Café Bar Eugenio

"Pasa, estás en tu casa".
SUBIDÓN: Trato, comida, precio.
BAJONAZO: Localización, ¿orden?

Viajes del día, con mucho que ver y poco tiempo. Todo son prisas y hasta las paradas para ir al baño están cronometradas. La opinión es unánime: un bocadillo para llevar. Sin embargo, en ocasiones, las cosas se tuercen. ¡Visteme despacio que tengo prisa!
Bares donde no tienen cocina, otros de dudosa calidad y otros de "tanto postín" Que no se dignan a atenderte por minucias. ¿Y ahora qué? Pues lo de toda la vida:
-Perdone, señora, ¿Sabe usted donde podemos comprar unos bocadillos?
-El Eugenio hace bocadillos y tiene empanada.
-Perfecto ¿Como se llama la calle?
-No me acuerdo, "neniños", pero es pá aquí y luego pá allá.
Y al llegar ¿Eugenio? Jugando con sus nietos.
-Si, sí si, sentaros que ya irá la camarera.
Y él con los críos a lo suyo. Todavía hay prioridades en la vida. Este hombre es de los nuestros.
Una mujer encantadora y cercana nos inquiere:
-Hay bocadillos de tortilla o de albóndigas.
-¿Como? ¿De albóndigas?
-Si, especialidad de la casa.
-Venga, pues.
-¿Con queso o sin queso?
-¿Como? ¿Albondigas con queso?
-Por supuesto!
-ok, pon uno con y otro sin queso.
Un pan tostadito con pelotas de carne cosquilleandole la miga. Un Mencía para servirle de tobogán.
A veces la felicidad está en las cosas redondas.
-De postre hay filloas o rosquillas.
¿Para que queremos una carta de 100 platos?
-Las dos, seguro que están riquísimas.

Voy a destacar lo que no me gusto.
Precio alto.
Falta de higiene.
Servicio muy lento.
Ambiente regular.

Lo que no puede ser es que estea una camarera sola a atender todo el bar y tener que esperar 50 minutos para un desayuno y nadie le heche una mano siendo mas personas en el bar.
La falta de higiene porque las tostadas se deben hacer en cocina con las manos lavadas o guantes.

Pedimos 2 chocolates y 1 coca-cola. Cuando el compañero terminó la coca-cola aún no nos habían servido los chocolates. Preguntamos y nos respondieron que " este año es lo que hay, si quiere esperar bien y si no. "

Lamentable, hemos estado para cenar y hemos tenido que esperar muchísimo (cerca de una hora para pedir comida y consumición), nos acercamos a la barra para "facilitar el trabajo de la camarera" y lo único que conseguimos fue una mala contestación y mala cara de parte de una de las camareras con gafas, a partir de ahí malas formas y no pudimos pedir más bebida, a lo que hay que sumar que nos fuimos sin que nos pusieran una de las raciones. Mi consejo ir a cualquier bar del pueblo o la pizzería que hay al lado antes que entrar en este sitio.

Debo señalar que quedamos decepcionados por varios aspectos. Lamentablemente, encontramos que el servicio carecía de la amabilidad que uno espera en un establecimiento de este tipo. Además, la excesiva lentitud en el servicio fue notoria y afectó negativamente nuestra experiencia.

Nos llamó la atención que, a pesar de haber solicitado raciones individuales, algunas de ellas fueron traídas compartidas, lo que generó cierta incomodidad. Además, las porciones no solo eran limitadas, sino que algunas de ellas no estaban bien preparadas y resultaron ser decepcionantes en términos de sabor y calidad.

Un aspecto que nos pareció poco acertado fue la forma en que servían los garbanzos, fuera de la cocina, lo que contribuyó a la sensación de falta de higiene y organización. La ausencia de cubiertos también fue notoria y afectó la comodidad de nuestra comida.

En resumen, nuestra visita al Restaurante Bar Eugenio dejó mucho que desear. Consideramos que hay varios aspectos que deben ser revisados y mejorados para poder recomendar este lugar a otros comensales. Esperamos que el establecimiento tome en cuenta estas observaciones y realice cambios significativos en su servicio y calidad para brindar una experiencia más satisfactoria en el futuro.

Tanto la atención como la comida de 10. Después de intentarlo por todo Porto do Son, nos atendieron pasadas las 15: 30 y mereció por completo la pena. Un delito salir de ahí sin probar la tarta de queso casera.

Comida riquísima, una tortilla casera enorme por 16 euros, comen al menos 4 o 5 personas con ella, a nosotros nos la pusieron crudita pero la cocinera (super amable igual que todas las camareras) nos ofreció hacer un poco mas alguna porción por si a alguien le gustaba. Bocatas riquisimos por 5.50 con pan artesano, la mejor opcion para comer por la zona, sin duda para repetir!

Está bien, fuimos de visita a Porto do son y el sitio que encontramos con terraza para comer, la comida no estaba mal, pero precios desmesurados para lo que es realmente. Hay que decir que todo estaba muy bueno pero precio muy alto. Atención mejorable

Los churros frios, el chocolate pequeño. El local vacío y sin ventilar. Un día de semana, sin gente y con pocas ganas de atendernos. 2 raciones de churros con chocolate 7,80 €.
Fuimos por la fama de su chocolate y fatal.

Buen bar restaurante. El servicio muy agradable y flexible. Dan desde desayunos hasta cenas y comida para llevar. Las tortillas de patatas exquisitas y hechas en el momento. Magníficas albóndigas y hamburguesas. Deliciosos cachelos y muy bien fritas las patatas. Siempre tienen disponibles churros. Tiene terraza a la calle y patio interior.

Buen sitio para tapear y cenar algo. Tiene una gran cocinera, un buen sitios para cenar y comer. Comida típica gallega. Recomendado y precios muy asequible. Recomiendo ir y reservar. Si vas con niños disfrutarán de la comida y de los postres. Tienen detalles con ellos. De verdad, es como este en casa o en un bar de gran categoría

Las albondigas estaban buenas, la tortilla de patatas, fria de hace horas, no lo recomiendo

La tortilla de patatas con cebolla, las croquetas, las albóndigas.insuperables, de verdad. Id y preguntad a Mónica, que sabe todo

Espectacular! Servicio rápido, comida casera, personal muy amable y a un precio “correcto”. Destaco la tortilla y la empanada de maíz (de berberechos) recién sacadas del horno y con un sabor increíble. Todos los postres son caseros, y todos están muy muy ricos. Repetiré seguro!

Buena comida casera, bocadillos, pizza, tortillas, empanada.con muy buena atención al público

Muy buena comida. Recomiendo croquetas de jamón y tarta de queso. (Y el kalimotxo). RECOMENDABLE 100%

La comida es casera y muy bien hecha, las raciones un poco escasas si eres de comer. El precio muy razonable para la calidad ofrecida. Las carrilleras impresionantes y los postres muy bien. Lo que es imperdonable es que en ningún sitio muestren los precios, algo que les perjudica claramente porque no es un sitio caro, por eso no le pongo cinco estrellas.

Buen lugar para picotear buenas raciones, las croquetas buenísimas y que decir de la tarta de queso maravillosa y para acompañar un buen kalimotxo lo recomiendo.

No hay mejor tortilla de patatas y empanadas… lo mejor María, la dueña, siempre dispuesta!

Vamos a menudo, cogemos todo tipo de comida para llevar y todo muy rico. Desde las raciones a los postres.

Hoy pésimo, nos hicieron unos calamares con un aceite requemado. Como nos quejamos y pedimos que los retiraran, a continuación nos dijeron que no tenían raxo, cuando lo habíamos pedido 1/2 hora antes de la queja. No vayáis a comer poco profesionales.
Mala calidad, mal servicio. Ir al Hórreo, al Son da Vilá, al Cantina da Lua, al porto nadelas. Hay alternativas mucho mejores

Comida abundante, rica y a buen precio, las chicas que nos atendieron fueron muy majas y el servicio bastante rápido. La tortilla de patata y el chocolate con churros están muy ricos.

Las sartenes variadas muy ricas. El chocolate con churros el mejor de toda la zona. La tortilla de patata, riquísima! Se notan los huevos caseros que utilizan. Las empanadas son otra de sus especialidades, de manzana, de zorza, de bacalao. Buen precio. Dispone de WiFi gratuita.

Trato familiar y comida buena y abundante, a precio razonable. Las sartenes, muy buenas. Andaban un poco pillados de personal y de existencias acabando la temporada, pero merece la pena ir y volver, la terraza genial.

Pésimo, no se puede dar un peor servicio.
La mesa para empezar les tienes que pedir expresamente que te la limpien sino ni se dignan en hacerlo. Las bebidas te las sirven sin hielos. Para comer te ofrecen lo que les interesa sacar en ese momento, es decir, si no tienes reserva te vas a comer lo que ellos quieran, en cambio si reservas tienen acceso premium a sus platos "gourmet". Tardan en servir hasta una empanada fría que es lo único que nos ofrecieron, eso si de atún o mejillones. Resumiendo creo que hay infinitas mejores opciones en este pueblo. Le pongo 1 estrella porque no deja menos

Raciones de estafa. 9€ la ración de raxo y no come ni media persona. Nada recomendable. Solo el personal que es amable.

Espectacular desayunos y almuerzos precios recomendables la atención muy buena personal Escelente y no digamos de limpieza todo espectacular volveremos a ir el próximo año