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El jueves nada más abrir entre en el super y lo primero que vi fue al pescadero encarandose y amenazndo a un reponedor. No es la primera vez que veo la agresividad de ese pescadero. Es un maleducad, a mi tio una vez le llamo hijo de ya sabeis. Todos los empleados de ese super son majisimos. No se como podeis tener a ese violento en plantilla. Me dan ganas directamente de ponerle una denuncia a ese snvergüenza y lo haré teniendo en cuenta que esta empresa ( empezando por las encargadas) no le llaman la atencion. No se puede ir a trabajar con ese ambiente violento. Y desde luego ni yo ni mis conocidos volverán a ese gadis. No es normal sentirse amenazado cuando vas a comprar.
Personal sucio desaliñado cajeras desganadas personal a voces con sus asuntos, cajas en la frutería por el suelo, Medio melón ya con bastante mal aspecto casi 4 euros no muy grande Mercadona buen aspecto buen sabor más peso sobre 2.40 Y la gente y la tienda impoluta
Los alimentos han subido de precio y la calidad ha bajado. Agradecería que cuando compre carne que no me intenten colar los recortes que tienen de a saber cuando, que ni color tienen ya.
Mi supermercado de confianza. Gente maravillosa y trabajadora día a día soportando a todo tipo de clientes que, en general, somos cada día más exigentes. Siempre encuentras calidad, buena atención y todo ordenado. Secciones, jefes/as, encargadas/os, cajeras/os, reponedoras/es, etc. Con Gadis nuestro día a día es más fácil y mejor.
No puedo entender que se permita a una encarga Beatriz tratar de manera humillante a sus compañeros y de malas formas. Pero me ha tocado a mí verlo y no puedo dejarlo pasar. Hacia los clientes es seca cortante y a la vez borde. Corta enseguida cualquier ánimo de alegría en la tienda.seguramente los trabajadores no pueden quejarse por ser su puesto de trabajo. Pero yo como cliente no puedo dejar que esta persona actúe impunemente bajo un poder de "encargada". Ella es feliz en una tienda triste.
Hoy he visto como una señora muy mayor, que estaba sola y desorientada, pedía cambio a una cajera que le acaba de cobrar y esta le respondía: 'No, que ya cerré la caja' y se iba entre risas. Serán muy buenos los productos, pero con personas que tratan así a nuestros mayores, no se va a ningún lado.
Siempre que entro aunque sea para comprar 2 cosas tardo 30 min, no es nada intuitivo el como está colocado todo en general, los trabajadores son simpáticos. Lo mejor el tío que pide en la puerta, tiene todo controlado y ayuda a todo el mundo, un crack.
Mala experiencia en carnicería, carnicero mal educado. No es la primera vez que pone mala cara y se queja a si mismo por filetear un pollo. Contesta de malos modos al cliente. Lo demás bien, pescadería, charcutería amables las señoras y cajeras en general bien. Cambiaré de super Gadis, iré a otro Gadis. Seguro.
Compro en Gadis porque es sin duda el super que tiene mas productos de cercania. Por lo tanto lo que nos gastamos, contribuye a aportar riqueza a nuestra provincia y a Galicia. Y con un personal muy atento
Tengo un problema, la charcutera es la carnicera y a la vez es la pescadera (no siempre me supongo por que a veces hay otras personas). No me importa que tenga multifunciones, lo que me molesta es que no sabe cortar un filete y que si destroza el pescado al abrirlo (y esto con un curso se soluciona). Lo otro que me paso es que el hummus que compre 14/04/21 y el guacamole que compre 15/04/21 estaban mal precintado, con lo cual el guacamole lo tuve que tirar ya que sebia ácido. (si podria ir a reclamar pero seamos sinceros nadie o casi nadie va).
Me es practico porque me queda al lado de casa, es pequeñito pero tiene de todo, escasa variedad en fiambre pero sificiente el pecado es muy fresco, la carne también es de primera, la verdad es que tiene muy buen producto y calidad y la frutera y las cajeras son muy atentas
Varias cajeras son maleducadas. Además de poner malas caras, y cuchichear por las esquinas, no conocen las palabras "hola", "gracias" y "hasta luego", ni responden a ellas. La más desagradable es la mujer venezolana. La última vez que me atendió esta señora, mientras pasaba por el escaner los productos que yo depositaba en la cinta, cogió y escondió una tableta de chocolate que yo pretendía comprar y continuó pasando productos. Tuve que llamarle la atención y decirle: <esa tableta de chocolate es para mi>. Y hace unos días, me dijo que tenía que echarme gel desinfectante en las manos si quería entrar. En las puertas de entrada, los carteles especifican que la tienda dispone de gel, no que sea obligatorio su uso. No son modos de comportarse. Y menos, de atender a los clientes. Si lees ésto, gracias por tu atención.