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Sitio bonito en un entorno ideal. Atención rápida y cuidada. Los camareros son muy cercanos. La comida rica. Se pueden tomar unas copas después de cenar.
Lugar de estética sencilla y muy de taberna gallega con una atención y comida exquisita. Hemos comido raxo y carrilleras y postres actuales y nos hemos llevado pizzas para llevar. Es decir, el menú es variado, tanto comes algo muy típico gallego como una pizza muy rica a precios muy económicos. Muy recomendable para comer bien.
Cuando te sientas allí, te sientes mu cómodo porque te atienden no como a un cliente, si no como uno de su familia. Tienen todas las medidas de seguridad a tu disposición (hidrogel, distanciamiento de mesas, etc.). Higiene 100%. Buena cocina, sobre todo casera. El trato es excepcional. Todo muy limpio. El café (si eres cafetero como yo) te va a encantar aquí. Si pasas algún día por Celanova, no dudes en visitar "a taberna do galo", y si eres de Celanova ya habrás disgustado algo allí. Difícil pasar este lugar desapercibido. Lo recomiendo no al 100%, pero sí al 200%
Cenamos para 2 adultos y 2 niños en un ambiente muy rico y muy bueno. El servicio es muy profesional. Tuvimos un pequeño problema con el comando pero luego todos regresaron para solucionarlo.aquí es donde se puede ver la profesionalidad y las ganas de facelo ben. Muy buena experiencia y pronto repetiremos
Todos los años que venimos de vacaciones lo añadimos en la agenda. El vino de la casa buenísimo y da igual. Lo que comas desde una pizza. Hamburguesa.rasso albóndigas.etc etc etc Muy muy muy bueno y los precios está muy bien
En el menú pone un precio y luego te ponen uno más caro, la comida es contada. Carrillera dos trozos con tres patatas y tres medias rodajas de pan, una cerveza. Casi 15€.
Bonita terraza pero mal servicio, si tienes suerte te ponen tapa con la consumición, si no pasas sin ella, o para todos o para ningun@, la atención en otros tiempos era mucho mejor.
Madre mía! Como para no volver! Entiendo que en período de vacaciones contraten jóvenes que no sean eficientes y sin experiencia. Puedo pasar de eso. Pero que con el calor que hay sirvan cerveza y zumo calientes y que la pizza que sirven sea recalentada y dura como para romper dientes. Es demasiado! Esa pizza estaba hecha desde hacía mucho tiempo y la recalentaron hasta convertirla en madera. La trajeron demasiado rápido con las bebidas calientes. No fue confeccionada al momento, ya estaba cocinada. No devolví nada pues no quise arriesgarme, ya pueden imaginar. Además, quise consumir para poder exponer mi experiencia. En fin, una pena de establecimiento en un sitio relativamente agradable. Además, había dos perros sueltos paseándose y ladrando entre nuestras piernas! Lamentable.
Excelente trato, un lugar con gran tradición, su gerencia actual es de 10, la cocina espectacular y los camareros súper educados y atentos, les deseo lo mejor, se lo merecen. Un 10 de 10
Nos gusto, estar en la terraza, dentro es pequeño.pedimis por probar para los chicis una pizza, muy rica y 2 menus de carrilleras, y unos huevos rotos y bebidas. Lo unico malo es que se demoran en servir, las pizzas estibieron inmediatamente, pero el resto demora mas de 30 min. Parece que hay poco personal, ya que tendian que antender varias mesas a la hora de la cena.
Parece extraño comer pizza en Galicia, verdad? Pues no os arrepentiréis si la pedís porque la masa la hacen ellos y se nota. La variedad no es muy grande pero están de vicio y encima se está fresquito bajo el soportal, estábamos a 40 grados.
Ya hemos estado dos veces en los últimos 10 días. Tienen buena relación calidad/precio y son super amables.
La carta es más escueta entre semana, cuando sirven pizzas de varios sabores (incluyendo vegetariana) y hamburguesas completas de ternera. Los fines de semana tienes más oferta de tapeo (pimientos, carrilleras, bravas a su estilo,) y lo hacen bien. Yo recomiendo llamar para reservar y hablar para encargar una cena si la quieres entre semana. Son muy hospitalarios y no te pondrán trabas.
Es un local donde tomar una buena caña, con un lugar idilico debajo de unos soportales, comida de la casa y unos buenos cócteles para tomar la primera de la noche.
Taberna tipica vulgar enclavada en un lugar emblemático y bucólico que poco a poco sabrán sacarle provecho. No es admisible que pidiendo un vino de marca te traigan la copa ya servida desde el interior ignorando que será. Buena atención y pinchos agradables al paladar. Entrada apta para sillas de ruedas. Amplia y bonita terraza bajo soportales centenarios, aunque mejorable. Medidas covid 19 adecuadas
Comimos una pizza riquisiiiiima recomiendo la de vegetales (son de su huerta y se notaaaaa), el postre delicioso, la atencion del chico espectacular (un encanto) RECOMIENDO ESTA TABERNA, cuando regrese a Celanova volvere