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Un bar rural dónde se puede disfrutar de sus pinchos de comida casera. Se vive y respira el ambiente de lo auténtico de una parroquia como la de Soandres, importante por su transcendencia cultural con el monasterio de San Pedro de Soandres como protagonista. El monumento se puede visitar en horario de culto.
Excelente lugar donde tomar algo tranquilamente. Los dueños son increíbles personas y por si fuera poco organizan música en vivio y eventos culturales como presentaciones de libros y nuevos escritores.
Paramos a desayunar y me quedé perpleja porque te da el bote entero de Cola Cao para que tú te sirvas. Y la tosta con aceite igual, la botella de 1 litro! ¿No ha llegado aquí la normativa Sanidad de aceite monodosis? Y el Cola Cao en sobres? Vete tú a saber quién metió ahí la mano. Por favor más higiene en los tiempos que corren. Salí con mal cuerpo.
Hace honor a su nombre y siempre hay un rayo de sol en esa terraza, que está preciosa con sus cenadores y sus plantas. El trato es de 10 y los pinchos también. Recomendable 100%.
Entorno moi tranquilo, terraza magnífica e ofrecen pinchos coa consumición. "Can friendly", sen nós pedir nada puxeron auga para a nosa mascota e ata lle trouxeron un cacho de churrasco!