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En pleno centro de Alcalá, justo enfrente de la fachada de la Universidad, muy buena comida con un ambiente agradable y los chicos que nos atendieron, con muchas ganas de agradar.
Los camareros son unos soles, te atienden genial, da gusto entrar y que te sirvan tan bien. Si eres de leer libros mientras tomas un café, este es tú sitios, posee una biblioteca con cientos de libros a elegir.
Maravilloso; ambiente tranquilo, bonito, muy buena atención y comida deliciosa. Según nos dijeron presentan conciertos los fines de semana, iremos sin duda.
Me parecen unos listos, pedimos 2 vermuts y pusieron 2 tapas, pedi un terce vermút y me lo pusieron pero sin tapa, al rato tuve que pedir la tapa, por que no llegaba y me la pusiron, no me gusta pensar mal, estamos en la comunidad de Madrid y a qui se pone tapa por consumición.
Fuimos por primera vez y nos sorprendió de forma muy positiva. El local bonito y original, la atención muy buena y las raciones muy ricas. Muy recomendable, volveremos.
El local es muy original, amplio y con buena luz, con todo tipo de mesas y sillas para sentarte. Está situado en pleno centro de Alcalá de Henares pero, a pesar de ello, tiene precios razonables y el ambiente es tranquilo. La comida estaba muy buena y el servicio ha sido muy rápido. La atención por parte del personal ha sido impecable. Había 2 camareras encantadoras pero, sobre todo, la chica morena con gafas ha sido un amor. Ojalá hubiera más camareros así. Volveré sin ninguna duda.
PD: las fotos corresponden a la hamburguesa de buey y a media ración de patatas bravas.
Nos atendió AIDA este domingo en la terraza, tomamos un café y nos apetecía algo dulce, pero en ese momento ya no les quedaba nada para tomar con el café y esta chica tan amable nos trajo un par de cruasanes que había llevado ella a sus compañeros porque hacía tres días que trabajaba allí. Encantadora y simpática, no creo que quede gente así en la restauración, le diría a su jefe que le renueve el contrato y le suba el sueldo y que por favor, tenga algo dulce los domingos por la tarde para tomar con un cafetito. La terraza y el local magníficos, tanto en situación como en decoración.
Carta excesivamente escueta, platos insulsos, raciones pequeñas y precios muy muy inflados. No merece la pena ni siquiera con el descuento de El Tenedor. Abuso máximo cuando por una tortilla de 10 cm de diámetro te cobran 16€. La atención fue muy buena, eso si. La chica que nos atendió fue super amable y servicial. Pero por lo demás, salimos muy descontentos del restaurante.
8,50 por solo dos tacos que estaban medio vacíos y 15 por unos nachos más bien pequeños en relación al precio. Habrá gente que pague ese dinero por tal cantidad de comida, pero para mí es la única y última vez que estaré en este establecimiento. Además, 2,90 la cerveza y nada de tapas
Otro recordatorio de que la media de las valoraciones no siempre refleja la calidad de un restaurante. En este caso hemos compartido una burrata riquísima y luego he tomado un costillar glorioso. Los camareros no son particularmente efusivos, pero el servicio es rápido. Local limpio y con buen ambiente.