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Hermoso lugar con una gran cocina y jardín. Personal agradable. Queerfriendly :) ¡Y especialmente una bañera en cada piso! Necesitaba un baño al final de mi Camino, ¡y gracias por ello!
El mejor hostel de Santiago! Si queres un lugar para descansar, conocer gente y compartir grandes momentos es en el Meiga. Gracias a Jorge, Paula y todo el equipo!
Hostal realmente bonito y acogedor! Había una gran zona comunitaria y un jardín con hamacas. También un gato muy lindo llamado jueves. El servicio fue muy amable y servicial, la cocina tenía todo lo que necesitábamos (incluida una lata de espresso). ¡Definitivamente regresaré a este albergue la próxima vez que esté en Santiago!
Hostal a menos de 10 minutos de la catedral, no utilicé las zonas comunes así que no puedo valorarlas, estaba en el último piso, dormitorio 301, tres literas más una cama individual, solo un baño con ducha (un poco viejo y pequeño), por piso, hay dos dormitorios en cada piso. Solución limpia y decente para una noche si no tienes demasiadas expectativas.
Es un albergue encantador, muy acogedor y que recomendaría a cada persona que llega a Santiago con ganas de compartir, pasar el rato con otros viajeros, con los voluntarios y el personal. Tiene un jardín muy bonito, con hamacas, un gatito (jueves) muy agradable y hermoso que va siempre a su rollo y no molesta. Siempre me he encontrado todo muy limpio y ordenado. Las vistas son espectaculares desde todo el albergue, sobre todo de los atardeceres. También es un buen sitio para pasar el rato cuando la lluvia no da tregua. Por dentro y por fuera el Meiga respira el arte. Tiene muchas pinturas, en zonas comunes, habitaciones, baños, lo cual hace que haya un gran ambiente. Dispone de varias guitarras para quien quiera compartir un poco de música, y de seguro siempre encontrarás alguien que quiera tocar contigo, o simplemente disfrute de escucharte tocar. El personal es muy majo, muy atento y dispuesto a solucionar cualquier inconveniente. Hemos compartido comidas, charlas y diversas actividades. Realmente me he sentido como en casa, iba a quedarme dos noches y terminé pasando dos semanas. Muchas gracias a todxs y espero verles pronto
Un gran lugar para relajarse. Hay una gran cocina y un hermoso jardín. Está limpio y bien organizado. El propietario es muy abierto y servicial con los problemas. ¡Te sientes muy seguro en todo el albergue! Gracias por el buen momento. Me encantaría volver
El albergue Meiga fue una GRAN experiencia para mis hermanos y para mí. Era la primera vez que nos alojábamos en un albergue junto con un "desconocido" y no podría haber sido mejor. Gran lugar para atardecer en el jardín para ver la luz desaparecer detrás de las montañas. Estaba muy limpio y el personal trabaja muy duro para mantenerlo limpio. El personal fue muy amable y servicial. Paoula es la mejor e hizo todo lo posible para cuidarnos. Gracias de nuevo chicha:) Era un ambiente muy asequible, acogedor, confortable y con los pies en la tierra. Un gran jardín y el ambiente ideal para conocer gente. Tanta gente amigable. 10/10 experiencia en albergue. Absolutamente volveré cuando esté en la ciudad nuevamente.
Estuvimos en el segundo piso. Dos habitaciones por piso, unas dieciseis personas (solo literas y una caja metalica, ni siquiera un taburete para poder sentarse). Solo un cuarto de baño para las dieciseis personas.
Albergue caro, con respecto a instalaciones, habitaciones de 8 camas con un baño en cada planta para 16 personas. Baño como el de casa, pero más básico, sin percha, ni taburete, ni nada. Agua por todos los sitios, limpieza escasa. Se abandona la habitación a las 11, si no sales a las 11, entra la mujer de la limpieza sin llamar. Muy alejado de la catedral
Todo lo que pueda decir de este albergue es poco, me han dado ganas de quedarme a vivir aquí, la gente increíblemente acogedora y simpática, es muy bonito y un jardín perfecto para pasar unos bonitos ratos, los baños muy limpios e individuales, la cocina muy grande y con comida para poder usar gratis, he llegado tarde porque tenía mal la pierna y he avisado por teléfono y me han dejado hacer la recepción más tarde. Sin duda lo recomiendo muchisimo
Es un albergue al que no volvería, el más caro de todo el camino, después de llegar con casi 40°C andando nos subieron a un altillo a la tercera planta con colchones y almohadas de plástico, hacía un calor infernal, una ducha con el WC en el mismo habitáculo para 7 personas, la bañera descascarillada, por la mañana estaba sucísimo, pedí un ventilador y me dijeron que abriera la venta a ver había un poco de corriente, no pudimos dormir del calor que hacía. Lo único bueno es que había una chica muy amable y nos dejó dejar las mochilas allí hasta que salió nuestro autobús
Jorge, el dueño nos ayudó en todo lo que necesitábamos! Muy buenos consejos sobre la ciudad. Nos encantó este hostel tan acogedor, me sentí como en casa. El jardín es espectacular y acogedor. Camas muy cómodas y todo muy limpio. Aunque nos íbamos más tarde, nos dejó dejar las mochilas allí. Repetiría sin duda.
El Gerente es un encanto de persona. Habitaciones normales que cumplen su función. Muy originales los murales y la terraza para relajarse. ¡Gracias por todo!
Consideramos q es demasiado caro para lo poco q ofrece. Está súper chulo el patio con las tumbonas, la habitación en la q estuvimos, era solo de 4 personas y eso tb está bien, cocina grande y amplia equipada fenomenal, pero demasiado caro a nuestro parecer
Peregriné en agosto 2022. Cinco estrellas por la amabilidad y honradez del recepcionista. Me dejé el móvil en la entrada y me lo guardó para dármelo. Que Dios le bendiga! El único pero: que 3 baños para todo el albergue creo son insuficientes. Consejo: cambien la decoración psicodélica-hortera y más protagonismo al Apóstol
Hostel amplio y muy agradable Buena atención Cocina con todo lo necesario si quieres hacerte algo de comer. Un amplio salón Patio con amacas para pasar la tarde Decoración muy chula
Este albergue es un lugar privilegiado en Santiago a 10 minutos del centro, te hacen sentirte como si estarías en casa. Además, la atención tanto de todo el equipo; Jorge, Iban, Rosa, Jueves y Matías es excelente.
Excelente hostel, muito bem localizado em São Tiago de Compostela, o local perfeito para finalizar o Camino! Bons áreas comum, camas confortáveis e jardim exterior, a 2 minutos do centro. Recomendo
El hostel mol be pero em va tocar un noi frances que portava sense dutxar-se molts dies anava mol borratxo i feia molta pudor, crec que com a hostel aixo s'hauria de mirar ja que no dorms sol i es una mala experiencia per els companys.
Las instalaciones están bien para el precio que tiene y el trato es bueno. Sin embargo, no se descansa muy bien. Por alguna razón, hay gente gritando por las escaleras o pasillo por la mañana y por la noche que nos ha despertado varias veces. Además, me crucé con varias personas sin mascarilla en el interior.
No es lo que publicitan en la foto, le hace falta una limpieza a fondo y algún detalle más, no tienen ni una papelera en un cuarto para 6 y sólo un baño completo para dos habitaciones de 8,6 en época covid.decepcionante.
Estupendo alojamiento a un paso del centro y en una zona sin ruidos para un estupendo descanso. Camas cómodas y habitaciones espaciosas. Geles hidroalcohólicos por todo el hostel y desinfección continua de zonas comunes. Tienes a tu disposición una amplia cocina y salón, así como un jardín estupendo con tumbonas, sillas y hamacas. Jorge, te hace sentir como en casa y te facilita todo tipo de consejos y recomendaciones para conocer Santiago a fondo. Volveré sin duda!
Hostel 100% recomendable. Ubicado muy cerquita del centro y en una zona tranquila para poder descansar. Camas muy cómodas, en estos tiempos que corren manteniendo distancia de seguridad y con geles hidroalcohólicos por todo el hostel. El chico que está a cargo es súper atento y cordial y te explica y conseja rutas, sitios para comer y beber, etc. Dispones de todas las comodidades, incluyendo un jardín super acogedor que hace las delicias de cualquier turista. Limpio, cómodo, económico y bien ubicado, qué más se puede pedir!
Ho soggiornato qui due notti e mi sono trovata benissimo. Dista a circa un chilometro dal centro ed é molto vicino alla stazione dei bus. L'ambiente é molto accogliente e pulito e i ragazzi che lo gestiscono sono super gentili e super disponibili. Dispone di cucina attrezzata con tutto il necessario, di una sala soggiorno per rilassarsi e un piccolo giardino esterno. Prezzo molto economico.
Esta muy bien ubicado, a 10 minutos andando al centro, el staff súper copados, tiene una buena sala de estar y cocina. Los cuartos son grandes y comodos
Lindo hostel. Atencion excelente de Iván y su equipo. Te sentís como en casa. Buena cocina. La pasé muy bien. Se ñlega muy facil desde la terminal de buses y queda cerca de la catedral. Buena relacion precio/calidad Lo recomiendo.
La tapa del váter se me caía en la espalda. Además, podrían poner algún perchero más en los baños y proporcionar una toalla a los huéspedes ya que facilitaría en gran medida su estancia. Por otro lado, el personal es muy amable.