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El lugar es clásico y agradable, aunque un poco descuidado. El personal amable pero el café desastroso (y mira que eso es difícil en Madrid). Me recomendaron una tarta, presuntamente de manzana, incomible y de aspecto absurdo, aún cuando en la vitrina había otras de tipo normal. Mi culpa por aceptar la recomendación (interpreto que para salir del producto de una vez). Para mantener los recuerdos que tenía del local, no creo que vuelva.
Un local que conserva el encanto de los antiguos cafés, de finales del XIX. Me gustaron las mesas de mármol y la decoración mural. Es acogedor e intimista. Lo recomiendo
Buen menú del día: ajustada relación calidad-precio (13 euros). La pizza es pequeña, pero deliciosa. ¡¡Y el mejor tiramisú que he probado en mi vida! El camarero muy amable y atento. La pequeña terraza, coqueta y tranquila, mejor por la tarde-noche que a mediodía, porque da el sol. Muy recomendable.
Precios desorbitados para la baja calidad de la comida, cuidado con pedir jarra de cerveza a 6,5€. Una pizzería no debería poner pizzas congeladas. Carta escueta además. No pensamos volver.
Hemos cenado muy bien aunque como pisseria italiana le ha faltado un poco mas de horno a la pizza para quemar los bordes. Precio correcto. Calidad correcta. Servicio muy correcto. Recomendable!
La terraza muy agradable, pero Le pongo solo 1 estrella por la camarera porque no ha podido ser más desagradable, antipática, grosera. Creo que para estar de cara al público hay que tener más empatia
Buen local para hacer un alto en una visita a Madrid, tiene dos plantas. En la parte de arriba se puede consumir desayunos, algo para picar y beber. La planta de abajo es una pizzería. La planta de arriba no es muy grande pero es un sitio con buen ambiente y buena música se está muy cómodo. El servicio fue muy bueno y no hubo problemas para hacer pequeños cambios a la hora de pedir. Los precios están acordes a la zona donde está situado. A la pizzería no llegamos a bajar.
Cafés y té (2,80€) postres (5,80€) más caros que en cualquier sitio alrededor. Un Sitio excesivamente caro para lo que es el servicio, el producto y el lugar. Never again.
Es una cafetería con un toque especial. Preparan unos mojitos riquísimos y una tarta de zanahoria de diez. Muy recomendable. Nosotros, aunque de forma esporádica, llevamos llendo hace muchos años. Esperando que sigan ahí por muchos años más
Desde hace ya algún tiempo los camareros muy desagradables, no salen a atender aunque no tengan gente, ayer sin ir más lejos me quitaron una silla cuando dije que no se la llevará que había quedado con una amiga. Mal muy desagradables. Con lo bonito queservicio
Terraza: sí, pequeña pero muy agradable. Ambiente: tranquilo e informal. Servicio: amable y atento Opciones sin gluten: no ️ No es necesario reservar pero si queréis en la terraza sí ️
Recomendaciones: provolone y pizza zucchini Precio/persona: 18'5 (entrante, pizza y bebida)
Valoración final: muy buenas sensaciones. La comida nos gustó mucho además tenía muy buen sabor.
Nos hemos sentado dentro y hemos pedido para que nos avisaran si se queda libre un a mesa fuera y nos ha dicho que muy difícil porque la gente se sienta según la ven, de toda la vida si se sienta alguien en una mesa reservada el camarero pide sisculpas y les levanta. Muy mal, la conumision te la dejan encima de la mesa sin servir a cada uno. Muy mala la atención para estar en la zona que está.
Tienen poca variedad para picar algo. Es un sitio bonito de visitar.
Lo único decepcionante y mal es que hubo un incidente con unos clientes que tenían su móvil la música a tope, molestando a otros clientes que no podían mantener su conversación normal.
Entre ellos, yo, que les llamé la atención se encararon éstas dos chicas y la camarera no hizo absolutamente nada por solucionar el incidente.
La camarera pasó olímpicamente a lo que otros clientes la recriminaron su actitud y contestó la camarera que no se había enterado a pesar de estar sentadas cerca de la barra éstas dos maleducadas.
Nada recomendable por una de las camareras que resultó bastante MALEDUCADA y DESAGRADABLE. Pedimos 2 cervezas y nos miró de mala manera, haciendo gestos realmente mezquinos. Tras ese desaire entré y le dije que no nos sirviera NADA. Le comenté que diría a toda mi gente que no fueran al lugar. La razón seguro que fue porque preferiría a extranjeros que consumieran mucho más y no 2 cervezas. No volveré y eso que he ido durante años. No debería trabajar más esa camarera ni ahí ni en ningún sitio.
Un lugar fantástico para tomar café ️ y unas tostadas con tomate en plena plaza de Isabel II de Madrid. El restaurante está súper bien decorado y te hace recordar el Madrid de antaño. Las camareras son muy educadas y el servicio en mesa es espectacular. Muy barato para ser el centro de la capital.
Muy bonito, muy cuidado, había mucha gente en la terraza y tardaron un poco en atendernos dentro, pero muy amables, el café muy rico, y la tarta de zanahoria no estaba mal.
Siempre correcto.buen ambiente en el saloncito superior.buenos cockteles.buen precio.mejor ubicacion.lugar al que siempre vuelvo y donde siempre encuentro amena conversacion con desconocidos.
Estupendo, reservamos en terraza y como hacía mucho frio y sabían que íbamos con niños nos llamaron para cambiarnos dentro, las pizzas riquísimas, nos invitaron a chupito, super bien de precio, y los camareros super amables y atentos. Muchísimas gracias!
Un servicio pésimo a un precio de lujo. No es normal que te retiren el café, platos, y te dejen la mesa vacía mientras estás hablando. Les falta modales o bajar el precio. Echarte de la mesa cuando está medio vacío parece un insulto.
El lugar es muy acogedor y la atención del camarero (Javi) es muy buena es rápido y muy amable y eso se agradece del personal que sea así, y bueno yo pedí una pizza Picantona y estuvo muy delicioso así que lo recomiendo.
Un sitio estupendo, con gintonic buenísimos y panchitos y gominolas premium. Cómo hablábamos muy alto algunas clientas han optado por irse. María se ha despedido a lo grande, muy contenta. Lo único negativo que he visto a un usuario que ha tirado una servilleta usada al suelo, así no frenamos lo del cambio climático, joer!
Idóneo lugar para tomarte algo tranquilamente y disfrutar de ambiente y decoración castiza a la par que bohemia. Emblemática cafetería de la capital. Es pequeñito, no apto para personas más altas de 1,90cm
Mas de media hora esperando para dos cafes que nunca llegaron. Nos dicen que no sirven arriba pero como favor nos iban a servir, pues no. No vuelvo mas.
Un sitio que tiene mucho encanto, tanto em terraza como en el interior. La pizza y la comida en general que probamos no era destacable, pero está bien. También entiendo que al ir a última hora de la noche ya sería de lo último que prepararían. El trato muy bueno, y el ambiente genital. El precio es el que puedes esperar en un restaurante en Ópera.
La comida estaba bien. Lo único malo fue el mal rato que tuvimos que pesar, mi amiga, mi esposo y yo al presenciar como una de las empleadas maltrataba e humillaba indiscriminadamente a otro mesonero que también estaba trabajando allí. Cuando yo y mi amiga le reclamamos a la persona maltratadora, es decir la otra mesonera que parecía ser la encargada nos volteo los ojos y mando al mesonero maltratado a atendernos en vez de acercarse ella, dar la cara y disculparse. Esto ocurrió en la parte de abajo la pizzeria. Cuándo se trabaja en hostelería se entiende que hay mayor tensión y presión debido a la afluencia de personas que están ahí esperando ser atendidas, algunas personas que se dedican a eso lo hacer por necesidad y no precisamente por vocación. Los ánimos pueden caldearse de vez en en cuando y es normal la tensión que pueda haber entre compañeros. Lo que no es admisible es la falta de respeto, maltrato y mala educación de parte de nadie, es un llamado a las personas a que denuncien esos comportamientos inapropiados si es compañero o jefe el MOBBING es denunciable y si lo ves y no haces nada también eres cómplice. De verdad que no volveré a pisar ese lugar mientras sigan maltratando a su personal.
El menú del día, aunque barato (9,50€), es un poco escaso, y de calidad bastante normalita. La atención de la camarera que nos coincidió fue bastante desagradable, aunque la tarta de zanahoria, aunque no fuera mucha cantidad, muy rica.
Arrived early for the tour meeting at plaza de isabel II, we went into this cafe. Cosy atmosphere. Reasonable price. Loved their toilet upstairs, looks like it only fits small people.
Un lugar muy acogedor, la tarta de zanahoria de las mejores que he comido, ideal para tener una buena charla y pasar un rato agradable, pero no es tan agradable cuando el servicio es deficiente, se siente la falta de comunicación entre las camareras, tienen cara de amagada, el trato no es empatico, están apuradas para que la consumición sea rápida, no saben mimar al cliente, es lamentable porque él sitio me ha gustado mucho pero no saben tratar, no sonríen, mucha seriedad como si estuvieran obligadas a trabajar, es una verdadera lástima, porque el lugar esta bastante bien
Po content! Nous étions 5, la serveuse à été exécrable car nous lui avions pris toutes ces chaises! Réflexion et regard très désagréable. Et en plus c'est cher!
Son unos jetas. Te quitan las sillas de la terraza, aunque estes esperando a mas gente. El servicio lento, pesado, hacen esperar y no tienen nada de agradables. Para pegar el sablazo al turista. Mejor buscar otro sitio
Fui por recomendación, la verdad solo consumi un café y probar la tarta de zanahoria, que me habían recomendado, la atención muy bien, el café y la tarta muy normalito. Solo como objeción, no pueden no tener datafono para pagar con tarjeta, a estas alturas una verguever.
Had coffee here one morning. Noticed that the upstairs seating was nice. Went to bring our coffees up but a woman working there snapped at us that the area was closed in a very rude way.
Later on we noticed them talking rudely to almost every other customer.
Cafetería donde tomar tartas caseras de buen tamaño en pleno centro de Madrid. Es un sitio donde escapar del bullicio del centro ya que aunque es de reducido tamaño si es verdad que es muy acogedor. Varían las tartas dependiendo del día aunque suelen tener la de zanahoria y chocolate que ambas están increíbles (quizás la de chocolate un poco empalagosa si no te gusta mucho el chocolate)
Aunque la carta no varía nunca, es uno de los restaurantes donde mejor preparan los espaguetis a la la carbonara, deliciosos y jugosos. Sus postres son muy recomendables, tanto la tarta de queso con maracuyá como la de zanahoria están muy ricas. La atención a veces es un poco lenta pues sirven platos a la parte de arriba de el café El Real.
El Café del Real se lleva las 5 estrellas por el té. Es difícil dar en Madrid con un sitio tan acogedor y con tan buenos precios en el que además puedas encontrar buen té.
Las tostas son sencillas pero perfectas para acompañar un Ribera, la música es agradable y el trato excelente.
Tiempo atrás este café se había vuelto bastante incómodo, ya que el trato se volvió tosco y a todas horas se ponía música de pachangueo a todo volumen que lo hacía parecer más uno de los bares de copas de la zona y no el café con solera que es. Por suerte, se ha recupero su esencia.
Local bonito y con muuuucho encanto, de los que da gusto tomarse un té o un café, incluso aunque el café sea sólo "normalito". Tartas buenas pero a precio de Madrid Centro
Las dos plantas de cafetería son perfectas para pasar el rato y charlar en un ambiente acogedor pero estimulante, ya prefieras un café, una cerveza o una copa. Es un poco caro, pero se sobrentiende por la zona y la antigüedad del local.