Pedra Filga

Impresiona mucho. Yendo solo sentí un aura extraño, difícil de explicar, como unas sensaciones cercanas al miedo pero también a la calma. Quizá fue el crujir de las hojas o el extraño silencio. Pero sin duda el primer momento en que ves la piedra te quedas realmente boquiabierto. Vista recomendada y debería estar señalizado, porque vale la pena verlo en persona.
Foto: Yo mido 1,83. Imagínate las dimensiones!

Entre la popular caldas de Reís y el Conjunto de Muiños y fervenzas del Río Barosa se encuentra a 800 m de la aldea de Ceboleiro. A la que se accede a través de la nacional 550.

Deja el coche próximo a una fuente o rebosadero de arquetas y continúa un ascenso a pie por un camino roto por la erosión del agua. Si tienes un tanque puedes llegar hasta el mismo destino.

Encontramos alguna piedra erosionada a lo largo del camino que nos anticipa lo que en breve encontraremos.

Rodeado de carballos y castiñeiros, dejando atrás los eucaliptos y pinos encontramos A Pedra Filga.

Su historia rodeada de leyendas, siempre mágicas, podemos contrastarlas con explicaciones más geológicas. Aquí os dejo algunas:

A Pedra Filga es el resultado de procesos químicos y físicos del granítico ocurridos a lo largo de millones de años a partir de la descompresión de las diaclasas (formadas en el momento del enfriamiento de la masa magmática) y por la descomposición de algunos de los minerales tectónicos dando como resultado tres grandes rocas de granito inalteradas tras el proceso de hidrólisis, formando una curiosa «mesa» entre las tres.

¿UN MONUMENTO MEGALÍTICO?

Debido a la grandiosidad del bolo granítico y a su «curiosa» formación hay quien apunta que A Pedra Filga pueda que haya sido creada por la mano del hombre y por ende estemos delante de un «dolmen«. De ser así, sin duda, podría tratarse del mayor domen que se haya catalogado nunca. Según algunos cálculos realizados en base a las medidas de las rocas graníticas, su peso sobrepasaría las 3.800 toneladas y la composición estaría datada, aproximadamente, en el período Neolítico (6000/3000 a. C.). Sea como fuere, mejor será esperar a estudios arqueológicos concretos para declarar, o no, monumento megalítico a la Pedra Filga.

Etimología. El término filga hace referencia a un lugar de felgos, fieitos, helechos. Se trata de la misma raíz que Filgueira, por ejemplo. En su origen, probablemente, se denominaría Pedra da Filga. Extrañamente, en Ceboleira no se conservan leyendas sobre la presencia de este imponente conjunto pétreo.

Más allá de cualquier explicación, su imponente talla te hará que la visita merezca la pena, porque cualquier foto no hace referencia de su tamaño.

Un auténtico capricho, o no, que cada uno juzgue, de la naturaleza.

Es un sitio bonito, curioso. Para llegar os recomiendo seguir estás indicaciones poner primero en Maps iglesia de Santa mariña de arcos da condesa como referencia y luego pedra filga porque si pones pedra filga, te lleva a un punto donde es imposible llegar al menos desde Vilagarcía, nada te dice como meterse por un camino el coche va bien al menos los días que no ha llovido ya que es tierra nada aparcas a dos minutos de donde realmente te dice y caminas luego bajas por un camino que está así como con hierbas y nada una cuesta cómo cinco min y te dice tu destino está a tu izquierda, cruzas un bosque con cuidado como un min y ya la ves es muy grande

Precioso e impresionante el tamaño que tiene, hay que verlo en persona para descubrir su inmensidad.

Es una obra de la naturaleza en un entorno natural y mágico de nuestra Galicia que hay que cuidar y proteger para intentar dejar algo para las futuras generaciones.

Como megalito es increíble pero nada documentado y totalmente desconocido y nada publicitado.
Demasiado perfecto para ser natural y casual. Huele de lejos a valor arqueologico.
Acceso solo para todo terreno o caminantes
Como megalito, precioso, pero no sé puede observar bien al estar rodeado de un espeso bosque.
Necesita información profesional y mejora del Camino de acceso

No tiene señalización pero se llega sin problema. Es enorme! Por supuesto, el lugar tiene ese misticismo tan característico gallego

Magnífico ejemplo de disyunción en bloques en la granodiorita de Caldas (Nada tiene que ver con dolmenes, ni con acción humana).
Lamentablemente ni esta señalizado, ni tiene ningún panel explicativo que pide a gritos.

Está situada en la entidad local menor de Arcos da Condesa, cerca de Caldas de Reis. Para llegar hay que ir por la carretera de Caldas a Pontevedra y desviarse en Arcos da Condesa, pasar las aldeas de Marán y a Ceboleira. En ésta última aldea finaliza la carretera y justo ahí comienza el camino que lleva hasta la piedra. Según subimos por el camino a unos 10 minutos está situada a la izquierda. La pena es que no está señalizada.

Es impresionante. Hay que ver que caprichosa puede ser la naturaleza formando algo tan majestuoso y sencillo a partes iguales. Se podría decir que este tipo de cosas son las que dan nombre a la Galiza máxica.

El conjunto en si es espectacular, pero se debía poner en valor. No hay ninguna señalizacion. Si se sigue montaña arriba hay piedras bonitas y grandes.

Un dolmen, suponemos que de origen natural por sus dimensiones, que impresiona por su tamaño y disposición.

Sin palabras ante la inmensidad de la naturaleza.alguno descerebrados hablan de dolmen por su forma pero ante su tamaño queda claro que es una afloracion granítica.

La pista asfaltada se termina a 1km aproximadamente. Queda un paseo tranquilo, apto para todos. Luego la piedra con forma de dolmen es grande, sorprende gratamente.

Aunque unos dicen que es un Dolme y de los a más grandes del mundo. Otro pensamos que es un capricho de la naturaleza