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Excelente atención, agradable local y desayunos excelentes con parking cómodo. De una semana por Vigo desayunamos aquí cuatro días. Precios razonables.
Tanto el dueño como los camareros, una gente excelente, la comida de alta calidad, tienes varios menús a diferentes precios y los postres caseros, voy habitualmente. Muy recomendable
Excelente restaurante tipo chill out, con una terraza espléndida y un profesional muy refinado, hacía mucho tiempo que no me sentía tan respetado en un restaurante, el precio excelente en relación con la calidad.volveremos seguro.
Hemos comido allí ya un par de veces, y el servicio es bueno, muy cercano. El interior es algo oscuro y quizás un poco bajo, por lo que si el tiempo lo permite mi recomendación es comer en la terraza cubierta. La comida es muy buena y el precio más que razonable aunque la forma en la que está estructurada el menú es algo caótica, por no decir que aún a día de hoy no me quedó claro si pido un plato único, si forma parte de lo que ellos llaman el menú ejecutivo o dentro del menú normal, vaya, un poco Cristo, pero aún así, el restaurante bien merece la visita.
Merece la pena pararse un rato a disfrutar y olvidarse un poco de todo. Desayunos, comidas, terraceo y cenas. Cualquier momento del día, en este lugar, ¡es el adecuado!
Sin palabras, la comida que he comido en este sitio es una de las mejores que he probado en mucho tiempo. Los platos muy bien presentados, con mucha molestia a hacer diversas variaciones de platos, ingredientes frescos (sobre todo por las ensaladas), la calidad es muy buena a precio asequible. El dueño es muy agradable, se molesta mucho en explicarlo todo con detalles y tiene un trato excelente con el cliente. El ambiente es tranquilo y cómodo. Sin duda volvería y recomendaría.
Lo primero destacar el trato exquisito del personal, una atención muy buena, siempre atentos. La comida muy bien relación calidad precio, cantidad suficiente y muy rica. Comimos los cuatro muy bien. Un lugar acogedor, con muy buen ambiente donde volverémos
No lo recomiendo, no tienen carta, el camarero te dice lo que hay de menú sin tiempo a tomar una decisión, poca cantidad, no es lo que realmente te dice el camarero. Tardaron más de media hora en recoger los platos, ya no pedimos ni los postes y café y nos los cobraron igual. El menú de los niños, que comieron mucho menos, nos cobraron como adulto. Se notaba que no había cordinacion entre cocina y camareros. Nos traen la cuenta y ni ticket dejan, te los dice de boca.
Un sitio apartado y muy detallista, los camareros son muy atentos, tanto para comer de diario como para una comida o cena puntual. Un producto de muy buena calidad y con una atención estupenda
Es una cafetería elegante, tiene apartamento, una terraza muy amplia y cómoda, el interior es muy acogedor y el dueño, que fue el que nos atendió, super atento, recomendable.
Simplemente te sorprenderá encontrar un local con varios ambientes, buena terraza. Muy buena atención, buen café y ricas tostadas con aceite y tomate de verdad y acompañado de buena música. Gracias
No le pongo menos estrellas porque no se puede. El trato del propietario es pésimo. Me ha echado de la mesa en dos ocasiones para montarla para el servicio sin preguntar si voy a comer o no. Cabe decir que si buscan tomar algo con espectáculo incluido es el lugar ideal puesto a su personalidad exuberante y mala gestión por su parte, es todo un show.
Por otra parte la comida tampoco es que sea de excelente calidad aunque se empeñe el decir que lo es. He visto piedras más frescas.
Le doy cinco estrellas porque es dificilisimo encontrar un propietario que te trate con tal profesionalidad. Pueden discutirse los aspectos que se quieran, pero el gusto por hacer que tu estancia en el local sea agradable; comas, tomes una copa o simplemente un café, es excepcional. Enhorabuena. Yo disfruto cada vez que voy porque me transmite algo que rara vez percibo: pasión por su trabajo.
No he comido nunca en el restaurante, la verdad es que solo he ido a tomar café varias veces, y puedo afirmar que la atención que he recibido sobre todo del propietario es sobresaliente, nunca he visto esmerarse a nadie así para que el cliente salga siempre satisfecho. De 10+
La terraza, totalmente "cerrada" con toldos, es correcta, el interior es muy oscuro y "desordenado" en lo que a distribución se refiere, la atención de los camareros, es muy buena si el cliente es habitual, si como yo, es la primera vez que te ven, pues.tienes que llamarles media docena de veces para que te cobren y la verdad, si quieren tener clientes habituales, alguna vez tiene que ser la primera vez que vas, digo yo! El pincho, nada apetecible
Solo nos quedamos a tomar como aperitivo el pulpo que por cierto estaba excelente! La atención muy correcta aunque un poco lenta. Volveremos otro día a probar su comida.
Caótico, después de tener la mesa reservada para las 14h, nos atendieron a cuenta gotas y terminamos d comer a las 18h. Por su puesto tuvimos que escoger lo que ya no querían lis demás, por que al ser tan tarde ya no les quedaba casi nada.
Quedé decepcionado, las reseñas me indicaban buena calidad. A pesar de que comimos barato, la calidad de la comida no era buena. Platos muy simples que se nos vendieron como delicatesen. Todo muy justo en cuanto a calidad y cantidad. Tardamos 4 horas en comer.
Local con 3 partes muy bien distinguidas. Tenemos un comedor ideal para degustar su menú del día con gran calidad de productos, también tenemos otra zona muy tranquila con unos sillones y unas mesas altas ideales para juntarse con amigos y disfrutar de una buena copa rodeado de un ambiente tranquilo y acogedor. Y por último tenemos una gran terraza cubierta y cerrada ideal para el verano y bastante soleada en invierno.
Local bonito y moderno. Con parking propio gratuito. Menú del día por 8€, muy variado tanto los primeros platos (tortilla, ensaladilla, ensalada, rulo de cabra, capresse.) como en los segundos (carnes, pescados, arroz.) Postres caseros. No son raciones enormes pero son suficientes. Comida rica y muy bien presentada. Trato inmejorable.
Un sitio que nada tiene que ver la fachada y su situación con lo que te encuentras al entrar. Está bastante apartado de todo pero cuando entras por primera vez la sorpresa es mayúscula. Un restaurante tipo Lounge en el que se sirve un menú del día increíble, en mi ocasión puede degustar un arroz con bogavante como digo de menú del día. No dejéis de probar la tortilla, es espectacular, tanto por su tamaño (en altura) como por su sabor, te transportará a la tortilla de tu abuel@. Sin duda lo recomiendo.
Muy atentos y amables, situado muy próximo al campus universitario, con bastante aparcamiento (unas 18 plazas). La entrada es un poco estrecha y no pasan dos vehículos en direcciones opuestas, nada que no se arregle con coordinarse un mínimo con un poco de educación. La terraza es bastante amplia. Estuvimos allí en un día con bastante viento y el toldo aguantó muy bien. Los postes caseros están muy bien y los precios son más que razonables.