Pensión Ribadiso

Y la pensión nos pareció bastante chula la habitación estaba limpia la cama, cómoda y un baño espacioso. Nosotros pudimos poner una lavadora y una secadora por cuatro euros cada una. El hombre que nos atendió fue súper amable, esta pensión dispone de piscina y una zona muy grande de césped está a unos metros del río, que es súper bonito la recomiendo 100 × 100 , eso sí para subir a la zona alta del pueblo nosotros cogemos un taxi que nos costó cinco euros subir y cinco bajar.

Es una pensión con piscina, que en el mes de agosto, que con 36º y después de 20 km, parece un OASIS,
Nos coincidió con una fuerte ola de calor, y después del camino con subidas y bajadas, y faltándote 3 km para llegar a Arzua, te da una alegría cuando llegas y puedes disfrutar de la piscina.
El único restaurante está en frente y ya se nota la proximidad a Santiago porque los precios van subiendo

Buena pensión en el camino. Está en una pequeña parroquia de Arzúa, junto a un puente antiguo y a un arroyo muy bonito. Tiene piscina para los residentes y en verano tras una larga caminata se agradece.

Lo mejor la ubicación, en ruta del camino y junto al rio Iso, parada obligatoria para refrescar los pies o bañarte.

Brutal, después de una etapa bastante dura, llegar a esta pensión muy chula y con piscina incluida no tuvo precio. Todo muy limpio.

Expectacular, es una pensión TOP, máxima limpieza, máximo co fort, y tiene un jardín súper cuidado con una piscina que después de una gran caminata viene genial. Hemos pasado solo una noche, pero es un sitio donde se puede disfrutar de una estancia más larga.
Muchas gracias por todo!

Buena estancia durante el camino. Se agradece la piscina aunque demasiado fría para usar pero…es una opción de relax. Entorno bonito. Justo enfrente un meson que abre prácticamente todo el día,
Las habitaciones muy bonitas, baño amplio y confortable. Colchones muy bien.

Al borde del Camino. Una muy buena escala con un gerente muy competente, amable, servicial y dinámico. Las habitaciones son nuevas y bien equipadas, muy funcionales. Los baños también son espaciosos y están bien distribuidos (solo falta un estante para poner tus cosas).

Pensión con varias habitaciones, muy moderno, bien equipado y en un enclave de pueblo total, tranquilo por la noche. Tiene un restaurante justo enfrente (el único del pueblo), parking privado y jardín con piscina. El dueño amable. Buen valor por el precio

Alojamiento muy recomendable, instalaciones estupendas, su dueño súper agradable, muy atento!
Dos sevillanos en el Camino…

Trato lamentable, es una mancha oscura en el camino, le doy una estrella porque la aplicación no deja otra opción para comentar.
Sin duda un lugar bello con pésima atención se convierte en una mala experiencia; el encargado un mal educado, nos dijo mientras estábamos cenando.que teníamos que entrar al hotel no mas tarde de las 23: 15 horas. Toque de queda para entrar en un hotel? Que tengo que dejar mi cena en la mesa por qué? No paren en este precioso lugar no merecen nuestro dinero, de nada vale una piscina y un bonito jardín si te tratan de malas maneras. Un lugar sin alma y sin corazón! Suerte que conocemos nuestros derechos.

Es pec ta cu lar! La semana pasada ibamos haciendo el Camino de Santiago y esta pension fue el lugar perfecto para descansar y reponernos para la siguiente jornada. Limpieza, comodidad, las vistas, buen precio, amabilidad.es que todo es bueno!

Es la segunda vez que me he alojado en este maravilloso hotel.
Al entrar ya notas el confort y la impecable limpieza. Manolo te recibe con una deliciosa serenidad.
Las habitaciones son maravillosas, con una decoración especial, buenísimas camas, almohadas y colchones
El baño es espectacular con una ducha reconfortante después de un día de caminata. Las toallas una delicia.
La ubicación es perfecta al lado del río, con piscina y unas preciosas vistas.
Indudablemente el mejor día de descanso en el camino.
En el próximo camino repetiré!
Gracias por su calidez y amabilidad.

Alojamiento muy bien ubicado con excelentes habitaciones.
Desafortunadamente, no se recomienda el restaurante adjunto al otro lado de la calle: camareros antipáticos (totalmente abrumados en las horas pico) y la comida era mala (el rosbif ofrecido era obviamente solo la carne sobrante de la sopa, cocinada).

Paramos a tomar algo y el trato lamentable, tardaron en atendernos y con muy malas formas. No lo recomiendo nada para parar.

El mejor lugar que he visitado en mi camino a santiago. La atención del anfitrión y demás personal increíble. La comida exquisita y el hospedaje muy confortable.