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Algo caro para el tamaño de los platos servidos, y no deberían estirar tanto las botellas probablemente, pero el local es muy agradable y la carta de vinos está hecha con cabeza y corazón. Tomamos un clarete Terra Alta que nunca había visto en Madrid, solo en bodega.
Un sitio muy cute para tomarte unas copas de vino un poco especiales. El sitio la verdad que es pequeñito pero muy mono. Tiene la luz tenue que recuerda un poco a los bares de vinos de Francia. La carta es pequeña y estaba buena. El precio, quizás , un poco más caro de lo que en realidad es la calidad. El vino estaba muy bueno y era diferente, aunque también el precio es alto, unos 35 euros la botella. Salimos como a casi 40 euros por persona. Compartimos 2 platos, el vino y la marinera. Recomendado para una cita especial.
Bar de vinos naturales, por copa y por botella. . Espacio cálido y buen servicio con una oferta gastronómica breve pero bien pensada basada en platos pequeños para compartir. Recomiendo el espacio walk-in en la parte delantera pero también hay un espacio más formal en la parte trasera con la misma oferta y donde se permite reservar.
Nos encantó la atmósfera tan especial que se respiraba según entramos. Es un espacio no demasiado amplio pero muy bien organizado. Estupendos vinos naturales y unas gildas muy ricas. Estábamos de paso pero tanto nos gustó que volveremos a probar algunos platos de los que hablaban maravillas
Creo que al empezar cualquier local deben cuidar mucho lo que ofrecen para atraer los nuevos clientes y no sé puede cobrar casi 6 euros (calidad media) por una copa de vino que no llegaba a un dedo.casi se bebía en un sorbo.no creo que se deba estirar cada botella tanto.las cantidades en la copa deben ser las justas no lo que nos pusieron desde luego.
Espero que mejoren para poder ir a disfrutar de un local tan bien puesto.
Nuevos sitio de vinos y tapas, cocina con influencia catalana. Tomamos: bikini de butifarra y queso de Mahón, albóndigas de fricandó, canelones, (estos 3 primeros imprescindibles!), Gildas, tartas de queso y tatin. Acompañando de vino naranja palomino fino, muy bueno. Muy recomendable!
Lugar TOP. Buenos vinos, que no se consiguen fácilmente en otros sitios, muy bien seleccionados. El local está muy bien decorado y se está muy a gusto. La comida buenísima, y el servicio amable. En cuanto a las reseñas que se quejan de los precios, los tienen publicados, por lo que no se deberían llevar a sorpresa…además que la calidad hay que pagarla. Lo dicho. TOP TOP TOP
Sitio encantador para probar vinos naturales acompañado de una carta bastante variada. Las albóndigas y los canelones hay que probarlos sí o sí. En cuanto a precios, entendiendo el concepto de vino natural está bastante alineado a otros bares de la ciudad.
Pésima experiencia, lo peor. Nos pasamos para reservar en la barra a las 7. Se nos dice que no se puede reservar en la zona bar (entrada) y que tenemos que volver a las 8 para tener sitio. Lo que hicimos.pero al llegar.a las ocho.todo está reservado. Empiezan mal.
Un exceso que por un vino te cobren 6 euros, el mínimo son 5 según nos dijeron, por muy naturales que sean, es verdad que no lo sabíamos queríamos Rioja o ribera y nos dieron no se cual total 3 vino 18 euros, una estafa. No volveremos por supuesto
Un sitio espectacular, super acogedor, donde puedes degustar vinos excelentes y bastante unicos en Madrid acompañado de platos muy bien pensados. El personal siempre esta atento en todo momento y verdaderamente un bar de vinos que recomiendo 100%
Muy rica la tabla de quesos y el pan con mantequilla. El personal super atento y amable, con ganas de explicarte y recomendar cosas. Yo personalmente bajaría un poco la iluminación de la sala principal, pero son gustos personales. Muy recomendable:)
Glop es un nuevo descubrimiento para los amantes del buen vino. La estética del bar es inmejorable y exquisita, con parte delantera de barra y taburetes y una sección al fondo con mesas bajas para algún grupo más grande. La selección de vinos es bastante amplia, y si no conoces tanto, las camareras te ofrecen sugerencias y recomendaciones. En cuanto a la comida, recomiendo la tabla de quesos, el carpaccio y sobre todo las albóndigas, que estaban riquísimas. ¡Sin duda es un lugar ideal para una velada con amigos o tu pareja!
Local precioso, con buen ambiente y personal muy amable. Buena oferta de vinos naturales y de jerez. Las albóndigas y el pa amb tomaquet buenísimos me quedé con ganas de probar el resto de la carta.