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La Paloma destaca su autenticidad en el ambiente de bar. La atmósfera genuina de La Paloma evoca el espíritu del Madrid tradicional, donde la buena compañía y la bebida de calidad son los protagonistas. Su dedicación a preservar esa autenticidad es digna de elogio, y estoy seguro de que quienes buscan una experiencia de bar auténtica en Madrid encontrarán en La Paloma un rincón encantador para disfrutar de la esencia de la ciudad.
Taberna típica de Madrid para poder tomar algunas reacciones o tapas de muy buena calidad. Recomiendo las ostras, son buenísimas, las almejas simplemente abiertas, las gambas y varias cosas más. Todo bueno. En algún caso he tenido problema con el servicio, no estuvo correcto uno de los camareros.
Lugar típico de Madrid para el marisqueo. No hay especies de las grandes, tipo centollo y esos, pero casi todo lo que hay está buenísimo. A destacar los matrimonios, la ración de boquerones en vinagre te la ponen limpios y enteros, no a la mitad como en todos lados, los langostinos a la plancha una delicia, las ostras grandes y buenas, y los mejillones naturales deliciosos. En cambio con alguna gamba a la plancha tuvimos problemas para pelarlas. En general muy bien. Lo conozco hace 25 años y no defrauda.
Es todo un clásico que no defrauda por años que pasen. Cerveza bien tirada, boquerones sin abrir en vinagre, gambas plancha, ostras, Es un sitio especial
Excelente local, tradicional y abarrotado por aquellos que verdaderamente saben dónde hay calidad. Las ostras y las gambas extraordinarias al igual que el vermú de grifo. Todo ello a unos precios más que razonables. Muy recomendable
De los mejores bares de todo Madrid. Bar chulo y castizo donde los haya. De mis favoritos de Madrid. Marisco súper fresco y a muy buen precio, y todo ello acompañado de un gran ambiente y de la mejor atención por parte de todos los empleados. Como recomendación: RECOMIENDO TODO. Con cada consumición te ponen una tapita.
Es la primera marisqueria a la que voy y volveré sin duda todo estaba buenísimo! La atención maravillosa estaban súper pendientes de ti y el marisco súper bueno y fresco. Gracias y ánimo compañeros!
Por calidad de productos serían 5 estrellas pero la atención un poco seca pero correcta, de los camareros (una mujer y un señor) me hace quitarle una. No es que tengan que ser la alegría de la huerta pero considero que al estar cara al público tenían que cambiar un poco la actitud apática. Pero vamos es un sitio totalmente recomendable para tomar una caña tirada como dios manda y marisco fresco a un precio bastante competitivo.recomendable 100%100
Muy buena Calidad. Si huyes de los locales modernos y quieres encontrar un sitio auténtico alejado del circuito turístico. Este es el lugar. Sencillo y con gran calidad
Muy buena relación calidad precio, un sitio perfecto para parar en ruta a tomar marisco, como por ejemplo las gambas o el matrimonio (boquerón + anchoa) tiene variedad y unas cañas bien tiradas acompañadas de una buena tapa.
Es como trasladarse hacia atrás en el tiempo. Ruidoso y sucio. Las cabezas de gambas en el suelo deben ser las de hace 50 años; y encima caro: 10 gambas plancha (normalitas) y dos cañas, 12€. Estaba lleno. No lo entiendo. ¿Sueldos bajos?
Pues está muy bueno todo.pero cuidado cuando os pesen lo que habéis pedido.estar atentos xq a mí un camarero me lo ha pesado con el plato! Y son platos q pesan.
Un clásico para tomar el aperitivo después de un domingo de mercadillo. Es un local pequeño, con decoración castiza, que nos ofrece productos de calidad a muy buen precio. Sus especialidades las gambas, cocidas o a la plancha, los boquerones en vinagre o las nécoras. Para acompañar además de la cerveza, nos ofrecen un Ribeiro bien fresquito o un vermut de grifo.
Ofrecen tapa con la caña, entramos y, la verdad, nos dejó un poco frío lo de la tapa: Una sardina, nada más. El bar está decorado con fotos de toreros, cosa que no me gustó pero es cuestión de opiniones. Resumen, un bar como cualquier otro y tapas más bien justitas.
Lleva toda una vida igual, ofreciendo una calidad insuperable. Es un bar al uso, exclusivo, que tiene sus especialidades: gambas, ostras, marisco en general cocido, fresquísimo, y gambas de Huelva a la plancha. De pié, como antes. Una doble de gambas a plancha y Barbadillo, el mejor plan. El precio, muy, muy ajustado.
Es un bar con marisco. Gambas a la plancha exquisitas buena calidad y en su punto y ostras. Vermut de grifo. De tapeo. De pie. Procurad ir temprano porque si no, no se puede entrar.
Marisquería muy popular con buen género. Habitualmente lleno lo que implica que está bueno y a precios contenidos y que es bastante incómodo al tiempo.
Sin duda, uno de los mejores bares de marisco que conozco en la ciudad. Las gambas a la plancha buenas, pero las nécoras son las mejores que he probado hace años. No es un bar de lujos, es para pedir algunas raciones y tomarlas de pie, el ambiente es informal y muy variopinto, tal vez algo ruidoso, pero la calidad de sus productos merece la pena.