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Estuvimos comiendo unas Raciones. La terraza muy rústica, con taburetes, la comida riquísima, y el trato de los chicos, impresionante. Muy buena ubicación y Muy buen precio.
Lo siento, ha sido un error garrafal por mi parte, la verdad q estuvimos el 14 de septiembre, comimos pulpo y lacon y estaba buenisimo y muy bien atendido, es un local de los de siempre, para repetir, mi mas sentidas disculpas
Fuimos con ilusión a comer aqui. Nos ha defraudado. Creo que es un lugar para tomarse una tapa, pero no para ir a comer. Tiene un menú muy corto. La comida no es nada del otro mundo, un pulpo muy escasito y muy poco gustoso, lacón bien, croquetas normales, empanada calentada en el microondas y una ensalada sin ninguna gracia, unas patatas cocidas abajo y arriba lechuga tomate y bonito de lata. Lo peor de todo es que no te pongan ni un simple mantelito en la mesa y que sólo tengas esas servilletitas sencillas. Todo esto puesto en la mesa, le dijimos al camarero que queriamos compartir y le pedimos unos tenedores y nos dice que alli teniamos los palillos para comer. ¡ Que menos, que poner unos platos, con un simple mantelito de papel y sus servilletas ¡ No creo que sea mucho pedir Lo dicho local con muy poca profesionalidad en la presentación, camareros, limpieza, etc no para compartir una comida.
En un lugar idóneo, junto a la iglesia y al lado del puerto. Carta pequeña pero con producto de calidad. Pedimos Pulpo, Pimientos de Padrón y Mejillones, todo exquisito. Por poner una pega, el servicio un poco lento.
Llegamos allí por casualidad y fue una suerte. Que maravilla todo! El pulpo, los pimientos, las croquetas de cecina otro nivel. Super recomendable, los camareros muy simpáticos y de precio mejor imposible
La comida DELICIOSA, porciones abundantes, todo muy sabroso. La atención del camarero fue excelente, fue muy amable. Las instalaciones impecables y el ambiente muy lindo. Sin duda volveré! Si quieres disfrutar de la buena comida, si o si tienes que pasar por aquí!
Raciones adecuadas, el pulpo y los cachelos muy bien, el Ribeiro excente y la atención y trato del personal inmejorable. Volveré y lo recomendaré sin duda a mis amig@s.
Comimos el pulpo a feira, el raxo y las croquetas de cecina: todo bien hecho y muy bien de precio. Bebimos una botella de vino blanco Godella D. O que no conocíamos y que está excelente. Por poner una pega no tienen mucha variedad de alimentos, pero lo que hacen lo hacen de 10.
Muy bueno todo. La carta, corta, breve. Pero todo genial. Por poner una pega, el hecho de cobrar 50 céntimos por un poner hielo en un chupito, sobraría, por muy caro y escaso que esté.
Camareros amables, comida buena. Dos detalles: 1- Preguntaron que si queríamos pan. En otros sitios no preguntan, te lo ponen y lo cobran. 2- Pedimos sal y ¡nos trajeron un salero! ¡Y la sal no estaba apelmazada! Aburridos de los minisobres de sal.
Nos ha sorprendido gratamente por la amabilidad del personal, la calidad de las tapas y por el buen precio. No tienen una carta muy extensa pero lo suficiente para disfrutar de la gastronomía gallega, pulpo a feira, pimientos del padrón, raxo, etc. Hemos pedido medias raciones para probar un pocos de todo y son bastante generosas. Muy aconsejable si pasas por Foz. La terraza muy agradable y tranquila. Un 10 al camarero que nos ha atendido.
Sin reserva, por orden de llegada. El servicio increíble de amables y simpáticos. Pedimos pulpo a feira, cachelos, media empanada de zamburiñas (rica pero un poco salada y me tragué algo de tierra o de la propia concha de la zamburiña), y carne de cerdo con patatas. Muy rico todo. Calidad, cantidad y precio bastante bien.
Situado al lado de la iglesia y del puerto de Foz. Dispone de una amplia terraza exterior e interior. La atención fue rápida porque, a pesar de que nos tocó esperar porque no había sitio, en cuanto terminaron unos clientes ya nos ubicaron en la mesa. Raciones normales y a un precio adecuado, de servicio rápido y amable. No le puntúo con 5 estrellas porque no me gustó el detalle de tener que pedir unos tenedores para comer cosas que, a mi modo de ver, no se comen bien con palillos (no te dan cubierto en ninguna ocasión). Por lo demás todo muy correcto.
Bueno lo que comimos.los camareron un poco inexpertos y un poco mal educados. Tardaron bastante en servir y cuando trajeron la comida habíamos terminado practicamente ya el vino. Se les pasó traernos una ración y se lo recordamos, finalmente no nos la sirvieron. Cuando se lo dijimos al pagar la cuenta, no pidieron ni disculpas. Me pareció lo peor, que no pidieran disculpas. No repetiría.
Muy buen sitio. Hicimos un poco de fila para pillar una mesa pero valió la espera. Comida buenísima, generosa. Atención rápida y amable. Muy recomendable.
Pulpo, pimientos de padrón, lacón.jarra de ribeiro. Muy amables, la terraza con mesas compartidas muy cómoda. Volveremos seguro! No tiene mi quinta estrella porque el lacón me pareció un poco seco, como si estuviera cortado/emplatado hace un rato largo.
Es un bonito sitio para degustar los platos tipicos gallegos, lugar con mucho encanto, gran atendimiento por parte del personal. Un lugar al que volver sin duda.
El local cuida los detalles de un lugar tradicional. Puedes pedir para llevar. Su carta básica pero más que suficiente, tiene todo lo que un turista como yo pueda desear. Además se pueden pedir medias raciones para probar un poco de todo. Personal atento y todo riquísimo. A destacar su pulpo, de los mejores que he probado en Galicia. Muy recomendable, repetiré.
Tapeo bueno, pedimos mejillones (a nuestro justo le faltaban un poco de cocción), pulpo a feira que estaban muy buenos pero nos pareció la ración un poco escasa por el precio, croquetas de cecina nivel dios! Y pimientos del padrón es un mus a pedir. Restaurante muy cerca del puerto con bonitas vistA y trato agradable.
Pudimos disfrutar de unas estupendas tapas en la terraza, pulpo, pimientos y la empanada de zamburiñas que estaba de muerte. Calidad precio bien y compartimos una mesa larga con otros comensales con los que acabamos charlando amenamente. Ojo! Los días de mucha afluencia hay que apuntarse para que asignen sitio.no nos enteramos a la primera.
Típico mesón gallego que se encuentra frente al puerto de Foz, con lo que si hace bueno, puedes disfrutar de la terraza y las vistas, como fue nuestro caso. La comida, muy bien y abundante, en especial el pulpo, eso de que el pulpo, mejor en el interior, debió de pasar de moda, o puede que éste sea la excepción. Buen servicio, rápido y con camareros jóvenes y muy agradables. Y los precios, pues razonables, como siempre en Lugo.
10 visitas a este establecimiento. Las anteriores de 5 estrellas. El motivo para ir: comer pulpo. La carta es corta y se completa con pimientos, empanada, croquetas. Bordan el pulpo. Pero la última vez no. Un martes. Duro. No se descuiden. Es el plato estrella y lo saben hacer de 10.
Muy mal pedimos una jarra de vino y cuando íbamos a salir fuera para beberla nos llamó la atención el jefe de muy malas maneras que pagaríamos la jarra y encima ya lo habíamos pagado
Un sitio muy recomendable, el personal muy amable y siempre pendientes, la comida abundante y muy sabrosa y el vino de la casa lo mejor. Volveremos sin duda.
Rte acogedor y con raciones abudantes, en nuestro caso compartimos 1/2 raciones de pimientos, croquetas, oreja y lacón (mi preferido), junto con media jarrita de ribeiro. Servicio y atención increíbles.
La combinacion perfecta, muy buena comida + perfecta atencion + perfecto precio.por tanto os recomiendo passaros por alli, y dejaros aconsejar.una pena que este a casi 1000kms de mi casa.porque seria una parada casi diaria. Gracias.
Buen sitio para comer. Llegamos un domingo sobre las 2pm sin reservar y no tuvimos problema. Buen pulpo, rico chorizo a la sidra y buena empanada de zamburiñas. Recomendado 100%.
Pulpo esquisito, sin patatas de relleno, a buen precio, las orejas de cerdo muy ricas, también como el pulpo raciones copiosas, el ribeiro en su punto y un excelente servicio. Seguro que volveremos.
La atención de los camareros excelente, la comida mejor todavía, la clientela es fantástica, lo malo es dar con algún cliente maleducado, grosero y como si estuviera fuera si, ya que hace tan solo unos días un señor mientras yo la mesa interior que ocupaba para poder hablar mejor por el móvil, a mí regreso a mi mesa me encuentro a este señor junto con los compañeros que le acompañaban que iban a quitarme mi mesa. Esto es típico de una persona muy mal educada, porque no se disculpó en absoluto por querer quitarme mi mesa, cuando estos tres señores tenían su propia mesa, sino que vino hacia mí para insultarme diciéndome que yo no hacía más que moverme de mi mesa y que le estaba molestando por eso. Incluso me insultó delante de todos los presentes, preguntándome que cuando me iba del pueblo y que por qué no me iba ya. En fin, personas como ésta puede hacer que muchos clientes dejen de ir a dicha Pulpería.
La racion de pulpo muy escasa! Y no nos an puesto ni manten de papel ni nada de nada! Y luego pedimos vieras y dijo que no tenían que tenían la cocina pequeña y tenían lo justo.
En agosto estuvimos comiendo y todo perfec.este mes de febrero fuimos cenar y el Pulpo recalentado.las tapas de lacon, que no es lacon, si no jamon frio.una decepcion.el sitio guapo.pero la comida, deja que desear
Buen sitio para comer pulpo lo recomiendo, precio ajustado, quizás la única pega sea que la carta se queda corta no vendría mal un par de platos más típicos de la zona como unos calamares o unos tacos de bonito.
Pulpería pequeña y con poca mesas en el interior. En la terraza hay bancos y mesas corridas. No admiten reservas pero suele haber bastante movimiento de mesas. Carta ajustada en cuanto a posibilidades de escoger pero muy digna en lo que ofrece. Pedimos Raxo con patatas, abundante y rica. Lacón cocido con patata, oreja, pulpo y postre. Para beber dos buenas jarras de ribeiro. Precio por persona correcto. Raciones abundantes para compartir entre dos. Al principio los camareros parecían algo sosos pero fueron ganando simpatía a lo largo de la comida.
Carta corta. El raxo no nos gustó nada, tenía pinta de estar muy recalentado. Bien el pulpo. Nos dio la sensación de que es más un sitio al que ir a beber y picar algo que un lugar para ir a comer/cenar
Nos han echado, literalmente. Llevábamos sentados un rato, había sitios libres y nos han dicho que por no sé qué de su máquina registradora sólo atendían a dos comensales y no a tres - habiendo sitio de sobra- VERGONZOSO. Han dejado a un señor con 87 años sin cenar después de que llevábamos sentados casi media hora. El camarero, un chico de color, muy chulito y desagradable. He flipado en colores. Se lo comentaremos a amigos y familiares para que no pisen ese lugar.
Llegamos de paso hacia Galicia, por las opiniones que vimos y la verdad que no nos defraudo, todo muy bueno sobre todo el pulpo excelente y la atención del camarero correcta. Buena relación calidad-precio.
No admiten reserva, o no al menos en temporada alta. La comida rica aunque la carta más bien escasa y para mi gusto un poco elevada de precio. El personal muy lento y el encargado bastante desagradable, al llegar le pregunté cuánto estimaba que tardaría en haber una mesa disponible para sentarnos, a lo que su respuesta con sorna y tono faltón fue "pues no lo sé, ¿cuánto tardas tú en comer? ". En fin, gente mal educada la hay en todos lados.
Una pena que la calidad y el servicio sea tan deficiente. Demasiada fama en poco tiempo y no han sabido como gestionarla. Años atras era una de las mejores pulperías de la zona y ahora.pulpo duro, patatas y pimientos crudos.
La calidad del pulpo a bajado un montón y el servicio pésimo. Si te sientas armate de paciencia. Una hora para pedir y otra para que te sirvan. Vergonzoso, siempre que venía a Foz paraba a tomar pulpo y croquetas, creo que ha sido la última vez.
Sigue siendo una estupenda opción para picar algo en Foz. Laa raciones están muy bien y a precios moderados, y el lugar es muy bonito, típico y muy bien situado, en la plaza junto al puerto de Foz.