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Comida deliciosa, incluso a las 11 de la noche, la chef fue increíble. Ni siquiera pensábamos que la cocina estuviera abierta en ese momento, pero nos llevamos una grata sorpresa.
Como la panadería de enfrente estaba cerrada (9 de la noche) este es el bocadillo, a la cocinera se le escuchó gritar que este era el pan que quedaba. Pan chicloso, calamares totalmente sosos e insipidos
Cafetería normal con buen ambiente para ver el fútbol sobre todo. Son los días que más pinchos ponen con las bebidas. Precio normal pero cocina regular.
Malísimo tanto la comida como la atención por parte del que me entere era el jefe (antonio) hace unos dias fuimos a este bar pedimos cafe y una tosta de jamón el pan venia duro y con un sabor desagradable jamón apenas llevaba y el que llevaba tenia un color raro y sabor incluso peor, para mas el camarero que nos atendio, el jefe nos tiro el dinero en la mesa de mala forma y se dedicaba a andar gritando y diciendo palabras muy poco adecuadas para un bar familiar y en el que hay niños
Teñen menú do día, con varias opcións a elexir, agora no inverno un dos primeiros sempre é de culler, e excepto os platos de culler, preparan todo no momento. Tamén teñen carta con tapas, racións, tostas, bocatas e hamburguesas. O raxo e a tortilla están de vicio. O trato sempre é amable. Teñen terraza, no verán é máis ampla.
No puedo hablar mal de este sitio pero tampoco darle grandes alabanzas, la comida es aceptable, los precios muy económicos y la atención recibida por los trabajadores habría que dividirla a partes iguales, una persona te habla muy bien y te trata como te mereces, con respeto y dedicación a su clientela y la otra pues siempre está quejándose protestando y diciendo frases más bien poco amigables.
La atención de los camareros excelente (Nico y Jose). La comida no hay por donde cogerla, siempre es una sorpresa de lo que te puedas encontrar. Otro camarero que hay, es un poco maleducado y siempre tiene alguna respuesta fuera de tono. Es una pena porque el sitio es bueno para explotarlo pero le falta mucho por mejorar yo hacer cambios con la cocina.
Somos clientes habituales, íbamos a cenar fácilmente una vez a la semana hasta que nos empezó a sentar mal la comida generalmente por exceso de aceite, el trato es bueno cuando están Nico y Jose, la atención de la cocinera y su educación dejan mucho que desear por no hablar de la comida que progresivamente fue perdiendo calidad, aunque fueron aumentando los precios, hasta que finalmente (como comentaba antes) nos termino por sentar mal. También hubo un día que pedí que me hicieran un bocadillo a medio día, la respuesta fue un NO rotundo y dije que me iría a otro sitio, ahí la persona que me atendió (Antonio) reculó al decirle que me valía un bocata de jamón y queso, me lo hizo y cuando me lo fui a comer tenía una loncha de queso y una loncha de jamón, pague 4 euros por ese bocadillo. Podría seguir con más cosas pero nos estamos planteando si vamos a seguir yendo o no.
A pesar de ser clientes habituales, nos han dicho que no iban a montar más mesas en terraza, cuando solo había que bajar 3, Taburetes de las mesas, y por supuesto me he ido sin consumir. No me parece logico
Bar tipico para gente de la propia ciudad. Buenas tapas y raciones (pedimos tapa de tortilla y trajeron una tortillita recién hecha muy buena) servicio atento y ambiente del lugar.
Establecimiento de hostelería con precios económicos suelen poner una tapita con la bebida y el trato es bastante cordial. No tuvimos ningún problema en las dos veces que fuimos, es más las copas que nos sirvió el camarero fueron bastante generosas.
La cocinera es una impresentable. Nos acusó en medio de la calle de no haber pagado incluso pidiéndonos más de lo que realmente era la cuenta. Cuando entramos nuevamente en el restaurante para arreglar el malentendido se disculpó de muy malas maneras. Además la comida no es cosa del otro mundo, es más, al día siguiente de cenar allí hemos estado bastante mal del estómago.
Paramos aquí a cenar. Había leído que con las consumiciones ponían un aperitivo, pero ese no fue mi caso. Pedimos 2 raciones y nos fuimos. No me convenció
Pasándose por el forro la limitación de mesas en terraza, según la legislación vigente. Lo malo que por culpa de estos "personajes" Volverán a cerrar la hostelería. Un sitio al que no volver más.
Camarero más seco imposible. Ambiente de funeral. Punto positivo que los precios están bastante bien. No ponen absolutamente nada con la consumición, ni unas míseras aceitunas para picar. Única y exclusivamente lugar ideal para tomar el café rápido e irte. No volveré salvo causa de fuerza mayor
Popular. Se come bastante bien, tiene una oferta variada para ser un bar de barrio. No le pongo más estrellas porque ni la decoración merece más ni el ambiente es tranquilo.
Bar de ambiente familiar, tienen pantallas para ver eventos deportivos, al pedir bebida te dan pinchos (eso siempre es un plus), son muy amables. Fuera del local tienen lugares para sentarse.
Antes eran amables, te ponían un buen pincho con cada consumición y te daban ganas de volver.pero ahora ha cambiado mucho, te atienden cuando quieren, el pincho se lo ponen a algunos clientes pero no a todos, y si pides algo de la carta entonces ya despídete del pincho. En cuanto a la cocina, también era mejor antes. Una lástima.
Terraza acogedora, recogida y soleada en una calle no muy concurrida dónde puedes disfrutar de la tranquilidad tomando algo, ya sea sólo o en grupo. El personal encantador, muy atento y 100% disponible.