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Mi hija hace karate y está encantada. Cristian lo hace todo mucho más fácil y es un profesor que. Cuando veo a mi hija lo encantada que va a karate y con el respeto y admiración con el que habla de su maestro. Para mí, lo dice todo. Lo recomiendo 100%. Y además, tiene sala de musculación. Perfecto para madres y padres deportistas que quieran hacer deporte mientras sus niños están disfrutando de un deporte sano. El karate no es un deporte más, es un deporte de además de aprender un poco de defensa personal y hacer ejercicio, trasmite unos valores fundamentales como son el respeto y la humildad, entre otros. Lo dicho, por todo lo anterior y mucho más, lo recomiendo muchísimo. Por cierto, te regalan una clase para que vaya el niño y vea si le gusta o no antes de apuntarse.
Pequeño pero muy apañado, está muy bien los monitores son muy simpáticos y no te obligan a tener nada domiciliado ni tienes que pagar matrícula. Las máquinas funcionan bien y todas, que hay gimnasios que te las encuentras rotas. Además no hay muchísima gente y puedes entrenar bien, muy recomendado.
En contestación a la opinión anterior, tengo vecinos de origen sudamericano y asiático que llevan a sus hijos a este gimnasio desde hace años. Nada de discriminación.