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Precioso, una maravilla poco conocido. Pero está muy lejos, necesitarás ir en coche y tardarás bastante en llegar. No suele haber aparcamiento, a no ser que pagues
Una estancia que no me decepcionó. Es cierto que iba con las expectativas muy altas y esto suele generar alguna que otra contrariedad. Puedo decir que es de los mejores alojamientos que he tenido en mi vida. El edificio ya tiene una singularidad que es fruto de muchos siglos de historia, pero es que la reforma es del nivel del edificio original. El cuidado de los detalles, de la decoración y la pulcritud de los espacios. Aunque siempre hay detallitos mejorables, vamos a dejarlos en la recamara. Servicio del nivel de Paradores (excelente), la comida muy correcta (sin llegar a ser de un restaurante de máximo nivel), el entornos es único y espectacular con muchas posibilidades de ocio al aire libre. Volvería una y mil veces, un 10.
Un parador muy recomendable. El personal muy amable y profesional, la comida extraordinaria, con productos frescos y de calidad, con una esmerada elaboración.las instalaciones muy cómodas y funcionales. Y un verdadero lujo todo el edificio. Los alrededores pura naturaleza, paz y serenidad.
Es muy bonito y espectacular Tiene 3 claustros a cada cual más bonito El entorno es mágico Se pueden hacer varias rutas por el entorno Es una visita obligada
Monasterio centenario, totalmente restaurado y convertido en Parador. En un lugar apartado y solitario se encuentra este majestuoso monasterio que puedes visitar aunque no estés alojado. A la entrada hay un pequeño y antiguo cementerio. La iglesia tiene dos vidrieras de llamativos colores y un bonito retablo. El claustro principal es una joya (ahora está cerrado con acristalamientos porque acoge habitaciones y zonas comunes del hotel) y hay otros 2 más pequeños pero muy bonitos. En la parte trasera, a la que se accede por dentro de la cafetería, hay un pequeño bosque con árboles autóctonos (castaños y robles) con senderos en donde parece que el tiempo se ha detenido.
Es un parador de aquellos que ofrecen algo especial. Está situado en lugar espectacular, con unas espléndidas vistas de bosques y del río Sil, al fondo.
En la carretera un miembro de protección civil hablando por teléfono y a la vez impidiendo el paso al monasterio, además de esto muy mal educado deja aparcar y pasar a quien a el le parece. Al final no pudimos visitar el monumento por el impresentable de protección civil que pusieron en la carretera. Así se quiere mejorar el turismo.
Só visitei. A localização não era o que esperava, não se consegue ver o canhão do Sil e o final do caminho desde Sober até ao mosteiro foi bem difícil. Quando chegamos perto, a protecção civil obrigava a deixar o carro na estrada, a mais de 600 m do mosteiro, com elevado declive, o que para idosos é penoso. Por fim não vimos a igreja porque estava fechada e era Domingo!
Lugar grandioso y espectacular. Visitables los 3 claustros y la iglesia. A destacar, el restaurante del Parador y las habitaciones con una decoración que se integra muy bien en el monasterio.
He tenido la suerte de verlo cuando estaba en ruinas y ahora con la restauración terminada. Me encanta lo que han hecho con él. Han respetado la esencia y la historia del lugar poniendo en valor cada pieza, cada anécdota, cada rincón. El resulta entona perfectamente con los alrededores y la atención en el restaurante es de 10. No he disfrutado del alojamiento, pero las opciones de turismo que ofrecen a los residentes en la entrada me parecen fabulosas. Un mérito de Paradores que hay que reconocer y valorar.
Se accede a través de una carretera estrecha, en algunos tramos muy estrecha teniendo que ceder el paso. Justo al lado del monasterio hay un parking, pero no tengo muy claro que no sea exclusivo del Parador.
En según que épocas del año el acceso hasta el parking esta restringido y se ha de dejar el coche arriba.
Aquí podemos visitar por un lado la iglesia de Santo Estevo de Si y por otro el Mosteiro de Santo Estevo de Ribas de sil, actualmente un parador.
Del Mosteiro no se puede visitar todo, sino ciertas partes que están abiertas al público ya que el resto es un parador y por lo tanto privado. Podemos visitar los claustros, y además cuando nosotros lo visitamos hay una exposición de la historia de Barreriros Diesel, productor de automóviles.
Espectacular lugar, es un parador y vale la pena visitarlo sin duda, el acceso empinado hasta el mismo si hay mucha afluencia es complicado y estrecho, hay parking abajo pero creo que solo para los alojados, sino hay 4 plazas contadas abajo, mejor dejar el coche antes de la pendiente
Monumento de imprescindible visita na ribeira sacra. Ocupado como parador nacional é visitable gratuitamente en gran parte, sobre todo a mais interesante como son os claustros ou as escaleiras. Ten bar e restaurante de acceso libre. A conservaciòn do edificio é impecable.
Magnífico, un entorno fabuloso y mágico. El personal es muy atento y amable, desde la recepción, pasando por la cafetería hasta el personal de limpieza. El spa está muy bien, lo mejor es el jacuzzi al aire libre disfrutando del paisaje. La habitación es confortable, camada muy cómoda. 100% recomendable.
Quizá el Parador más espectacular por ubicación y por ser un convento de los mejores conservados y de los más amplios que conozco. Alojarse en este entorno es una experiencia única que hay que hacer al menos una vez en la vida. Muy recomendable visitar alguna de las bodegas y viñas de la Ribeira Sacra para entender el trabajo y sacrificio de trabajar en ese terreno. Una pasada!
Me gusta mucho ir a conocer paradores. Este lo había visitado hace años. Esta vez con un cafetito incluido. Que puedo contar.el parador precioso y el servicio como siempre en los paradores de España, un 10
Como guía turístico en proceso, me encantó visitar la iglesia y contarle a mi acompañante la maravilla de estilos arquitectónicos que se pueden encontrar.
Las instalaciones son dignas de formar parte del grupo de Paradores. Excelente.
Si buscas tranquilidad es un lugar excepcional. El parador es una verdadera pasada, instalaciones, limpieza, el personal es 100% profesional, un trato exquisito desde que llegas hasta que te vas hacen que te sientas como en casa o mejor. Enhorabuena a todo el equipo.
Precioso, un enclave privilegiado Una lástima que no admitan animales de compañía, no entiendo esta actitud retrógrada Cual es el problema, hay animales de patas que son peores y permiten el acceso
Unos Indiana Jones a la gallega buscando anillos. Claro que vinimos al Parador / Monasterio por el libro "El bosque de los cuatro vientos" y claro que estuvimos buscando los anillos de faltan de los otros 5 Santos Obispos por los alrededores, solo faltaba. Nos imaginamos por momentos en el altar mayor descubriendo los 4 anillos que ya se encontraron y todo el tiempo dentro de la trama del libro. Todo muy bonito, pero nosotros venimos por el libro.
Enclave único situado en la Ribeira Sacra, Cañon del Sil, precisamente cerca del embarcadero de Santo Estevo.monasterio con mucha historia.construido entre los siglos XII y XIII, restaurado y ahora en propiedad de Paradores de España.podrás comer bien y dormir, en plena naturaleza y rodeado de mucha paz y tranquilidad, realizar varias rutas de senderismo por parajes impresionantes.también disponen de parking.
Hermoso lugar, increíble paz y tranquilidad. La atención es excelente, se puede comer a un precio muy razonable y con un gran servicio. Lugar muy recomendable, vale la pena acercarse hasta ese paraje casi al final de la Ribera Sacra
Es un edificio precioso y muy bien conservado. Me ha gustado mucho como se ha incluido el parador sin estropear su imagen. Esta enclavado en un lugar muy curioso, en medio de tanta naturaleza. Merece la pena su visita.
Si vistas los (fiordos Gallegos) los cañones del sil es obligatorio perder unas horas y disfrutar de este gran monumento y su encanto, Aviso peligro de ENAMORARSE️️️️
Sin duda un monasterio asombroso y con una historia increíble en cada uno de sus claustros y mas a nosotros que nos encanta la historia. Sobretodo es de admirar la ingeniera de estos monjes para tener una piscifactoría en un claustro el cual aprovechaban el agua del rió sil y volvían a sacar el agua por otro agujero del monasterio para que estuviera en constante movimiento y así poder dejar los peces que pescaban ahí y asegurarse comida. El punto negativo o como quieras verlo es que le dejamos un 4 ya que la restauración cuando nada mas entrar ves la cristalera de enfrente, eso no quita que te asombres con el claustro pero le quita belleza, pensamos que se podría haber restaurado con otra idea (eso si para gustos colores). Lo ultimo que no podemos dejar de decir es que para nosotros las vistas del miradoiro do Castro al Monasterio de San Estevo son increíblemente bonitas ya que te deja a una vista de pájaro espectacular y puedes visualizar toda la belleza que rodea el entorno de este parador.
Marivilloso lugar, ahora el Monasterio, convertido en Parador, ofrece unas estancias muy recomendables a quienes quieran disfrutar del encanto de la Ribera Sacra
Genial. Un sitio precioso. Nos perdimos (ese GPS que tengo) y fuimos por una carretera secundaria. Llena de curvas, atravesando un bosque húmedo. Solo faltaban las Meigas.
Su restauración ha sido espectacular. Enclave precioso para pasar unos días. Sus tres claustros tienen cada uno su particular fin e historia. Fuimos al restaurante y el servicio es normal, por debajo de lo que se debería esperar en un Parador. Es lo que tiene el haber puesto gestores mediocres al frente.
La comida genial, atención magistral, todo muy bien, las habitaciones muy cómodas aunque como sucede en casi todos los Paradores, un poco viejinas en algunos aspectos (baño).
Es un lugar mágico. Situado en un enclave privilegiado de la Ribeira Sacra. Conversión magnífica de este monasterio en un hotel. Transmite paz, Sosiego, tranquilidad, quietud, serenidad. Perfecto para visitar la zona, descansar y disfrutar de la buena vida.
El Monasterio de Santo Estevo de Ribas de Sil es un monasterio benedictino, situado en pleno centro de la Ribeira Sacra, es uno de los más importantes de Orense y casi de Galicia entera. Se encuentra situado en la ladera izquierda del río Sil y pertenece a la parroquia del Santo Estevo. Su origen, eremítico, se remonta al siglo VI aunque su existencia está probada en el siglo X, en el año 921.
El Monasterio se compone de tres claustros, entre ellos el claustro Dos Bispos construido en el siglo XIII en honor de los obispos santos yacentes. El claustro pequeño que consta de dos cuerpos y se encuentra situado al norte del de los Obispos y el claustro de la portería o grande, situado a la entrada del Monasterio, al lado de este está la escalera cubierta con una bóveda.
La Iglesia del Monasterioalterna el estilo románico y el barroco y es donde está situado el cementerio parroquial. Tiene una fachada en ángulo recto de estilo barroco y en su escudo hay reflejados nueve mitras en honor a los nueve obispos aquí retirados. Tiene una planta basilical, con una nave central estilo romano con tres ábsides, toda ella cubierta por una bóveda de crucería. Antiguamente tenía una bóveda de madera que fue retirada en el siglo XVI. Los dos ábsides laterales tienen aspecto de torreón al haber sido modificados. El edificio fue declarado Monumento Histórico Artístico en el año 1923. Hoy se ha convertido en parador El Parador Santo Estevocuenta con un total de 77 habitaciones, son todas diferentes, algunas con vistas de los Cañones del río Sil.
El Mosteiro de Santo Esteban de Ribas de Sil, se encuentra en la localidad de Santo Estevo de Ribas de Sil, perteneciente al municipio orensano de Nogueira de Ramuín, en la comarca de la Ribeira Sacra. Si bien hay constancia que el monasterio existía en el siglo X, ya que la primera documentación escrita en que se nombra data del año 921, sus orígenes parecen remontarse a los siglos VI y VII. En este monasterio, que estuvo ocupado por la Orden de San Benito, se alternan estilos desde el románico al barroco y cabe destacar los tres claustros (románico, gótico y renacentista). Tras su restauración, en el monasterio se ubicó, en el año 2004, el Parador de Turismo de San Estevo. Junto al monasterio, formando un ángulo recto, se encuentra la iglesia de Parroquial de Santo Estevo de Ribas de Sil, de estilo románico, edificada entre finales del siglo XII y principios del XIII.