Hotel Florida

Mi experiencia un Desastre en la cafetería. Aparte la comida todo congelado.y los camareros unos maleducados. Sobretodo uno que era latino

Una experiencia muy buena en todos los sentidos. Está ubicado en el centro histórico, y para llegar al monasterio sólo teníamos que cruzar la calle. Aunque el lugar en el que está situado es muy populoso por la gran cantidad de bares y restaurantes que hay, no sufrimos ninguna molestia a la hora de dormir, de lo que se deduce que tiene una buena insonorización. Cuando volvamos a San Lorenzo de El Escorial, volveremos, sin duda, a este hotel.

Hotel sencillo, limpio y con buena relación calidad/precio. Lo mejor su ubicación muy cerca del monasterio.

Buena ubicación y precio. Las habitaciones reformadas, la cama genial. El único pero es que se escuchaba a las personas de la habitación de al lado.
Tienen convenio con la cafetería de abajo y está muy cerca de la Lonja. Fuimos en época de fiestas y pudimos dormir bien pese al ruido.

Vamos por partes.
Las habitaciones tienen un desgaste y piden una renovación a fondo.
Dicho esto, las habitaciones son cómodas, espaciosas, el personal es muy amable, en el hotel y en la cafetería, y la ubicación es extraordinaria.

El pasado fin de semana estuvimos en familia en este hotel y la experiencia fue satisfactoria. Las habitaciones, a pesar de ser un hotel de 3 estrella, estaban bien en relación calidad precio. Sin embargo, tuvimos algunas experiencias negativas con el parking.

Decidimos reservar el parking con antelación, pero lamentablemente no se lo recomiendo a nadie. Este hotel no tiene parking en si, nos mandaron al parking del hotel Lanceros.
Encontrar la entrada fue complicado, y al entrar vimos la rampa y tenía una inclinación muy pronunciada. De hecho, uno de nuestros coches comenzó a patinar al salir.
Hay pocas plazas y eran bastantes estrechas. El otro coche que llevábamos era un SUV y nos costó bastante aparcarlo y salir de allí. Habiendo reservado dos noches de parking, solo hicimos uso de una ya que decidimos no volver a entrar en ese parking.
Al momento de hacer el check-out, mencionamos nuestra experiencia a la recepcionista, quien amablemente nos aseguró que nos devolverían el dinero.

Ayer terminé en el pueblo de El Escorial a la vuelta de la visita al monasterio. Serían las seis y media de la tarde. Entre el calor y la consiguiente modorra, sumado al cansancio tras unos cuantos kilómetros a pie, lo único que quería era tomar un café. Tras deambular por las calles busqué cafeterías a través de Google, seguí caminando más de quince minutos para que, al llegar al destino deseado me dijeran que iban a cerrar. Volví sobre mis pasos y tras diez minutos de espera en otro establecimiento (llegué a creer que me había vuelto invisible) terminé por casualidad en la cafetería del hotel Floridablanca. Mi cara debía ser un poema, la verdad; entonces apareció un chico que con una amplia sonrisa me preguntó cómo estaba. Mal, respondí: no hay manera de que alguien me ponga un café en este pueblo. "Eso lo solucionamos ahora mismo" respondió. A partir de ahí todo fue a mejor: un trato excelente, una conversación amena y la continua sonrisa que sólo llevan en sí las personas que disfrutan con lo que están haciendo, aquellas que empatizan y hacen que una tarde que parecía ir a convertirse en un pésimo recuerdo, quedara en la memoria como todo lo contrario. Mario, el chico que me atendió obró ese milagro. Gracias por tu naturalidad. Desde luego, si alguien me pregunta dónde tomar algo en El Escorial les hablaré del hotel. Gracias, Mario, volveré.

Las habitaciones son muy grandes pero, al menos en nuestro caso, las camas se movian de manera muy facil por el suelo lo que puede provocar algún accidente si por error durmiendo te aproximas al borde.

El chorro de agua de la ducha cuando es caliente es muy lamentable, además de que el grifo pasa prácticamente de frío a caliente.

Eso sí, la ubicación es excepcional.

Fuimos la noche del 23 de Diciembre. Hotel muy bien situado a escasos metros del monasterio. Habitaciones amplias y limpias, y personal correcto y amable. Una buena opción. El precio sin ser barato fue comedido (70 euros la noche)

Muy bien ubicado. Tienen bañera y la cama era comodísima. Lo único, eché de menos una smart TV para conectar el móvil y ver series o películas.

Nos ha encantado, la cama comodísima, las vistas al monasterio iglesia y el trato en recepción muy atento y amable. Muy limpio y acogedor. Volvería sin dudarlo

El peor hotel de san lorenzo del escorial, Habitaciones viejas sucias.camareros de cafetería con un trato desagradable sobretodo el señor mayor de color.y calvo.delgado y alto fue muy desagradable con mi mujer. No recomiendo este Hotel es sucio y muy desagradable

La comida normal, nada especial. Raciones pequeñas. Fuimos a comer un grupo grande de personas e hicieron el minimo esfuerzo por atendernos. Parecía que tenían prisa por que comieramos y nos marcharamos. El sitio limpio y relativamente cuidado.

El trato recibido por la recepcionista pésimo, fuimos con una reserva hecha y abonada y por un error, no nuestro, tuvimos que pagar a mayores por una cama supletoria y sin ella buscar otra solucion. Pagas si o si. Nos fuimos a hacer turismo y cuando volvimos por la noche la habitacion estaba sin limpiar. No lo recomiendo, sinceramente. El lugar no está nada mal pero el trato dejw mucho que desear.

Todo estaba genial, desde el personal, las instalaciones, la ubicación, hasta un detalle para la mascota, una camita, comedero y unas chuches.

No hemos estado en el hotel pero el restaurante está genial y muy bien atendido, unos estupendos profesionales. Merece la pena.

El peor hotel en relación calidad precio en que me haya alojado nunca.
Viven de las vistas al monasterio.
La cama cómoda y grande, es de justicia decirlo.
Instalaciones viejas y sin mantenimiento.
El desayuno buffet desastroso.
Pan congelado, todo lo que había bollería, fiambre, tortilla, fruta, todo del día anterior o de varios días.
El servicio de la cafetería malísimo.

Pese a ser "solo un 3 estrellas" el nivel de atención, de limpieza, de equipamiento de las habitaciones y la ubicación son muy buenas. Eso si, eviten alojarse cuando hay concierto nocturno ya que ni las estupendas ventanas de la habitacion conseguirán aislarse del ruido. Pesima gestión del ruido nocturno por parte del Ayuntamiento. Alta nota para el hotel.

Os funcionários não prezam pela simpatia, quarto sujo, o cheiro a fritos por todo o hotel, o frigorífico do quarto não funciona.

Lo vi todo muy cuidado. La persona de recepción muy profesional, ocupada por el bienestar del cliente. Tiene un emplazamiento idóneo para conocer El Escorial.

Excelente ubicación si quieres disfrutar de unas magníficas vistas al monasterio. Habitaciones preciosas y con una muy buena cafetería donde poder desayunar, cenar.

Lamentable mi experiencia fue muy muy Pésima finde de escapada con mi pareja reservamos la suite junior al entrar a las 19h en la habitación parecía un horno trabajando en su máxima temperatura, al entrar se activa todo el aire comprobamos que el termostato esté bien puesta a ver si por lo menos se enfría algo la habitación al pasar dos horas nuestra sorpresa fue que ni aire salía, avisamos a recepción y que subía a revisar y dejaría una tarjeta para que el aire esté activado mientras estemos fuera al volver al hotel cosa de las 0: 00 pues hacia el mismo calor aire activado pero nada de frío salía llamamos de nuevo al otro recepcionista revisa el termostato por desgracia el pobre no sabía que hacer, se pone a mirar el cuadro de luces que no tiene nada que ver toca el termostato y seco que le dejemos un tiempo enfriarse pasa tiempo y esto ni se enfría ni sale aire frío, disponemos a llame al recepcionista y tenia el teléfono descolgado lo cual decidimos bajar y pedir otra habitación Normal y nos dice que está todo ocupado lo cual pido hoja de reclamaciones y me dice que eso a su compañero por la mañana lo dicho que el pobre solo estaba ahí para vigilar y ninguna solución nos pudo dar.
Resumiendo pagas una suite júnior para desconectar y disfrutar de un descanso el cual se volvió una noche sin poder dormir ya que ni funcionaba el aire una estafa lo de la suit junior obviamente la hora de reclamación la voy a poner en la mala pero en Verano no recomiendo reservar esta suite porque hace mucho calor ya que el sol recalienta esa parte durante todo el día y no funciona el aire

Estuvimos por el inserto del 8 al 13 de mayo del 2022, El trato extraordinario en general y destacaríamos todos los amigos a Fátima

Ubicación perfecta, justo enfrente el Escorial. Limpio, trato agradable y en muy buena condiciones, nos alojamos en una habitación superior y estuvimos muy a gusto. Recomendable

Situación y vistas inmejorables.
Limpieza muy buena.
Personal, trato esmerado.
Restaurante, genial.
Destacar el trato recibido hacia nuestra mascota, le sorprendieron con su zona preparada, mantita y comedero con chuches.
Recomendable

La atención recibida por el personal fue excelente! A pesar de lo lleno que estaba el restaurante, y la terraza. Precio y calidad muy bueno!

Trato amable y cualquier consulta nos la han resuelto rápidamente y bien. Las habitaciones limpias y camas muy cómodas, volveremos!

La ubicación es genial. Desde la ventana hay una buena vista del monasterio y todo el campo de al rededor. La cama es muy grande y cómoda. Hay cosas que tienen aspecto de viejo. La higiene podría mejorar

Respecto a la cafeteria. Tenia buena pinta la comida pero no se como estaría de sabor, nos trataron tan pero tan mal desde que llegamos que no la probé.
Llegamos el Lunes a las 14: 30, habia 3 mesas ocupadas pero nada mas, pasados unos 15-20 minutos no vimos a nadie, entramos y dentro estaba vacio también pero se escuchaba gente dentro de la cocina, llamamos a la puerta y nos gritaron que no podiamos entrar (lo que es normal, pero tampoco sabiamos si alguien podia atendernos). Finalmente no sentamos y esperamos llego la camarera enfandada y nos regaño porque la mesa estaba sin limpiar y tenia que desinfectarla cosa aue nunca pasó. Pero bueno, al sentarnos llegaron 2 mesas nas y la camarera fue a atenderlos, cuando paso le pedimos que tomara nota y dijo "si ahora". Cuando sacó la comida de las otras mesas y le pedimos otra ve que tomara nota dijo "tienen que esperar que termine de antender las otras mesas" enfadada. Y bueno que mas puedo decir, bonito lugar comida con buena pinta pero un asco de servicio.

Paredes de papel, instalaciones muy antiguas y cobran 18 euros por la mascota, la cual no puedes ni dejar sola en la habitacion.
El unico punto positivo fue la limpieza.

Hemos estado del 6 al 7 dic. 2021, inflexible ubicación, no entiendo la puntuación. Íbamos con mascota y entramos y tenían una colchoneta y comedero preparado para mí Chuchi.una cajita de caramelos de violetas en la cama. Limpieza de 10, personal de 10 ubicación de 10. Os dejo las vistas desde mi balcón. Desayuno de 10. Volveremos! Recomendado 100%.

Buena ubicación con respecto a los sitios de interés. Limpieza y buen trato. La habitación tranquila y cómoda.

Hotel con una ubicación excelente, calidad precio correcta. Es una pena que este tan "descuidado", un enchufe solo en la habitación, hay dos más inutilizados, la nevera y la TV comparten enchufe, el aire acondicionado medio "kao", recepción in caos.dicho una pena con un poco de atención el hotel sería 5*****
La cafetería es un desastre, desayunos caros y mal atendidos.

Un hotel fabuloso, limpio y céntrico, trato estupendo. Estamos frente al monasterio, seguro que volveremos.

Très bon accueil y compris pour notre chien avec tapis de sol et croquettes de bienvenue dans la chambre.
Emplacement et chambre très bien et petit déjeuner au delà de nos espérances.nous recommandons vivement

Un joli hôtel sympa, bon petit déjeuner. Jolie chambre, c'est sûr que nous reviendrons. Seul problème pas de parking.
Un parking public dans la rue plus de 30€ par jour.

El desayuno estaba bueno y el personal atento. Pero en la habitación había una naranja podrida, la luz se iba cada 15 minutos, el colchón no era cómodo y había un ruido constante durante la noche. El baño estaba limpio pero la ducha estaba mal. Lo mejor la ubicación pero no recomiendo el hotel.

Habitaciones anticuadas y todo el hotel con olor a humo menos en las habitaciones. No está mal para pasar alguna noche. Hay muchos detalles que no cuidan, están viejos y rotos.
La nevera de la habitación no funcionaba.
El desayuno está completo y bien, el personal de día atento.

Hotel rústico y en el centro de la ciudad. Para pasar un finde está de lujo. A 5’ andando del monasterio.

Amables y hotel limpio
el camarero del restaurante (isidro) muy amable y eficiente.pendiente en todi momento de que estuviésemos agusto.volveremos seguro

Muy bien situado, con excelente limpieza y personal muy atento. Le vendría muy bien una vuelta a las habitaciones, las almohadas y evitar las habitaciones de la tercera planta por ruido del sistema de refrigeración.

Excelente relación calidad ~precio, buena atención de la chica de recepción y en el restaurante se cone muy rico, especial atención de la camarera.

Tanto la ubicación como la limpieza y comodidad de sus habitaciones son dignas de mención. Hotel con ese toque vintage que me encanta. Desayuno que no está mal y la atención excelente.

Sinceramente el hotel es un poco viejete con instalaciones antiguas así como pasillo, muebles interior.
Quizás algo caro para como lo pintan.
Por lo demás muy amable la chica de recepción.

Trato súper amable en todo momento, solo fuimos una noche sin reserva, y nos ofrecieron una habitación económica pero con todas las comodidades. Las vistas y ubicación inmejorables.
Sólo bajo una estrella porque el mini bar no funcionaba.
Es bueno, bonito y barato.
El desayuno 10 de 10

Sitio pintoresco, con una decoración antigua pero elegante. Fuimos con un pack romántico que incluía una cena y una habitación con jacuzzi.
La experiencia fue muy buena. Cena de calidad y comida abundante. El servicio impecable. Todo estaba muy limpio.
Las habitación muy grande, amplia y con unas vistas a la basílica espectaculares.
La única pega que le puedo poner es que la bañera perdió un poco de agua por el suelo.

Personal muy amable y muy profesional las habitaciones están limpias y el personal de servicio y mantenimiento muy rápidos y detallistas, en la recepción un 10 a la chica por amabilidad y preocupación por el cliente y que decir de la cafetería maravilloso el desayuno si lo contratas junto con tú habitación y los camareros amables y simpáticos. Si tengo que volver al Escorial volveré a este Hotel lo recomiendo al 100 x 100.

El trato es maravilloso, sobretodo de los recepcionistas, se preocupan mucho por los huéspedes, hubo un problema con la habitación y nos cambiaron a otra incluso mejor! Súper limpio y muy bien cuidado y ubicado, sin duda para repetir

Un hotel con un trato de diez, muy acogedor y muy limpio, el personal muy atento con los clientes. Muy recomendable

Esta situado justo al lado del monasterio del Escorial, es acogedor y el trato del personal es muy bueno y cordial.

La suite que nos tocó tenía bomba de calor insuficiente y pasamos un poco de frío. La bañera de hidromasaje estaba sucia y el chorro de agua de la ducha no tenía suficiente fuerza. La cama muy grande y cómoda. La estancia no está mal pero tiene cosas a mejorar.

Quartos do sótão péssimos, janelas enormes do corredor pró quarto, sempre que ligavam a luz o quarto ficava iluminado, barulho entudecedor na escadaria, no corredor e ao fecharem as portas, quarto sem TV, camas de dar cabo das costas, comida péssima

Tomadura de pelo
La habitación estaba bastante bien (al hacer la reserva habíamos solicitado una habitación tranquila y la que nos fue asignada realmente lo era, estaba muy bien insonorizada de las adyacentes).
Las «rarezas» propias de este establecimiento comenzaron incluso antes de llegar: sufrimos un retraso inesperado en el comienzo de nuestro viaje, por lo que durante este hicimos varias llamadas de teléfono al hotel para avisar de que llegaríamos más tarde de lo previsto; nadie contestaba el teléfono, lo que nos hizo pensar que, pese a ser de la cadena Sercotel, sería algo por el estilo de los «Formula 1» franceses, pero cuando llegamos ahí estaba en la recepción «El hombre impasible»… Definirlo como «parco en palabras» sería no hacerle justicia a tan entrañable personaje.
Las rarezas se convirtieron en molestias a la mañana siguiente, cuando quisimos hacer uso de la ducha; el desagüe estaba completamente atascado y esto provocaba que por mucha prisa que nos diéramos, el suelo del cuarto de baño quedara completamente inundado en cuestión de segundos. Lo comuniqué en la recepción para que acudiera alguien de mantenimiento y para que nos proporcionaran alguna toalla adicional, ya que alguna tuvimos que utilizarla para secar el suelo y evitar resbalarnos; la gobernanta apareció en pocos minutos con un juego de toallas completo, pero nadie acudió a examinar cuál era el problema con el desagüe, con lo que yo mismo tuve que hacer de fontanero y encontrarme con los restos de cabello de todos los huéspedes que habían pasado por esa habitación desde los tiempos de Felipe II (véase la espeluznante fotografía). Curiosamente, más tarde descubrí que colgado del picaporte de la puerta, junto con el habitual cartelito de «no molestar», había un aviso de la misma avería que databa del 29 de agosto (véase fotografía de dicho documento) ; es decir, que durante al menos dos meses (y lo que quedará, dada la dejadez del personal y la dirección de este hotel) todos los huéspedes de esta habitación han tenido que sufrir el mismo problema.
Y las molestias se convirtieron en escándalo al pasar por recepción para abonar la factura, ya que intentaron cobrarnos los desayunos que ya teníamos incluidos en la reserva (si cuela, cuela).
En resumen, establecimiento de baja estofa y muy poco recomendable: si bien las instalaciones son adecuadas para la calificación del hotel, la pasividad con el mantenimiento hará que estas se degraden progresivamente; por otro lado, el personal con el que nos encontramos (salvo la gobernanta y las camareras de pisos) es incompetente, negligente y maleducado, especialmente la jefa de recepción y la camarera encargada de los desayunos. Para no volver o, si las autoridades tomaran cartas en el asunto, para clausurarlo de inmediato.

Digno hotel de tres estrellas. Ubicación inmejorable frente al Escorial. La cama comodísima y el tamaño de la habitación doble superior es óptimo. Incluye bañera jacuzzi. Lo recomiendo por su buena relación calidad-precio

Reservé por Booking una de las habitaciones sencillas.
Básico, en tiempos de nota que fue un hotel mejor de lo que es, hay otras habitaciones "superiores" con buena pinta
Personal agradable.
Por poner un pero, la cafetería que necesita una vuelta, tiene un personal un poco más soso y lento.
Recomendable para pasar una noche, sin grandes lujos

Bonito hotel con habitaciones amplias y baño muy grande y las vistas son muy bonitas muy recomendable

Tiene tres estrellas pero es mejor que algunos de cuatro que conozco, sobre todo de los de Roma. Habitación amplia con camas muy confortables, bonitas vistas al Monasterio, ¡muy silencioso, cosa muy importante, está perfectamente insonorizado de la calle y el buffett del desayuno muy completo.

Una pena que haya bajado este hotel, cuando hace unos 5 años estaba mucho mejor. ANIMO FLORIDA, NO CEJES EN EL EMPEÑO.

Great experience at Hotel Florida. Staff was really friendly, the room was comfortable and clean, and the views were amazing.

Todo muy limpio, los colchones muy cómodos, el personal muy amable, el desayuno bien, el asador genial y el emplazamiento inmejorable.
No me fiaba mucho de mí reserva al ser un tres estrellas; pero la experiencia ha sido muy buena.
No hay que esperar lujo asiático en las habitaciones ni diseño de gran nivel pero son muy asadas y cómodas.
Además reservé una habitación doble estándar y me hicieron un up grade; no tengo nada malo que decir.

Estuve aquí alojada por motivos de trabajo y estuve comodísima.
Ubicación buena, frente al monasterio de San Lorenzo, a cinco minutos de la estación de autobuses y en la zona de ambiente de los fines de semana.
Comida buenísima y bien preparada. Desayuno tipo buffet super completo.
️ Habitación acogedora. La cama es de lo más cómodo que he visto en muchos hoteles. Está bien acondicionada, lo único que se nota es que el baño es antiguo, pero está bien.
Conexión WiFi gratuita en todo el hotel.
‍‍ Personal muy amable, tanto en la recepción como en el restaurante.

Un hotel y habitación antiguas que necesitan mucha mejora, en especial el baño es muy cutre, la habitación olía a tabaco aunque la chica de la limpieza pidió cambio y pudo ser, sino hubiera sido una estancia muy incomoda

Gran hotel 3* que comparte ciertas competencias con el asador El Rey. Se duerme y se come fabulosamente. Eso si disfrutando desde la ventana de la habitación del Monasterio Real El Escorial

Hicimos la reserva para dos adultos y un bebé para el dia diez de agosto pero ni al hacer la reserva ni al llegar nos avisaron de que eran las fiestas justo debajo de nuestra habitación, hasta las cinco de la mañana que paró la música no pudimos dormir.
La habitación estaba sucia, avisamos al personal de limpieza para que pasarán a limpiar pero nadie lo hizo, al dia siguiente al irnos lo dijimos en recepción y nos dijeron que teníamos que avisar ahí, aún así nos pidieron disculpas.
Mi pareja es celíaca, lo avisamos al hacer la reserva y nos dijeron que no había ningún problema, pero al ir a desayunar el camarero no sabía nada, ni sabía que podía comer o no.
Una pena que se haya estropeado así el fin de semana. La estrella es sólo por la ubicación ya que desde la ventana se ve el monasterio del Escorial.

Hemos estado en la terraza de la cafetería del Arte que pertenece al hotel. Los camareros son amables pero la comida es cara para lo que dan. El sándwich vegetal era lechuga con mucha mahonesa y algún trozo de tomate y la tosta de jamón ibérico era ridículamente pequeña y el jamón de ibérico no tenía nada. A parte de que se les había olvidado q las habíamos pedido junto con la ensalada.

Te dejan entrar con mascota pero luego cobran 10 euros extra y tienes que sacarte tu el desayuno a la terraza no lo recomiendo