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Lentísimo. Tuvimos que decir todo el rato que por favor nos atendieran. Sensación de que les sobrábamos allí. Precios muy inflados. Lenguado a la plancha quemado y seco. 40 euros por cabeza de cocido. Para pedir la cuenta y poder pagar tuvimos que decírselo 3 veces. NO VOLVEREMOS.
De lo mejor de Galicia, tanto por el trato de José y familia, como del resto del personal. La calidad del producto, requiere una mención aparte, francamente espectacular, y el cabrito al horno es para ir solo comer eso, deseando volver.
La verdad fui sin estar en mi ruta y se me ofreció como algo genial, mi decepción fue brutal la comida no es tratada como merece cada producto no ofrece carta con precios algo que es culpa del cliente debemos de pedir que se nos muestre, el trato como si fuésemos patanes o tratantes, ah, relación calidad precio muy caro, esa es mi experiencia
Nos pareció carísimo. Nos dijeron el menú de palabra y a la hora de pagar llegó la sorpresa. Todo desproporcionado de precio. El rodaballo más caro de mi vida y no digamos la pieza de vieira 14 euros. Nunca se lo recomendaré a nadie. CARÍSIMO
Buena comida, cordero espectacular, pero muy caro. NO TE INFORMAN DE LOS PRECIOS, hasta que solicitas la cuenta. Y te llevas una sorpresa. DEBERIAN DAR UNA CARTA CON LOS PRECIOS
Cocina clásica, con producto de calidad. El trato por parte de Jose y Familia es de lo mejor, ir a comer a Casa Ríos es para ir a comer sin prisas y a disfrutar. Por cierto el cabrito al horno espectacular, igual que las almejas, nécoras, la centolla, y las filloas. Gracias y hasta pronto!
He vuelto a casa Rios después de un largo paréntesis. Expectante por lo leído en los comentarios y conocedor de que el local se había reformado. Me he encontrado con un local cómodo con un área exterior ajardinada con mucho gusto. La comida y el servicio en la misma línea de calidad de siempre. Un lugar para disfrutar de comida casera, muy bien elaborada con productos de kilómetro cero o de proximidad. Para mi esto es la clave del éxito. Comes como si lo estuvieras haciendo en una casa familiar o de un amigo íntimo. Tomamos sus famosos entremeses (jamón, chorizo, lomo) seguido de unas almejas y un rodaballo al horno. Todo de 10. Y un detalle, para mi muy importante: llevaba años sin pasar por allí y me trataron con la misma amabilidad de siempre. Como si hubiera estado la semana anterior. Por supuesto que repetiré muy pronto.
For all the English speakers, don't miss this absolute hidden gem! It's worth the travel out of the main city; a real cultural experience with some of the most passionate and skilled chefs/staff I have ever encountered in Spain and Europe.
Es recomendable hacer reserva para ir. No tienen menú ni código para ver la carta. Te la dicen ellos. Los precios lo sabes al final, al pagar la cuenta. No es caro. La comida es muy casera se cocina a la antigua usanza. Raciones adecuadas, con buen sabor. La atención correcta, el dueño super amable.
Se come bien, mejor reservar por si acaso ya que en alguna ocasión hay bastante rato de espera y las reservas funcionan bien. Hace algunos años los precios y la cantidad de comida se han hecho antagonistas, el primero creciendo y la segunda menguando, por ejemplo 4 raciones de cabrito se las comen 2 que tengan algo de hambre, rico pero escaso y a 26 € creo recordar que cuesta cada ración pues me parece caro. Era mejor en los tiempos de la foto colgada enfrente de la barra, con los mismos barriles y una fuente de sardinas, fijaros. Los de la zona no van a comer, fijaros en los coches, gente con coche de empresa la mayoría, y el aprovecha (mientras cuela, hace bien). Saludos. Un
Una comida de domingo que se pareció mucho a una estafa. Se trata de una casa de comidas en Xesteda, en medio de la comarca de Cerceda, en donde no hay carta y te cantan el menú, sin comentar los precios, claro. Y ahí es en dónde te equivocas; te fías de que todo vaya acorde al sitio que es (manteles y servilletas de papel), y no es cierto. Te ofrecen un salpicón casero de bogavante y lo pides. Te suena bien el cabrito, y vas a por él. Las raciones son escasas, y la cocina es regular; el cabrito, muy pasado y el bogavante muy cocido. Lo peor, de todas formas, el precio: salpicón: 36€, cabrito: 27€. También tomamos truchas fritas, ración de 8,16,80€.
Comimos un cocido de grelos buenisimo. Carta de vinos de calidad, productos de temporada y carnes de calidad. El fallo q se le puede poner es q no sabes lo que cuesta lo que pides de carta, y son un poco listillos en esto. En resumen buena cocina pero con gerencia mejorable.
El mejor lugar para comer truchas y comida casera. El servicio es rápido y súper amable, muy cercanos y familiares. Todos los platos son caseros y de buena calidad. Hay una variedad de recetas de la gastronomía gallega. Los postres buenísimos. Recomendable 100%!
El local quedó muy bien con la reforma, pero te la cobran bieeen. Restaurante sin carta. La comida estaba rica, pero pusieron raciones a precios altos y cantidades muy escasas para el precio.
Relación calidad-precio: bastante caro. Son lentísimos. Tardamos 2 horas y media en comer (4 personas) y había que perseguir a los camareros cada vez que querías algo. Y las raciones bastante escasas.
Visite este restaurante el domingo. Tome unos mejillones en escabeche casero, muy buenos los mejillones pero el escabeche no era de los mejores, aun asi se puede valorar como bien. Despues media de truchas pequeñas, buenas tambien y como plato principal cabrito al horno. El cabrito era lechal y estaba buenisimo, aunque el precio me parece desorbitado. En definitiva buena calidad, pero muy mala relacion calidad precio. Y otros detalles que no me gustan son el vino tinto ribeiro de barril, aparte de ser a 3,50 la taza que aunque grande me sigue pareciendo tambien desorbitado, creo que esta prohibido. Y que no tienen carta, te cantan lo que hay. Sin enterarte en ningun momento de lo que vas a pagar. La atencion y el servicio muy muy buena. Pero no puedo recomendarlo. Tiene que ponerse al dia. En todo. No solo en lo que interesa.
Lentísimo, no se puede tener las mesas llenas sin personal que las atienda. Para la cantidad que ponen de comida, carisimo, 27 euros por una ración corta de cabrito aunque esté bueno es un atraco, ese es el precio de una paletilla completa. No lo recomiendo.
Llegamos, preguntamos y solo preguntamos si habia alguna mesa libre para 3 Personas. El dueño, en lugar de simplemente contestarnos que no tenia sitio, y con eso nos dabamos por satisfechos, lo que hizo fue hablarnos en muy mal tono. Echandonos fuera de malas formas, y como se nos ocurria ir por alli, sin haber llamado antes por Telefono.
Una vergüenza, pedimos un cocido, y nos trajo toda la grasa k había en la olla, solo un pedazo de carne para compartir, los chorizos muy rancios, y el servicio muy lento, entre plato y plato casi 15 minutos, si no quieren que comas de menú k no lo pongan, teníamos k haber entrado de corbata, creo k tratan mejor a la gente, un cero patatero
Lamentablemente, muy buena atención mientras no pedimos él menú, aparte de caro poca cantidad y mal preparado, al final nos invitaron a dejar la mesa Casi sin tomar café hacia falta para las cartas
Raciones escasas comparando años anteriores" en la carta precio elevado trato desigual dependiendo de cliente que ellos vean, si con más poder adquisisitivo? No Recomendable
Después de treinta años o mas como cliente sintiéndolo mucho, tengo que decir ultimamente que las raciones son escasas con precio alto, y el trato para clientes no es el mismo me parece que es inadmisible? Pero el dinero que cobran si es lo mismo, no recomendable
Difícil de llegar a él, pero cuando hayas comido allí, te olvidarás de eso. Lo mejor del producto local, de tierra y mar, cocinado sin florituras, pero muy muy bueno, para aquellos a los que le gusta ponerse las botas. Eso sí. No es barato.
De lo mejor de Galicia, tanto por el trato de José y familia, como del resto del personal. La calidad del producto, requiere una mención aparte, francamente espectacular, y el cabrito al horno, para ir y solo comer eso, deseando volver.
Hacen bien cuatro cosas y te atienden bien pero creo que se han subido a la PARRA en lo que a precios se refiere. El cocido, cabrito asado, chorizos caseros, chicharrones, truchas, tabla con jamón y embutidos, vinos del RIBEIRO, enfin, bien pero repito que me parece, he ido muchas veces, un poco subido de precio.
Un desastre, fuimos a comer el menú del día, nos pusieron una ridiculez de ensalada, dos rodajitas de tomate contadas y una hoja de lechuga, y de segundo una mini chuleta de cerdo servida en un plato de postre, no sé si lo que que pretenden es hacer una selección de sus comensales, pero por 12 euros, el más caro de todos donde hemos estado en toda la autonomía gallega, es una vergüenza un menú tan cutre, lo que consiguieron es que ninguno recomendaremos este lugar nunca