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Poñolle unha estrella porque non se pode poñer menos. Sentamos para picar algo de cea e non te atenden se non pides bebida e comida xuntos. Acabamonos levantando sin pedir nada porque a camarera foi borde e desagradable.
Paramos a tomar algo por la noche y preguntamos por la carta por si queríamos picotear algo. Nos dijo que se tenía que pedir todo junto, no dándonos opción a tomar algo sin más (el local estaba casi vacío) después de un rato esperando llamamos a la camarera varias veces sin recibir respuesta y cuando la recibimos fue borde y desagradable. Nos tuvimos que levantar e irnos. No entiendo como hay personal trabajando tan a desgana de cara al público.
Menú del día de precio correcto con varios primeros y segundos a elegir. Muy buen trato por parte de los camareros. Todo rico, especialmente el caldo Gallego.
Intentamos comer aquí, pero fue un auténtico desastre. Más de 20 minutos para tomarnos nota, y más de 30 en traernos la comida. Y las camareras unas bordes, e irresponsables.
Gracias a Dios vino el que creíamos era dueño, o un camarero profesional de verdad, que cuando le dijimos que llevábamos media hora esperando los primeros los sacó de inmediato, y puso en marcha los segundos. Luego la comida no estaba mala, pero la sensación no fue buena.
Incluso salió discutiendo con una camarera, lo que nos sirvió de coña todo el viaje. - Se foi * Pero como que se foi, si están ahí.
Menuda atención PÉSIMA, las chicas que trabajan son nefastas, menudas ganas de trabajar, por la mañana fuimos y despectivamente nos dijeron que estaban completos aún habiendo mesas disponibles aunque separadas, cero resolutivas, y aún habiendo recibido ese trato intentamos volver por la tarde noche para cenar, además de una vez más recibir una atención absolutamente desastrosa, estaban bebiendo copas junto con algunos clientes. Tienen suerte que la gente pasa por aquí y quieren descansar y comer y se llenará por ese factor, si por su atención tuvieran que atraer al cliente otro gallo cantaría. Aquí queda mi queja y decepción.
Cuenta con menú y con gran variedad de raciones, está muy bien situado y el personal es muy amable. Las croquetas de chipirones fue lo que más nos gustó de lo que pedimos.
Si queréis algo barato digamos que portomarino es el sitio adecuado pero solo porque está en el camino de Santiago es bastante caro pero como todos los sitios de portomarín en vez de aflojar precios para los peregrinos pues lo que hacen es sacarles el dinero de la mejor manera posible un plato de pulpo 15 euros por ejemplo en plenosal Thiago el mismo pulpo la misma cantidad 12 euros y ya si te vas a levante o Andalucía pues como mínimo un 30% más barato que en el camino de Santiago
El sitio céntrico. Restaurante con pocas mesas y nos hemos tirado 15 minutos para que nos atendieran, pasando y mirando las camareras. Llego el momento en que pensamos que había que entrar a pedir y nos dijeron en tono borde, atendemos en la calle. No recomendamos, típico sitio céntrico que lo tiene todo hecho por estar en el centro
Llegamos sin reserva y nos pusieron de comer sin problemas. La comida espectacular, el servicio sin palabras (especialmente Lorena, que es una maquina). Recomendable 100%
De vergüenza y muy patético el trato del camarero, tal vez dueño por sus formas, con una clienta mayor esta misma tarde. Al sacar la mujer el dinero para pagar una tapa de pulpo le ha montado un escándalo, repitiendo en muchas ocasiones que si le estaba llamando a él ladrón. Entiendo que la mujer peregrina no sabrá muy bien los precios de las tapas de aquí, pero lo mejor que puede hacer este camarero es aprender buenos modales y trato con los clientes. Poco ha faltado para pegarse con un transeúnte que pasaba por allí y defendía a la señora, que la pobre no paraba de decir que no había dicho nada, en voz baja. Todo un espectáculo. Por cierto, la comida deja mucho que desear, con el mismo sabor de ajo y perejil tanto para el pescado como para la carne. Nada recomendable, y si eres peregrino menos todavía.
Pedimos una caña un un café y La camarera casi me echa la cerveza y el café por encima estaba hablando con mi pareja y dice disculpe y se mete en medio una mal educada, dan gominolas por la consumición.
La verdad que me da pena no ser uno de los agraciados en que le atendiese el chico el cual dicen que es tan simpático. A nosotros esta tarde nos atendió una camarera que por desgracia los dos refrescos nos los saco sin hielo y medio calientes, A los dos minutos saco un plato de frutos secos que casi sale volando a la mesa de al lado con el desagrado que lo tirò. Porque lo tirò a la mesa. Total! Mala cara desagrado y sin más por nuestra parte desaconsejable por parte de la chica el trato. Lo dice una persona que se a dedicado a lo mismo que ella y jamás de esa manera.
Sitio excelente para comer, personal muy agradable, raciones muy generosas y puedes repetir. Sin duda un buen sitio para repostar después de una etapa del Camino.
Cominos menú del día (11€). Comimos tortilla, espaguetis, raxo y salmón. La calidad muy buena y la cantidad inmensa, además nos preguntaron si era suficiente, sino traían más. La atención tanto del camarero como de la camarera inmejorables. Sin duda repetiré la próxima vez que visite Portomarín.
La pousada y toda la gente que trabaja son espectaculares. Un paraíso, comida increible y acompañados de los mejores profesionales. Volveremos muy pronto a ese paraíso. Os queremos.
Comimos menú, la comida sale rápida y con bastante cantidad. Destaco la tortilla de patatas y el caldo gallego. El camarero muy profesional. Nos preguntaron si queríamos más.
Ante todo felicitar el restaurante por su personal, en especial a Javier. Un trato más que exquisito. Llegamos de la primera etapa desde Sarria sobre las 15: 30 horas y como entra dentro de la normalidad por las fechas y el año sacobeo esperamos unos 20 minutos hasta que nos dieron mesa. Comimos de menú porque a parte de tener seis primero y seis segundos nos parecieron fuera de lo normal, así que probamos un plato distinto cada uno de los seis amigos y todos estaban exquisitos. Las raciones generosas y por si fuera poco con opción de repetir pero hasta en los postres que no fue el caso porque estábamos saturados. Realmente indicado parar y disfrutar de estupendo lugar. Otra cosa, precio realmente económico para como está hoy en día el mercado y la temporada. De nuevo felicitar a Javier por su atención, gracias!
La comida muy buena, y el trato increíble. No sólo nos preguntaron si estaba bueno o si queríamos más, si no que además nos deleitaron con un breve resumen de la historia del pueblo. Quien no conozca la hospitalidad gallega que se pase por este sitio
Creo que es el mejor sitio para comer en Portomarín durante el camino de Santiago. El menú es barato, 10 euros, y es variado y de calidad. Destaco el salmón. Durante la tarde hay un gran ambiente de peregrinos.
Precio calidad excelente. 10€ menú mediodia y noche - ofrecen repetir en los prineros y segundos. Primeros 5 opciones (pedimos guiso de alubias y nos pusieron tanto y como quisimos) Segundos 5 opciones (costilla tierna y de nuevo tanta y como queriamos) Postre casero
Estuve en este restaurante en varias ocasiones. La última con motivo de unos pinchos con el novio de Portomarín en su boda, y dónde tomamos un aperitivo que ya parecía el almuerzo. Como siempre que fuí allí estaba todo muy rico y abundante. El servicio impecable, muy atentos y ágiles. Buena calidad de todo lo que nos sirvieron por lo que es un lugar que recomiendo a cualquiera, peregrino o no.
La comida muy bien, pero el trato se distingue mucho el de las personas que hacen una extra a los de todos los días. Quitando los extras (unos maleducados) excelente experiencia
Acabamos de comer en este restaurante. Pésima atención al cliente y caos absoluto en la gestión del servicio de mesas de comedor. Dos horas y media para una ensalada y unos spaghetti.viendo cómo se atendía al voleo. No volveré nunca. Absolutamente prescindible.
Está bien típico bar del camino de Santiago, tampoco es nada especial, pero son muy majos, pero tampoco tienen mucha variedad en sus productos, está bien, dejémoslo hay.
Menú de semana a 9.50€ sin incluir el café, típico bar de pueblo con amplia terraza, como todos los bares de Portomarín el precio es parecido, el bar en sí es pequeño, limpio y en buenas condiciones, la camarera y el jefe son atentos y no hacen esperar mucho, quizás la ensalada le falta gracia y le sobra k que sea de lechuga iceberg, sirven un buen pan
Locale piccolo ma accogliente, dispone anche di tavoli all'aperto, verso la piazza. Ottimo per pranzare per chi si ferma a Portomarin dopo una tappa del Cammino. Menù del giorno a 9,50€ (estate 2018).
Muy buena comida y sitio excelente. Te preguntan si quieres más comida en el plato. El caldo gallego está buenísimo y la tarta de Santiago muy rica también.