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Hemos reservado para las 14,30 y hemos llegado puntuales. Nos sirvieron las bebidas rápido, tuvimos que insistir para que nos tomarán la comanda. Después de una hora, seguimos esperando
Había oído hablar muy bien de este sitio y hace un par de semanas hice un reserva para dos a mediodía para conocerlo y cuando llegamos allí entramos en el local que me gustó bastante y nos acompañaron al local de al lado (que estaba vacío) y nos sentaron en una mesa pegada a una barra vacía con vistas a una sillas encadenadas y a una vieja cocina en desuso. Le pedimos si podían sentarnos en otra mesa, ya que estaban todas vacías y nos dijeron que no. Nos dijeron que estaban reservadas y les dije que yo tb había reservado y que no me sentía a gusto con la mesa tan mala que nos habían asignado pegada a una antigua barra y rodeada de trastos y me dijeron que eso es lo que había, sin ninguna otra opción así que nos fuimos. Me dio pena no poder probarlo pero el trato a un cliente nuevo me pareció horroroso.
La comida está bien, pero los vinos son bastante caros.mención especial para la cerveza, ¡la primera es gratis si tu barco está registrado en el puerto!
Con amigos locales un privilegio Sin, igualmente te sugeriran y te acompañaran Las sardinas (enormes y sabrosas), calamares y ensalada de tomate lo más. Al lado de un parque para que los peques liberen Energie Relativamente fácil aparcar aubque sea caminando 10 min Precio acorde con la calidad Cantidad al estilo Galicia Muy familiar
Muy bueno! TODO, cocina muy bien elaborada y sabrosa, calidad Genial, y no demasiado caro, para los manjares que tienen, croquetas, Riquísimas, Camarones, excepcionales (20€), Zamburiñas, a la plancha, Puff, buenísimas, al natural, solo sal y un poquito de aceite, sin salsas ni otros ingredientes que ensombrezcan la calidad del producto, de las mejores que he probado, el Entrecot delicioso, 100%, recomendable, los camareros amables, super pendientes y atentos.
Genial la atención del personal, la terraza estupenda, con las mesas muy separadas (Covid) Lo mejor la calidad de la comida y su precio. Venimos mucho y seguiremos viniendo.
Este es un restaurante que es una solución para estos tiempos de pandemia, terraza para comer, distancia de seguridad, servicio rápido y comida tradicional. El pero está en la comida que no tiene ninguna referencia a un restaurante que te puede sorprender. Se debería recuperar otra vez el concepto de casa de comidas, para definir lugares como este.
Fui a tomar un aperitivo, no nos ofrecieron tapas, ni ningún tipo de pincho. El trato del personal poco amable, siendo el único encanto las vistas sobre el puerto deportivo de Sada.
Rápido y agradable, nada más tomamos dos raciones, pero merecen muy mucho la pena, los calamares de la ría IMPRESIONANTES, el salpicón vale lo que cuesta. Para repetir ya!
Buena ubicación, en el paseo marítimo de Sada, con una terraza muy amplia, ideal para picoteo, muy rico todo, los mejillones, pimientos de padrón calamares, etc.y una tarta de plátano muy buena.
En la zona del Puerto de Sada. Excelente servicio, atentos, rápidos y amables. Buena terraza con vistas al puerto. Carta completa con platos típicamente gallegos, así como los vinos.
Nosotros probamos el pulpo una ración con patatas, en su punto y muy rico. Las croquetas de la casa caseras de verdad y también ricas y el raxo de cerdo bueno. Raciones generosas y bien de precio.
Buenos productos y buena cocina. De precio está correcto. El sitio es precioso. Si no le pongo más nota es por un camarero, que conmigo se portó muy borde y desagradable desde el primer momento. Puedo entender que con el Coronavirus toda la hostelería está muy castigada, y que eso estrese a los camareros, cocineros. Pero no puede ser que los clientes paguemos ese estrés. Además de borde, tardó prácticamente una hora en traernos la comida. Incluso clientes que vinieron después fueron atendidos con más premura. Si no fuera por este camarero, daría mucha más puntuación a este lugar. Me gustaría que todo el servicio fuera tan amable como otra camarera que se disculpó en nombre de su compañero.
Fantásticas vistas desde la terraza de la Marina de Sada. Estupendas las sardinas, los berberechos, los mejillones NES y las navajas. Muy bien de precio.
Muy buen sitio para tapear. Raciones de tamaño adecuado, con una buena y sencilla elaboración de toda la vida. Trato familiar, nada exquisito, ideal si te quieres sentir a gusto y nada agobiado. Reseñables las raciones de chipirones de la ría y unos mejillones de Lorbé, sencillamente exquisitos. En el debe, de lo probado, el pulpo que es algo mejorable en el punto de cocción. Un notable bien ganado
En temporada de sardina este es el lugar al que hay que acudir en Sada. Cocina variada, raciones y precios moderados. Bellas vistas desde sus terrazas, local muy animado en el verano.