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Reserve online con 15 días de antelación en la terraza. Me confirmaron la reserva y ponía lógicamente que tenía calefacción. He estado allí tres veces. Cuando llegamos, la terraza estaba cerrada, nos dirigimos al local. El camarero con el abrigo puesto nos dice que el aunque era un día festivo (6 diciembre) la terraza no estaba abierta Reservé allí para comer en la terraza no en el local. Al ser festivo y centro Madrid nos tuvimos que quedar por la dificultad de encontrar un restaurante para comer. No tenían calefacción, nos quejamos del frío, el camarero dijo que pondría la estufa pero se lo tuvimos que repetir en tres ocasiones, cuando finalmente la encendió se apagó rápidamente y aunque lo dijimos no la encendió de nuevo. Comimos con abrigo. La comida regular nada que ver con las tres veces anteriores Experiencia desagradable, nunca volveré y no lo recomiendo
Un timo, tienen un menu pintado con precios en el sitio y al pagar te dicen que eso es historico y que los precios y el menu es otro. Desde mi punto de vista eso es engañar, como recomendacion borren los precios si quieren conservarlo
Carísimo para la calidad de la comida. Servicio muy lento, esperamos mas de 25 min para empezar a comer. Bastones de berenjena sosos, sin gracia con salsa de acompañamiento súper fría. Ceviche de los peores que he probado nunca. Las habitas con pato ricas. Platos grandes para compartir
Mala coordinación, Maitre si se le puede llamar así, y sus camareros. Pasamos primero a la zona de playa, previamente preguntando al camarero si después de tomar la cerveza habría mesa para cenar, a lo que el camarero nos dijo que sin problema. Cuando quisimos pasar a cenar, preguntamos al Maitre… y le expusimos el deseo de cenar y de manera algo chulesca nos dijo que no había hueco, a lo que trasladamos la información dada por su camarero y respondiendo de manera chulesca, nos dijo que es lo que había. Considero que no es una respuesta del responsable, pedimos la hoja de reclamación y nos las dio de mala manera. Al terminar de rellenar nos la dio incluso sin su firma. Tuvimos que reclamársela. La verdad que una verdadera pena, que un sitio tan atractivo tenga un gerente y unos camareros poco sincronizados en el control de las mesas.
Terraza bonita y espacio agradable, pero su cocido terrible. El servicio de calidad discutible, los camareros lanzan el plato sobre la mesa con los dedos agarrando el cuenco sospechosamente cercano a la comida. Para tomar un cóctel tiene un pase, pero para comer.yo no repito.
Están ubicados muy cerca de la estación de tren de Príncipe Pío, la atención buena y los precios algo elevados pero se come muy bien. Está ambientado como si estuvieras en la playa, con arena en el suelo en uno de sus apartados que tiene el restaurante la otra zona es más tipo restaurante normal pero muy bien decorado igualmente. Para ir al baño tienes que cruzar la calle ya que tienen lo que es el la cocina y demás en la otra acera esto sería más bien la terraza del restaurante que es lo que más se utiliza.
Estuvimos en la terraza para comer y compartimos platos. Había buen ambiente, camareros simpáticos (a pesar de jugarse la vida cruzando la calle entre bar y terraza) y comida vistosa y rica.
También había zona de playa más para snack/tomar algo.
En los postres podría haber más variedad de 3, pero para repetir.
Lugar agradable pero la atención deja mucho que desear no logré probar la comida debido a que nunca me ofrecieron el menú a pesar de que sólo había 3 mesas poco profesionales
Una terraza ambientada de una manera que te sientes como en medio de la selva, buena música de fondo, ambiente joven. Platos exquisitos, buenos precios. Recomendaciones: quesadillas, burritos, bao, todo lo que tienen es super rico. Nosotros fuimos 12 personas y probamos de todo, aparte que los precios están muy bien (17 euros de persona, cena + la cervezas). Recomiendo!
Un lugar para disfrutar de un rincón playero en un Madrid sin playa sin olvidarnos de un buen servicio y una muy buena cocina a la carta y de menú del día, 100% recomendable
Hemos estado para tomar unos cócteles, nos han sentado, los hemos pedido y de repente nos dicen que la coctelería estaba cerrada a las 8 de la tarde y en ningún lado ponía que la coctelería cerrará.
Atención del personal de 10. Muy recomendable para comer algo distinto en una terraza con encanto Me quedo con las ganas de irse de noche, que al parecer hay bastante ambiente, y la zona de la playa es muy original
Sitio original en el centro de la ciudad. Buen sitio para tomarte un cocktail con los pies en la arena (si no tienes la mala suerte de que esa noche no sirvan, como me pasó a mi). Por lo demás, comida rica, quizá un poco cara para lo que era, aunque el ambiente era bueno.
Todo perfecto. Un pequeño oasis en pleno Madrid. Terraza decorada con gusto esquisto. Cocina deliciosa. Un ambiente muy agradable. Merece la pena. Volveré
Tardaron como una hora en traernos la comida y encima fría, la camarera que nos atendió era muy antipática, los precios de los platos muy caros en mi opinión para lo que era, desde luego que no volveré ni los voy a recomendar, fui a celebrar mi cumpleaños y menuda decepción, otra cosa el baño era para todos y bastante sucio.
Llegas a las 17: 15 y tienen un montón de mesas vacías, hay 3 camareros en la barra. Uno de ellos te pregunta “vais a ser cuatro? ” Y cuando le respondes que si, te dice que vuelvas a las 6 porque “entre las 5 y las 6 hay un tiempo muerto en el que no se sirve” (literal). Es para reírse, la verdad. Sobre todo si no eres el propietario del negocio…
Todo riquísimo! Y el trato de Ainhoa y Alfonso espectacular! Había un espectáculo de Drac muy chulo! Y el sitio es precioso, como si estuvieras en un chiringuito de playa! Volveremos sin dudar! Muchas gracias
Muy buena atención y el sitio lo más parecido a un chiringuito de playa, los cócteles muy buenos y naturales, los camareros muy atentos y simpáticos, Volveremos
Las fotos no representan lo que de verdad te encuentras, arena sucia y de largo nada parecido a una playa. La experiencia y profesionalidad de los camareros eranula. Los trajeron dos cócteles de la mano y escurriendo. 2 cervezas y 2 cócteles 27€. Sitio para ir una vez y no volver.
Un sitio muy chulo, decorado y ambientado con mucho gusto, consigue un ambiente de playa. La comida está rica, aunque la cantidad no está acorde con el precio, los refrescos y cervezas 4€ me parecen Excesivos.
Pésimo. Empezamos esperando una cola totalmente innecesaria, ya que había mesas y camareros para atender a mucha más gente de la que había en la cola. Tras media hora de cola, nos atienden y nos sientan en una mesa, y otros 15 minutos después al atendernos, nos dicen que no tienen coctelería solo bebidas normales. En definitiva, para no volver
Estuvimos cenando allí el fin de semana pasado en la zona del Beach Club y estuvo fenomenal. Soy celíaca y, aunque en esa zona no tienen demasiadas cosas sin gluten, me lo facilitaron pudiendo elegir de la carta de la zona de terraza. La camarera que nos atendió fue un amor, al igual que el chico que estaba en la puerta, que se notaba que controlaba de alérgenos y eso me dio mucha tranquilidad. La comida muy buena y los cócteles también riquísimos.
Un sitio súper bonito y los camareros súper amables, repetiría sin dudas, se lo recomiendo a todo el mundo. Lo más importante te ponen gominolas con el vino ;-)
Tenía muchas ganas de probar este sitio desde que lo abrieron. Fuimos a desayunar y nos sorprendió tanto la calidad como el precio del desayuno. Tienen bastante variedad tanto de dulce como de salado, y los precios no distan mucho del de los desayunos de los bares de barrio. Pagamos por café, zumo y tostadas 5,50€. El jamón oba aparte y fueron 2€ más. Para estar en Príncipe Pío, me pareció muy barato. Volveré para comer o cenar, sin duda.
Sitio moderno como para tomar un aperitivo o un café en su terraza o zona de barra, tanto para comer dentro en el salón. Las cervezas dobles y refrescos a 3€ con tapa. Con buen tiempo hay una terraza muy chula en la acera de enfrente, abierta con hamacas y otra zona con carpa a cubierto.
Celebramos un fiesta de despedida para mi hijo con 40 amigos y todo salió muy bien. El catering muy bueno y Carlos el Director y Gabriel el encargado durante el catering, muy amables y atentos.
Un lugar muy agradable en el barrio, tanto para desayunar como para disfrutar la terraza. El servicio es atento y simpático, pero en muchas ocasiones es muy lento. Comida rica.
La terraza está genial en verano. Los precios un poco caros. El comedor es agradable y está muy bien decorado. La comida está bien presentada y es sabrosa.
La ubicación del lugar es perfecta para ir o bien al centro comercial de Príncipe Pio o bien para ir dando un paseo a Plaza de España en el centro de Madrid!
Ya hemos venido muchas veces y la verdad es que este sitio está bastante bien, los platos son abundantes y de sabores exóticos y muy ricos. Además el precio no está mal del todo. Recomiendo la visita.
Hidden gem. Great place, good service, friendly staff & delicious dishes. A good place for a meal, drink or just to have a coffee, cakes or pasteries. This place is for anyone: couples, groups or families.
El sitio está bien, pero durante mi visita el personal se negó a servir un café a una persona necesitada, la cual iba con dinero suficiente. El camarero se justificó repitiendole que no podía servirle nada y que se fuera. Una auténtica vergüenza! Hacía frío y el hombre solo quería algo caliente para llevar. Esperemos que ese camarero no se vea en esa circunstancia nunca.
Celebré mi cumpleaños el sábado 3 de noviembre allí ¡y la experiencia no pudo ser mejor! Comida, música y bebida de 10 y atención continua en la realización del evento. Muy, muy contenta. Muchas gracias por todo. Repito seguro:)
El menú del mediodía tiene un precio de 12 euros y me pareció muy bien en cantidad y calidad. Recomendado el espacio, es agradable y tienen terraza. Ubicado detrás de la estación de Principe Pío. El camarero podía mejorar su trato y su atención.
La terraza estaba muy bien ambientada, como estar en la playa de verdad, incluido el calor asfixiante. Ojalá hubieran tenido uno de esos aparatos que echan vapor frío, le habría dado las cinco estrellas.
He celebrado mi cumpleaños y ha sido todo un acierto. Te tratan fenomenal desde el primer momento, haciendo todo muy fácil. Muy agradecida a Carlos, que es con quién primero trate y a Natalia e Ismael, que fueron los que se encargaron de que todo saliera a la perfección.
Hicimos una fiesta sorpresa con barra libre, atendidos por Alfonso, estuvo siempre pendiente de nosotros, siempre amable y divertido, tienen proyector, hilo musical, aire acondicionado, salió todo perfecto
Era la primera vez que íbamos a este restaurante pero repetiremos seguro, buenas raciones, excelente vino, sus postres, precios módicos, como recomendación las croquetas de sepia, riquísimas