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Comida estupenda, servicio maravilloso. Que pena que no se pueda entrar sin ser socio o sin ir invitado por socio. Pero te atienden en barra y te puedes llevar la comida a casa perfectamente preparada y envasada.
Es un lugar con una decoración adecuada y con un salón amplio. A priori dentro es para socios, aunque sino hay mucha gente no hay ningún problema. Los precios adecuados y no se come mal.
Después de un paseo decepcionante por Olivenza encontramos este club social y se come estupendamente. Recomiendo jamón, chuletitas de cordero y bacalao dorado
Sitio agradable, lo hemos visitado de paso y solo tomamos café, pero repito lugar limpio y agradable. Decepción máxima al no poder admirar la bellísima Iglesia de la Magdalena, por el hecho de tratar de visitarla a las 18 horas, ya estaba cerrada, no puedo entenderlo habida cuenta de los grupos de personas que pululaban por el pueblo