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Lo peor que encontré en el camino de Santiago, un trato chulesco y despectivo, solo atendía a sus amistades, no nos dio opción ni a pedir una tapa puesto que solo atendía a quien le venía en ganas. No lo recomiendo.
Lo peor de Melide. No lo recomiendo. Llevamos más de hora y media, atiende a sus amigos y clientes habituales y nosotros que vinimos a comer solo nos puso una ronda de cervezas y nos hizo caso omiso, el camarero ha pasado de nosotros, Gracias por no atendemos, así nos evitamos pagar por pésimo servicio
Después de más de esperar una hora para que tomara nota de la comida, solo pudimos beber una cerveza. Maltrato a los que consideran que no son del pueblo. Debería poner un cartel "prohibido turistas"
¡Nos divertimos mucho en este bar! Gran personal, super agradable! ¡Las bebidas fueron fantásticas! Lo recomiendo encarecidamente: ¡una parada muy divertida en el Camino!
Si quieres comer croquetas bañadas en aceite y ver al tio más insípido y antipàtico de Melide, ve a este bar. Mala atención, solo un camarero para dos bares.
Lo encontré en una noche lluviosa y después de no saber quien nos atendía apareció Alberto y nos atendió de maravilla y nos ganó la apuesta de que te tenia las mejores anchoas y tenía razón las mejoras que Lila ha probado
La experiencia fue pésima, cuando vino el camarero le dijimos que queríamos cenar y nos dijo que primero la bebida. Después de media hora y después de insistir varias veces en que nos dijera que tenía de comer, nos dijo que tenía la campana estropeada y solo tenía latas y embutidos. Fue muy desagradable.
En una parada del camino de Santiago, entramos a tomar una cerveza y unos vinos, cuatro amigos, nada más entrar nos atiende ALBERTO, simpático y amable, nos sirvió una cerveza de bodega buenísima después un vino acompañado con queso de la tierra y una tabla de jamón ibéricos recomiendo si quieres pasar un ratico agradable compartiendo con amigos.
Pongo una estrella porque no me permite poner 0. No es el lugar más idóneo para tomar nada. El dueño o encargado mal encarado, menos con sus conocidos a los que sirve pinchos seguido ignorando los que no somos del pueblo. Para cenar sino eres colega te puedes esperar más de dos horas viendo cómo pasan por delante los conocidos aunque lleguen más tarde. O sea en lugar de de bar a boa viña, debería llamarse los "amigos de Melide"Poco inteligente por su parte. No se puede decir lo mismo del de al lado la bodeguilla un bar donde todo el mundo se atiende por igual Chapø además de ser encantadores
Fuimos a tomar algo y luego nos quedamos a cenar, tube que decirles 3 veces si me habían tomado nota, pq la espera fue de 1 hora casi, por lo que se ve se habían olvidado de nosotros, mu mala organización y eso que no había casi gente, pedimos una tortilla y unas cosas más y la tortilla de patata tenía buena apariencia, pero la probamos y sabía a calamar, el aceite era reutilizado de los calamares y hombre tortilla con sabor a pescado, desagradable a más no poder, para tomar algo sin más, pero por mi experiencia para comer algo allí deja mucho que desear, te cobran 12 euros, no me parece normal que utilizen el mismo aceite donde fríen calamares da mucho asco, a parte de que la atención no es demasiado buena, y si también lo veo muy feo el detalle que pasan las bandeja o ponen pipas, a quien quieren, a unos si y a otros no, y nos dejamos 50 euros, no lo recomendaria un cero a parte que los camareros muy desagradables y eso que viven de la gente veraneante más que nada, no volveré sin dudaaa
Una atención por parte de Alberto fabulosa, nos atendió con muchísima amabilidad, y nos dedicó un trató exquisito, y unas tapas de jamón deliciosas, muy recomendable
Horrible experiencia! Si queréis pasar un buen rato con una atención agradable evitar el A Boa Viña a toda costa. Estuvimos esperando 45 min a que nos atendieran, y eso que no había mucha gente. Al final decidimos irnos. Eso sí, al camarero no se le olvidaba ofrecer pinchos o atender a otros grupos de gente, "amiguillos" del pueblo supongo. Además el camarero es muy poco agradable. Y sobretodo, nos han dicho que ojo con la cuenta que pueden contaros cosas de más. Con todo esto, puedo decir que estoy totalmente deacuerdo con las múltiples reseñas de 1 estrella que tiene el local.
Trato muy malo, pedimos la bebida después de estar esperando bastante y al rato nos dice que prácticamente no tenía nada y eso que le dijimos que lo que queríamos era cenar. Nos tomo el pelo y encima nos contestó bastante mal, un maleducado.
Alberto es simpático, detallista y agradable. Es llegar y sentirte como en casa. Incluso si vas solo. Incluso si vas para estar tranquilo y pendiente de tus pensamientos. Me ha encantado estar aquí y diré que se me ha hecho cortísimo. Súper recomendable.
Pedimos tres vinos godello y nos puso uno de 3 euros sin preguntar. En la botella quedaba el fondo y le dijimos que lo echase en nuestras copas para compensar el precio. Lo que hizo fue ponerse él una copa y tomarlo vacilando aún encima. Un maleducado el dueño la verdad. No volveremos. A veces pone tapas a unas mesas y a otras no dependiendo de lo bien que le caigas. La comida bastante mal también. Sobran bares donde te traten mejor
What a great little find. The owner Alberto was so friendly, generous and helpful. It was just a shame we had such an early morning the next day or we could have spent hours sampling the great wines on offer. Gracias amigo
Genial, la atención, la variedad de vinos, las generosidad de los pinchos. Mi referente en el camino cuando paso por melide. Y además relación calidad precio estupenda.
La verdad que el dueño o el camarero, de simpático nada de nada, todo lo contrario, áspero y mal educado con los que venimos de fuera, los dos últimos años que hemos ido el primer siempre tiene alguna salida de tono, así que dos veces, pero ya no 3, que vamos como un buen profesional debería tratar a los foráneos igual que a los del pueblo! A este le hecharian de la escuela de hostelería.quiere dar una impresión y da todo los contrarío, así que cuando suba mellide de vinos, un bar menos donde gastar. Ya no quedan profesionales de la barra!
Pedimos si habia algo de comer, nos dijo que 18.30 si. Son 18.34 y se sento a comer el, quejandose que tiene hambre. No abrio cocina, nos dijo que si queremos nos saca un plato de jamon 5j. Si sos de fuera y peregrino, horrible el trato. El ambiente esta bien, pero el trato del camarero, la palabra horrible, no termina de describirlo.
Pueden tratarte mal porque total no vuelves, pero escribo esta review para dejarlo claro. Ojala lo hiciera mas gente
Regular tirando a mal. El trato del camarero deja mucho que desear, sobre todo si lo comparas con los bares de alrededor. Imagino que a los de Melide los tratarán mejor porque si no estaría vacío.
El sitio, agradable. Bien los pinchos que acompañaron las bebidas. Pero ojo al pedir algo más de comer; te ofrecen algo distinto a lo pedido. En los quesos, pides una tabla de curado y te ofrecen un batiburrillo de tipos al precio de 19€.
Trato pésimo por parte del camararero desde el minuto uno con mi perra sin venir a nada, así que no tomé nada e incluso recogí una chapa del suelo que el camarero debe tener por costumbre tirar al suelo cuando sirve. Lo peor.
Local muy bonito en la zona vieja de Melide, gran variedad de muy buenos vinos de distintas regiones y acompañados de unos quesos y embutidos espectaculares, a precios asequibles. Muy buena atención. Recomiendo ir a probarlos.
No saben diferenciar un albariño de un ribeiro. O ponen lo que les da la gana y cobran lo que les da la gana. Ponen pincho.pero si eres de fuera ya sabes.a pagar!
Trato pésimo, y malas palabras hacia nuestra perra (cosa que estando en la terraza y la pobre tumbada al sol sin hacer nada). Entramos a solicitar una tapa de tortilla o de algo para bajar las cañas que habiamos pedido y muy bordemente nos responden que no tienen nada para comer. No cuesta nada ser un poco más empatico y atender a los clientes de mejor manera. Asique nada, toca tomarse rápido las cañas y marcharse a otro lugar donde nos atienden mejor. NO LO RECOMIENDO para nada. Asiq por eso le doy un -100%
Después de 30' esperando por un raxo y sin tapa y si en la mesa de los amigos de al lado! Raxo rico y ración correcta, pero tampoco trajeron el pan.por tanto, ni preguntamos x el postre.
Uno de los mejores sitios de Melide para tomar un buen vino a su temperatura óptima o una caña bien tirada, con unos buenos pinchos que suelen pasar un par de veces. La terracita, en una pequeña plaza, resulta acogedora (aunque algo apretujada), pero en el interior también se está muy bien.
Buena terraza para tomar unas cañas o refrigerio. Ofrecen pinchos con frecuencia y muy variados. Buen ambiente, aunque quizá las mesas de la terraza demasiado juntas. Recomendable.