Albergue A Casina di Marcello

Visitar a Marcelo y su albergue para peregrinos debería ser una parada obligatoria para cualquier persona que quiera disfrutar del camino y las experiencias que te regala.

Este es un lugar auténtico para disfrutar con la cabeza y el alma abierta.

Tiene todas las comodidades, enchufes cada cama, toallas, lavadora, blablabla. Pero lo realmente importante es lo que pasa cuando te sientas a compartir mesa e historias con Marcelo y los demás peregrinos.

Mi consejo: acepta su cena, escucha y disfruta de conocer las historias de Marcelo y de tus compañeros de albergue. Esto es el camino, amigo.

Gracias por la velada. Volveré.

Un abrazo,
Marcos (Valencia - el que venía de Villafranca del Bierzo)

Maravilloso! Marcello es genial y hace todo con amor. Gracias por tanto cuidado a lo largo del Camino. ¡Nos vemos en Casa SanAndo cuando termines en Santiago!

Una dirección absolutamente recomendable.
Marcello hace todo con atención al detalle y mucho humor.
La comida que preparó para nosotros fue increíblemente sabrosa y hermosa.
¡Un anfitrión con corazón de peregrino y grandes consejos!
Gracias Marcello!

Hostal con instalaciones y servicio promedio. Como parte de un grupo de 3 mujeres que se quedaron solas en este albergue, me pareció inapropiado cuando el dueño bromeó sobre la posibilidad de que el espacio fuera visitado por fantasmas por la noche. La broma fue aún menos divertida cuando me di cuenta de que él mismo entra al piso de arriba, durante la hora del baño y cuando nos preparamos para ir a dormir, sin motivo aparente, y sin anunciarse. No abandonaba la zona de la cama por la noche sin repetir la supuesta visita de los fantasmas nocturnos a 3 señoras acostadas en la cama. ¿Es esto una sutileza? Tal vez. ¿Genera sensación de seguridad a las mujeres peregrinas? NO.

Mi nombre es Rosa he pasado una noche en este albergue y a sido maravilloso. Tiene mini chimeneas con lo cual es cálida la temperatura, muy acogedor y Marcelo está pendiente de tu llegada. Es amable simpático y muy buen cocinero y anfitrión.es decir te cura las ampollas, cocina, su sello del camino es súper original. Hemos compartido una cena de 10 con los wespedes que éramos.
Los baños son grandes y limpios, tiene lavadora secadora y secador de botas jajajajaja
Os lo recomiendo 100% Si vuelvo aquí sin duda volveré a este albergue
Muchas gracias Marcelo por tu hospitalidad un abrazo grande
Ah! Puntazo! El camino empieza en la puerta de este albergue.tus pies te lo van a agradecer jajajajajaja

Gran experiencia de peregrino. Habitaciones impecables. Gran cena de peregrinos.gracias marcelo

Lugar limpio, organizado, Marcelo es un
Muy buen albergue, hermosa cocina, la cena fue alrededor de una hermosa mesa puesta, con excelente conversación y buena música.
¡Experiencia única!
¡Ahh, y habla portugués, italiano, español e inglés!

¡Super consigliato! ¡Uno de los mejores lugares en los que nos alojamos! ¡Gracias Marcelo! Un gran abrazo - Daiane y Kassiano

Hemos estado 3 amigos durmiendo en el albergue y todo correcto. Las camas cómodas y con cortina que es un puntazo, con enchufes en cada cama. Los dos aseos y la ducha más que correctos para las personas que hay en el albergue. Hemos leído comentarios sobre la cena y el precio es correcto, pudiendo repetir las veces que quieras, con vino si quieres y con agua la cantidad que quieras. Gracias Marcelo!

Albergue muy acogedor. Disfrutamos muchísimo de la cena italiana que ofrece Marcelo. El sello de la credencial que pone es el más chulo del camino. Nos encantó haber pasado allí la noche. Muy entrañable.

El mejor sello del camino de Santiago, espectacular, os va a sorprender, dormimos mi mejor amiga y yo genial, la primera vez que dormimos bien, los baños genial, el dueño súper hospitalario, súper atento a todo, nos enseño a poner bien las mochilas y ya no nos duele la espalda. El mejor albergue en la zona sin duda. De parte de Irene y Marta, saludos.

Grado de servicio 10 de Marcello. Tranquilo y de fácil ubicación, literas con cortina, gran ducha. Y lo principal fue la cena italiana preparada con mimo por Marcello, un momento de confraternización entre peregrinos.

Albergue acogedor, y limpio.
La ubicación muy buena para continuar el camino. Ideal para grupos pequeños.

Como decimos en mi tierra, voy a "estrozar" una lanza en favor de Marcelo. Por lo pronto, ha puesto solución a todas las pegas que se podían leer en anteriores reseñas, además, ha conseguido darle el ambiente y el espíritu que es típico del Camino; compartes vivencias, risas, comida. Con el resto de peregrinos que se hospedan, se dan consejos, se ayudan y cuidan los unos a los otros, que eso es lo que, creo, que tiene que ser el Camino, convivencia, buen ambiente y compañerismo. Además la cena italiana estaba muy rica y las historias de Marcello dan un toque histórico a la noche.
Volvería sin dudarlo y lo recomendaré siempre.

Además, tuvo un detallazo conmigo, que venía sin reserva y me dejó guardar las cosas un rato antes de que abriera.

Si no cenas con ellos no te dejan utilizar la unica mesa comunitaria hasta que no terminen ellos de cenar, está bastante alejado del pueblo, pero el sello es bastante bonito y hay limpieza.

El albergue está muy bien es pequeño pero acogedor, es un espacio peculiar y diferente a los demás albergues en los que hemos estado. En el se puede disfrutar de la experiencia y compañía de demás peregrinos, tiene una terraza muy chula para descansar y despejar de la etapa, el único pero que podríamos poner es el precio, que es algo más caro que otros albergues para lo que se ofrece. Muchas gracias por todo Marcelo!

Un albergue pequeño y perfecto para el descanso del peregrino
Marcelo un encanto.
Nos preparó para cenar pasta al pesto y a la boloñesa súper rica.
Las conversaciones después de la cena nos enseñaron a saber más sobre la peregrinación.

El Albergue está al final del pueblo en dirección al camino francés, por lo que está algo alejado si quieres ir a cenar o tomar algo. Por otro lado, el dueño tiene unos horarios de entrada y salida estrictos y algo pequeños ya que la hora de máxima de entrada para dormir en el albergue es a las 22: 00 por lo que tienes que cenar con prisas o pedir para llevar en muchos casos.

Hemos estado súper a gusto. Todo súper limpio, las literas muy cómodas y además de prepararnos una cena deliciosa, Marcello con contó la historia del Camino De Santiago y nos encantó!
Recomiendo muchísimo!
También me parece genial que haya unos horarios y normas que cumplir y respetar, ya que mucha gente madrugamos para caminar y necesitamos descansar.

El Albergue a pesar de ser pequeño es muy acogedor, bonito y se encuentra en buena localización. Sin embargo la actitud del dueño deja bastante que desear, a pesar de preguntarle sobre el envío de mochilas y decirle que no lo habíamos echo antes sólo nos dio el papel y no nos explico dónde meter el dinero, nos hizo una llamada comportándose como un mal educado, en ningún momento pretendíamos no pagar ya que le habíamos echo previamente el pago del alojamiento. No repetiría.

Fuimos a dormir y la puerta estaba cerrada. En la terraza nadie nos atendio. Queriamos un gin tonic en copa de balon con petalos de rosas y bayas de enebro y tuvimos que marchar.

Albergue pequeño pero muy acogedor!
El dueño italiano y muy buena persona, nos acogió como uno mas de su familia, nos ofreció par cenar en el albergue por tan solo 12€, un plato pasta tipico italiano, con una ensalada de segundo mas un postre y sus botellas de vino!
Muy buen anfitreon!
Lo único que no me gusto fue que para 17 personas solo tenía dos baños pequeños y no ofrecía desayuno, pero te daba la oportunidad de utilizar su cocina!
Lugar donde repetiría estancia!

El albergue es contenido y además con encanto y muy bonito.

Las habitacion es cómoda con buena disposición de las camas, tienes toma de corriente y luz (se agradece mucho)

La habitación se mantiene caliente durante toda la noche, además de tener mantas de sobra.

Dispone de dos baños muy completos y funcionales.

El señor Marcelo muy servicial y atento a tu bienestar.

Gracias por las horas de descanso!

No creo que vuelva. Fui receloso por lo que había oído al respecto. Hola común muy pequeña que en caso de cena comunitaria no se podría utilizar. En la cocina la placa no se puede utilizar, sólo un pequeño horno y el microondas. Muchos candados en armarios de cocina y otros lugares que inducen a pensar que el dueño, aparte de poco amable, es desconfiado. En la zona superior solo un baño para todos. A evitar si hay algún otro abierto en el pueblo. Positivo: camas cómodas con sabana bajera y funda de almohada de tela y toalla de aseo.

Lo que no puede ser es que nos pongas un horario a las 10 de la noche si o si tienes que estar asi porque el codigo no es valido a partir de esa hora lo cual es falso le sienta mal cuando le dices que no cenas la cena que el te ofrece y se vuelve un mal educado pasamos mucho frio ya que la calefaccion la enciede de 6: 00 am hasta 22: 00 pm algo incomprensible con -1 grados en la calle increible gracias pero no volvere

Marcelo una gran persona que me lo puso todo más facil, al paso del camino Francés y al lado de bares, supermercados etc, sin duda alguna un sitio acogedor y familiar, att Viki

El albergue es modesto pero en principio parece acogedor. Luego ves que podría estar mucho más limpio y hacer menos frío pero el principal problema es que si rechazas la cena que prepara el dueño para los huéspedes a 13 euros por barba porque, como en nuestro caso, prefieres visitar el pueblo y cenar allí (mil veces mejor por un precio similar), el tío se vuelve un desagradable. Pensabamos que había sido impresión nuestra pero parece ser que esa es su reacción habitual. Si buscas un albergue cómodo y limpio este no es tu sitio. Si no te importa tanto la comodidad y lo que buscas es un sitio entrañable donde te traten bien, tampoco.

En mi opinión relación calidad precio hay otros por la zona a mismo precio más atención, amplios, nuevos e con más higiene.

Genial albergue, pequeñito y acogedor. Es como estar en familia. Marcelo es muy agradable y suele ofrecer buenísima cena para sus comensales, en la que todos comentamos nuestra experiencia en el Camino de Santiago y compartimos anécdotas. Marcelo cenó con nosotros y estuvo culturizándonos sobre historias y leyendas del camino. Recomendado al 100%.

Excelente albergue para quedarse en palas de Rei. La experiencia que el hospedador brinda es totalmente para peregrinos. Trato amable, instalaciones limpias y una cena personalizada. Si quieres una experiencia distinta y excelente este es el lugar para quedarse.

Baño limpio, literas con bastante “intimidad”. El señor que lo regenta, y sus gatos, son un poco “especiales”.

Marcello una persona que te ayuda en todo lo que está en su mano, albergue pequeño pero muy acogedor, limpio y a pie de camino.
Da posibilidad de cenar una cena Italiana muy Rica en el mismo albergue.

La cama muy confortable, la cena comunitaria todo un espectáculo, Marcello te hace sentir como en casa. Recomendable parar aquí.

Muy buena, el mejor albergue en el que estuve es diferente a los demás muy familiar parece que estás dentro de una casa de campo. Marcello es un fenómeno y nosotros no cenamos.

Yes! It was a great find tucked away. Warm greeting, cute, cozy, clean and welcoming feel.
We ate dinner at the Albergue and Marcello went above and beyond for me and I really really appreciated it. Felt like visiting your Italian uncles vacation home in Spain. Love coming across these extra special Albergue while on the Camino.

Reservamos y tuvimos que cancelar el plan por una lesión en el camino. El dueño fue muy amable y comprensivo, sin duda nos alojaremos ahí cuando retomemos la ruta. Había un ambiente muy acogedor.

Marcelo è un personaggio unico. Purtroppo per lui essendo bassissima stagione eravamo le sue uniche clienti. Ci ha preparato un'ottima cena e ci ha fatte sentire a casa

Lovely quirky eccentric albergue on a little side street. Nice communal Italian meal. Some may find the rules a little strict but personally I feel it made the stay all the more enjoyable. A well run establishment.

Un magnífico lugar.es maravilloso el trato y atención de Marcelo! Lygar obligado a llegar si haces el camino francés

Marcelo estuvo muy atento con nosotras, las peregrinas catalanas, dormimos muy bien y con mucha tranquilidad! Es un sitio que se respira paz y es acogedor

Albergue muy pequeño, el dia que llegamos hacia mucha calor y no tienes sitio comun donde puedas sentarte, tuvimos que cojer unas sillas y sacarlas a la calle.el dueño es atento y si quieres por 10€ te prepara una cena italiana, lo malo es que " la cocina" es muy pequeña y el olor a la comida indunda la estancia, los baños estaban limpios y a las 22: 00h te apaga la luz y no puedes llegar mas tarde

El dueño era majisimo, siempre atento con nosotros. He leído en algunas reseñas que decía que tenian chinches pero yo personalmente no he visto o notado nada de eso. Volvería a repetir. Gracias marcello

No volvería a repetir. Es un albergue pequeño con poco espacio y muchas camas. El salón y la cocina están en la misma estancia que es muy pequeña para el número de alojados y la única zona común donde poder estar fuera del dormitorio el dueño utiliza esta misma zona común para preparar y dar la cena a los peregrinos por lo tanto, o estás en la cama o en la calle. No lo recomiendo.

Lugar muy pintoresco. El sitio familiar y muy acogedor. Apartado un poco del pueblo pero en pleno camino. El dueño super amable y la zona muy tranquila. Hace cenas italianas para sus huéspedes.

Uno dei posti più graziosi che abbia incontrato.e Marcello il proprietario una persona veramente amabile.mi ha curato una vescica sul piede come fossi una sua cara amica.l'ostello è veramente carino.come sentirsi a casa, un ambiente caldo e accogliente.molto pulito, letti a castello e cuscino super comodi e spaziosi (lenzuolo e federa inclusi). Due bagni veramente deliziosi.assolutamente super consigliato.grazie Marcello.spero di ritornare.
Paola