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Comida espectacular, pulpo, mejillones, croquetas y postre de 10. Muy amable y atentos. Comimos en la terrazas ya que íbamos con nuestros dos perros, todo estupendo.
Tras no encontrar sitio en Leiro para comer ni de camino a Carballiño, encontramos este sitio, si bien tardaron un poco en atendernos y tocó en mesa de terraza con algo de ruido, la comida bien y el trato bueno a precio asequible.
La comida un 10. Nos sentamos dentro y notamos una mala extracción, olía demasiado a cocina. La camarera que nos atendió fue muy amable y educada, el problema vino con la cuenta. Éramos 6 y sólo una persona pidió menú, comió solo un plato (no tenía hambre para comer los dos) y postre. Pedimos refrescos, agua grande y media jarra de vino. En la cuenta la bebida del menú (coca cola) la cobraron a parte y no se les ocurrió meter el agua y/o el vino que se supone que entra en el menú aunque no lo tomara la persona que lo pidió. La camarera que nos aclaró las dudas con la cuenta fue borde y se sintió ofendida cuando le dijimos que creíamos que algo no estaba bien. Fue una manera innecesaria y cutre de quedar mal teniendo en cuenta, además, que se estaban ahorrando un plato del menú y estaban cobrando el menú entero que, en la mayoría de sitios cobrarían medio menú. Una pena porque la comida estaba espectacular y la relación calidad-precio es buena.
Espectacular, chuleton de primera, bacalao a la portuguesa increíble, el trato de los dueños te hacen sentir como en casa. La relación calidad precio maravilloso. Volveré segurisimo. Recomendable 100%.