As sete campás

Sin dudarlo,totalmente recomendable,hemos estado en él este verano y la experiencia no habría podido ser mejor .
De hecho ,no dejamos de hablar de él y recomendárselo a todos nuestros amigos.

El restaurante es un lugar lleno de encanto y magia. Unas mesitas de madera debajo de una parra, entre las q se pueden entrever las típicas tiras de luz de bombillas para la noche (fuimos al medio dia). Las vistas desde las mesas son de los viñedos y más de cerca, un bonito hórreo, un limonero, un naranjo.

La comida muy rica, pedimos mejillones en escabeche caseros (aproximadamente una ración de 1kg), calamares, ensalada de tomate (de su huerta), croquetas de jamón y huevos rotos y de postre. LA TORRIJA! Es obligatorio si vas, probarla. Nosotras repetimos! Una locura!

Tienen vermú gallego.

El servicio.es una auténtica maravilla! Rápido, bueno y muy agradables!

Es un lugar de esos que atrapan, sencillo, tranquilo. Por supuesto repetiremos!

Salimos con ganas de volver. Todos los que trabajan en el hotel son súper amables y dispuestos. Las habitaciones son cómodas y espaciosas el desayuno súper completo y vale la pena reservar la cena con ellos, la comida está súper rica con productos de sus huertas todo súper fresco. El albariño está muy rico también. Además de todo esto aceptan mascotas.
Recomendado.

Totalmente recomendable, la habitación muy limpia y amplia. Baño moderno y con secador. Buena ubicación para hacer turismo por la zona, muy próximo a la vía rápida que vértebra todo lo que hay que ver. El desayuno espectacular y el "furancho" que regentan muy recomendable a la vez de práctico para esos días que regresas muy cansado para salir a cenar. Lo escogimos de casualidad y repetiremos.

El descascado está garantizado. La atención y esmero de Héctor, Rafa y resto de su personal de 10. Un lujo escondido en un precioso pueblo entre bosque de eucaliptos y viñedos de albariño

Habitaciones espaciosas y muy limpias. El sitio es muy acogedor y el personal muy atento y agradable.

El desayuno es casero y abundante.

Muy lindo lugar, camas cómodas, muy buen desayuno, hermoso jardín. El material es muy útil:)

Ya de vuelta a casa tras unos maravillosos días por las Rías Baixas y alojados, como hace varios años, en As Sete Campas. Millones de gracias Héctor y Rafa por hacernos sentir como en casa. Las cenas bajo la parra maravillosas y los encuentros con gente de otros años! Ya estamos contando los días para volver a veros! Un abrazo enorme (y de nuestro perrito Lolo también)

Excelente en todos los sentidos, la estancia en el hotel de lujo, la comida extraordinaria, el postre delicatessen y qué decir de los anfitriones Rafa y Héctor, encantadores.
Volveremos, ya es el tercer año qué vamos con nuestra mascota Otto y el trato es lo más familiar.

Muy buen lugar para hospedarse. Esta en las inmediaciones de Sanxenxo, lo que proporciona al establecimiento un buen número de reservas en temporada alta. El trato es muy correcto y próximo. Los propietarios, encantadores. El desayuno, para quitarse el sombrero. Todo delicioso. Muy buenas instalaciones. Se aparca con facilidad en la zona. Recomendado conocerlo y disfrutarlo.

Espectacular, recomendamos 100% este alojamiento para conocer las Rías Baixas y Galicia en general. Ubicación inmejorable entre viñedos y cercano a los puntos de interés de la zona. Habitaciones amplias, confortables y muy limpias; el desayuno el mejor que hemos probado al igual que el restaurante, comida exquisita y productos frescos, especial mención a los huevos rotos, aunque es imposible quedarse con un solo plato de toda la carta, las manos de Héctor en la cocina valen oro.
Aunque si hay algo que ha hecho que nuestras vacaciones hayan sido perfectas, es el trato de sus anfitriones, Rafa y Héctor, siempre dispuestos a ayudarte y hacerte la estancia más agradable. Todo un descubrimiento, gracias por todo, volveremos!

El trato al cliente es inmejorable, las instalaciones están súper limpias y cuidado todo al detalle con una bonita decoración, no se escucha ningún ruido y la comida está muy bien, el desayuno no falta de nada. Sin duda repetiré.

Extraordinario tanto en calidad como precio, servicio y ambiente. El lugar es precioso, sobre todo la terraza bajo las parras. La comida, la mejor y la relación con el precio muy buena. El personal es encantador. Volveremos

Comida o cena con vistas, bajo un parral iluminado de noche! Comida sabrosa y atención rápida. Ideal para las noches de verano disfrutando de un Albariño

Por encima de todo el trato, amabilidad y simpatía de Héctor y Rafa (dos cracks). Luego, la relación calidad-precio.imbatible. Resumiendo mucho.una MARAVILLA. Gracias por todo ️.

Hotel: habitación amplia, buen colchón, baño grande y limpieza impecable. Vistas espectaculares al valle. Ubicación inmejorable. Desde el hotel tienes todas las Rías Baixas a mano. El desayuno es una pasada, digno de un hotel de 4 estrellas. Y el precio por una semana fue muy bueno.
Restaurante: muy coqueto y todo muy rico, pegado a la viña y también con buenas vistas al valle. Buenos precios.
Pero lo mejor de todo ha sido el trato dispensado. Héctor y Rafa fueron muy atentos y muy majos, siempre disponibles. Además, coincidimos con una feria del vino de albariño en el pueblo muy divertida y con grupos de música todas las noches.
Sin duda, el mejor sitio para ir al sur de Galicia. Gracias por todo. Volveremos.

He tenido que eliminar mi reseña de hace 1 año para actualizarla a la situación actual.

Hace 1 año era un sitio top, pero ahora parece que de tanta parra que tienen se han subido a ella.

1º Mesa reservada para 4, llegamos 2 personas y no nos dejan sentarnos en la mesa teniendo que quedarnos en la entrada hasta que vengan los otros 2. Espero que en la respuesta me digáis el motivo!

2º La comida ya no es lo que era: 55-60 euros por 1 pimientos, 1 croquetas, 1 tortilla (poco menos y es de plato de postre y de 1 dedo de altura) y unas pechugas de pollo a la miel que parecían hechas a desgana (ya que ni jugosas estaban)

Calidad precio es lo que ha empeorado mucho, el sitio es bonito si pero la comida ya parece hecha para turistas y clavarles.

Sitio muy muy chulo. Las croquetas de las más ricas que he probado, pero el resto. Pedimos tortilla y pollo con miel y sésamo y bastante malo, por no hablar de los precios ️️️
La camarera borde, mal encarada. En cambio el otro chico que había majísimo y hablador.
Lo dejaría como un lugar "sin más".

Un sitio para relajarse y desconectar.
Héctor y Rafa, los anfitriones, son los dos encantadores y hacen que la estancia sea más agradable si cabe. Hotel pequeño, muy bien decorado y la limpieza espectacular. Nosotros íbamos con un perro y después de la limpieza no se veía ni rastro de su paso por ahí.
Las camas son comodísimas. Desayuno abundante y excelente.
Una pena que no pudiéramos quedarnos más tiempo. Volveremos seguro.

Nos cuincidió fin de semana por la zona, nos guiamos por los comentarios y sin duda un acierto.comida casera, raciones abundantes, trato estupendo y precio acorde! Repetiremos sin duda!

Nos alojamos con una perrita pequeña y el trato fue perfecto. Destacar también el delicioso desayuno y lo bien decorado que está todo. Sitio más que recomendable, sobre todo si viajas con perrete!

Si quieres estar y sentirte como en casa, tienes que ir a As Sete Campás. Por muchísimas razones:
- Rafa y Héctor son los anfitriones perfectos
- Las habitaciones son amplísimas y descansas de lujo
- La ubicación es perfecta para moverte por los alrededores, Sanxenxo, Grove, La Toja, Caldas, Pontevedra, etc.
- El desayuno merece una mención aparte, es exquisito
Un alojamiento absolutamente recomendable, de 10. Dentro de nada estaremos allí de nuevo.
Gracias por vuestra hospitalidad, chicos. Y hasta pronto!

Os propietarios son moi agradables. As habitacións estaban moi limpiñas, a pesar de que había cans. Os colchóns espectaculares. As vistas das habitacións de atrás dan a un val ben bonito. Recomendable, se queres descansar

La atención del personal excelente. Los desayunos perfectos. Bonitas vistas desde la habitación de la zona de viñedos pero la carretera genera un ruido desagradable.
A pesar de una decoración con muy buen gusto, la habitación no resulta acogedora: excesivo color blanco en puertas y paredes, aunque esto puede ser muy subjetivo. Lo que no es subjetivo es el ruido provocado por la bajante de agua de la planta superior, muy molesto sobretodo en horas de madrugada. (Nuestra habitación era la número 8).

Fabuloso jardín bajo las parras de uva Albariño. Carta cortita pero muy rica de platos gallegos y postres caseros con mucho cariño. Vinos de 1a calidad de la tierra y muy buen trato.

Simplemente maravilloso, tanto la comida como el servicio y el lugar. Proporción calidad-precio y el entorno inmejorable

Un lugar maravilloso para desconectar durante unos días, tanto la comida, el ambiente, el confort de las habitaciones y el entorno del hotel son increíbles. Además el trato recibido por Héctor y Rafa es estupendo, te hacen sentir como en casa. Gracias por todo, me voy enamorada de Galicia y de vuestra terraza:)

Por el sitio, el servicio y sobre todo por el trato. La comida está muy buena y además barato y ese pescado que nos hiciste (raya que no habíamos comido nunca) estaba muy rico. Seguid así, os deseo lo mejor un saludo para todos.
Y por supuesto una buena vendimia!

Extraordinarias vistas, sobretodo con puesta de sol sobre los viñedos.
Trato amable y comida rica.

Un gusto exquisito. Un lugar para el descanso. Precioso. Muy educados.
Ya había estado y volveré seguro.
Muchas gracias a Hector y Rafa.

En un entorno tranquilo, buena ubicación para recorrer la provincia. Casa con mucho gusto. Habitación muy confortable y buen desayuno.
El pulpo con queso muy rico, aunque todo estaba muy bueno, y si lo tomas en el jardín de los viñedos con una copita de albariño, ya de lujo.
Gracias a Rafa y Héctor por su amabilidad y atención.
Totalmente recomendable.

Habitación y baño super amplio! Máxima comodidad. Muy limpio todo. Las vistas desde la habitación a los viñedos son preciosas. El personal es encantador! Desayuno buffet variado. Muy recomendable cenar en su restaurante bajo la parra con las lucecitas y las vistas.las raciones abundantes y ricas. En definitiva, 100% recomendable.

Hemos estado una semana en este hotel encantador. Héctor y Rafa te hacen sentir de la familia. La comida buenísima. Nuestra familia, incluida nuestra perrita Ona los vamos a echar de menos. Muchas gracias por todo. Esperamos que os vaya genial

Este verano fuimos muchas veces y seguiremos yendo, cuando un sitio nos gusta, nos tratan bien, se está súper agradable debajo de la Parra y encima se come de cine.destacaría los huevos rotos y de postre la torrija con helado buenísima.

Este verano hemos ido un montón de veces y seguiremos yendo, cuando el sitio es súper agradable el trato inmejorable y encima se come de cine.destacar los huevos rotos y de postre la torrija con helado.buenísima.
Sitio muy recomendable

Magnífica terracita con emparrado y música tranquila para cena veraniega de taberna y copa de producto básico gallego, tortilla, pimientos
a mejorar las viandas y el surtido de producto, pero sin duda.un sitio muy acogedor y novedoso para adultos.para niños, no hay zona juegos

Todo un descubrimiento! Con una bodega preciosa para tomar unos vinos antes de cenar y una parra muy acogedora. Ellos son encantadores y la comida toda muy buena, tengo que destacar la torrija con helado de pistacho que me pareció insuperable.

Tracte immillorable. Esmorzar boníssim. Estada molt confortable i acollidora. Unes vistes xulissimes. Molt recomanable

Excelente lugar para disfrutar de una buena comida echa con esmero y calidad. Exquisito
Todo lo que hemos comido. Buenísima presentación además de unas mesas muy chulas en madera con un ambiente acogedor. Repetiremos segurísimo.

Encantadores anfitriones, limpieza extrema, desayuno sensacional, habitaciones amplias y confortables.

Pedimos puntillas, tortilla mediana sin chorizo, huevos rotos con jamón, zamburiñas todo riquísimo no, lo siguiente y de postre sorbete de fresón buenísimo y por último la torrija esto si que nunca había comido nada tan rico en mi vida! Calidad precio perfecto y el camarero Pedro un 10! Solo una pega la comida la sirvieron muy rápido pero después el resto algo lentos

Unas tapas muy buenas, en un lugar idílico bajo las viñas, precioso.
Muy buen servicio y buen precio

Excelente en todo, estuvimos con nuestra mascota (Otto) unos días de descanso y relax, la habitación amplia, la decoración exquisita, la cama de lujo, el desayuno inmejorable, la comida con mucha variedad y exquisitez y el trato por parte de los dueños Rafa y Héctor súper familiar. Sin duda repetiremos.

Un lugar espléndido. Furancho donde se come y se bebe genialmente sobre todo es recomendable hacerlo en la bodega.

El lugar está bien pero pedimos pulpo con queso de Arzúa y fue un chasco. Las rodajas de pulpo era tan finas que parecían cortadas con una máquina cortafiabres, el fondo estaba cubierto con rodaja de patata cocida y en el queso no se apreciaba el sabor característico del queso de la denominación de origen Arzúa-Ulloa.
La tortilla estaba buena.

Tiene una zona de terraza para cenar muy buena pero necesitas reservar y como paramos de casualidad nos tocó en la zona interior, tienen una comida muy rica, lo que más triunfa son sus Huevos con jamon

Desde que abrió, su relación calidad precio, su atención y servicio insuperable, sigo echando de menos alguna referencia más en su carta de vinos, pero el resto genial

Una comida debajo de un parra de calidad, fue de picoteo y en calidad precio muy bien, la atención fantástica, repetiré para probar más platos.

Terraza muy bonita y enxebre debajo de una parra. En nuestro caso como estaba completa nos dieron la posibilidad de cenar en el comedor del hotel. Las tapas muy bien con raciones grandes y precio pequeño. Volveremos y lo recomiendo.

Auténtico sabor y ambiente de Galicia. Un trato sorprendentemente profesional en virtud del aspecto humilde de las instalaciones. Todo escrupulosamente limpio y aseado. Respeto de las medidas de higiene post CO-VID.

La comida que pedimos excelente tanto en su ejecución, sabor y presentación en generosas raciones, pero aún mejor los postres. Increíbles las torrijas (absolutamente imprescindibles) y la tarta de queso de Arzúa cubierta con reducción de membrillo. Buena cerveza, buena carta de vinos y el precio de todo muy ajustado a la calidad y cantidad servidas.

1000% recomendable (sí, mil). Repetiremos seguro y varias veces, sin duda.

Lo primero es que comimos a la sombra debajo de una parra. Dos matrimonios
Y comimos tortilla, zamburiñas y huevos rotos. En general todo bien, con buena relación calidad / precio. El personal muy amable y bastante limpieza. Los postres normales, si
Bien quizá podría mejorar un poco este apartado, introduciendo alguna otra variedad.
Volveremos si Dios quiere. Gracias al personal por su atención.

Inigualable la hospitalidad y profesionalidad del personal de As sete campas.

Las habitaciones super cómodas y todo al detalle.

La ubicación magnífica a 10/15 minutos de todos los puntos de interés de la zona.

El desayuno de vicio!

Y por último, destacar como trataron a mi perrita durante la estancia. ️️

Un placer visitar sitios como este.

Muchas gracias!
Un saludo.

Una semana maravillosa. Trato exquisito de sus dos anfitriones: Héctor y Rafa. Eficacia, profesionalidad y cercanía. Desayunos de 5 estrellas. Limpieza y
pulcritud extraordinarias. La decoración preciosa tanto dentro como en la preciosa terrazita que han habilitado para comer su maravillosa carta. Y además son dog-friendly. Lo recomiendo encarecidamente!

Comes bajo las parras y con vistas a viñedos. Han cuidado los detalles, las vajillas, son muy bonitas. La comida muy natural y de la tierra, lo que esperas. Nos pusimos a pedir y el camarero nos aconsejó que pidiéramos menos, un detalle, gracias a él comimos fenomenal, zamburiñas, muy ricas, ensalada, chopitos.todo muy bien, los postres una locura, la torrija y la tarta de queso estupenda.

Ten unha terrazaincreible debaixo de unha viña con mesas baños moi limpios e un servicio moi atento esta patomar o que che apeteza e pasar un momento moi agradable recomiedo esta moi ben

El hotel es perfecto, el desayuno los dueños, la situación entre viñedos y el restaurante una cocina muy buena en un entorno muy bonito

Viernes 3 de julio. Descubrimos una terraza donde pudimos cenar tapas, bien elaboradas, atendidos con agrado por una chica profesional, muy pendiente en todo momento de que no faltase nada, que nos ofreció lo mejor de la carta y fue un acierto. Se agradece el trato recibido en un lugar que no te conocen. Buena relación calidad/precio. Si volvemos por la zona repetiremos! Gracias

Un lugar agradable de buena estancia, buen servicio y personal muy agradable, desde luego muy recomedable

Todo espectacular, la habitación decorada con muy buen gusto, muy cómoda y limpia, el desayuno muy completo, variado y casero y la cena exquisita. Todos los detalles cuidados al milímetro. Nos ha encantado todo! Repetiremos!

Nos íbamos a alojar allí en el puente de agosto, pero desgraciadamente se rompió una tubería y nuestra habitación no se podía usar, no nos podían dar otra porque estaban al completo, pero ellos nos buscaron otro alojamiento para poder quedarnos ya que íbamos con un perro y un bebé e iba a ser complicado encontrar un alojamiento que diera esas prestaciones y más en el mismo día que íbamos a ir. Muy atentos en el trato, estuvieron muy pendientes de si estábamos agusto en el alojamiento que nos habían encontrado. Fuimos una noche a cenar a su restaurante y todo exquisito, relación calidad precio muy buena. Sin duda en otra ocasión intentaremos quedarnos en su alojamiento.

Muy buen servicio. El maitre muy atento explicando todo muy bien. La comida exquisita y con un ambiente relajado y muy agradable.

Para repetir! Un buen lugar donde comer, platos bien elaborados, plato de pulpo y calamares encebollados exquisitos. Servicio con detalle y local decorado con gusto. Recomendable 100%.

Trato exquisito. El dueño es encantador, explicando los platos con todo detalle. Los platos muy bien elaborados. Gran equilibrio entre calidad y precio. De 10.

Me parecio un sitio sin personalidad, queriendo imitar lo que hay en otros restaurantes, y de precio algo caro

Restaurante muy bonito y muy acogedor nos quedamos impresionados el dueño muy amable la comida muy buena con un gran producto fuimos 4 y nos quedamos encantados un local para visitar! Volveremos

Un sitio perfecto para dormir sin un ruido habitaciones amplías y perfectas el trato exquisito y la comida igual, la relación calidad precio de 10.