Bar restaurante El Rincón

Vinimos después de una amarga experiencia en otro bar, y qué diferencia. Trato excelente y comida (bueno probamos los postres solo) pero todo casero y riquísimo. Repetimos seguro!

Hemos ido en varias ocasiones y con mucha pena no volveremos. Las últimas experiencias no fueron buenas. El trato no fue agradable, no es obligación que pongan tapa pero cuando ves que ponen en otras mesas y en la nuestra no, la pedimos en la segunda ronda visto que tampoco nos la ponían y nos la pusieron de malas maneras. Otro día fuimos y había un par de mesas fuera, hacía buena tarde. Pedimos dentro si nos podían sacar una mesa y la mirada de la camarera fue de asco. Le pedí disculpas por si le había molestado y nos fuimos. Me da mucha pena poner esta puntuación porque la chica rubia que siempre estaba es puro amor, pero el trato últimamente ha sido bastante incómodo y no por parte de ella. En cuanto a comida, nada del otro mundo. Raciones bien de tamaño y precio pero lo normal que puedes encontrar por el barrio. La gracia es la ubicación y la terraza.

Deberían mejorar el trato al cliente,después de acomodarnos uno de los camareros,nos tuvo un buen rato esperando para tomar nota.
Las tiras de pollo con sabor a calamar,es un fallo muy grande,para otra ocasión usar freidoras diferentes.
Las bravas estaban buenas.

Servicio deficiente por parte del camarero. Estuvimos esperando más de una hora para que nos sirvieran el primer plato y ni siquiera trajeron pan para ir picando algo. Estaba perdido, tardaba en servir y sus formas no fueron las más correctas en algún momento. Gracias a su compañera se enmendó un poco el servicio que nos prestaron. Teníamos reserva a las 14.30h y el postre lo sirvieron a las 17.30. Por lo menos la comida estaba buena.