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Siempre que vamos es nuestro sitio para desayunar o tomar algo. La atención es buena y los pinchos están riquísimos. La verdad es que no tenemos queja de nada. Un sitio para repetir.
Impresionante el servicio, la atención, y la calidad. Todo recién hecho por ellos mismos y riquísimo. No os podéis ir sin probar el croissant de chocolate blanco y las palmeras de chocolate.
Pongo una estrella por que no puedo poner menos pero la atención del camarero me parece de muy mal gusto muy mal educado y si no eres conocido el trato no es el mismo tienes que consumir mucho aunque vayan dos personas para q te pongan un pincho que le ponen a todo el mundo
Un día pasamos de casualidad a comprar pan y resultó que tenían alfajores. No es algo comun en galicia así que siempre que andamos por la cañiza pasamos a comprar alfajores y estan muy buenos, se nota que son caseros. Las tres veces que hemos pasado por la panadería siempre han tenido alfajores así que seguiremos yendo a buscar más
Una de las cosas importantes en hostelería es la limpieza no se cómo será el producto pero solo nos tomamos un agua porqué estaba el mostrador y el local poco higiénico
Todo lo que hacen está buenísimo: pan, pizzas, bollería, café, bocatas. Además, lo dueños son encantadores. Para nosotros es un fijo de casi todos los días.
Una experiencia nefasta.llegas a la mesa y estan todas sucias y hasta con bichos.tardan 1h en atenderte y encima los camarer@s son bordes y desagradables para el trato cara al público y encima se ofende si te levantes y te vas despues de que nadie te atienda
Salimos con buen sabor. Muy buen producto, hecho con cariño. Café rico, desayunos variados, comidas y cenas. Leche de avena! Siempre es un buen sitio para parar de camino. Trato amable y, en especial, con peques.
Un sitio fantástico. Muy bueno tanto para desayuno, comida, cena o, simplemente, para tomar algo. Habitualmente, sirven tapas muy abundantes con las consumiciones. Las opciones incluidas en la carta son abundantes y a precios muy económicos. El trato es agradable y cercano y el ambiente del local acogedor.
Este si que se lleva la palma de tosa las reseñas, la comida excelente especialmente el jamon asado, el pan un vicio, el oersonal my atento y amable y los gerentes exceltes personas, lo recomiendo mucho, no te dejes de pasar si vas por A CAÑIZA.
Entramos nos sentamos, después de 5 minutos nos dice la camarera que viene, entra una señora se sienta pide y le traen un café nosotros con cara de tontos mirando para el dependiente que hay allí, y si no fuera poco coge la comida con las manos (sin guantes) para ponerla en el sitio. Ante tal situación nos vamos. ️
Fran, nosotros estuvimos hoy y pésimo aquí el pincho lo pagas en la consumición por eso es más caro pues si no te conocen lo ponen en todas las mesas q ellos conocen a la gente y te dejan con cara de tonto y encima el camarero bastante borde y pésimo trato así q si venís por a cañiza hay muchos bares y buenos este para nada recomendable
Después de hacer un encargo el día anterior resulta que cuando fui a recoger a la hora convenida habían vendido una de las empanadas que había encargado teniendo que volver a casa sin lo que había encargado
La atención al cliente genial, lo recomiendo a todo el mundo, está genial, bien situado y sobre todo, los dulces y todo lo demás está de muerte, para comérselo, le doy un 10 sobre 10.
El Camarero-Dependiente persona desenvuelta, competente y agradable, lo mejor del local se ve que disfruta con su trabajo. El local desde la reapertura pésimo tanto el pan que bajo mucho de calidad, y las pizzas la última cruda, el aspecto de las vitrinas y del local Pésimo, la terraza no merece ni nombrarla.
El 9 de diciembre de 2018, nos atendió una camarera llamada Ana, quien tardó más de media hora en venir a atendernos, a pesar de no estar haciendo nada. Durante nuestra estancia en el local, pudimos comprobar como varias personas decidieron irse a otro sitio al tardar en ser atendidas. Esta señora, en vez de servir a los clientes, estaba con el teléfono móvil o pendiente de un señor no identificado, el cual salía y entraba de la cocina/barra. Esto no es todo: cuando pedimos una pizza para llevar, nos acabamos encontrando con que el bacon estaba crudo y la parte de atún estaba bañada de aceite, sumando que tenía demasiado queso. Esta camarera no sólo nos hizo mal la pizza y nos atendió mal, sino que su actitud hacia la clientela es áspera y cortante. Hemos decidido que solo vendremos cuando estén camareras como Patri y/o Susi, dado que ellas si nos dan un trato agradable y nos atienden como es debido, de muy buena gana.