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Nos guiamos por los comentarios y valoraciones que tiene. Comimos migas, alubias, balao dorao y picadillo de carne estando todo delicioso. Su personal es excelente, hablando con ellos nos recomendaron visitar el Pico Villuercas y sus maravillosas vistas de toda la comarca. Todo un acierto!
El restaurante donde mejor me he sentido en esta ruta por Extremadura. El trato es inigualable, es como estar entre amigos que conoces de toda la vida pero hasta cuando llamas para reservar. El local está decorado con mucho gusto, con cosas que manejaban nuestros abuelos y que no es fácil verlas juntas, me trajo recuerdos de gente maravillosa que, por desgracia, ya se fueron. Y la comida impresionante. Sabores increíbles que me recordaron a mi abuela porque todo está hecho con mimo y como antes. No dejéis de probar las migas, el picadillo de carne y las torrijas, todo está delicioso. Y la música una pasada, también te evoca recuerdos porque es toda de 1950 hasta los 2000. La unión de todo, trato, comida, música y decoración es impresionante inigualable. Sin duda, después de probar tantos restaurantes en esta tierra, una relación calidad/precio de 100 sobre 10. Gracias por darme este final de ruta tan inesperado, sois maravillosos. Volveré con mi familia, tienen que vivirlo.
Celebramos la Nochevieja en las ánimas del tiempo y no pudimos haber elegido mejor, nos lo pasamos muy bien con el personal del restaurante y con los clientes, se creó un ambiente impresionante. Ver a Javier dando las campanadas no tiene precio y la atención de Sofía fue inolvidable. La comida de 10, nos dieron un menú especial que no pudimos acabar por la cantidad, pero todo exquisito, desde el aperitivo hasta los postres, todo increíblemente bueno y casero. Y el precio muy económico, la verdad es que no esperábamos tanto y tan rico. Me hizo recordar a mi familia, cuando celebrábamos esa noche todos juntos. Gracias a todos, volveremos seguro, sois un equipo de primera.
Agradecer al equipo del restaurante la velada de Nochevieja. Los platos son totalmente caseros y deliciosos. El secreto ibérico con salsa de bellotas espectacular.
Estuvieron atentos de nuestras peticiones acerca de intolerancias.
Gracias a los tres por vuestro trabajo y disposición. Por darnos una experiencia única
El trato y la comida es excelente, el camarero tiene una voz muy radiofónica y explica muy bien los platos. También ha tenido un detalle con los más pequeños. La chica también es una buena profesional, atenta y rápida, sin duda, la próxima vez que venga a Guadalupe repito. PD: las torrijas son muy TOP.
Restaurante increíble Todo, decoración, trato, comida, precio y ubicación Alubias, migas, guiso de ternera, picadillo de Guadalupe, torrija, dulce de la yaya María Jesús y hasta el café está riquisimo. Hemos vuelto a reservar pero para toda la familia para cenar en fin de año Gracias por todo, nos vemos la noche del 31
Increíble, comida casera muy rica y variada, probamos muchas cosas pero nos encantaron los morros y las mollejas con sus patatas caseras, riquísimo y muy recomendable. Además de ello muy buen trato de los camareros, muy agradables y atentos y eso que éramos 18. El precio tampoco es caro, está genial. Repetiremos.
He repetido en menos de dos meses justamente. Creo que esto es una señal inequívoca de que este restaurante es una maravilla, uno de los lugares que hay que visitar cuando estés en Guadalupe.
Esa tortilla de cardillos, esa morcilla, esos guisos de carne, esa torrija con su miel y nata casera para cuatro; esas patatas fritas como mandas los cánones, ese pan de pueblo; o ese servicio atento y profesional con Xabi, el encargado, y Sofía, la joven dueña, a la cabeza. Han conquistado nuestro estómago y nuestro corazón. Volveremos dentro de poco.
Un restaurante para repetir. La cocina casera y de calidad. La atención insuperable. Javier (camarero) y Sofía (cocinera/camarera) unos profesionales de la restauración. 100% recomendable. La torrija buenisima al igual q las galletas con canela. Triunfo asegurado. Sin duda volveré.
Excelente experiencia. Un diez en todos los aspectos. A nivel profesional todo correcto. Y a nivel trato humano insuperable. Javier es un modelo a seguir por el gremio de hostelería.
Fuimos un grupo de 54 personas y todo maravilloso. La comida, el servicio, la decoración, el precio y la simpatía y amabilidad, todo de 10. Sin duda son los mejores de Guadalupe. Gracias por todo, volveremos.
Restaurante ubicado en zona céntrica. Disponen de un salón comedor en la parte superior del establecimiento espacioso para grupos. Trato cercano y amistoso de los camareros, muy majos. Recomiendo el menú económico y comida de la zona de calidad y tradicional. Estuvimos muy cómodos en todo momento. Con variedad de platos para elegir en el menú.
Lo mejor de Guadalupe. Las migas impresionantes, al igual que el lomo con reducción de vino de pitarra de la zona y el dulce de la yaya María Jesús. Son únicos, hacía mucho tiempo que no me trataban tan bien en un restaurante ¡Y con música ambiente de los 60,70,80 y 90! Ojalá y tuviéramos un sitio así en cada pueblo.
Personal muy simpático y atento, y sin agobiar. La comida toda casera y deliciosa. Comimos un helado de frutos del bosque, riquisimo. Y las croquetas y la tortilla de patata tambien! Un 10 en todos los aspectos!
Javier es el mejor! Era tan genuino y amable. Mi pareja, nuestro perro y yo cenamos aquí y Javier nos hizo sentir muy bienvenidos. De hecho, es el restaurante más apto para perros en el que hemos estado. ¡Javier tuvo la amabilidad de traerle agua a nuestro perro e incluso algo de comer! Estuvimos muy felices de charlar con Javier y realmente disfrutamos del ambiente del restaurante en general. ¡Gracias por todo y definitivamente volveremos cuando estemos en la zona!)
Gran experiencia en Las animamás del tiempo. Servicio atento y rápido, regalos para niños y cocina sabrosa con una excelente relación calidad-precio. Probablemente el mejor restaurante de Guadalupe.
Lugar especial, comida bien hecha, esfuerzo por recuperar platos tradicionales y potenciar el producto de la comarca. Cada elemento decorativo tiene una historia, merece la pena que el dueño la cuente, persona para conversar y aprender. Excelente comida y el personal no puede ser mejor
Ensalada de naranja, migas, bacalao dorado, picadillo de carne, dulce de la yaya María Jesús y torrija, todo increíble, hacía tiempo que no comíamos tan bien y por poco dinero. Además tomamos café natural y una infusión gourmet, delicioso. Por si fuera poco, de trato de 100 sobre 10, son encantadores, amables, serviciales y muy simpáticos. Gracias por el chupito y por el buen rato que pasamos, volveremos.
Trato del personal de 10, agradables, atentos, la comida exquisita todo casero y con sabores naturales, recomendable al 100%, la decoración muy curiosa con muchas antigüedades. Sin duda volveremos.
Encontar un sitio así es un lujo. Recomendable 100 por 100 en todos los sentidos. Todo de 10, ninguna pega, un milagro sí. Gracias y.volveremos, amigos! Desde Valencia!
Lo mejor de lo mejor, ya me gustaría encontrar más sitios como este en mis viajes. Comida. 10 Carta de vinos. 10 Ambiente. 10 Trato a niños. 10 Trato a mascotas. 10 Música ambiente. 10 Decoración. 10 Ubicación. 10 Precio. 10 Trato en general. 10 Lleváis poco tiempo, pero os aseguro que Guadalupe ha ganado mucho con vuestra presencia. Gracias por tratarnos así, mi hija hoy me ha preguntado que cuándo vamos al sitio de las sorpresas. Nos vemos muy pronto. TOTALMENTE RECOMENDADO.
Este restaurante lo tiene todo, buena comida, buena música, buena decoración, buena ubicación, buen precio y un trato excelente. Ya me gustaría encontrar un sitio así en cada uno de mis viajes.
Es como viajar al pasado, recordando cosas de la niñez y a seres queridos que ya no están aquí, después de todo me explicaron que este restaurante museo está dedicado a esas generaciones irrepetibles y lo habéis cuadrado, esas generaciones se sentirían orgullosas de ver cómo os lo habéis currado y os lo currais, sois impresionantes. Felicidades a todo el personal, porque además sois un ejemplo de cómo se pueden hacer bien las cosas y con poquito personal, poniendo mucho corazón y ganas, como se hacía antes. Volveremos con nuestras familias, podéis estar seguros. Un abrazo.
Trato increíble. Excelente atención a los niños y a nuestros compañeros peludos. Comida de 20 sobre 10. Decoración que te hace volver al pasado, como la forma de preparar la comida. Muy económico para la calidad que ofrecen y la atención. Lo mejor de Guadalupe. Gracias por hacernos pasar una velada inolvidable. Volveremos seguro.
Me tocó reservar en Guadalupe para 36 ciclistas y familiares. En cuanto les llamé sabía que teníamos que comer en Las Ánimas del Tiempo, la atención es exquisita y facilitando la gestión que, para mí, era un incordio porque acertar en Guadalupe es una lotería. Llevan poco tiempo, pero son verdaderos profesionales. Concertamos un menú, eligiendo cada uno lo que quería, se lo envié unos días antes y cuando llegamos todo fue perfecto y dentro de los tiempos lógicos. También tienen menú infantil. Teníamos a dos compañeros con intolerancias alimentarias y hablaron antes con ellos para prepararles un menú especial. Al final nos obsequiaron a todos con un chupito Hasta nos propusieron un hostal cercano para poder ducharnos al llegar, los del hostal cobran 3 euros por persona pero lo dejan todo preparado, toallas, gel, champú, esponjas, etc. Hasta para afeitarse y perfume. Comida casera y riquisima, trato impresionante y hasta tuvieron detalles con los niños. Gracias por hacer que el día fuera inolvidable, cada vez que vayamos a Guadalupe nos tendréis en vuestro restaurante. Saludos de toda esta pandilla.
Comida casera muy rica. Hecha y servida con mucho cariño. Personal muy amable que nos ha hecho sentir como en casa. Íbamos con nuestros perretes y les trataron como Reyes, sacándoles agua y chuches. Sitio muy recomendable
Reservamos para un grupo de 52 personas y todo de maravilla.
El trato inmejorable, desde que llamamos para reservar hasta la despedida. Teníamos 2 personas con intolerancias y la dueña les llamó para concretar sus menús y sin aumentar el precio. Son gente increíble.
La comida totalmente casera y tradicional de verdad, a pesar de ser un grupo grande las patatas eran caseras, con el trabajo que conlleva, y todo lo que comimos igual, nos llamó la atención que hasta la nata de los postres, como nos dijeron, es también casera. Recomiendo todo, esa es la verdad, pero personalmente destaco las migas, la crema de pimientos asados, el bacalao dorado estilo portugués, el picadillo estilo Guadalupe, las torrijas y el postre de manzana con nata (creo que le llaman dulce de la yaya María Jesús). Y por si esto fuera poco, el café que tienen es cien por cien natural, todo un lujo y con un precio de menú, bajo mi criterio, económico.
Felicidades porque dar de comer a tanta gente, con tan poco personal y con esa excelente calidad en atención, servicio y comida es de medalla.
¡Y encima cerquita del Monasterio!
Nos vemos pronto, os llamaré para reservar para otro grupo que estamos formando. Un abrazo para todos y gracias.
Espectacular. Si visitar Guadalupe es necesario, parar en Las Ánimas del Tiempo es obligatorio. Excelentes las migas, las morcillas locales y el bacalao dorado. El ambiente extraordinario, la decoración tradicional y el trato exquisito. Estuve allí con mi mujer y quedamos encantados. La gente que lo lleva es estupenda y si tienes un poco de suerte hay un aguardiente excepcional. Un verdadero placer.
Pasamos un fin de semana en Guadalupe, el viernes entramos a cenar en un restaurante de la plaza mayor y fue un desastre, el trato de pena y la comida peor (de carta porque no tienen menú de noche), nos desanimamos mucho y el sábado dimos un paseo por Guadalupe y cerquita de la plaza, al lado del aparcamiento del monasterio, nos encontramos con este restaurante. Desde que entramos hasta que salimos todo fue increíble, un trato muy cercano, como que nos conociéramos de toda la vida y la comida exquisita, pedimos migas y cocido extremeños, de segundo bacalao Dorado estilo portugués y ternera con patatas fritas caseras y, de postre, torrija y un postre de ellos hecho con manzana y nata casera, todo estaba espectacular, y por si fuera poco el café es 100% natural. Decidimos volver a cenar y tenían el mismo menú por la noche y al mismo precio (14,50), así que pudimos cenar más que bien, probando otros platos de la zona y por muy poco precio. Se nota el amor por la cocina extremeña y las ganas de agradar, son maravillosos, conocimos a Sofía, la dueña, a Consu, la cocinera y a Javier, encargado y todos un encanto. Volvimos a comer el domingo y a despedirnos, pero hasta pronto, porque volveremos con unos amigos para disfrutar de vuestra cocina, trato y de vuestra de decoración, tipo museo, que nos trajo mucho buenos recuerdos a la mente. Seguid así, lo estáis haciendo maravillosamente bien, no parece que solo llevéis 8 meses con el restaurante abierto, sois una pasada. Gracias por todo, nos vemos pronto.
Es un restaurante extraordinario. Una comida casera riquísima y el personal no nos pudo tratar mejor, como si te conociera de toda la vida. Algo que te hace sentir muy bien. Tiene una amplia carta donde poder elegir. Recomendable totalmente. Si volvemos a Guadalupe seguro que iremos a comer de nuevo allí.
Muy buena cocina tradicional, migas del castúo hechas con mimo, pollo al carbón con champiñón, bacalao al estilo tradicional portugués. Postres deliciosos: trufas de leche condensada y galleta, postre de la yaya María Jesús (buenísimo) y torrija con miel digna de reyes. Me llevo muy buena impresión de la calidad de la comida y la sencillez a la vez de grandeza de la jefa de cocina y dueña del establecimiento, muy buen trato del camarero. Todo un sitio por descubrir. Gracias por su atención, repetiremos sin duda.
Comimos de menú y estaba todo riquísimo. La atención inmejorable, desde que llamamos para reservar, pasando por la entrada en el restaurante y durante toda la comida, es como estar en casa. Si volvemos a está zona contad con nosotros. El mejor restaurante de Guadalupe.
Simplemente espectacular. No se puede visitar Guadalupe y no comer en este restaurante, comer platos de siempre en un museo dedicado a nuestros padres y abuelos, además de recibir un trato de primera, es toda una experiencia y muy gratificante. Tan grandes profesionales como humildes. Volveremos a Guadalupe solo por volver a vivir esta inolvidable experiencia. Gracias a todo el personal.
Hemos ido a comer 12 amigos y todos encantados, es un restaurante típico atípico, porque es de comida extremeña de siempre, con unos sabores que quitan el sentío, y atípico porque es muy difícil encontrar un restaurante en el que te traten tan bien. Una gran sorpresa para todos, estamos encantados. Esperamos volver pronto y quedarnos a dormir en Guadalupe en finde, para disfrutar de esos guateque de los viernes y sábados noche. Sois geniales, chicos.
El mejor restaurante de Guadalupe. Comida y trato de 10. Excelente en todos los sentidos. Gracias por hacernos sentir como en casa. Totalmente recomendado. Volveremos.
Lugar que te tratan como si fueras un cliente de toda la vida. Llegamos desde Sevilla y decidimos comer ahí. No podíamos haber elegido mejor. Comida 100% casera, el personal muy amables, te hacen sentir como si estuvieras en casa. No es el típico sitio de comida de turista, comida casera buenísima y a muy buen precio. Repetimos ese día para la cena y otro éxito. 100% recomendable. Si volvemos a Guadalupe repetiremos.
Hemos pasado el día en Guadalupe y hemos conocido este restaurante con una cocina muy buena pero sobre todo el trato es lo que más hemos valorado, recomiendo las migas la morcilla y la ensalada de pimientos volveremos sin ninguna duda
Todo una maravilla, la comida impresionante, casera y se nota que la hacen con corazón. Nosotros comimos migas, pollo, bacalao y torrijas y compota de manzana de postre. El personal, tanto camarero como las cocineras unos amores. Y el dueño mejor todavía, un encanto de hombre, con una conversación de lo más agradable y con mucho mundo a sus espaldas. Totalmente recomendable en todos los sentidos. Un imprescindible!
Vinimos de Avila y Elche. Todo estupendo, desde la comida al servicio. Muy simpáticos. Sin duda lo recomendaremos y si volvemos por aquí (seguro q sí) repetiremos.
El mejor sitio sin duda para visitar Guadalupe después Del Real Monasterio, no solo por su comida que esta rica rica si no por el trato exquisito de su personal en especial de Xabi. Comimos de menú de día y todo muy rico y casero a destacar las migas q estaban buenísimas y súper jugosas. Después de lo bien que nos trataron en la comida volvimos para un picoteo en la cena e igual o mejor que la comida. Los quesos de la zona nos gustaron un montón y el bacalao a bras y la ensalada de pimientos buenísima también. Pero lo mejor sin lugar a dudas el personal del establecimiento ya que era mi cumpleaños y tuvieron un detalle precioso sacándonos un trozo de tarta y cantando el cumple. Además ibamos con una niña y lo mismo, un montón de detalles y buenas atenciones con ella. Espero que les vaya súper bien porque realmente se lo merecen y se nota la gente que pone ganas en su negocio. Sin duda si volvemos a Guadalupe repetiremos y se lo recomendamos a todos nuestros conocidos. Mucha suerte chicos!
Trato excelente, los camareros muy agradables y atentos, el local está muy bien decorado y es muy acogedor. Pedimos el menú del día para comer y quedamos muy satisfechos, comida casera y rica. Cuando vuelva a visitar Guadalupe, seguro que vuelvo a comer allí, 100% recomendable.
Calidad precio, se puede decir que tienen un buen menú. Muy destacado el buen servicio. Cuentan con medio menú para niños. Y los postres son caseros. Meno la tarta de queso. - Te avisan antes de pedir la - os recomiendo NO pedirla. Cuenta con dos salones.
Lugar y personal acogedor, como en casa. Buena relación calidad-precio. Comida casera. Si te gusta el trato como a un amigo, es tu sitio. Gracias por vuestro trato. Si vuelvo a Guadalupe me pasaré a saludar.
Erstklassiges Restaurant mit landestypischer Küche aus der Gegend. Das Essen ist einfach toll. Der Eigentümer und die Mitarbeiter sind besonders freundlich und erfüllen jeden Wunsch. Ein Mitarbeiter spricht sehr gut englisch. Am Abend zuvor waren wir nur in der Bar aber die Stimmung war unglaublich. Es war eine sehr herzliche Atmosphäre und wir fühlten uns unter Freunden. Unsere Empfehlung zu 1000 Prozent.
Es nuestra segunda visita en un par de meses y reconozco que antes no escribimos porque se nos pasó, pero está vez no podemos dejar pasar la oportunidad de decir lo bien que nos tratan en este restaurante (somos un grupo de 8 personas). Para empezar la comida es más que deliciosa y se nota que es casera, hasta las patatas fritas, algo que se agradece y mucho. En estas visitas hemos probado varios platos como las migas del castúo con huevo (riquísimas pero demasiada cantidad para mi gusto, te llena muchísimo), las sopas de tomate y de ajo (auténticos sabores de siempre), el impresionante bacalao dorado al estilo portugués, los potajes de alubias de la tierra y de garbanzos (abundantes y exquisitos), el lomo a la reducción del vino de pitarra de la tierra (sorprendente), el pollo al carbón (más qué rico) y bueno, más platos que comimos la vez anterior y que ya ni recuerdo, pero eso sí, recuerdo que nos gustó tanto que prometimos volver y lo hemos hecho. Y los postres son deliciosos, me quedo con las torrijas, los repápalos con leche y canela y lo último que probé, recomendado por Javier, el dulce de la yaya María Jesús (creo que es su nombre, disculparme si me equivoco), está que quita el sentío. Si a todo esto le sumamos el exquisito, familiar y amable trato de todo el personal (en especial de Javier, es un tío increíble), que nos regalaron unos chupitos de licor de la zona, y unos bombones con doble chocolate que no os cuento cómo están, y que el precio del menú es de 13,50, pues eso, imposible pedir más. Casi olvido comentar que comimos con música de los 80, bajita pero que nos trajo muy buenos recuerdos, está claro que todo lo han estudiado (la comida, el nombre, la decoración como museo y la música) para hacerte sentir como en casa y entre amigos. Os felicitamos, sois con diferencia el mejor sitio de Guadalupe y os aseguramos que pocas veces nos hemos sentido tan a gusto en un restaurante. Prometemos volver, que nos quedamos con ganas de probar esa crema de pimientos asados pero ya no había más sitio en nuestros estómagos, así que pronto nos veremos de nuevo. Gracias por todo y, sin ninguna duda, recomendado al 1.000%
Tomamos en menú del día y ya que éramos varios tuve la oportunidad de probar muchos platos y la verdad que ninguno estaba rico rico. Nos recibieron anunciando que toda la comida era casera y así fue pero no tenía calidad ni sabor. Ni la sopa, ni el bacalao (parecía de hace varios días), ni el pollo (seco seco) ni las migas que estaban justitas (este se podría salvar). Al igual que los postres sin gracia ninguna a excepción de la torrija que si estaba buena. Respecto al vino del menú lo mismo, nos gusta el vino y no terminamos la botella entre todos, bastante malo. Me sorprende por los comentarios que leo, pero a nosotros no nos gusto nada.
Excelente en todos los sentidos, pedimos menú del día a muy bien precio con bastantes opciones a elegir y platos de comida casera completos y muy ricos. Enhorabuena a la cocinera y también a los camareros por hacernos pasar un rato tan agradable.
Vinimos a este sitio animados por las buenas opiniones que tiene y la verdad es que fue un acierto. Según entramos ya te da la sensación de bar familiar y desde el primer momento nos sentimos muy cómodos. El comedor se encuentra arriba. El local se ve limpio y la decoración es bonita y curiosa con utensilios antiguos. Comimos de menú (casero) y todo estaba muy rico. De cantidad muy bien también. Las migas estaban espectaculares y el pollo al carbón muy muy bueno. Los postres no se quedaban atrás y estaban muy ricos. A destacar también la amabilidad del chico que nos atendió en la comida; y mención especial al camarero de la barra (Javier), que empatiza con el cliente y se puede mantener una agradable conversación. Muchas gracias por el chupito y los bombones. Además de para comer, es un sitio que no te puedes perder para tomar una cerveza o consumición. Encantados de haber conocido este establecimiento.
Platos caseros de verdad, personal muy amable, puedes pedir menú, o menú para compartir, tapas, raciones, o medias raciones, Pedi un plato de crema de puerros, que estaba solo en el menú. Y sin problema alguno, me lo sirvieron a parte. Salón en planta primera ni se ve desde el exterior. Lo recomiendo 200%.
Todo un descubrimiento, la comida muy rica, todo casero, te ponen aperitivo con la bebida, y el personal es súper simpático, recomendable totalmente si vienes a Guadalupe
Por fin un bar con buena música en Guadalupe! Ideas creativas, un restaurante - museo muy interesante. Un equipo humano muy educado y agradable. Deliciosas tapas y buen menú.
El lugar con mejor recibimiento y trato que hemos encontrado en Guadalupe, su gente es encantadora, la comida es espectacular y si a todo esto le sumamos el buen gusto musical que tienen y la alegría con la que hacen las cosas, prácticamente podemos deducir que es al menos uno de los mejores lugares a los que ir a comer o a tomar algo en Guadalupe.
Un lugar excepcional. Para empezar tiene 450 piezas de museo donde poder recrearse mirando por las paredes donde están colgadas. El servicio es rápido, amable y profesional. La comida bastante sabrosa, de la tierra. Y los precios bastante económico. La cerveza buena, estrella de Galicia pero bastante flojita el grifo. Gracias por todo.