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Encarguei unha empanada de calamares dun día para o seguinte. Dixéronme que ás 11 estaría lista. Fomos á 13 e dinme que esta no forno, que volva en media hora. Ao volver, atopámonos recoñecennos que se esqueceran de facela. Ao comela nos atopamos unha empanada, de cebola, con auga que indicaba que se desconxelara xa dentro da empanada, (que facía que se desfixese a masa) e con catro calamares pola que nos cobraron 19 euros o quilo. Unha falta de profesionalidade e respecto.
El día 29 les encargué dos tartas de Santiago para recogerlas hoy, día 31. Cuando he llegado, a las nueve y media de la mañana, me han dicho que no las han podido hacer.y se han quedado tan anchos. No volveré.
Todo espectacular: los panes (recomiendo probar el de hamburguesas), las empanadas dulces (de manzana) y los pasteles y tartas. Hemos probado seis o siete distintos estos días y a cuál de más calidad (el bizcocho esponjoso, el hojaldre fino y crujiente, la nata, la crema, la yema.). María tiene una mano increíble para la pastelería, todo es elegante, nada empalagoso. Este fin de semana probaremos las empanadas, estamos seguros de que serán igual de buenas. Si estáis por Muros o Louro, no dejéis de pasar por esta casa. De diez.
El pan muy rico, lo único que la situación del establecimiento no es muy céntrica e ir adrede y a diario siempre cuesta, sobre todo en verano. Bastante amables.