Nakeima

Un 10/10, la comida y el trato impecables. El menú adaptado al cliente pero una experiencia a ciegas buenísima. El helado, el pilpil, la gamba al ajillo y el postre, espectaculares.

De mis restaurantes favoritos de Madrid. Por el trato, por la comida, por la experiencia…Es cierto que es un poco rollo tener que hacer cola con suficiente antelación como para no quedarse sin sitio, pero creo que también es parte del encanto. Todas las veces que hemos ido, en la barra, hemos podido hablar con los chefs que nos han recomendado buenos vinos y dado a probar alguna cosa con la que están experimentando (la última vez un chupito picante).

Te echa para atrás el tener que ir antes y no saber si vas a poder entrar o no porque al no haber sistema de reserva anticipada es un poco lata pero merece la pena.
Nos sacaron platos hasta que ya no pudimos más pensando que era un precio cerrado en un menú degustación, pero la experiencia es para repetir sin duda.
La decoración y el ambiente es normal.pero la comida está muy muy buena y sabores y mezclas muy sorprendentes.
La camarera que nos atendió fue super amable, los platos iban saliendo en el tiempo perfecto y sin duda es un sitio que recomiendo aún siendo una zona que a mí me da una pereza que me mata.
Deseando repetir.

Recomendable 100%, restaurante cocina fusión, estilo menú degustación hasta que se acaben los platos o quieras parar, contando con las piezas de sushi serán unos 17 o 18 platos la mayoría de ellos son para compartir entre 2 personas y quitan y meten platos cada bastante poco tiempo, el ambiente con música animada y compartir barra hace que sea una buena experiencia.

La comida es excelente y el menú está riquísimo. Pero la tontería de hacer cola para reservar una mesa, hace que se quiten las ganas de ir. Si lo hacen es porque les funciona. Pero creo que hay otros sistemas de reserva que hace que no estés perdiendo el tiempo en la calle, haga el tiempo que haga, y que hacen que no se te quiten las ganas de ir. Muy bueno pero no volvería solo por la tontería de hacer cola.

Un personal muy amable, que fue muy servicial para explicar los platos y el menú. Unos minutos antes de cerrar la puerta, todos salen de la mesa e incluso las placas reservadas. Le recomiendo que vaya allí si desea pasar un momento de diversióny gastronomía. La ubicación no es la más hermosa en Madrid, pero el personal realmente merece ser reconocido.

Tuvimos suerte de no hacer cola al ir a mediodía en mitad de un puente con Madrid vacío
La comida nos gustó mucho igual que la primera vez que fuimos, cuando llevaba poco tiempo abierto.
La única pega fue cuando nos trajeron la cuenta, no había carta con los precios y nos quedamos sin respiración: 166 euros para dos personas, un precio a todas luces desorbitado para lo que comimos.

Los maridajes de comida y vinos son excelentes. Nunca he estado tan lleno de alegría como cuando el camarero vino a decirme que me había quedado sin vino. Me gustaría volver a probar todo el menú.

Buah creo que ya tengo mi restaurante favorito del mundo! Un espectáculo ️ gracias al equipo, comida y personal brutal

Ahora es un menú cerrado y como siempre pasa algunos platos mejores que otros. Uno que deberian eliminar en mi opinión es la ensalada de callos, del resto en general una experiencia agradable sin más. Sin embargo un comentario a los dueños: es una vergüenza que haya que estar haciendo cola en la calle tirados desde las 1900 para poder cenar a las 21.00. NO SE SI HAN PENSADO QUE ESO TAMBIEN FORMA PARTE DE TODA LA EXPERIENCIA GASTRONÓMICA DE SU RESTAURANTE.yo evaluando todo no volvería a repetir nunca.

Un auténtico escándalo de comida. Hacia mucho tiempo que no probaba una cocina con tanto sabor. Muy muy muy recomendable. Trato exquisito. Vamos que repito segurísimo.

Un 10, le daría 100más.
Honestidad en estado puro. La logística del establecimiento y el servicio hacen que se entienda la cola a la entrada o la No Reserva
Enhorabuena Nakeima

Nos lo pasamos muy bien cenando, curioso concepto culinario, comida fusión canalla. Todo en pequeños bocados pero salimos cenados de sobra. Muy bien.

I agree with many other reviewers: Nakeima needs a reservation system that respects customers’ time. Who has time to wait for several hours without any guarantee of being seated? There’s a gentleman you can pay to wait in line for you (and the restaurant is aware). They could easily improve the experience. I like small, intimate restaurant experiences… but I’m also a fan of not my wasting time.

Lugar inesperado que llegas por el boca a boca o por reseñas. No admiten reserva, debes estar antes y hacer cola para ver si entras dentro de los 15 comensales. Es como un menú degustación en el que van sacando platos hasta que dices basta. Precio razonable para la calidad del producto. Mejor probarlo.

Curioso restaurante, casi clandestino, que no sirve más de quince menus en cada turno, lo que genera colas a veces de horas para conseguir plaza. Pero claramente merece la pena superar las dificultades.
El local no tiene ningún encanto especial. Los clientes se sientan cómodamente a lo largo de la barra o en un par de mesas, donde se les ofrece un menu de una docena y media aproximadamente de bocados de cocina de fusión terminados en el momento, muy bien explicados y presentados, que resultan en una explosión de sabor. Es difícil recordar cual estaba mejor pero el sashimi de calamar no es fácil de olvidar. Se acompañan de una carta muy limitada dr vinos de diversos paises. El servicio muy atento y simpático.
El ticket, unos 75€ por persona, resulta económico para las dos horas largas de degustación. Sin lugar a dudas un sitio muy recomendable.

Es difícil conseguir sitio aquí, no hacen reservas, es por orden de entrada del local hasta que se llena. De precio medio alto. La comida es muy buena y la cocina es abierta así que puedes ver como lo preparan todo. No he dicho nada accesible el local ️

La comida espectacular pero la atención sobre todo la del coletas lo peor que he visto en años como alguien va atender así

Uno de los mejores restaurantes de madrid, no solo por la comida que es increíble, la cercanía del personal, la amabilidad y el trato son inmejorables.
Con respecto al comentario negativo anterior, no tiene razón en absoluto, está pareja llegó a las 20: 20 y quisieron colar por toda la cara.
No es cierto que una persona reserva para 12, una persona puede reservar para un máximo de 4 personas.
Me encanta Nakaima ️

Experiencia espectacular. Tienes que ir pronto para poder entrar, pero os aseguro que merece la pena. De los mejores sitios donde he comido. Trato muy bueno, ambiente adecuado y la comida exquisita. Una experiencia para vivirla!

Don’t waste your time waiting in line if you are not local. We went twice today to wait in line- lunch and dinner. There is always one guy in line to reserve a table for 12 people and the restaurant only seats 15.
I wish I had known this before going. I hope my review will help future visitors to make the right choice. Madrid has so many amazing options.

Es una experiencia imprescindible. Pese a tener que hacer cola, pues no reservan, merece mucho la pena!

Nakeima es uno de mis lugares favoritos y la única pega que se puede poner es tener que hacer la cola durante hora y media antes de comer.

Una vez pasas eso, es todo disfrute y diversión. Es completamente recomendable estar en la barra y no en las mesas que tienen separadas donde la experiencia resta muchísimo.

Esta última visita (van unas 5) ha sido de las mejores en cuanto a comida por lo que el nivel no hace más que subir y los clásicos no faltan.

Pro tip: cuando hagáis cola, preguntar a cuanta gente representa cada persona y si hay mas de 15 plazas ocupadas, ahorraos esperar la cola durante una hora.

Restaurante fusión Japo- castellano con un menú tipo Omaskase en el que tú paras cuando quieres. Pequeños bocados a cada cual mejor. La única pega es que no aceptan reservas hay que ir a hacer cola a la puerta

Y volvió la magia! Que decir que no se haya dicho ya! No quitéis el postre de los torreznos garrapiñados

Un espectáculo. Un concepto único que lo diferencia de cualquier otro sitio de Madrid. Trato personal y cuidado. Comida canalla, hecha con gusto. Todo buenísimo y el uso de la casquería en algunos platos apenas se notó por como trataban el producto.
Mejor para ir a comer si quieres hacer el menú completo que por la noche e ir con tiempo para asegurarse sitio!

Lo tiene todo: calidad y cantidad, con un precio acorde. Si quieres probar un menú degustación con platos originales e innovadores, materia prima de alta calidad, acabar saciado y con un ambiente joven y moderno este es tu sitio. A grandes rasgos fusionan comida asiática con española, con algunos toques de otras comidas, como la mexicana. Todo espectacular y hecho con mimo. Eso sí, no se puede reservar, por lo que tendrás que ir a hacer cola, si quieres ser uno de los quince afortunados que comen por sesión en el restaurante. Hay que ir sí o sí.

Yo sinceramente no entiendo lo de la cola. Esta formada desde más de una hora antes por personas pagadas para coger el turno. Aún así, te tienen 1 hora a -1 grado para luego echarte porque resulta que las 4 personas de delante han cogido mesas para 12/15 personas.

Vamos, hay mejores opciones por el mismo precio donde no te hagan sentir ganado. Y a la gerencia, si la cola está ya formada a más 12.30, un poco de humanidad y no tengan 1h a la gente a temperaturas gélidas.

Experiencia top! Un único pase a las 14.00h, donde 15 personas disfrutamos al mismo tiempo del mismo menú. No elijes lo que comes, te sorprenderán en cada bocado, y en mi opinión su precio es acordé a la calidad, ambiente divertido canalla y el buen trato de los camareros. Brutal!

Volver a este espectacular restaurante y comprobar que te siguen volando la cabeza con sus creaciones no tiene precio. No puede valer más la pena la espera para coger mesa (más con detalles como el vaso de caldo caliente que te sacan). Constituye un festival de principio a fin, de los platos a su bodega pasando por su increible ambientación musical. Si sólo pudiese recomendar un restaurante de madrid, sería sin duda Nakeima

Una comida original, lo demás no merece la pena, ni las horas de cola para coger mesa, ni los vinos (sin carta, te ofrecen una serie de cosas tipo manzanilla o chacoli, o vino joven de madrid), y lo peor el servicio, nos atendió un camarero que lo primero que hizo fue decirnos que no repetía lo que era el plato porque no le habíamos atendido. Y todo eso por el módico precio de 100€ persona. Nada recomendable.

No pongo 5 pq aunque sea el encanto de no poder reservar y hacer cola, por el precio y mi edad no estoy para esperar en la.calle más de dos horas.
La.comida es diferente y bastante buena pero la degustación "infinita" no es real, a partir del final de lo que han decidido que tienes ese día de menu, te traen cositas menos elaboradas y más bastas. Vamos, unas sevillanas para finalizar y que vayas saliendo

Diferente, único, impresionante! Comida muy elaborada. Un equipo muy profesional! Bravo por Carlos "el venezolano"!

Muy buena experiencia, los platos estaban muy buenos y la atención fue excelente.
El hecho de que salgan diferentes platos pequeños para ir probando permiten disfrutar de una buena diversidad de sabores.
Probamos:

- Ensalada de oreja
- Pil pil coreano con base de pasta de arroz y kimchi. Podría considerarse un tteokbokki al pil pil.
- Sabayon con mantequilla trufada, boletus y picatostes. Buenísimo, increíble la textura de los picatostes.
- Atún macerado en encurtidos de wasabi y lomo bajo rubia añeja. Increíbles estos nigiris.
- Nigiri gambas al ajillo y papada de cerdo
- Temaki de tartar de atún y huevo de codorniz. Muy original y buena combinación.
- Ningyoyaki de gambas.
- Takoyaki de oreja de cerdo con katsuobushi.
- Watán al agua de morro de ternera con 5 especias y yemas de huevo
- Infladitas de trompeta de la muerte
- Dumplings de sepia
- Siu mai de papada de cerdo
- Bao cochinita pibil
- Bocadillo de bao de panceta con salsa hoisin
-Berenjenas chinas con caldo de liebre y huevas de pez volador
- Ramen seco. Me recuerda a unos espagueti a la carbonara pero al estilo japonés/coreano.
- Helado de torreznos con torreznos garrapiñados y pera.

Un lugar único, a destacar el temaki, los nigiris, al principio está muy bien todos los platos, muy equilibrados, pero cuando ya estás terminado el menú se vuelven muy pesados, un lugar muy especial

Brutal. Fuimos 8 personas sin menú, nos fueron sirviendo a su gusto y no pudieron acertar más. Tenía las expectativas altas y no defraudó, volveremos seguro!

PRECIOS: 80 €/persona (x4.con 2 botellas de vino y algún agua)

A FAVOR: Menú degustación sorpresa totalmente innovador y diferente a cualquier japonés de la capital

EN CONTRA: Antes sólo se podía ir haciendo cola. Ahora hay reservas pero solo conseguimos reservar para 4.

RECOMIENDO: Pasar de la carta y esperar atentos a: el Temaki de atún con huevo de codorniz, la oreja en takoyaki, los distintos nigiris y los Dim sum

ATENCIÓN: correcta y discreta, para poder disfrutar.

CONCEPTO: Restaurante japonés con platos sorprendentes y lugar que tiende a parecer algo clandestino

CURIOSIDADES: La puerta de entrada es muy discreta y pasa desapercibida (para salir es como la de un ascensor). El sistema del menú degustación es sencillo, ya que sólo tienes que decir si no te gusta algo y indicar el momento de poner fin a la experiencia (obviamente tiene fin). La duración de nuestra comida fue de 2h 50min, y sólo nos faltó por probar dos platos (entre ellos el ramen seco que es el último)

Una de las mejores experiencias culinarias de mi vida. No lo recomiendo para gente no abierta de mente (paladar). Saborazo y súper combinaciones! Pensando en repetir

La experiencia consiste en que el restaurante va sacando platos sin saber cuáles son hasta que no puedas comer más sin conocer de antemano qué vas a comer. Sushi d atún y de carne muy buenos, temaki y el de oreja ricos, si bien alguno que otro nada especial. Tuvimos un camarero algo arisco pero profesional y pese que en la reserva nos dijeron que si en un principio éramos dos no podíamos ir, nuestra sorpresa fue que al llegar había dos mesas de dos personas. Eso no nos agradó. 50€ por persona

La calidad de la comida muy buena excepto el primer aperitivo que nos pusieron. A partir de ahí todo mejoró. En cuanto al ambiente creo que es bastante mejorable pero sin duda se disfruta de una experiencia distinta. Hay que probarlo. Creo que la calidad precio es buena.

Simplemente brutal, ambiente (9) comida (10) sitio pequeño y especial (8), precio (8) sitio muy especial, con buena musica, los cocineros son majisimos y la experiencia redonda.
Una referencia en madrid

Parada obligatoria cada vez que vamos a Madrid, la comida es simplemente espectacular, desde que entras es toda una experiencia, los camareros tienen mucho rollo, muy atentos además, un 10

Muy buena comiday un trato excelente.
Precio alto y conseguir mesa no es fácil. Mientras dure la pandemia no tienes que hacer la cola para reservar sino llamar por teléfono

Un restaurante buenísimo, servicio y calidad excelentes, tremendamente recomendable.
Repetiremos seguro.

Llevaba tiempo sin ir, ya me encantaba antes pero ahora me ha parecido que han subido un escalón, muy TOP la experiencia

Espectacular atención y comida. Reciben a un número reducido de personas cada vez y no hay reserva. Debes presentarte 45 minutos o una hora antes de apertura a coger sitio. Media hora antes de abrir cogen lista y cierran cupo.
Un vez dentro la atención y sus recomendaciones son buenísimas. No existe carta como tal, te van sirviendo y tu decides cuando parar. Antes de empezar te preguntan por intolerancias y gustos para adaptar el menú lo máximo posible.nosotros estuvimos dentro dos horas y no llegamos hasta el final puesto que habíamos quedado, pero volveremos a terminarlo! En nuestra experiencia, con vino y agua el precio rondo los 60 €/persona. Gracias Nakeima, ha sido un placer poder ir por fin!

Es impresentable la forma de “reclutar” o esa es la sensación, a sus clientes
He acudido en varias ocasiones y el problema de la cola siempre es reincidente sea cual sea el motivo.
No se puede dejar que sean los clientes quienes decidan el orden y número, si cinco minutos antes de que salgan del restaurante a una de las personas que están delante se le unen tres amigos y deciden que cada uno pide mesa para cuatro, no cenas aún siendo el tercero.
Eso me sucedió ayer, y no sabes cual es el mal sabor de boca después de hacer cola y verte que a las 8,30 no cenas
Es tan complicado hacer lo que hacen otros? Un papelito numerado con los comensales al llegar y punto.
Fue muy desagradable, y no supieron buscar una solución a esta situación, no volveré, no es necesario humillar y tratar mal al cliente para llenar el local, hay una cosa que se llama “saber hacer” y no solo se ve en el emplatado. Una lástima, pero no es aconsejable ir, no merece la pena el previo

Una gran experiencia gastronómica! Comes lo que hay, todo preparado al momento viendo a los cocineros como lo preparan. Comida oriental de alta elaboración. La verdad que quedamos muy contentos. Si quieres entrar asegúrate de llegar pronto. Se forma fila a partir de las 20h y si cuando sale la chica (a las 20.30) a apuntarte no eres de los 20 primeros te quedas sin comer. Repetiremos seguro. Además el trato fue excelente. El precio. Pagas toda la experiencia y exclusividad de ser solo 20 comensales. Sitio

One of the best dinners I’ve ever had. Incredible, innovative, tasty and fun. If you are boring and conservative maybe you think the service is bad as I read some in some reviews. The head chef, the waiters, cooks and somellier know everything about their food and wines. They are fun and irreverent. I love this place. Great great value for money. What a mix of flavours.from Asia to Spain going through the whole world. Definitely worth the hours queue, yes they don’t book and only 20 people will be seated. Just go, wait and enjoy one of the best meals of your life.

El amiguismo por encima de todo. Para comer supuestamente es por “orden de llegada”, pero si tienes la mala suerte de que ese día un amigo de los de cocina cumpleaños o quiere comer ahí y coger los 20 sitios disponibles, pues no importa que estes antes que ellos te quedarás fuera. Una pena que la comida es relativamente buena, pero las malas gestiones lo convierten en un mal restaurante/barra.

No he Me querido ni entrar.al ver una frase que ponia que estaba prohibido que entrasen los niños. Me parece una discriminacion, la verdad. Si tu hijo no es de los que suelen armar jaleo no veo motivo. Es horroroso

El mejor restaurante de Madrid. Asiatico con toques y productos de cocina española. El menú varia recurrentemente pero siempre tiene una calidad sobresaliente.

El hacer cola es algo que se te olvida con el primer bocado. Recomendable ponerse en sus manos, comer todo lo que hay y lo mismo con la bebida. Si vas a ir pensando en el precio ahorrate la cola y enfrente esta Donoso

Solo entran los amigos de la cocina, y si tienes suerte de entrar la comida es bastante regular, sabores repetitivos, sin coherencia en el menú y platos sosos. Sin duda la comida más sobrevalorada de Madrid. Hacerle caso a los chicos de la cocina y visitar el mercado de Vallehermoso, Tripea y Kitchen 154 mucho mejor.

El hecho de no poder reservar es algo que, personalmente, no me gusta
Sin embargo la comida es excelente, original y te la explican perfectamente.

Absolutamente recomendable. La comida es excelente; cada plato está mejor que el anterior ¡una gozada! Sólo dan de comer a 20 personas, y para cenar lo mismo. Sí quieres comer tienes que ir un par de horas antes y esperar cola, pero garantizo que merece la pena. Luego el restaurante es pequeño y comes en la barra o en un par de mesas altas, pero la experiencia está muy bien. Ambiente muy animado con los cocineros y camareros. Un 10.

This place is delicious, creative, and hip. Great music, attentive staff, fun atmosphere, ambitious food (all of it really tasty - esp the black bao and the sushi; the whiskey cake was really good, too). The only reason I can't give it five stars is that it's expensive and staff are cagey about the price (we asked when we arrived and they wouldn't give any kind of answer) - they just keep bringing the food (they choose, but it's influenced by any allergies or items you'd like to avoid) till you say stop, and then the bill arrives - in our case, about 70 euros per person, including drinks (and we didn't make it all the way through the menu). Instead of withholding all info about the cost, I'd suggest they offer a tasting menu price and offer a set number of dishes (they could do, say, 5,7, or 9 and let you choose?) like some restaurants in town (La Candela, e.g.) do - and just tell you the price up front. Again, this is top-notch food - it was only the opaque pricing that left a bit of a bad taste in my mouth.

Una experiencia singular, gran ambiente y comida que sorprende. Hay que ir a las 7.15 un miércoles y te apuntas a las 8.30 para cenar a las 9 pero merece la pena. Te van sacando platos hasta que dices basta. A mi pareja y a mi nos faltaron 2 platos. Con botella de vino y dos copas, 133€. Personalmente lo recomiendo antes que el streetxo. También puedes ir al kitchen 154 para una experiencia "similar". Volveré.

Gran experiencia la que ofrecen en Nakeima. Todos los platos estaban buenisimos (quizás el que menos nos gustó fue la quenelle) donde la combinación de sabores es perfecta. Mención especial para el black bao, el temaki y los nigiris.
Si tienes alguna alergia o preferencia por algo como no gustarte mucho el picante, te adaptan los platos para que puedas probarlos todos. También te van diciendo los platos que quedan por si prefieres pasar de alguno para llegar a los siguientes.
El precio, habiendo probado todos los platos menos el postre, fueron unos 60€ por persona.
Lo peor, el tener que llegar a las 19.00 para hacer la cola hasta las 20.30 que toman nota de la lista, ya que solo tiene capacidad para 20-21 personas, pero si vas mentalizado no se te hace tan duro.

Calidad muy buena. Sabores diferentes que explosionan en la boca y crea toda una experiencia. Alta cocina. Precio alto entre 50-70 euros con bebidas

Situado cerca del metro Argüelles, el local tiene capacidad para 20 personas y no admite reservas. Experiencia diferente y divertida. Productos de primerísima calidad, técnica y sabor. Personal joven, atento y agradable. La única parte negativa son las dos horas de cola que hay que hacer si quieres asegurarte un sitio. No es barato, pero la calidad hay que pagarla.

Quizás una de las comidas más divertidas de mi vida en relación concepto/precio/comida/disfrute.

Pienso repetir cada vez que cambien el menú, no me cabe duda

Uno de los restaurantes más interesantes que hay en Madrid ahora mismo. Decir "cocina asiática con influencias" dice ya poco, pero en Nakeima van más allá. Buenísima materia prima, mucha creatividad. Y da gusto cómo se atreven con todo.
El menú completo es laaargo y contundente, así que ve con hambre porque vas a querer probarlo todo. También puedes decir "basta" cuando no puedas más o pedir a carta, aunque es mejor dejarse guiar.
Buenos vinos. Estrella de Galicia.
Nivel calidad-precio muy bueno.
Si no voy más es porque, al no hacer reservas, el conseguir mesa haciendo cola con antelación, etc, es una lotería. Ya me he ido a casita a comer un sandwich un par de veces y da mucha rabia. Ve con tiempo y paciencia.

Llevábamos tiempo queriendo ir, y agosto nos pareció el mes perfecto ya que hay menos gente en Madrid.

El concepto es muy distinto a todo, empezando porque no hacen reservas. Sirven a 20 comensales por servicio; hay que ir antes a hacer cola, y a las 13: 30 y las 20: 30 salen a tomar nota por orden de llegada (cada persona de la cola puede apuntar a cuatro comensales). Por eso hay que ir con bastante antelación. Como nosotros hemos ido durante el éxodo de agosto, llegamos a las 13: 05 y fuimos los primeros:)

La comida empieza a las 14h. No hay carta ni menú previo. Al iniciar preguntan si hay alergias, intolerancias… Van sacando platos uno por uno, explicándolos detalladamente. Si en un momento dado no quieres que te sigan sacando platos basta con avisarles, aunque llegado cierto punto ellos mismos te preguntan si quieres continuar.

Nosotros probamos todos los platos que sacaron (17 contando aperitivo y postre) ; ya metidos en faena, lo cierto es que está todo tan rico que quieres seguir y seguir degustando.
Sabores intensos, texturas sorprendentes, platos espectacularmente presentados. Un black bao es impresionante, unos espárragos con mahonesa inesperados, una infladita de boletus de chuparse los dedos, el dim sum, el bundwich de tortilla con piparras, su versión del cerdo agridulce, el ramen seco… ¡Todo me encantó! Lo que menos me impresionó fueron los nigiris y el postre.

En vez de botella de vino, optamos por que nos fuesen haciendo un maridaje por copas, que al final encarece la cuenta. Entre el menú completo y el maridaje y varias invitaciones que hicieron, salimos a unos 70€ por persona.
¡Ya tengo ganas de repetir!

Ya quisieran algunos afamados y estrellados restaurantes fusion /oriental, como el Kabuki (Tenerife), lyo (Milano) tener la calidad, el ambiente, la música, el personal y el "rollete" del Nakeima. Fantástico.

No es sólo la comida diferente, la experiencia también. Si, tiene un protocolo curioso para entrar, hay que hacer cola que te apunten en una lista y dan un máximo de cenas, el dia que estuve yo, sólo 20. Apuntan a los que entran a las 20: 30 hh y entras a las 21: 00 hh. Diferente, pero como todo en la vida, depende de como te lo quieras tomar, con buena compañia y una caña es divertido.
Una vez dentro la experiencia continua, no quieren ser majos, no quieren ser tus amigos, quieren atenderte bien y si eres abierto te acabas riendo de la situación, de la mesa compartida y de todo en general y eso mola.
Y ya cuando llegas a los platos son una fusión, yo creo que acertada de comida, china, japonesa, peruana y española? Seguro que me dejo alguna, hecho todo sin fuegos artificiales, sin excesos, con buen gusto, nada de retortijones y mala digestión, rico y sienta bien.
Y si has sido majo, te recomendaran nuevos sitios en Madrid, de los de Olé!
Para los maridajes creo que lo mejor es blancos o agua, me empeñe en cervezas y es demasiado.
Repetiré.

Lugar cojonudo. Ahora bien, prepara 2 cosas, los gemelos para esperar de pie durante un buen rato hasta que te cojan la reserva (a las 8.30 lo hacen y a las 9 empieza la cena, puedes ir al bar de bravas que hay subiendo la calle o a Bache en la paralela Rodríguez San Pedro un poco más arriba y tomar una caña para hacer tiempo) y la cartera, ya que si te gusta la comida innovadora (si no, no vayas), no vas a querer parar hasta que hayan sacado el último plato de los 12 o 13 que sacan. Eso, más la bebida y que no es barato, te puede salir el tema fácilmente por 70-90 por persona. No creo que merezca la pena ir más de 3, ya que la gracia es la barra aunque tenga un par de mesas para 4. El personal, de 10, déjate aconsejar por ellos.

No ponen tapa y me preguntan que si quiero vaso cuando me traen una mahou de 2,85 euros, después me traen un vaso pequeño.