Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Me encanta este paseo. Si vas a Lugo guarda tiempo para recorrerlo. Tiene aparcamiento para coche; dónde tomar algo; puedes ir con niños o sillas de rueda.
Estupendo lugar para pasear, correr o ir en bicicleta. Enlaza con el río Miño al final, permitiendo continuar el paseo muchos kilómetros. Por la mitad más o menos se encuentra el restaurante Terras do Miño, ideal para pararse a tomar algo. Por ponerle una pega, no tiene apenas mesas donde hacer picnics.
El parque de los Ratos es un lugar para el deporte, como para las personas disfrutemos de una caminata en compañía de familia o amistades, disfrutemos de la naturaleza en un merecido descanso después del trabajo, como también personas mayores caminen en compañía de familiares, es relajante.
Buen sitio para pasear, excepto cuando llueva o haya llovido, no está cementado o asfaltado por donde puedas caminar, a no ser que vayas por el carril bici, pero no lo aconsejo, cada cosa para lo que es. Es una pena.
Ha quedado precioso desde su remuneración, echo en falta más árboles sobre el río para evitar la vegetación en el que consume el oxígeno e impide que haya peces.
Un lugar idóneo para hacer deporte, dar un paseo. Lo peor en ésta época la gente que pasa corriendo y no guarda la distancia de la gente que va paseando.
Es un lugar estupendo para caminar, desde la carretera de castroverde, al miño hay casi 5 km. Y luego si deseas caminar más, al lado del miño hay un camino fantástico hasta la depuradora, ida y vuelta 15 km.
Otro de los parques periurbanos de Lugo, abandonado la mayor parte del tiempo, salvo en elecciones, con mobiliario roto, carente de aseos y en ocasiones con la vegetación desmadrada, de tal manera que se intuye por donde va el río, río que por otra parte es víctima de especies invasoras y de la eutrofización del agua que no mantiene un caudal ecológico mínimo.
Es un entorno próximo a la ciudad con muchísimo potencial pero falto de inversiones y recursos, en su día hubo una zona de aves que hoy lucha por no desaparecer bajo la maleza, también había vigilancia, hoy nada de eso subsiste y por eso está como está.
Está al lado de Lugo y lo rodea por una de sus zonas. Se puede enlazar con el paseo del río Miño por lo que puede hacerse todo lo largo que queramos. Hay bastantes sitios para aparcar al lado, un restaurante más o menos a la mitad, y se puede hacer andando, corriendo o en bici.
Abrigado paseo muy próximo a la ciudad, adaptable a todo tipo de público, ya que es un terreno llano que va bordeando el río Rato. En algunos tramos te puedes salir un poco por senderos, que te llevan a zonas naturales un poco más apartadas.
Recientemente lo han dotado de iluminación, lo cual permite hacer deporte o caminar, en horas nocturnas.
Fantástico, naturaleza viva! Buen ambiente, buena comida, y precio asequible como cualquier bar. Se puede ir con niños, pues tiene un tobogán y unos columpios.todo dentro de una fresca hierba!