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Bar/Restaurante/Fonda, Pensión, ejemplo de negocio que ha pasado de generación en generación, casi autosostenible, bueno más bien que resiste, gracias al buen talante y empeño de Xesús, su simpático y auténtico propietario. Buena comida, buenas cañas y lo mejor de todo buen servicio y buen humor.
Toda una experiencia Queríamos comer de tapas o raciones y entramos para comer Pero.no pedimos nada Dijimos para comer dos Y nos sentamos Lo demás vino. Un plato, otro plato otro plato otro plato Encantador Suso el camarero tal cual sin tapujos La comida como si estuvieras en casa Algunos platos no se ve nada porque no me di cuenta y nos los comimos sin hacer la foto. Gracias Suso eres genial no cambies Ah! Nos fuimos sin poder preguntar si había más cosas, aparte de lo que comimos
Increible Menu de degustacion para disfrutar con tranquilidad Marques el “todo” tiene una actitud de la que deberiamos de aprender todos Muy recomendable
Curioso lugar donde degustar platos típicos de la zona. Camarero muy atento y simpático. Personalidad extraña. No tendrás carta para elegir pero comerás. Se podrán disfrutar de antigüedades en el local.
Gran cambio con la nueva gerencia, comida muy rica y casera, con una presentación excelente, se nota la mano de un esperimentado cocinero. El trato de diez, educados, agradables y cercanos en todo momento. Repetiremos seguro.
Sitio muy peculiar y con su encanto, mantiene mucha esencia. El dueño te sirve con todo el cariño lo que tiene de comer en el día, eso si, venir con muchas ganas de comer por que es increíble lo que te sirven en la mesa. Si quieres salir de lo típico es recomendable 100%. El trato es maravilloso, mucha simpatía y ganas de su trabajo.
Empezando a que no te dan opción a elegir la comida 45€ hemos pagado por una ensalada para compartir 3 huevos fritos y dos chorizos (crudos) con patatas y jamón flotando en aceite después de 1h esperando la comida. Los platos estaban sucios y uno de los vasos una mosca muerta. Menudos estafadores y nosotros subnormales por no decir nada pero las caras decían todo. Te cobran como un menú a cada comensal sea un bebé o sea un adulto. Es para llamar a sanidad y que cierren el local.
Sitio anclado en su historia, no tiene carta ni menú pero la comida que te prepara es abundante y parece improvisada. No es caro, con la intriga que no sabes qué vas a comer.
É un café bar por clasificación legal, pero leva o espírito desas antigas tabernas das que hoxe en día cada vez quedan menos. Un lugar onde dar avituallamento o teu corpo e tamén dar un espazo de reflexión a túa mente. O gran Suso fai do Moderno un lugar distinto.
Paramos para comer y no estaba el dueño, la chica q estaba, agradable dijo q venía en 15 mnts el dueño y tomams algo mientras, 2 cervezas, nos puso queso tipo García vaquero como no venía. Nos fuimos, cobro 6 €. No se un poco raro
Camarero-cocinero muy agradable, te trata como si fueras cliente de toda la vida. Comida increíblemente buena, no hay carta ni menú pero te saca de todo hasta que digas basta. PARA REPETIRRR!
Aunque cuando hemos llegado no estaba el dueño en 15 minutos ya estaba allí. Cuando a llegado con tanta energía no hemos parado de reírnos. La comida era impresionante todo muy casero.el precio también muy bueno. MUY recomendable y que no se os olvide: pasar por la costa de barreiros.
Qué buena experiencia comer en este lugar! No hay ni carta ni menú, pero el cocinero-camarero nos ha sacado un montón de platos caseros y ricos. (la empanada, estaba deliciosa) trato familiar, platos abundantes, muy buen precio y sobre todo acogedor, sin duda un lugar para repetir y recomendar. El dueño es encantador!
Muy buena atención rápida y amable. Te hace sentir como un cliente de siempre desde el.primer momento. Café con dulce y tapa al mediodía. Limpieza y desinfección de la mesa después de cada consumición
Un lugar único, muy buen servicio, su ubicación es en el centro del pueblo cerca de bancos, supermercados, Ayuntamiento y Centro Médico. Sin duda una muy buena experiencia.
El menú fantástico, el trato y la atención, perfectos. Y el local muy acogedor y familiar. La tarta de la abuela. Exquisita! Está muy bien situado, en la nacional 634, en el núcleo urbano de San Cosme de Barreiros y con aparcamiento cerca.
Primero porque hay un buen cocinero y se come muy bien, es muy acogedor, y se encuentra uno muy agusto en el y está muy limpio. Yo repetiré. Me encanta.
Una parada obligada a tu paso por San Cosme. Excelente lugar para tomar los vinos y con la cortesía de una gran variedad de tapas y pinchos. También ofrece servicio de restaurante. Muy bien en un agradable ambiente. Muy recomendable.
Un sitio muy acojedor y familiar. A destacar la atención del dueño, Xexu, muy agradable y servicial. Nos subió las maletas hasta la habitación sin nosotros pedírselo y se preocupó por nuestra comodidad. Muy económico y la comida de buena calidad. Recomiendo el sitio.
Me ha sorprendido gratamente, llevo veraneando desde los 15 años y no sabía de la existencia de este lugar, un descubrimiento, buena música más consumición con su tapa que más se puede pedir de 10
30 euros la nuit pour 2 avec petit déjeuner , qui dit mieux? Bien sûr ce n est pas le grand luxe mais l accueil est chaleureux, la propreté impeccable et nous avons goûté un cake maison et une tarte locale au petit déjeuner La déco du bar date de 1934 et l établissement se transmet de génération en génération. Vraiment chouette. Nous gardons un bon souvenir de cette halte sur notre route qui nous a permis de nous balader à la plage des cathédrales et cela vaut le coup de s y arreter. Merci
Fuimos en agosto de 2019 y es un lugar excepcional para tomar unas tapas con amigos, pareja o familia. Muy buen ambiente y un trato cercano. Muy económico. Lo recomiendo 100%, en especial la tosta de pulpo con queso
Lo peor de unas fabulosas vacaciones. El camarero como si no quisiera que entrara gente. Nos sirvió la bebida le pedí haber que raciones tenían y me dijo testada ocupado, aunque sea una bolsa de patatas para la niña. Luego ahora tengo que ir al, comedor. (Había 2 mesas). Después de 20 minutos de espera pagué lo, que había servido y hasta luego.
Un sitio para dormir un día solo si desinfectan el colchón (tiene mal olor), ponen una funda y unas sábanas nuevas adecuadas a la medida del colchón y retiran la fina y arrugada colcha. La habitacion, aunque es grande, no tiene Wi-Fi y tiene una televisión de las antiguas que no funciona. La habitación tiene mal olor, es la primera bofetada que te da cuando abres la puerta. El llavero con las llaves se pega a la mano de la grasa que tiene. Eso sí, el desayuno está muy bien, el camarero fue muy amable.
Comida rica casera la única pega para mi es que no está cerca de la playa y el punto a favor q está en la carretera general que para la gente que está de paso es una ventaja, la atención de 10
No vayas a tomar una simple cerveza o un vino. Esa clase de clientes parecemos no interesarle al dueño. Después de 20 minutos esperando nos fuimos sin ser atendidos. Nos dijo "hola" y desapareció.
Excelentes vistas, mármoles, maderas, desayuno bufet.creo que algunos de estos comentarios han estado en otro sitio, cualquiera leyendo esto pensará que es un sitio de lujo cuando es todo lo contrario, Todo el personal es muy amable y te tratan bien. Pero si queremos dar una información veraz a futuros clientes no se puede poner 5 estrellas a este local. La habitación es una cama y un armario, nada más, miento y una tele de las antiguas que no funciona, mejor quítala, coloca alguna percha, alguna mesilla. La ropa de cama, colchas, sabanas, viejas. Los cuartos de baño son grandes, pero ya que son compartidos ponles un cerrojo en condiciones. En definitiva, sibaritas, tikis mikis, este no es vuestro sitio. Le pongo dos estrellas por la amabilidad del personal.
Fixemos unha parada na nosa viaxe para tomar un café no Bar Moderno e encantounos. Tanto o local como o servicio. Volveremos sen dúbida con máis tempo para comer ou cear.
Un trato genial, un camarero profesional y unas tapas super buenas y en cantidad para cuatro personas nos daba a dos por persona y pidiendonos dos rondas casi salimos comidos. Recomendadisimo.
Local con solera en San Cosme de Barreiros. Bar y posada de ambiente familiar, un muy buen trato con una buena carta de vinos a la hora de chatear, nunca falta algo para tapear en la barra. Cocina sencilla y de muy buen precio.paso obligado para los peregrinos en su paso a Santiago por el camino del norte.