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La comida muy buena y la atención también. La terraza tiene muy lindas vistas al valle cuando el clima lo permite. No se puede acceder al recinto de los animales.
Sitio con mucho encanto en mitad del campo, la comida buena aunque tuvimos un problema con la carne que la pedimos poco hecha y nos la trajeron muy pasada, lo dijimos y nos la cambiaron, esta vez nos la trajeron prácticamente cruda y fria y pusieron un plato para hacérnosla al gusto pero al estar tan fría de la nevera se pegaba al plato y era imposible así que pedimos un trozo de grasa como ponen en otros sitios y nos dicen que no, que allí no lo ponen así así que se la vuelven a llevar y nos la traen de nuevo ya hecha pero ya se nos había pasado el hambre por que desde la ensalada de tomate hasta que trajeron el resto pasó demasiado tiempo y encina con la historia de la carne ya ni te cuento, en fin una pena, a todo esto los camareros andaban un poco descentrados. Sabado 22 de octubre, hemos vuelto y todo ha estado muy bien excepto que estaba petado y el ruido era horrible pero bueno eso no es culpa del sitio, comida y atención estupendas
Un restaurante situado en un entorno precioso, con muy buenas vistas desde la terraza, donde se está genial en verano, la carne espectacular, las croquetas de boletus muy ricas (las demás para mi gusto un poco sosainas), el personal atento y profesional, volveré. Estupendo en relación Calidad Precio. Publico fotos carta oct 22.
Restaurante en un entorno natural con buenas vistas (en la terraza trasera, sobre todo). Tiene anímales, lo que es un incentivo si se va con niños. Buena comida y relación calidad-precio.
Me encanta este sitio. El lugar es precioso y se está muy a gusto con esas vistas maravillosas. La comida está buenísima y la atención fantástica. Hay que reservar porque se llena. Al principio me costó encontrarlo, pero guando te aprendes el camino es muy fácil llegar hasta allí. Vuelvo siempre que puedo!
Vistas increibles. Y respecto a la comida, gracias a la recomendación del camarero probamos entraña y estaba de 10; la parrillada muy sabrosa; arroz con leche demasiado dulce. Muy recomendable el restaurante
Buen sitio para comer. Atienden bastante rápido, las raciones son muy generosas, el precio es comedida y está bastante bueno en general (así fue con la entraña y con los huevos rotos, pero las tostas de solomillo tenían un sabor extraño, demasiado intenso). Lo único que sería criticable es la sensación de masificación que hay en la sala, era un día fresco y estaba todo cerrado de forma que entre la gente y el humo parecía más bien una discoteca (sin mencionar restricciones covid, que todavía existe aunque no se le quiera mencionar). Supongo que cuando la terraza esté disponible será una experiencia mucho más agradable.
Hoy comimos en La Casona y hemos disfrutado mucho, el camarero que nos atendió, Darwing una máquina, el para toda la terraza pero se movía como pez en el agua, mucho mejor servicio que en otras ocasiones. La comida muy Rica, patatas alioli muy bien fritas, variado de barbacoa perfecto de punto, parrillada de verduras muy jugosa y pimientos asados, de postre una torrija decente, cerveza bien fría y café muy rico, cosa que no es habitual en muchos restaurantes, enhorabuena! Llevaba tiempo sin ir y ha mejorado mucho.
Increible sitio para comer, cenar y celebrar cumpleaños, bodas, bautizos y comuniones. La comida esta buenisima, tienen muy buen genero. A nosotros nos gusta mucho el arroz con bogavante y la parrillada de verduras. El precio esta muy bien compensado con la calidad y cantidad de la comida. Siempre tienen platos fuera de carta, por si no te decides con tooodo lo que si tienen dentro de carta. El lugar donde esta ubicado es sin duda uno de mis preferidos, apartado de practicamente todo, con unas vistas increibles de la sierra de Madrid, con aparcamiento de tierra dentro de la parcela del restaurante y a otro lado una finca con burros, cabras y algun que otro animal mas. Os recomiendo llamar para reservar por que se llena muchisimo, sobretodo en fin de semana. Por poner una pega, depende de como esten de trabajo, a veces tardan un poco de mas en servirte la comida, pero merece la pena por lo bueno que esta todo.
Espectacular atención, de todos comida genial y el cordero bestial de bueno. Volveremos pronto ese cordero es de repetir. Y cerca de casa que peligro. Gracias creo se llamaba Sara la camarera un amor. Se agradece. Nos juntamos familia y fue un placer.
Siempre es un buen sitio por vistas, ambiente, trato, comida, Nunca falla si buscas un buen sitio de Sierra Y si buscas venir con peques tienen animales
Trato excelente de parte del camarero. Comida buena y buen precio. Las cuatro estrellas en vez de cinco es por la comida a la brasa, llegó un poco fría. Buen sitio para repetir y disfrutar.
El lugar es bonito y atractivo, hace honor al nombre. La comida está riquísima pidas lo que pidas. El trato y el servicio es excelente, el personal es amable y paciente. Una pena la acústica del salón, el ruido es tremendo tanto que resulta muy difícil conversar en tu propia mesa. Estábamos deseando terminar de comer para marcharnos. Volveremos seguro, pero cuando el tiempo permita estar en la terraza.
Mi recomendación aquí es reservar, siempre. No hay margen para el error y si el sitio te gusta para una caña y quieres picar algo.es imposible por que no te atienden si no has reservado.
Aparte de esto, enclave inigualable, vistas maravillosas y yo ya he reservado para poder comer el finde que viene. Espero volver aquí con la reseña
Lugar muy bonito y con buenas vistas pero grandísima decepcion por la atencion recibida por parte de la camarera (vergüenza), lo que nunca nos ha pasado a lo ocurrido aqui. Suerte con el negocio que seguro es buenisimo hoy nos ha tocado a nosotros.
Comida rica, casera, camareras muy agradables y atentas. Por poner un pero, cuando está lleno el restaurante hay mucho barullo. El GPS del móvil te manda por caminos imposibles.
Todo genial, comida muy buena a precio razonable, hay carne y pescado. Lo único malo es la accesibilidad, para llegar al parking nos hemos perdido y tuvimos que andar un buen rato sobre tierra y baches pero ha merecido la pena.
Decepcionante. Considero que la relación calidad precio está pasada de todo. La comida muy por debajo del nivel del sitio y entorno. El entorno es magnífico. La parrillada de verduras buena, los judíones con niscalos duros e insulsos (recién hechos), el cachopo es malo, sin paliativos (no merece ese nombre), la carne dura y cortada al revés. Disfrutas del entorno pero, no comes bien.es una lástima porque las condiciones son inmejorables. Hemos comido regular.muy discreto. Cualquier menú del día tiene una calidad similar que lo anterior. Para mi una decepción.
Comida auténticamente me encantaron las manitas de cerdo con setas, me las recomendó un excelente y profesional camarero, koke gracias por todo, repetiremos sin dudarlo
Primera vez y una experiencia genial, comida y atención perfecta, unas vistas únicas y buen precio. Lo único tuvimos problemas para llegar por culpa del gps.
Vistas espectaculares, y la comida muy, muy buena. La única pega, y por lo que le doy 4 estrellas en vez de 5, es que no admiten pagos con tarjeta, hay que pagar en efectivo. Casi imprescindible reservar para no darse un paseo en balde.
Además de unas estupendas vistas de la sierra, un trato agradable y una buena comida con un buen precio. Los torreznos excelentes. El único pero es que es complicado llegar, quizás forma parte de su encanto. Ojo solo admiten efectivo.
Restaurante con terraza situado en pleno campo. Con unas vistas estupendas de la sierra de guadarrama. Comida tradicional con muy buenas carnes y arroces. También se puede comer o cenar de raciones. Precio medio. IMPORTANTE. NO SE PUEDE PAGAR CON TARJETA. (A dia de hoy esto es inaceptable. Esto le resta)
Solo regular, la comida normalita y el servicio nefasto, la primera vez que fuimos tardaron 50 minutos en servir el primer plato y otros 30 en el segundo. La segunda vez similar. El sitio es bueno, pero no merece la pena perder TRES horas para comer. No volveremos.
Ya he perdido la cuenta de las veces que hemos ido. Trato genial, vamos con una silla de ruedas y siempre facilitan todo. Y la comida buena y a buen precio.
La comida buena, relación calidad precio también buena. Tienen mucho terreno ideal para que los niños jueguen. Fallo que no se puede pagar con tarjeta.
Me parece muy buen sitio para ir a comer, sobre todo si es en una época de buen tiempo ya que tienen masas fuera del restaurante y se está muy bien. No sirven tapas en las mesas de fuera, solo bebidas. Pero por lo demás es muy buen sitio, las raciones no son ni muy grandes ni muy escasas, sino que están muy bien de cantidad.
Llegar hasta alli es algo casi imposible, el camino q hay de tierra hasta el restaurante está lleno de agujeros, raciones algo escasas, la barbacoa nada del otro mundo, el secreto quemado y las chuletas de cordero un poco duras, los postres muy buenos, solo se puede pagar en metalico, eso si, el sitio es muy bonito
Bonito sitio para desconectar de la ciudad, buena carne y ricos postres, no es excesivamente caro, los niños pueden jugar en el exterior, tienen animales en un cercado junto al restaurante, volveremos.
Calidad, cantidad y buen servicio. Un sitio sin duda ideal para alejarse un poco de la ciudad a respirar aire puro Las vistas de la sierra son impresionantes y el restaurante es muy acogedor. La comida es buena y abundante. El Cocido realmente bueno aunque las sopas han con un fideo fino, pero esto es cuestión de gustos. En definitiva, un gran descubrimiento que seguiremos visitando.
La camarera es lo más antipático que he visto y se nota que no lo gusta su trabajo. La comida no está mal, pero si pides algo a la brasa, todo sabe al amargor de lo quemado. Devolvemos la carne porque está quemada y nos la cobran, sin ofrecer nada a cambio.
Restaurante que abre en fin de semana y que está en la Cañada Real Segoviana entre Galapagar, Collado Villalba y El Escorial. Se come muy bien, no es caro y la carne a la brasa está estupenda, como los callos, la carrillada y los huevos rotos. Tiene unas terraza maravillosa donde puedes tomar un cerveza con unas vistas extraordinarias con la emita de El Cerrillo enfrente. Está en una granja rehabilitada con animales. A mí me gusta.
Si te gusta el cabrito no puedes dejar de ir. Está un poco alejado y no es fácil llegar si te pierdes, pero se come buena cantidad a un precio asequible y como digo, el cabrito (que crían allí) excelente
Es de los mejores sitios, por no decir el mejor, de la sierra de madrid, buen precio y la comida muy buena.lo mejor el lugar y la atención de todos los camareros. Volveremos y pronto