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Fue una experiencia inolvidable, una explosión de sabores, un ambiente cálido y por sobre todo la atención fue increíble. Absolutamente todo excelente.
Si estás buscando un lugar para disfrutar de la deliciosa cocina gallega en un ambiente acogedor, la Taberna Galega Pan de Millo es una excelente opción. Este restaurante, ubicado en Coiro, ofrece una amplia variedad de platos tradicionales gallegos, elaborados con ingredientes frescos y de primera calidad. La carta incluye platos a la brasa como pulpo y bacalao, croquetas, ensaladas, churrasco y postres caseros. La relación calidad-precio es excelente. El servicio es muy atento y profesional. David, el camarero que nos atendió, fue muy amable y nos recomendó varios platos que resultaron ser deliciosos. Después de comer, recomiendo visitar la iglesia parroquial de Coiro que está muy cerca y ofrece una espectacular vista de la ría de Vigo o hacer caminata o paseo por el monte cercano, que es un precioso bosque autóctono gallego. En conclusión, la Taberna Galega Pan de Millo es un restaurante muy recomendable para disfrutar de la gastronomía gallega en un ambiente agradable.
Restaurante con encanto situado en Coiro, parroquia de Cangas del Morrazo. El servicio muy atento, te asesoran y tienen productos de calidad. La decoración es típica de taberna gallega con toques elegantes. Tiene terrazas con unas vistas espectaculares de la ría de Vigo. Una vez que se llega arriba, al cruce, girar a la izquierda. El Restaurante está situado justo enfrente de un crucero de piedra. Tiene en su haber un solete de Repsol. Recomiendo el xurelo surfeiro.
Sitio de 10. La comida, la atención de Julia y del cocinero muy agradables y pendientes. El bonito a la brasa espectacular y raciones muy abundantes. Éramos 5 y todos de acuerdo, el año que viene repetiremos.
Pedimos pulpo a feira, malo no, lo siguiente, recocido, recalentado y chicleado, el vino que nos aconsejo la "encargada" un albariño que no pasa de 16€ nos cobraron 25,50€ y para colmo cuando le decimos que llevamos esperando mucho por un churrasco (30 minutos) nos dice que nos va explicar que ellos tienen un protocolo y que si pedímos a mayores después de coger la comanda tenemos que esperar
Voy allí a menudo porque me encanta este lugar! De piedra, con aire vintage y tranquilo, chimenea en invierno y súper terraza todo el año con vistas magníficas, el silencio es maravilloso! Está latente la personalidad de sus propietarios tanto en la comida como en los detalles. El pescado o las vieiras a la brasa son una delicia, la empanada es un plus y su tempura de verduras es de mis preferidas! Los postres son aptos para los más exigentes sin duda! Es tan tranquilo y bonito que es imposible no repetir! Una se siente como en casa!
La comida de 10, el servicio leento, mas que en una boda, hartos de esoerar y recordar las cosas, hubo que ir varias veces a recordar que trajeran más de una cosa.hst hubo algun@ que aun sigue esperando que le traigan su ️ (una pena pues nos gustaba)
Fuimos a probar después de una recomendación de amigos y lo cierto es que fue una grata sorpresa descubrir en una encantadora casa de piedra un lugar maravilloso para comer. Comimos en la terraza, donde disfrutamos de una comida maravillosamente rica y con buen gusto. En nuestro caso comimos una torta de maíz con navajas escaldadas, cebolla caramelizada y una salsa de algas (maravillosa), después seguimos con unas INCREIBLES volandeiras de la ría a la brasa (las mejores que he probado hasta ahora. Sencillo pero delicioso), además compartimos una increíble lubina salvaje de la ría a la brasa también (se nota que como bien nos informaron, su especialidad es la brasa. Estaba de 10! Súper jugosa y con todo su sabor) todo ello acompañado de un fantástico vino blanco. También probamos las filloas con chocolate y helado de mandarina y el crumbel con manzana y helado.
A parte de la comida increíble, el lugar está decorado con mucho mimo y la atención fue INMEJORABLE. Una encantadora mujer con la mejor de sus sonrisas súper servicial, atenta y enamorada de lo que hace. Sin duda una de las cosas por las que volveremos. Son un gran equipo que te hacen sentir felíz de poder disfrutar de pequeñas grandes cosas. GRACIAS CHICOS! HASTA LA PRÓXIMA.
Fuimos pensando que tenia terraza con vistas y nos pusieron en otra que tienen al lado de la carretera. Platos demasiado elaborados para mi gusto y servicio lento. Lo mejor la carne a la brasa.
Taberna, terraza y vistas preciosas. Nos atendió Fito, quien nos hizo sentir como en casa, explicándonos muchos vinos (de su zona e incluso de la nuestra) y recomendándonos con gran acierto. El cocinero y los dueños te saludan para saber si todo ha estado a tu gusto. Y la comida espectacular. Tuvimos la suerte de poder degustar un plato fuera de carta que nos dejó sin palabras (dados de atún con puré de azafrán). Dejaos aconsejar y disfrutar. Tienen parking cerca.
82 euros dos personas Os relato él menú. Entrantes 10 navajas y una ensalada de tomate. Pedimos vino de la casa y nos sirvieronn una botella de albariño. De segundo plato cómo no les quedaba bonito de la carta nos sugirieron un sargo para dos que era eso.un sargo que para dos pues eso.un lomito para cada uno Dos cafés con chupito y para de contar. 40 eurazos el pescadito de marras. Está bien para pedir un churrasco de cerdo acompañado de un par de cervezas.sino clavada al canto.
Con parking, excelentes vistas, mesas en exterior, muy buena atención, carta bastante extensa y de calidad, local tranquilo y bien presentado. Buena relación calidad precio.
Desde luego no es un lugar lujoso, a no ser que valoremos la calidad, el buen servicio, la limpieza y la exquisita amabilidad de la propiedad. El lugar es muy amable, muy amplio, muy espacioso, tranquilo y sobre todo muy acogedor. Los baños son pequeños, pero muy limpios y bien dotados. Todo un lujo en un entorno rural y natural. Excelente.
Restaurante que se diferencia por la calidad y la innovación en algunos de sus platos. Guti dirigiendo la cocina y Julia en sala harán que quieras repetir la experiencia. Déjate aconsejar, muy ricas las tostas, las ensaladas, los platos de cuchara, y por supuesto los postres. Para comer sin prisa y disfrutar.
En una sola palabra ESPECTACULAR. No podeis venir a cangas y marchar sin antes venir a comer o a cenar aqui. Y la atención de diez. Ya tengo otro sitio favorito para comer
Había ido varias veces antes de la pandemia y muy bien, tanto camareros como local y comida. Ahora está todo mucho más caro, la ración de Bacalao era pequeña en comparación a lo que costaba, las croquetas no sabían a nada. (mejor las que tenían antes de jamón) El churrasco estaba bueno, como siempre. Salimos a 25€/PAX sin postre. No me quedan ganas de volver.
El producto es bueno, PERO es demasiado caro y las raciones muy escasas para la zona, además el servicio muyyyyyy lento. Otra cosa que no nos gustó nada, es que no hay carta para los vinos, es el camarero quien te lo cuenta de memoria y te asesora según calidad, pero cual no puedes elegir según precio, es importante saber lo que estás pagando ya que no todos podemos pagar precios tan altos. El postre lo mismo, no sabes lo que vale porque no hay carta. Al final nos llevamos sorpresa cuando nos trajeron la cuenta. Nunca más.
El cocinero majísimo, se tomó la molestia de contarnos su punto de vista sobre la situación del pulpo y los mejillones en Galicia, que es preocupante y nos habló de su trayectoria y como prepara el menú de cara a cada temporada.
Generazo, buena presentación y relación calidad precio muy muy bien.
Un grupo de 13 personas que reservamos una semana antes para mi cumpleaños. Yo siendo vegano y habiendo tan pocas opciones (nulas) en el pueblo, confié en las habilidades del chef para cuanto menos cenar. Todo esto resultó en un salteado de salsa de soja con verduras (no al revés, era incomestible), una tempura aceitosa y una ensalada de tomate (a 10 euros el plato de tomate) a la cual tuve que apartarle yo el queso con el que venía.
Decepcionante, esa es la palabra. Todo el grupo se fue muy descontento con la comida y el servicio con un ticket de casi 400 euros para la cena.
En general mal. El pulpo a la brasa ni pedirlo.encorreado.el camarero todo escusas.muy caro para donde está calidad precio desorbitado.no sigo. Aqui queda.
Un lugar con encanto! A pesar del retraso que tienen a la hora de servir los platos, no te sientes "abandonado" o mal atendido. La atención es muy buena, muy amables y simpáticos. El producto es bueno y fresco, con una preparación elaborada. Un lugar para recomendar y repetir sin duda!
Sitio encantador c, on productos a la brasa de buenísima calidad. Gustavo y demás muy profesionales. Se nota que les gusta su trabajo y se esmeran por tener buena calidad y buen trato
Moi lentos e ambiente tenso: o xefe de sala borregou con camareiro e cociñeiros que se escoitaba no comedor, foi incómodo. O postre tardou tanto que xa non o quixemos. Diferente trato a outras mesas: non lle gustou que non levaranos lector de QR e expresouse axitado con nós, cos da mesa do lado foi moi agradable ante o mesmo "porque ya sé lo que quieren" dixo. Non volveremos.
La verdad es que le doy un aprobado muy raspadito. A pesar de que cenamos en la terraza, cuando entras el olor a fritanga es bastante desagradable. La decoración estanun poco desdejada. El servicio bien pero intentan darnos a ver que conocen muy bien el producto pero realmente no va en consonancia con la calidad de este y eso hace Q no se pueda defender ese discurso. Tomamos el atún rojo, estaba bien pero me pareció muy caro y la calidad bastante normalita. Los postres OK. Creo Q tienen potencial pero deben de mejorar bastantes cosillas.
Plato del día penoso, primer plato sopa y caldo fríos, segundo parrillada de carnes con patatas, patatas recalentadas, carne seca y demasiado hecha. Nada recomendable.
El local no está mal, quizá un poco apretado. El personal amable, pero poco profesional. La carta reducida pero con productos de calidad y típicos gallegos. Las raciones pequeñas y caras. Definitivamente, no volveré
Productos de calidad, cocinados con cariño. Muy buena atención por parte de las camareras. Un local bien gestionado, donde comer rico y a un precio asumible. Repetirè siempre.
La dueña muy agradable, pero tardaron una hora y media en traernos de comer. Una de las camareras un poco arisca. El sitio esta muy bien, buenas vistas. Cuando pedimos la cuenta nos querían cobrar 3 cosas de más el camarero se hacía la picha un lío. No lo recomendaría si tienes prisa y en cuanto a la calidad de la comida buena.
Sitio totalmente recomendable. A cinco minutos escasos del centro de Cangas, os encontrareis uno de los mejores sitios del Morrazo. Si pruebas, repites.
No lo conocía, lo recomiendo al 100 %, no es barato pero merece la pena pagar hemos comido muy bien y los postres delicioso, todo muy casero, el ambiente muy familiar, trato excelente, repetiremos sin duda
Puedo entender que un domingo haya mucha gente y el poco personal del que se dispone a cierta hora no rinda lo suficiente, pero si me siento a comer y voy a pagar mi comida con su correspondiente servicio creo que deberia de haber unos minimos ya que el dinero no me lo regala nadie y quiero comer agusto lo que pago. Servicio deficiente, comida mala. Me voy con mal sabor de boca de un sitio que creia se distinguia del resto pero hoy no lo fue asi.
Excelente cocina. Nos gustó mucho todo lo que pedimos, y destacó el revuelto de erizos y gambas, y desde luego el churrasco de vaca bien madurado. Un plato genial para los carnívoros recalcitrantes, como yo. Claramente para repetir. Cuidado con las chinchetas del Maps. Hay dos diferentes y la buena (nos lo dijo el dueño) es la que pone "Pandemillo" todo junto. La otra no la crearon ellos
Siempre bien cuando vamos a Pan de Millo. Si bien es cierto que tuvimos que esperar a que nos atendieran pero luego se disculparon y todo se compensó con la rica comida. La atención es buenísima y el sitio muy agradable. Tiene una terracita que es muy acogedora:). Volveremos sin duda:).
Buena y original gastronomía, todo muy sabroso y bien elaborado. Atención amable y formada. Buenos caldos. Excelente ubicación. Algo diferente que invita a siempre repetir! Enhorabuena!
La experiencia ha sido malisima, raciones pequeñas, precios desorbitados y ante la crítica, el dueño responde con gritos. Una pena, ni volveré ni lo recomiendo a nadie.
No podemos ser objetivos. Gus y Julia son una maravilla.y ahora xuliña. Trato de 10 y la comida siempre buenisima. El mejor churrasco que he probado! Bicos y apertas para Gus y Julia y a todo su equipo.
De lujo. Segunda vez q vamos y volveremos. Atención, ubicación y comida de 10. No es barato pero caro tampoco. Cocinan casi todo a la brasa. Recomendable 100%
Genial la atención y las recomendaciones, buen producto muy bien preparado. Rl precio en sintonía con la calidad. Estupenda la terraza si el tiempo acompaña.
Local acogedor con una terraza muy agradable. La comida siempre buena empleando productos de temporada ecológicos. Buena atención aunque un poco lento el servicio. El entrante detalle de la casa muy rico. La empanada de lombarda, nueces y tetilla, ligera y rica. Las verduras en tempura de pan de millo un poco sosas. Las croquetas muy buenas. Y el postre mejorable.
Fantástico. Comimos fenomenal, camarero amable, simpático y profesional. Tranquilidad, silencio y muy buenas vistas. Comimos unas tostas de pimientos y ventresca espectaculares, un revuelto de zamburiñas, erizo, algas y setas muy sabroso, el tradicional churrasco y de postre filloas rellenas de chocolate con sorbete de mandarina. Muy buen precio: 43. Lo recomendamos sin duda y volveremos.
Lugar muy bien decorado y acogedor en invierno con su fogón de leña da un toque muy acogedor. Dan unos entrantes gratuitos mientras esperas la comida un buen detalle pero doy 4 estrellas porque me parece un pelin caro de mas ciertos platos que tiene y tambien por cobrar el hielo de la bebida nunca me apasado en la zona. Pero recomiendo ir a comer esta todo muy bueno. La dueña y los camareros son muy majos.
Por qué el lema de la taberna dice "Tódolos camiños conducen a Pandemillo"? Porque es un sitio al que hay ir y volver, por la calidad de sus productos y de su cocina. Es una taberna tranquila y acogedora, tiene terraza y una muy buena atención al cliente.
El trato muy bien, la calidad súper! Tienen parking, una terraza. El lugar muy acogedor ahora pedimos croquetas una ración, carne ración para tres (parecía para 5) exagerado. El vino (más dos cervezas a la entrada y botella de agua y tres dantas naranjas) total 101€ aproximadamente. Dos adultos y dos niños.
Sitio agradable. Recomendable o xurelo surfeiro e moitos outros platos. A atención é moi boa, mágoa que non empreguen moito o galego para un sitio tan auténtico. Recomendable igualmente.
Un lugar moi agradable onde o trato sempre e moi bo. En canto a cociña decir q pola Sema os menús son asequibles e moi ricos. A carta e amplia e moi boa tamén.
Entramos para tomar un café y descubrimos un lugar encantador, con una decoración muy bonita y un personal muy amable. Las vistas bárbaras. Tiene terraza y aparcamiento para los clientes. Volveremos a comer.