Administración da Lotaría da Praza de Vigo
4 opiniones Rúa Federico Tapia, 38, A Coruña +34 981 12 02 17 Sugerir una edición
19 diciembre 2019 2:30
Un lugar ideal porque está enfrente del Zara de Juan Flórez así que siempre que pasas por allí picas y yo tengo mucha suerte o no sé pero no soy millonaria pero siempre que pillo a ti me pillas reintegro
21 mayo 2019 23:22
Acabo de estar en esta administración de lotería y me he ido pensando en que nos hemos acostumbrado a los malos modales.
No soy una persona de costumbres rancias, pero entiendo que hay unos mínimos formalismos que hay que cumplir, unos mínimos que aseguren una correcta comunicación, y más si se trata de una relación comercial en la que yo consumo y otro se beneficia.
Me he puesto delante de la ventanilla y la persona al otro lado no ha levantado la vista de la pantalla del ordenador, he saludado y no me ha respondido, he solicitado una apuesta y me ha lanzado el boleto y el cambio sobre el mostrador, sin mediar palabra. He dicho “gracias, muy amable, muy buena atención al cliente”, no he podido contener el sarcasmo. Creo que tampoco ha habido respuesta, me he ido.
El saludo, el agradecimiento, la despedida.hacen que la interacción entre la personas sea agradable, que las tardes de primavera sean mejores y que al cliente le queden ganas de regresar.
No soy una persona de costumbres rancias, pero entiendo que hay unos mínimos formalismos que hay que cumplir, unos mínimos que aseguren una correcta comunicación, y más si se trata de una relación comercial en la que yo consumo y otro se beneficia.
Me he puesto delante de la ventanilla y la persona al otro lado no ha levantado la vista de la pantalla del ordenador, he saludado y no me ha respondido, he solicitado una apuesta y me ha lanzado el boleto y el cambio sobre el mostrador, sin mediar palabra. He dicho “gracias, muy amable, muy buena atención al cliente”, no he podido contener el sarcasmo. Creo que tampoco ha habido respuesta, me he ido.
El saludo, el agradecimiento, la despedida.hacen que la interacción entre la personas sea agradable, que las tardes de primavera sean mejores y que al cliente le queden ganas de regresar.