Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Sitio precioso, sobre el mar una terraza impresionante. Calidad de la materia prima excelente. Peeeeero: tienen una carta que se queda corta (por ejemplo: en carne sólo tienen 2 cosas) y, por encima, no tenían muchos productos que pedimos y aparecían en la carta: no berberechos, no navajas, no empanada, no merluza. Una lástima.
Escenario espectacular con unas vistas al mar preciosas. Muy buena atención y un muy buen producto.como es lógico es precio en consonancia es alto. Y si acaso un poquito alto de más. El bogavante frito es Du especialidad y estaba buenísimo 3,1 de animalitos.
Solo voy a elegir un adjetivo: ESPECTACULAR! Y añadiré algo más.un lugar al que siempre querré volver. Enhorabuena a los propietarios y profesionales que trabajan en Porto dos Barcos
Paramos solo a tomar una cerveza, lo valoro con cinco estrellas por su aspecto elegante y por estar en un sitio espectacular, con unas vistas increibles al atardecer.
La langosta bastante insípida, y el dueño todo el rato insiste que pidas y pidas (siempre lo mas caro de la carta), tanto en comida como en vinos. Clavada desproporcionada
Es un restaurante que hace sentir cómodo al cliente, con una atención exquisita y un ambiente muy agradable. Ofrece productos de primera calidad (magníficas las almejas, los berberechos, las navajas, el bogavante,). Es bueno dejarse aconsejar a la hora de pedir. También son de destacar los postres, a cual más gustoso. Llos precios acordes a la calidad de los productos. Para ocasiones en las que uno quiera darse un homenaje.
Precioso lugar, al borde del mar, con mesas separadas y bien servidas. Muy buen servicio, rápido y amable. Excepcional marisco, eso si, a precios también excepcionales. Sitio perfecto para darse un homenaje. Lo único que no me gustó: en una abultada cuenta, nos cobraron los chupitos. Feo detalle, y así se lo hice saber.
El sitio es espectacular, su comida sublime y Martiño es lo mejor de todo el restaurante. Da gusto comer y que te lo sirva alguien que sabe tanto! GRACIASSSS volveremos
El sitio idílico, la comida un manjar (langosta o bogavante de 10) todo, el entorno, la atención, el servicio correcto. Y claro, eso tiene un precio que hay que pagar de lindo gusto.
Para mí, es un sitio solo, para tomar marisco y pescado, (muy buenos). Al sentarte ya te empiezan metiendo el marisco por los ojos, no queríamos el marisco, queríamos comer y pregunto si tienen solomillo y me dicen que solo chuletón, entre plato y plato mucha espera y todos separados, mientras comía uno los otros veíamos porque si no, se enfriaba, la atención no muy buena, el personal un poco perdido. Le doy las dos estrellas para ver si así mejoran. Yo personalmente no volveré ni lo recomendaré. (lo siento).
Excelente lugar para disfrutar de las puestas de sol desde una magnifica terraza sobre el Atlántico. Disfruta de una buenísima atención y cocina, a buen precio que, eso sí, no deja de "actualizarse"
Hemos ido dos veces y relación calidad precio ha sido decepcionante. Precios desorbitados. Somos de la zona. La calidad del producto es muy buena en comparación a otros locales de la zona pero nunca podrá hacer competencia a sus iguales en las rias baixas. Las zamburiñas no son las de verdad verdad. Es mejor no pedir recomendación porque da la impresión que intentan vender el producto mas caro, no el mejor. Desde luego no volveré. Hay sitios bastante mejores en las Rias Baixas, en los que pagas lo que se merece pero no te siente engañado.
Restaurante A pie de un precioso océano Atlántico, estas comiendo en una preciosa terraza acariciado por la brisa marina y viendo y escuchando una preciosa mar, el servicio desde que llegas muy atento y profesional, mesas bien vestidas y presentadas, un vino cortesía de la casa y un pequeño pero delicioso aperitivo, la carta, extensa, sobre todo pescados y mariscos de extraordinaria calidad, la preparación y cocina espectacular, todo en su justo punto y cantidad. Los postres caseros y bien elaborados y servidos. El precio, acorde con el servicio, local y ubicación. Volveremos y probaremos nuevos platos.
Chiringuito con producto local y fresco con barco propio, servicio excelente y lugar para verano y puestas de sol. Si hay viento y hace frío no se puede estar en la terraza y el interior no está climatizado
La terraza un lujo. El interior un mesón. La comida de calidad pero el precio muy por encima de la calidad. La atención a la recepción mucha reverencia pero los postres y los cafés ya no te los sirven.
Un lugar maravilloso, muy bonito y con encanto, el personal amabilisimos y pendientes de que no te falte nada, y la comida excelente, exquisita, un lugar precioso en un sitio muy bonito
Lugar increíble con lo mejor del mar para disfrutar con una atención de cinco estrellas. Sencillamente incomparable. La terraza más exclusiva que uno se pueda imaginar en la que puedes escuchar el sonido del mar mientras degustas las viandas más exclusivas. Inolvidable experiencia.
No celebréis eventos importantes en este restaurante Llevamos yendo toda la vida a este restaurante y nos decidimos por celebrar aquí un doble cumpleaños familiar, 15 personas. Intenté varias veces que el encargado me mandara la carta para ver los precios y poder así preseleccionar la comanda. En ningún momento me la mandaron, pero como ya conocía el sitio, me fié y me dejé aconsejar por Juan para los principales, que me recomendó un “pescadito” para los niños… El día en cuestión, nos tuvieron más de tres horas para comer esperando muchísimo entre plato y plato (que era un cumpleaños NO una boda!), no fueron capaces ni de traer un detalle con una vela para los cumpleañeros, y luego ya la decepción fue cuando nos colaron una cuenta de 100 euros por persona, teniendo en cuenta que 6 de los comensales eran niños…sólo su “pescadito” (3 San Pedros carísimos a compartir) costaba 300euros! … Es una pena que hayan querido hacer negocio con gente de toda la vida (que no deberían hacerlo con nadie), no queriendo dar precios para sablarnos y dejando un mal sabor de boca a la celebración…. Probablemente no volvamos por estos motivos…
Un lugar magnífico para probar productos de la zona. Tomamos el bogavante y langosta, todo muy fresco y de una calidad excelente. De los entrantes destaco el ceviche y los chipirones. Los postres todos muy muy buenos. El servicio excelente.
Restaurante de gran calidad con producto bien fresco y atención inmejorable.
Dispone de zona interior aunque lo que realmente destaca es la gran terraza con vistas al mar, atendida por un servicio muy correcto y a la altura.
Gran carta de vinos y de comida, complementada con el producto de temporada. Dispone de parking en el exterior (no excesivamente grande).
Relativamente tranquilo, de aquellos lugares donde irías a celebrar algo en familia, amigos o con tu pareja.
Buena relación calidad-precio, con algún pica-pica cortesía de la casa. El precio por persona es variable por la variedad de opciones pero una comida normal (entrante + principal) con vino y café estará sobre los 50€/persona.
Visitado como lugar de " referencia" tan solo puedo aprobar la especialidad: bogavante frito, el resto muy mediocre para un lugar que quiere dar una apariencia que no necesita, pues el lugar y las puestas de sol son preciosas, pero el esnobismo exagerado sin el conocimiento chirrian así como los precios que no se corresponden.
Recepción con copa de vino, mesa en primera línea de costa con vistas a un bello atardecer, pescados y mariscos de gran calidad y unos postres exquisitos. No es un sitio para ir todas las semanas, ya que es muy caro, donde se paga lo mejor que entra en la lonja con precios al kilo (hablamos de 20€ a 50€ el plato). Si es perfecto para darse un homenaje y hacer una comida o cena memorable de vez en cuando (solo si eres de pescado, no es un sitio de carnes aunque tengan en la carta). Está bien dejarse aconsejar para escoger los mejores platos del día de esta forma acertarás. La botella de vino fueron 27€ y su precio de mercado podía estar en torno a los 22€ por lo tanto no me parece un margen excesivo para un restaurante como este (Albariño La Mar, estaba excelente). Sin embargo 2€ por dos trozos de pan pequeñitos y normalillos de sabor si me parece un timo; por esto y por el precio general, que me pareció excesivo le quito una estrella. Por lo demás el personal muy amable y servicial; he leído varias criticas donde dicen que son lentos, yo no lo veo así: se trata de un sitio donde disfrutar de una buena comida y de la compañía; no es para comer corriendo.
Estupendo sitio, con preciosas vistas y trato excelente. Marisco gallego de altísima calidad pero de precio muy muy elevado. Puede que no todo el mundo valore lo que cuesta, pero la calidad está garantizada.
Nos fuimos sin comer, Díez minutos para qué nos trajeran la carta la cuál con los precios escritos con lápiz, borrones y sin los precios me dio sensación de timo Según la normativa de turismo de La XUNTA DE GALICIA esa carta no cunple la legislación
Reserve con 15 dias de antelación y llame unos días previos para confirmar la reserva para 2 personas en una mesa al lado del mar. Llegamos el día señalado y nos indicaron una mesa que estaba en una esquina totalmente interior dimos queja ya que esa no era nuestra reserva y nos dijeron que teníamos que esperar, en esto llegó un grupo de 4 y les ofrecen mesa al lado Del Mar cuando les escuchamos que no tienen reserva. Nos quejamos y nos colocan una mesa en medio de la terraza sin ninguna vista. Viene el camarero nos dice la carta de palabra y le pedimos la carta para observar con mayor tranquilidad y nos responde despectivamente si lo que queremos es ver los precios, nos quedamos a cuadros. Mucha espera y trato pésimo que ya ni disfrutamos la comida con tantos malos detalles.
Lo he recomendado siempre a quienes se lo recomiendo lo acaban recomendando, PESCADO FRESCO no como en otros de la zona y el SERVICIO es FANTÁSTICO. Saludos
Lo recomiendo siempre. Si tienes visita en casa y los comensales que lleves gustan de comer bien.nunca quedarás mal.luego ubicación del restaurante y sus propietarios de 10
Este restaurante ofrece una excelente calidad en sus productos, especialmente en el producto del mar, aunque también en carnes. Tiene piezas de marisco enormes (langosta, percebes, almejas,). Para ese tamaño y calidad, el precio es muy competitivo, aunque tratándose de marisco, la cuenta no te saldrá pequeña. Dispone de una terraza al aire libre, con vistas al mar, fantástica en un día soleado.
Un restaurant très bien placé, en plein bord de mer, avec une vue de l'océan des plus charmantes. Le personnel est très sympathique, et la cuisine irréprochable: tous les plats que j'ai pu y goûter sont simplement excellents. Un restaurant à ne pas rater si vous êtes de passage!
Por donde empezar? Nos sentamos a nuestra hora reservada (14: 30h) y estuvimos 25min esperando a que nos atendieran para traernos la carta (sólo había 3 mesas, no era por estar saturados). Cuando por fin nos trae la carta nos pregunta qué queremos comer, a lo q le respondo. "acaba de dejarnos la carta, nos da 2 min para pensar? ". (De toda la carta tenía 2 cosas de carne y 3 de pescado). Cuando al fin nos decidimos por una lubina (42€/kg), aparece 50min después con 2 platos con un "filete" cada uno con lechuga y patatas. Le pregunto si eso era lo q habíamos pedido, y nos contesta que la lubina se sirve así (jamás me ha pasado en ningún restaurante, a no ser que ya lo ponga en la carta, cosa este no era el caso). Decidimos empezar a comer, ya que son las 16h y se nos estaba pasando el hambre. Cuál fue nuestra sorpresa? El "filete" Insipido, chicloso y crudo. INCOMIBLE. Tratando de llamar al camarero para comentárselo y q los pasara un poco más, no apareció por la zona en 20 min. Cuando por fin aparece, nos pregunta "que tal estaba la lubina? " A lo que le señaló mi plato (entero, con el "filete abierto para que se viera la sangre) y le digo" sinceramente? Pues como ve no la he podido comer, está cruda, insípida y chiclosa", el camarero sonríe cínicamente y dice "una pena, esta recién pescada", recoge los platos y nos pregunta si queremos postre o café. CÓMO? (No da opción a pasarla un poco, o cambiar de plato. A nada), Le pedimos directamente la cuenta. Tardan 15 min en traerla, pero no la trae él, la trae otro (el jefe), y la deja en la mesa y se va, para que no podamos decirle nada (60€). No, no, no. Mire, por favor. Se acerca y le comento todo lo sucedido. "Y que me dice con eso? Qué quiere que le cobre, porque el pan y el vino se lo han tomado? " Quiero que me cobre lo que tenga que cobrar, usted es el dueño, sabrá qué es lo que tiene que cobrar, porque me imagino que habrá visto el plato entero de vuelta en la cocina con la "lubina"cruda y no ha dado ni guna opción para que pueda comer lo que he pedido y me está cobrando. Pues no sé. 30? Le parece bien? A mi no me pregunte, simplemente descuente mi plato de la factura y cóbreme, pero que sepa que ya me ha visto. Vergonzoso, parecía tendero de un puesto de mercadillo, Había ido muchas veces, y jamás me había pasado esto, pero. No volveré. Ya no es lo que era.
This used to be a cheap but fantastic restaurant. Now it still serves excellent seafood/shellfish /fish but can be very expensive. They have a fantastic range of wines and you can buy many of them. The dinning terraces are amazing because you are virtually in the sea. A great place to have a beer and watch the sunset. It's a family owned business and Juan, the son will give you a warm welcome and great service.his bother Abelio catches the fish.
Muy mal. Nos han quitado de la mesa donde nos sentamos (pegada a la barandilla) diciendo q estaban montando para cenas, y a los cinco minutos llegaron unos turistas americanos y los han dejado sentarse para tomarse unos vinos. Discriminais a la gente de aquí? Que vergüenza. Ni chicote ni leches. No recomendable para nada.
Muy recomendable! Cenamos con unas vistas del atardecer impresionantes. Comida de gran calidad a un precio no tan caro como podría parecer y un servicio muy atento y amable. Repetiría sin dudar para un capricho
Fatal, nos han puesto en una mesa alejada y a los turistas americanos justo al lado de la barandilla junto al mar. Si sólo les interesan los turistas, a ver de qué viven el resto del año,? Cuando a los propios vecinos los tratan así. Con la consumición no nos han puesto nada para picar. No se lo recomiendo a nadie y espero que recuerden cuando comenzaron, que vivían solo de los vecinos.
Espectacular los platos con el género más fresco de la zona, e inmejorable el trato! Comer o cenar con vistas al mar una delicia! Recomendable al cien por cien!
Si te gusta el pescado y el marisco y en un lugar idílico este es tu restaurante. Eso si, lo pagas a precio de oro. Caro. El sitio espectacular, el trato encantador y la cocina muy buena.
La calidad del producto es buena. Pero si pidés zamburillas y te traen algo más parecido a lapas que a zamburillas (y sosas) se te queda cara de tonto. Luego el rodaballo si preguntas que qué tamaño tiene que si de 2 raciones y media y te ponen 200 g. Lo dicho producto muy fresco raciones muy escasas comparadas a su precio. El trato muy bueno y el sitio inmejorable. Experiencia única, no volveré