Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Un sitio acogedor, parece que estas en tu casa, muy limpio un trato excelente y muy familiar, la dueña y el personal, sensacionales, y muy detallistas, gracias, desde albacete.
Lo mejor que tiene es la limpieza, el precio y la ubicación para ver Rías Baixas. Lo peor la cama, era tan dura que no se podía dormir, los enchufes y interruptores estaban en otra pared, cada vez me tenía que levantar para apagar la luz. El Fin de semana abre el restaurante y se sentia muchísimo el ruido hasta muy tarde, ya que nuestra habitación estaba mirando la cara al río, donde estaba la terraza del restaurante.
Lo regentan una señora mayor con su nieta y son encantadoras. Lugar muy cuidado y limpio. La piscina todo un lujo. Relación calidad precio insuperables
Es un hostal muy recomendable si viajas en tu coche y sólo quieres un sitio donde dormir mientras visitas la zona. Está en una zona tranquila y tiene un gran aparcamiento. La habitación que nos dieron era muy amplia y silenciosa. Todo estaba limpio y los muebles, sencillos, cumplían su función. El baño estaba muy bien. Destacar que las ventanas tienen persianas, algo poco habitual en hoteles y hostales, y que yo valoro mucho (aborrezco los típicos cortinones que no amortiguan ni el sonido ni la luz). La relación calidad-precio muy buena. El único "pero" es que no sirven desayunos, aunque hay una cafetería en la que se puede desayunar a unos dos kilómetros de distancia. Eso sí, es imprescindible disponer de vehículo propio para moverse por la zona.