Gambrinus

Caminando por los Caminhos de Santiago, un amigo y yo paramos en este restaurante para almorzar.

Todo comienza cuando preguntamos qué hay para almorzar y la señora responde de manera grosera y antipática. Sin decir qué hay en el día.

Como teníamos mucha hambre después de 30km y no teníamos otras opciones cerca, nos quedamos en el restaurante.

Después de sentarme en la mesa, pedí hielo para mi bebida, a lo que me dice que tengo que ir al mostrador porque no hay servicio de mesa.

La comida era terrible y estaba cubierta de aceite.

En medio de todo esto, la señora tuvo actitudes irrespetuosas.

Me parece un robo a mano armada que me pida con un cortado con hielo. Que ni siquiera tienen servicio de terraza tienes que entrar tu a pedirlo y me cobren 1,85€ por un mini café. Y apenas unos días antes me cobraron 1,50€ que también me parece caro. Pero 1,85€ ni que estuviera París.

Local ok para tomar algo mientras esperas el tren. Relacion calidad-precio aceptable, no tienen servicio de mesa.

No les doy menos porque no se puede, los empleados malisimos, un trato terrible y las cosas carisimas. Concretamente una camarera en barra me trató fatal (la aue trabaja los viernes a las 14: 00). Obviamente no volveré y le diré a tofo el mundo que no vaya

1,80 por un café con leche pequeño, sin una mísera galleta. Encima tienes que ir a pedirlo y llevarlo tú a la mesa.

En la estación de autobuses no hay cafetería y me dio por venir aquí a comer algo. No lo recomiendo, mejor comprar en el súper de al lado, Aldi. El pan malísimo de hace dos días y negro, que no integral. La ensaladilla rusa peor que he comido en mi vida. Y las empleadas nada agradables. Lo siento. No volveré. Es un timo.

Como mucho fuera y es el peor menú que he comido en mi vida.
1. Amburguesitas del tamaño de una chapa de bollella congeladas y rebotadas, incomibles con 4 patatas congeladas.
2. Merluza, que sería la parte final del pez, pero muy final con un rebozado, otra vez, con mucha harina y no se que clase de huevo, por supuesto congelado, y lo mejor las 2 hojas de lechuga sin cortar.
3 Postre un flan de lo peor de supermercado.
De beber casera y menos de un cuarto de botella de vino, que vete tú a saber el tiempo que llevaba abierto y por cuentas mesas había pasado. Experiencia hiperdesagradable

Pésimo, no tienen servicio de mesa pero si decides tomarte algo en la barra, te echan y te dicen que te vayas a una mesa por narices. Me sentaré si quiero, solo faltaba.

Una tapita o un aperitivo, olvídate, ni una triste aceituna

Horrible, es caro se come fatal aún por encima tienes q pedir en un trocito d barra, porque sobras en todas partes.
Ahora q abrió el super al lado, id a comprar algo allí, vale la pena.

Independientemente de los precios, la última vez que compré un sandwich para llevármelo de viaje en tren, me lo entregaron con papel albal en una bolsita pequeña de plástico.

Esta vez me lo entregan en una bolsa de papel grasienta y me dice que son 10 céntimos más si lo quiero en la bolsita.

Viajo mucho y tengo claro que no volveré a consumir nunca nada más en este bar.

No sé cómo no mire las reseñas antes.un café y una coca cola 4,20€. No te lo traen a la barra ni una tapita ni nada. Desde luego.volver.jamás.

En el gambrinus de la estación de tren de Pontevedra nos pusieron las cervezas que pedimos y nos quedamos esperando los bocadillos casi 45 minutos, a punto de perder el tren. Encima nos quejamos y nos pusieron malas caras. No vuelvo.

No nos dejaron atravesar el bar para ir con una niña que necesitaba ir al baño de la estación. Hay necesidad de consumir para cruzar el bar si te encuentras apurada con una niña y además con un bastón porque te cuesta andar. Amabilidad ante todo. Pues gracias que la niña llegó a tiempo dando toda la vuelta. Espero que el resto no sean tan inhumanos.

Mala experiencia desde el punto de vista de que no tienen servicio de mesa, precios altos y malas caras

La medida de copa de vino muy mal pir poco no ponen nada y cuando se le reclamo a la chica dijo que tenía que cobrar más y de una manera muy repugnante.

Local antiguo, necesita una reforma, sin servicio de mesa y bastante caro, no pienso volver.

No volvería ni aunque estuvieran todos los bares del Mundo cerrados, muy mal trato, 13€ por una caña, un café y dos tapas incomibles. El dueño y la camarera son unos bordes.

2.65 un albariño caliente.
De pincho.aire.
Bordes hasta para cobrar.
Desagradables a más no poder.
Nunca mais.

Una estrella le queda grande. Precio excesivo (2.40€ por un nestea), pides una cosa y te traen otra, nada de picar en absoluto, te obligan a pagar al momento, local vacío y pasan los camareros como vigilando cada dos por tres, que además tratan de mala gana. Error mayúsculo entrar en este sitio, nunca más.

Me entero que Gambrinus es una franquicia y este local ni sale en la lista de sus negocios. Huele mal el asunto. Poca vergüenza.

Yo no suelo poner reseñas, pero en mi vida me sentí tan engañado.
Tuve que colocar yo la mesa de la terraza, ir a dentro a pedir la consumición y traerla para para la mesa, atención pésima y aún por encima precios desorbitados.
Una vez y nada mas, dijo santo tomás.

Muy caro y sin poner nada con el café, en comparación con otros sitios, espero y deseo que vuelva a abrir la cafetería de la estación de buses

La chica una autentica maleducada, nos estuvo esperando 20 min, y aun por encima nos contesto, marchamos sin tomar nada porque perdiamos el tren

Servicio nefasto y maleducado. Me tomé un café por el que esperé, con el local vacío, más de 20 minutos y, al irme hacia el tren les pedí por favor una mascarilla porque se me había roto la mía y perdía el tren. Respuesta: que eran 50 céntimos. Accedí a pagar, pero no me quiso cobrar con tarjeta porque las mascarillas solo en efectivo. Total, que perdí el tren y la camarera se rió literalmente de mí.

No vuelvo.

Mala atención, un café con leche €1,60 y no te dan ni una maceta. Encima, lo único caliente era la taza. Se abusan porque están en la estación y no hay otro cerca. Ojalá abran pronto el de la terminal de buses. Quizás ahí se den cuenta que necesitan mejorar si quieren clientes. Nada recomendable

Asco de servicio, de sitio y atracadores no lo siguiente una cocacola 2,30 ni que fuera esto madrid, la camarera morenita mas bajita un desastre y una maleducada

El sitio es muy bonito, pero la atención fatal. Las camareras, no encuentro un adjetivo que pueda describirlas. En tres palabra, no quieren estar ahí, no se la razón por el cual lo están, pero desde luego por atender al público no.

10€ por 4 bebidas. La atención pésima. Los vasos sucios. El pincho brilla por su ausencia y por poner no ponen ni servilletas en las mesas. No repetiré ni aunque me paguen ellos a mí.

Una estrella porque no permiten cero.

El local de la estación de pomtevedra el servicio es notable muy buena atención de la camarera y comida bien hecha

El peor lugar en el que estado en mi vida. La camarera, mientras me estoy haciendo una foto con mi marido viene a preguntame que si le estoy haciendo fotos al local que estaba todo sucio y todas las mesas sin recoger. Un lugar en el que solo había 2 personas más tomando algo.está claro que no volveré ya que la atención ha sido pésima y el local estaba asqueroso.

Horrible. Me he tomado tres cafés con el bar vacío y me ha obligado a pagar los tres cafes uno a uno con tarjeta. Y eso que le dije que pagaba todo junto. Una vergüenza. Cerrada puertas y dejad paso a verdaderos hosteleros.

No se puede ser más desagradable, como camarera (la morenita más baja que atiende las mesas) después de avisarle que no funcionaba el QR para ver la carta, nos contesta de mala manera y chillando sin hacer ni caso a nuestro aviso.

Servicio pésimo, estuvimos esperando más de 40 min por un bocata de lomo, cuando apenas había gente. El bocata tenía 2 lonchas de lomo hiperfinas, como papel de fumar y ni nos dieron mayonesa ni nada y tampoco había servilletas para limpiarse.
Hacía un frío que no se aguantaba, que hasta la camarera estaba con un plumas!
No volveremos nunca más!

El que está en el Centro Comercial Vialia de Pontevedra, tiene acceso desde el exterior y desde la estación, es un sitio ideal para tomar el aperitivo, tanto en la terraza, como dentro.

Horrible’! Atencion pesima por no hablar de la calidad de la comida que brilla por su ausencia! Patatas fritas a medio hacer y bocata de pechuga que ni se ve

Amables, acogedor, pero no hay estrella de Galicia en botellín, solo de barril, y creo que es una cervecería, en fin.

El menú con no mucha calidad y sin esmero en el cocinado
El camarero mostró ningún interés por atender bien y ser amable. No recomiendo el local de la estación de tren de Pontevedra

Wir hatten Pasta mit Pesto vorbestellt, da wir erst spät essen wollten. Ohne ein Wort wurden uns dann Nudeln ohne Sauce mit Thunfisch und Ei (ich bin Vegetarierin) vorgesetzt. Auch für Fischesser ungenießbar und trocken. Erst auf Nachfrage wurde frech behauptet dass es heute eben Thunfisch gebe. Auf weitere Nachfrage gestand man dann dass das Pesto aus war. Unfreundlich und unverschämt, wirklich schade. Dabei haben wir auf dem Jakobsweg wirklich nicht allzu hohe Ansprüche etwas essbares zu finden

El camarero súper borde, y las croquetas horribles, llenas de aceite. Creo q la peor comida que comí en todo España.
Las patatas chorreaban aceite

No te dan servicio, de mesas por las mañanas, cafés mal hechos, te cobran por un refresco o aguapara llevar el mismo precio y el sitio necesita una renovación y limpieza a fondo.

El camarero un premio nobel y la comida la traen tapada con restos de ceniza. Si no quieres acabar en el hospital mejor elige otro sitio

Soy Pelegrino, vengo preguntando por el menú Pelegrino y me dice que por 8'5€ puedo comer.
El local está muy bien, pero todo lo demás pésimo. La encargada muy antipática y la comida parece prefabricada, además qué los platos son muy pequeños, me he quedado con hambre. Y 8'5€ ¡MADREMIA! Ahora tengo que ir a otro restaurante a comer. Y para acabar le he comunicado mi descontento a la cocinera con la cantidad de los platos y encima se ha puesto a chillar. Flipante.
Ah me olvidaba. Se han equivocado a la hora de traer los platos. Sinceramente muy mal servicio, no me ha gustado nada. No cuesta nada ser amable.
No recomiendo para nada.

Que vergüenza de restaurante porque esta en la estación que sino ya habrian cerrado las cantidades de la comida son una vergüenza creo que me estoy muriendo de hambre ademas es caro por la calidad y cantidad por no hablar de los gritos de la camarera

Camarera maleducada y muy borde cantidades denigrantes parece que pagues un menú de 5€. I pagas 10€ arroz pequeño de microondas comprado en el mercadona, a eso se la llama arroz a la cubana. Churrasco que no es ni churrasco i solo tres costillas algunas sin carne. Que cierren ya este restaurante que vergüenza de sitio.

La chica que atienda es una borde, le pregunto si puedo pagar la cuenta con tarjeta y se enfada, me responde mala manera casi echandome la bronca y gritando diciendo que allí solo en efectivo. Servicio muy malo.

Y por qué no se puede dar ninguna estrella. Camareros/as bordes, desagradables, mal educados y un sin fin de calificativos. Muy mala atención al público. Pésimo servicio

En plena pandemia, con cierre a las 17 h en toda la hosteleria y se pasan las normas por el forro.son las 19 h de una tarde de diciembre y sirviendo a gente en la terraza

Un servicio pésimo, la camarera es seca y mal educada. Los precios solo se justifican porque no tienen competencia de otras cafeterias en la estación, porque sino sería abusivo. No se como se puede hacer tan mal un café.

Aunque parezca que los bocatas estén a buen precio, no hay buena relación calidad-precio. Casi sería mejor que estuvieran más caros y con más condimento.

Yo me pedí un “Pechuga completo” y a la mitad del bocata, le faltaba la pechuga.

El pan parecía del día anterior y si pides queso, pide doble, porque es igual de fino que el papel pinocho. O al menos eso parecía en el “Serrano especial”.

Un sitio pésimo, la atención y educación de los camareros nefasta, la relación calidad precio no podría ser peor, un cafe con vistas a un aparcamiento por 1.70, una y no mas!

Las 2 empleadas sin mascarilla, hablándote a 20 centimetros con la mascarilla en el cuello y haciendote el café. Cómo? Pues sin mascarilla. Un absoluto desastre en lo que se refiere a higiene, seguridad y respeto por los demás. Una y no más.

Café con leche patético. Una basura que no sabía a nada. No tienen ni idea de hacer café. Local sucio y abandonado. Nunca máis!

Atraco, un pincho de tortilla y una caña 5,25 euros. Después nos quejamos de la falta de clientes.

Me encanta ir al gambrinus tiene buena cocina después de ir al cine además hacen unos bocatas requisitos

Eh pasado por ahí mientras esperaba el tren. Mi experiencia a sido muy agradable, eh sido muy bien atendida mientras esperaba decidí picotear algo. Me quedé sorprendido con la variedad de la carta además del menú del día. Pedí un menú del día que me ofrecia primero y segundo plato además de postre, bebida o pan y café, por 10 euros, a comida muy rica y muy casera además de un atendimento súper atencioso 100% recomendable.

A minha experiência foi ótima, lugar excelente para tomar um shop e comer com qualidade. Voltarei sempre, vocês estão de parabéns.

Los filetes de pollo aquí tienen un ingrediente secreto. AQUÍ LE ECHAN CRISTALES DE VIDRIO AFILADOS Y PLÁSTICOS. Si eres amante de la basura te lo recomiendo.

Yo como cliente habitual del tren, siempre tuve un recibimiento agradable desde el personal suyo, muy rapido y muy atentos, algunas veces eh comido y muy buena la comida.

Siempre cuando voy al cine me encanta pasar por Gambrinus, me gusta mucho la variedad de bocadillos y siempre soy recibida con una sonrisa por parte de los camareros, bocadillo Gambrinus 100% recomendable

Lo recomendó muy buen ambiente antenciom excepcional recordando q se regalan 2 horas de parking gratis lo q no se encuentra en cualquier lugar lo volvería sin duda.

No le recomiendo a nadie este lugar! La encargada es una maleducada, trata a los camareros como esclavos y el trato hacia ellos es totalmente vejatorio. Fui a tomar una caña porque llevaba a mi hija de siete años al cine y aún era temprano. Al oír como se dirigía e insultaba a los camareros le dije que debía tratarlos con educación y respeto. Se puso como una fiera, me empezó a insultar y me llegó a llamar alcohólica. Evidentemente voy a poner una reclamación en la oficina de turismo. He visto muchísimas quejas de otra gente sobre esta persona. Debería replantearse su profesión. He de decir que el camarero que me atendió era muy amable y desbordado de trabajo. Una auténtica explotación!

El lugar agradable y con buena presencia, pero no puedo decir lo mismo de la comida.
Pedí una ración de Zorza con patatas antes de coger un tren y en la vida me habían dado tal casquería por zorza.
Una vergüenza, para tomar una cerveza y punto.

A minha experiência em Gambrinus foi muito boa! Local amplo, limpo, cômodo e agradável. Funcionários atenciosos e amáveis, atendimento super rápido, comida e bocatas deliciosos. Recomendo e com certeza voltarei!

Siempre un caos de bar, con poca gente se alteran, bocatas caros.un bocata con apenas ingredientes.solo sigue vivo por el lugar que esta

Somos peregrinos fuimos a comer y nos pusieron menu del peregrino hasta ahi todo bien despues pedimos un poco de mayonesa y nuestra sorpresa a la hora de pagar fue que nos cobraron 8'50 por el menu en vez 7.50 como estaba anunciado en el Albergue y 0'60 centimos por dos sobrecitos pequeñitos de mayonesa no recomiendo a ningun peregrino que coma el menu el trato nefasto por parte de los camareros.

La camarera prefirió contar billetes que atender a los clientes. Habia un cartel que ponía que no hay servicio de mesas antes de las 12: 00 horas. A la hora que he ido yo, 16: 20 parece que tampoco. Tras 10 minutos esperando me fui del lugar sin atender.
El perfecto ejemplo de lo que no hay que hacer.
Nada recomendable.

Estoy ahora mismo 21.30 hs. Hicimos pedido de bebidas y nos pidieron abonar en el momento que las sirvieron.
Mal servicio. Mala atención.
No lo recomiendo. Un DESASTRE

No recomiendo para nada este lugar a un niño casi le matan con un cristal que se encontraba en el pollo. Además el servicio no ha sido nada majo ni amable. No vayáis acaso que queráis dar dinero por pasarlo mal

Un HORROR, no hay palabras para describir el mal comportamiento de la camarera no solo con los clientes sino con los propios trabajadores. Chillando y riñiendo delante de todo el local. Las patatas crudas, el sandwich con tomate a pesar de avisar de que era alérgica. Hacer una hamburguesa de solo pan y carne, una hora! Aún estando el local vacío. Nos quejamos y su respuesta fue clara y desagradable "haber salido antes de casa si tenéis prisa". Todo esto en agosto al venir de un viaje, no me puedo creer que a día de hoy esa misma chica siga allí. Nosotros tuvimos que pedir una hoja de reclamación, la primera en mi vida. Desastroso!

El local en sí está bien, pero 1.45 por un café con leche me parece de sobra, y si no te ponen nada de picar ya me parece demasiado.
Para colmo, no hay servicio de mesa hasta las 12.00 y a la persona que atiende a las 6.30 de la mañana no le debe sentar bien madrugar. Es borde, da contestaciones poco apropiadas y en los 10 minutos que estuve allí lo único que hizo fue hablar mal de los peregrinos que pasan por el local (no debe darse cuenta de que son los que pagan su sueldo) y decirle a unos clientes jóvenes de muy malas maneras que a esas horas no prepara nada caliente. Desde luego, por la ubicación en la que está, la atención debería ser un poco mejor. Y por el precio que tiene también. Lo peor, que es el único local abierto a estas horas.

Pedí una hamburguesa y el pan estaba durísimo.después, otro día, fui a pedir un café, que en la foto aparecía con leche condensada, y me pusieron un capuchino.la dueña tiene una mala leche con los empleados y cocina.
No me gustó, lo único que se puede pedir que está bien es café con leche pero no mucho más por qué es malísimo.si sigue abierto es por su ubicación

Buen sitio para tomar algo. Acogedor. Temático sobre cerveza, predomina la madera. La camarera vino y nos preguntó que deseábamos beber. Pedimos dos refrescos y mientras estudiamos la carta. Esperamos a que regresase pero como teníamos prisa para coger un tren me levanté para pedir en la barra, la camarera me vió y me dijo que ya venía ella a tomar nota a la mesa. Vino enseguida. Preguntamos que tenían para tomar rápido, ya que teníamos que coger un tren en muy poco tiempo. Nos recomendó tortilla y ensaladilla. Aceptamos, se dirigió a la cocina y le pasó el pedido a su compañera, añadiendo que tuviera en cuenta de que teníamos que coger un tren. Trajeron el pedido enseguida. Nos dió tiempo a comer, disfrutar del sitio, y coger el tren con tiempo.

He estado muchas veces, y siempre tuve buenas experiencias buen trato por parte de los camareros, sitio tranquilo para esperar tren o esperar para ir al cine. Hay bastante quejas sobre el personal siempre me han atendido bien sin faltarme al respeto. En caso que asi fuera, dia malo tiene cualquiera y mas trabajando con personas que cada persona es un mundo y mas en una estación de tren que viene gente de muchos sitios. Muy recomendable

Despues de toda la semana en Pontevedra, en cualquier establecimiento de restauración con cualquier consumición te ponen un pincho dulce o salado, MENOS EN ESTE, es caro y un trato con el cliente no demasiado agradable, ojo, si pides hielo te lo cobran aparte!

Menú peregrino pésimo, poco y malo, nada recomendable, ademas si lo pides en la terraza un euro mas, no se lo recomendaría ni a mi peor enemigo, además de todo nos han exigido la credencial para poder optar al menú, en cuanto lleguemos al al albergue hablaremos con el dueño para que quite su publicidad. Me ha fastidiado todo el buen rollo que llevaba acumulado del camino, nos hemos sentido estafados.

Vinimos atraídos por el menú peregrino y es una estafa, comida de baja calidad y muy poca cantidad. Ni volveria, ni lo recomendaría a nadie.