Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Lástima que no esté suficientemente cuidado porque es un remanso de paz. Sitio donde sentarse, verde en primavera e inicio de varios caminos para pasear por la zona.
Muy descuidado y sucio con muchísimos excrementos de perros pero que ellos no tienen la culpa Podrían cuidarlo un poco ya que es un sitio muy bonito para que los niños puedan comer la merienda y jugar
La estancia en traumatología fue muy bien, y la geriatra María Teresa es una persona increíble, muchas gracias a todos los profesionales, médicos, fisioterapeutas, gracias María José, enfermera/os, auxiliares que han atendido a mi madre.