Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
El viaje es bastante impresionante aunque si es verdad que transcurre por la zona más agreste y menos por la zona de los viñedos. Si fue un poco raro que para embarcar te llamaran por tu nombre según el orden con el que reservaras. El parking se queda muy escaso para toda la gente que va.
Fui en diciembre, es un lugar muy helado pero con una vista expectacular. Lo ideal creo que sería ir en verano pero sino de todas formas es un buen paseo
Desde este embarcadero se coge el barco para visitar los cañones del Sil y se pueden ver las condiciones en las que se realiza lo que se llama "viticultura heroica". Este tipo de viticultura se realiza en pendientes muy inclinadas, en altura y poco o nada mecanizado, es decir, se vendimia en paredes casi verticales a mano. Es impresionante, a algunas de las vides solo se puede acceder en barca.
Contratamos el paseo en catamaran, fue precioso y muy ameno. El chico que hacia de guia lo tenia muy bien preparado y daba gusto escucharlo. Un rato muy placentero.
Cogimos un paseo en barco por el cañón del Sil con el grupo Hemisferios y nos gustó, fueron puntuales y teníamos un guía que iba contando los detalles del recorrido, pero se hizo un poco largo. Además, creo que el cañón del Sil se aprecia muchísimo mejor desde la altura, desde un mirador, que desde abajo.
Pues espectacular, pero el que tenga vértigo que no vaya … la carretera para ir viniendo de Pontevedra como se te cruce un coche o un autobús como me paso a mi … empiezas a recordar porque tuviste que pensar en ir … para repetir el que no haya ido …
Repetí ruta tras unos años y ha sido todo un descubrimiento. La guía encantadora, muy documentada sobre la zona y muy amena con sus explicaciones. Las vistas son preciosas. Merece la pena ir en distintas épocas del año porque el bosque y las viñas van cambiando de color. Yo aconsejaría hacer el paseo en barco y luego visitar el cañón desde ambas márgenes para disfrutar de una visión completa. Dependiendo de donde te sitúes ves unas cosas u otras. Viaje inolvidable por la perspectiva desde el agua.
Un viaje en barco por los cañones del Sil no debe faltar en tu visita a la Ribera sacra. La mejor hora para nosotros despues de comer. El trayecto de hora y media es impresionante y se hace muy ameno ademas con las explicaciones que nos van dando a lo largo del viaje. No perderselo.
Deja que desear las opciones alimentarias que ofrecen en el sitio. No hay opciones vegetarianas, mucho menos veganas. Lo que sería bueno tener en cuenta. Las pizzas que ofrecían eran congeladas de super.
Quitando eso, las vistas son inmaculadas, merece la pena.
Es muy bonito, la zona más escarpada del río, no hay tantas vides pero las que hay son heroicas de verdad, viaje relajante y muy bien explicado por viajes Hemisferio, a ellos gracias por vuestra simpatía
Lo que no me gustó del paseo en barco que toda la gente salio fuera nada más empezar la travesía y no dejaban de entrar y salir, he estado en otros y hasta el final no dejaban ir de un lado a otro. Por lo demás muy bien la tripulación y su explicación
Una belleza de paisaje, y la mejor manera de visitar los cañones del Sil es hacerlo en catamarán.cuando te adentras en ellos es como si vivieras una película, y que decir de las plantaciones de viñas de donde se sacan tan apreciados caldos.verlo es la única forma de entender xq le llaman Heroica, Un lugar muy recomendable para conocer la Galicia misteriosa
Magnífico paseo en barco con genial explicación por parte del guía. Tuvimos la suerte de ir en la parte de arriba y que a pesar de ser otoño estuviera un día fantástico. Actualmente por el covid no se puede beber ni comer a bordo. Puedes comprar los tickets online pero igualmente tienes que recogerlos en la taquilla que se encuentra en la cafetería donde además de tomar algo cuenta con baños. Aparcamiento habilitado a unos 200m
Cogimos un catamarán por el río Sil porque nos lo recomendó la dueña de la casa rural donde nos lo alojamos y he de decir que fue todo un acierto. La ruta en barco dura 90 minutos y cuesta 12 euros. El guía speaker es muy bueno, comentando solo cuando hay que decir algo interesante y aportando datos sobre el recorrido y la Ribeira Sacra en general. Se aprecian muy bien los viñedos heroicos en las laderas del cañón.las medidas covid son aceptables. Se embarca por orden de reserva por lo que es recomendable reservar con antelación para acceder a la parte superior del catamarán que es donde se aprecian las vistas del cañón. Muy recomendable.
Lugar indicado para dar un paseo en barco y ver el cañón del Sil. Se aparca pegado a la cuneta, no cuenta con aparcamiento. Dispones de un bar donde sirven bocadillos fríos, calientes, pizzas, helados, bebidas.
Enclave paradisíaco para tomar un vino y disfrutar de las vistas, solo una pega k no dejan subir a las embarcaciones con perro, no siquiera en transportin
Salida preciosa, paisaje especatcular. El guia un crack. Explica de manera q conectas con él todo el rato. Un gran profesional. El barco limpio y desinfectado despues de bajar los otros viajeros. Gran excursión!
Situado enfrente de nuestro embarcadero, hace el mismo recorrido que nosotros, con barcos más grandes desde la orilla de Ourense. Lo recomendamos para grupos.
Me encantó. Se llega sin mucha dificultad, las carreteras con muchas curvas pero bien. Aparcar aunque el parking no es amplio se deja cerca de la cuneta y sin más complicaciones. El barco estupendo. Recomiendo comprar las entradas cuanto antes por internet y en la cafetería te validan el billete. Lo bueno de eso? Que entras al barco por orden de reserva y por tanto podrás elegir ir arriba o en el interior. Yo fui arriba y la verdad que volvería a ir, hacía calor, llevar gorro y crema solar si vais en agosto al menos y a disfrutar! Van narrando cositas sobre los cañones del Sil por tanto muy bien.
El Personal (el guía concretamente) bastante desagradable, se dirige a mi personalmente con malas formas en varias ocasiones. Demasiada gente embarcada, embarcación al 100% de su capacidad en tiempos de Covid-19.decepcionante.
Una excursión preciosa y todo bastante bien organizado. Como crítica y espero que sea constructiva, creo que al desembarcar un grupo y embarcar otro seguido, no hay desinfección de las zona comunes
Unas instalaciones sencillas pero adecuadas y en muy buen estado. Hay una cafetería y una pequeña tienda de souvenirs. La carretera de acceso es buena pero con muchas curvas, y el aparcamiento algo escaso. Puedes reservar una excursión en barco por el Sil que merece mucho la pena.
Bonito sitio, para ir a montar en barco y hacer una excursión por los cañones del río Sil. También dispone de bar donde poder tomarme algo, incluso comer en plan informal. Lo único malo. Es que había mucha gente y no respetaban las medidas Covid.
El trayecto en barco merece la pena sin duda alguna. En este embarcadero tienen dos tipos de embarcaciones, una grade y otra pequeña, no te especifican el tipo cuando reservas y es mucho mejor la más grande. Este tiene su itinerario por algunos miradores, pero por lo contrario no pasa por la zona con más viñedos.
Pocas medidas de seguridad.el entorno lo conozco de hace años y volvere mil veces mas por que es expectacuar. La naviera no es gran cosa y si encontre el rio con mucha suciedad ya no de los troncos que flotavan y es normal.pero el plastico que hay.botellas.cubos.cajas.vi de todo.eso. No es normal
Es genial. Visita obligada si estás por la zona. Paisaje sobrecogedor. El personal a bordo es muy profesional y la guía es simplemente fantástica. Te ayuda a comprender TODO lo que engloba el paisaje y da sentido a todos y cada uno de los minutos que dura la ruta.
La carretera es muy estrecha y cuesta un poquillo llegar, pero el lugar es espectacular, el Servicio amabilísimo, nos esperaron unos minutos antes de la partida del barco
Visita en catamaran 100% recomendable, el guía muy interesante sin embargo sería aún más agradable si no pusieran la música cuando el guía no está hablando. Nota importante: no aceptan pagos con tarjeta.
Bonita experiencia de navegar por el río Sil. Permite ver el cañon desde otra perspectiva mientras te explican un poco la historia del lugar y te dan algunos tips de turismo local. Podrán ver también los viñedos a ambos lados del cañón. El paseo cuesta 12 euros y dura aproximadamente 1 hora y media. Se puede reservar por internet o comprar los billetes directamente en el embarcadero. La subida al bote se suele hacer por orden de reserva así que quienes hayan comprado las entradas ese mismo día suben de últimos. Las salidas suelen ser a las 12pm y algunos días a las 16pm (recuerden preguntar antes de ir). Hay aparacamiento fácil justo al lado del embarcadero y una cafetería con aseos en el lugar. En cuanto a la seguridad COVID no hay problema: aforo incompleto y mascarilla obligatoria durante todo el recorrido.
La organización, en lo relatuvo a seguridad por covid 19 ha sido muy buena. El embarque ordenado y rápido. La travesía por el cañón interesante, auque un poco breve. La parte negativa está en La cafetería que deja mucho que desear.
Íbamos a reservar pero nos dijeron que si teníamos algún temor por el Covid, que no lo hiciésemos, ya que el aforo es del 100%. Será muy bonito, pero no toman medidas de precaución. Suerte para el que lo haga!
Es fantástico el recorrido en catamarán por el cauce del río Sil. Pero la oferta gastronómica mientras esperas en el muelle la embarcación, es patética. Y sólo dos o tres camareros corriendo como locos y sudando. A pesar de que no es muy barato.
Desde aqui se toma el catamaran para recorrer el cañon del sil. En el embarcadero tienen una cafeteria donde puedes comer algo. La zona de compra de pasajes para el barco esta atendida por unas chicas que son muy muy amables. El barco cuenta con un muy pequeño bar. El paseo es un espectaculo y el guia te va explicando lo que ves. Un sitio para volver sin duda.
Vergonzoso que sigamos aceptando no poder pagar en una cafetería con tarjeta de crédito. Y sobretodo en época de Pandemia COVID19. O tiene algo que ver con oscurantismo ante Hacienda?