La Pausa

Encantadores todos, pero sobre todo el trato de Juliana el mejor, la comida se sentía como en casa

No lo recomiendo para comer para nada. Si está abierto el restaurante navelgas que está enfrente ir a ese. Yo tuve que entrar a este por qué los sábados el otro está cerrado por descanso y estaba viajando sábado. Pero cuando viajo y paso por la estación Chamartín siempre voy al otro. Primera vez que voy y es orendo, cola para pedir comida, no hay servicio de mesa, la comida malísima el precio normal pero como la comida es tan mala que es caro. El trato de los trabajadores muy muy rápido y sin gentileza como si tratarán con robots. No hay casi mesas disponibles y si encuentras una libre toda sucia por qué solo tienen 1 limpiadora para un local donde se mueve mucho la gente. Tuve que comer en una mesa sucia y con los platos de la persona anterior. No lo recomiendo para nada a no ser que tengas mucha hambre y no este el otro bar abierto. No entiendo cómo una estación tan grande y solo haya 1 bar en condiciones todo lo demás como este es comida chatarra y cada vez menos con lugares de comida española y decentes, solo franquicias. Aaahhhh y lo más fuerte es que el plato te dicen que es filete con huevos patatas y ensalada y solo me pusieron 1 huevo! Desastroso
Pido al establecimiento no hace falta ni que me contesten, siguiendo haciendo las cosas como robots, no dedico el tiempo a vosotros sino a la gente que lo lea y no vaya.

Rápido y sin problema. El camarero muy majo. Un par de ensaladas por 7,95€ cada una. Ricas y abundantes

Comida sin mas, pero queria comentar lo bien que nos atendió una camarera, super atenta con nosotros

Es una vergüenza.trabajo en la zona y es imposible entrar a desayunar.para atender a 5 personas se tiran más de 20 minutos.se ve un pasotismo desmesurado en los camareros.de verían renovar la plantilla al completo.sobreto el chico de los tatus en la mano está hay para nada.no vuelvo más.tercer día consecutivo que son haber demasiada gente me tengo que marchar sin desayunar.

Dos sándwiches prefabricados, donde no ponían el precio en la nevera ni en el envoltorio del sándwich, 11 €

Muy bien que esté en Chamartín, pero es un robo.

Tomé un café mientras esperaba mi tren.
El café está bien, pero me ponían la cucharita sucia y les pedí a cambiarla. Luego, al probar la tarta de manzana estaba muy congelada. Tenía que pedir ponerla en la micronda.

Un poco desorganizada la fila, el bocadillo de jamón durísimo y caro y los cafés horribles. Por otro lado el sitio es cómodo y la tarta de manzana está buenísima.

4 camareros y atienden de 1 en uno

Mal gestionado para un sitio al que se va con el tiempo justo

El lugar no está mal, aunque algo saturado a la hora de comer con tanto turista, además comparte local con un Burger. Es mejorable la limpieza en aseos y sería bueno poder pagar en la mesa y no tener que ir a la barra para ello. El Menú está bien para el precio, plato de bistec con huevos, patatas y ensalada. Lo que ya no hace gracia es que te traten de colar 1 euro más por un trozo de pan pequeño que debe ir incluido en el precio. También tienen unas ensaladas grandes como plato único interesantes.

Relación calidad precio muy mala. El desayuno malo en general. Tanto el pan como el tomate. El café es lo peor, está asqueroso. El lugar lo tienen súper sucio. Las meda y la barra las recogen y limpian cuando les apetece. El personal nada agradable y muy antipáticos.

Estuvo muy bien. La chica de pelo corto que nos atendió súper amable y simpática. Pendiente de las mesas en todo momento. La comida estaba buena y los precios normales para estar
ahí.

Lugar bullicioso porque está en una estación y pueden tardar en darte mesa pero el maître muy amable enseguida nos la procuró.
La comida muy rica, por calidad-precio recomiendo los platos combinados.

El sitio con mucha afluencia pero limpio y con buena atención. Comida de buena calidad. Precio un pelin caro.

Sólo he pedido bebida, pero los camarer@s super amables, sobre todo Álvaro. Muchas gracias por el trato, se agradece que haya gente tan amable.

Suelo esperar el tren allí, todo normal la mayoría de veces, excepto la última. Fui a pedir un vino, luego de un rato de haberlo pedido sigo frente a la caja y cuando pregunto por mi vino, me dicen que no encuentran el sacacorchos, a lo que el camarero con tono fastidiado y con cara de muy pocos a amigos me dice “¿Qué quieres que hagamos? ”. Me limité a guardar mi tarjeta e irme. Fue desagradable.

Flautín súper caro 6,75€!? Que es eso
Además no había nadie en la barra y aún así tuve q estar 5 minutos parada a ver si una de las 3 señoritas q estaban ahí dejaban de hablar entre ellas y se daban la vuelta para atenderme.

Si quieres entrar en el PEOR sitio de la estación bienvenido. Cerveza caliente, ensalada pasada, no tenían vinagre, mala cara, bandeja sucia. Todo por un sablazo.
A ver si no me cojo algo por haber entrado, cruzo dedos

A las 09: 10 de la mañana los baños están indecentes, el olor es nauseabundo y están muy sucios, desde luego es una vergüenza que estén así, esto no se ha limpiado en varios días.

Mala atención por parte del personal de la barra deberían tener un poco de educación y respeto