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No lo recomiendo, camareros sin ganas de nada, la.comida comparto con otros usuarios nada del otro mundo, tardaron muchísimo más de 20 minutos en tomar nota.un trato penoso, la decoración hortera, desde luego no volveremos
Gente maravillosa, profesionales de los de siempre, entregados a su oficio. Te sientes como en casa, cocina tradicional excelente. Terraza muy agradable en verano.
Recomendable el conejo, sin duda su especialidad junto con la ensalada de escarola. El dueño entrañable siempre saludando y preocupado se como se ha comido y servido. Podíamos sacarle más partido a la terraza.
Experiencia fantástica, lo tiene todo, ambiente muy agradable, una atención del servicio genial y la comida lo más.el mejor rabo de toro que comi, el solomillo espectacular. Muchas gracias por todo. Me falto la foto con el dueño, que andaba por ahí con mucho cariño. Sin duda llevare a mi familia. Gracias
El rabo de toro excepcional como siempre, lo que no me gusto nada es que a día de hoy sigan llevando todos los trabajadores mascarilla bueno todos no el jefe sin ella.
Como siempre de bien, el conejo más rico del mundo, el rabo de toro buenísimo, el bacalao, las ensaladas, las croquetas, el picadillo de chorizo y morcilla, todo buenísimo
Muy buen sitió. Tradicional, ambiente casero, lo único que no me gustó son los toros de la pared, pero cuestión de gustos. La comida fenomenal, bien cocinada. De precio normal tirando a alto. Repetiremos
El secreto de este magnífico restaurante? , cocina tradicional elaborada con productos de calidad mezclado con un eficiente, amable y discreto servicio en una bonita finca tranquila, espaciosa y agradable (la terraza de verano es extraordinaria). Para mi es uno de esos pocos restaurantes imprescindibles. Carne espectacular, torreznos buenísimos, gambas plancha como dios manda, bacalao con tomate único, berenjena y alcachofa de calidad y un largo etc… En cuanto a los precios, me parecen que están ligeramente por debajo de lo ya expuesto, lo dicho, imprescindible.
Tengo que decir que tienen una terraza espectacular y por dentro del típico restaurante de toda la vida en los que se está a gusto. Como negativo tengo que decir que el conejo que era un punto fuerte de ellos he estado hace 10 días y no sé si tendría prisa de cocinero pero las tajadas eran grandísimas. Creo que esto el tienen que cuidarlo.no tengo mucha costumbre de mirar la cuenta pero últimamente me estoy dando cuenta que hay que hacerlo en muchos sitios, en concreto aquí es una cuenta de aproximadamente 75 € me cobraban nueve euros de mas.queso de cada cosa que creo que tiene que cuidar.supongo que sería un fallo.
Restaurante familiar y tradicional. Para mi gusto excesivamente taurino, pero la comida es muy buena, para reuniones de amigos y familiares (no es para cenas románticas)
El conejo es el mejor que comí hasta ahora y no menos importante la atención recibida A1. Fueron amables de aceptarnos cuando la cocina estaba por cerrar.
Que decir… sitio de buen comer pidas lo que pidas, sin ser excelente en nada, pero muy bueno en todo, Nos sentimos como en casa Pedir que os enseñen la bodega, esa bodega tiene más vida e historia alli dentro, que se podrían hacer un documental, digna de ver Repetiré? ….: Sin duda!
Súper agradable, familiar y accesible, comida deliciosa y personal super cercano! Volveré sin duda y pronto además! 100% recomendado! Creo los findes montan un mercadito de ropa fantástico para mi chica!
Restaurante de siempre, con camareros de los de siempre, todo muy bueno y un buen trato, si quieres acertar no lo dudes, celebrar algo, invitar a alguien y que dar bien, puedes ir sin problema sin duda volveré,
La dirección y los camareros son muy profesionales, y la gastronomía que ofrecen en la carta es variada y de muy buena calidad, además siempre tienen algo más que te ofrecen fuera de la carta. Los entrantes, pidas lo que pidas está todo buenísimo, pero unos de los entrantes que nunca renunciamos a pedir son, los torreznos, el picadillo de chorizo y morcilla ó los corazones de alcachofas rebozadas en tempúra. Y si hablamos de carnes ó de pescados, de verdad espectacular. El lugar con un ambiente tranquilo, donde si se va acompañado con niños tienen un jardin y terraza exterior fabuloso y sin peligro alguno. Los camareros dentro de su profesionalidad, hacen que te sientas como en familia por su trato cercano y respetuoso. También tiene una bodega maravillosa, la cual puedes visitar siempre que se lo solicites al camarero. También cuenta con un gran parking, donde poder aparcar sin problema alguno dentro de la finca.
Es increíble la calidad de los productos y los precios son los correctos para un restaurante de tal nivel, sin duda alguna Gregorio es un gran profesional
Todo. Calidad-precio. Muy buena comida española. Ambientes dentro y fuera muy agradables, sin olvidar su "Bodega museo". Dejarse aconsejar x sus profesionales.
La relación calidad precio en el menú buena. Comida buena. Los postres caseros muy ricos. El sitio agradable y correcto. La atención de los camareros muy buena. La verdad que es un sitio para recomendar.
Buen lugar, calidad precio bastante aceptables. Trato muy amable e original. Comida tradicional. La verdad es que me fui muy contento, seguramente repita es cuestión de tiempo que vuelva. Ah! Y preparan unos gin and tonic bastante interesantes. Saludos
Relación calidad precio mediocre, atencion deficiente, falta de educación y nada de simpatía hacia el cliente, i siquiera cuando pagas, un gracias. Poco profesionales y totalmente apáticos, por precio que se paga es inadmisible.
Repetí en este restaurante porque en anteriores ocasiones tuve buena calidad y buen servicio El sábado pedi un solomillo al punto y estaba frío Cuando se lo reclame a los camareros y se lo llevaron volvieron a traerlo frío Como les dije que así no lo quería me dijeron que lo intentarían pero que la carne poco hecha es difícil calentarla. Eso que es? Por que lo ofrecen al punto entonces? Eso no es profesionalidad y estamos hablando de 22 o 23 € por un trozo de carne Mal servicio Si vuelvo tardaré en hacerlo
No es un bar de carreter, si buscais algo barato de carretera no es tu sitio, es caro y la calidad es buena aunque no a la altura de su precio. Ni tampoco la cantidad.
Tampo inclye el iva en el menu. Una escusa para cobrarte de mas.
El cocido 13 euros para la cantidad y calidad que ponen me pareció caro. La cerveza cruzcampo 4 euros.una broma d mal gusto y 2 cestas de panecillos 15 euros y la botella de licor de plástico.pues el remate. No volveremos
Un lugar de los que sales muy satisfecha. Buena cocina, personal muy agradable, fácil aparcamiento y mucho jardín para tomar algo, o para que jueguen los niños. Un encanto el dueño, que a pesar de tantos años en el negocio, aún sigue atendiendo a los clientes con mucho interés y cariño
Jardines bonitos y bien cuidados, comida bien cocinada pero son cuatro platos de la carta de los que hacian amas de casa en años 60, igual como interior.se quedo muy antiguada, camareros muy atentos y servicio muy bueno.nada mas aunque si.los precios del restaraunte de la primera. NO volveria alli. NO seguro que NO
Muy agradable. Conserva el aspecto de una casa de comidas muy rustica, pero bien puesta.tiene una bodega antigua que se puede visitar. El trato agradable. Comumos de picoteo y todo estuvo bien
Se sigue comiendo fenomenal. El picadillo de morcilla es sublime (si se puede aplicar ese calificativo a la morcilla), el conejo en tomate, igual, y la ensalada de escarola con tomate triturado, fresquisima.
Comida tradicional en un marco taurino y un servicio excelente siempre supervisado por Gregorio. Exquisito guiso de conejo al ajillo o con tomate.carnes muy buenas y guisos tradicionales.
Maravilloso restaurante taurino en la carretera a-5, el señor Gregorio nos trata como en casa siempre que vamos, comida de buena calidad y casera! Muy recomendable y muy taurino!
A ver: un clásico, sin sorpresas. Croquetas-croquetas, migas-migas, picadillo-picadillo, chuleton-chuleton, con un decorado muy taurino. Y los postres tal vez lo más flojo. Lo mejor, la carne, excepcional.
No hay mejor sitio donde comer el conejo con ajillo ya van mas de 40 años regentafo por Gregorio, siempre atento a todo lugar con encanto llegar pronto para poder aparcar
Un restaurante muy bueno. Su especialidad es el rabo de toro. Riquísimo. Toda la comida es fresca y exquisita. El trato es maravilloso. Muy familiar. Tiene aparcamiento propio. Me encantó. Lo recomiendo.
Comida de pueblo, eso no quita la decoración, es completamente taurina, a mi parecer una falta de respeto a los antitaurinos, pero para gustos colores, esta muy bien todo
El sitio muy bonito y la comida en general buena, pero mi plato me decepcionó. Pedí chuletillas de cordero (18€). Me traen 5 chuletillas con puré de patatas de bolsa. Entiendo que estoy pagando también el sitio, pero ese precio por ese plato no era justificado. Recomiendo la crema catalana, aunque no es casera pero está tremendamente buena.
Un buen trato la comida muy rica. El sitio tiene una decoración peculiar muy taurina. Los camareros muy atentos. El único pero el precio del pan. Para llegar el acceso es muy fácil y tiene mucho parking lo que es una comodidad.
Estupenda comida, trato agradabilísimo. Habitas con almejas de primero y conejo al ajillo de segundo, de rechupete. Gregorio ejerce de orgulloso anfitrión mostrando sus innumerables fotos con artistas famosos que cubren décadas de la historia de este país. Si os invitan a la bodega no os la perdáis.