Colegio Público Andrés Manjón

Centro escolar del barrio El Naranjo de Fuenlabrada histórico, fue el primero que se construyó en el barrio al inicio de la democracia gracias a los pactos de la Moncloa. Muchos de los hij@s de los vecinos del barrio han iniciado sus estudios en este centro.

Donde he conocido a mis amigos de toda la vida que con 30 años seguimos juntos y contando anécdotas.

Quizá escriba sobre todo por nostalgia. Fue mi colegio hasta 1988. Ahora no puedo dar mucha información ni valorar como están las cosas, aunque por lo que escucho sigue teniendo un profesorado realmente comprometido con la enseñanza y sobre todo con la formación integral.
Gracias en parte a este colegio soy lo que soy.
Gracias!

El mejor cole en el que estado ya llevo cuatro años y nunca me eh arrepentido de estar en este colegio

Es un colegio de 10, en el se respira una atmósfera muy agradable. Mi hija está muy contenta en el, tienen un equipo docente muy bueno desde el director hasta los profesores. Las personas del ampa son un encanto y preparan muchas actividades lúdicas para los niños, tienen un amplio abanico de actividades extraescolares. Lo recomiendo totalmente al cien por ciento. En este colegio se trata a los niños como niños, enseñandoles educación y responsabilidad.

Es un colegio increíble, trabajan muy bien con los niños, mi hija sale todos los días encantada y motivada muy diferente al colegio que estaba antes que ningún día al salir quería hablar de cosas del colegio y siempre estaba triste. Lo recomiendo de corazón. En este colegio si ven a los niños como niños no como autómatas.
En clase las mesas están organizadas en grupos de cuatro y cada niño asume un papel de responsabilidad cada semana. Una semana toca ser silenciador (el que manda callar a la mesa), otra semana portavoz (el que habla en nombre de la mesa), otra semana secretario (el que está pendiente de que los de la mesa hayan hecho los deberes) y otra semana el critico. Increíble como los propios niños se autorregulan entre ellos jugando y haciéndose responsables. Mi hija tiene una motivación por hacer los deberes increíble porque al día siguiente la que la mira las tareas no es la profe sino una niña de su edad.
El colegio funciona muy muy bien.