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Después de haber jugado el pasado viernes los 18 hoyos, hoy era mi segunda visita a las instalaciones para valorar si hacerme socio del campo o no; he ido con mi mujer y mis hijos. Sentados en la terraza del "hoyo 19", a mi hijo de 4 años se le ha antojado "patear" en la zona de prácticas. Al minuto de estar ahí, con un putt de niño y supervisado por mí para respetar y cuidar la instalación, se nos ha acercado un socio para indicarnos que si el niño no era socio no podía jugar. No voy a calificar la actitud de este socio, dejo ese acto para que ustedes lo juzguen. Por mi parte, obviamente, no compartiré club con socios de ese nivel humano tan lamentable.
Un club a la antigua usanza, los precios entre semana son bastante buenos. La cancha tiene buenos profesionales dando clases. Actualizo: desde que el ayuntamiento de las Rozas se ha metido ha mejorado un montón, con el tema simpatizantes han dado en el clavo. Siguen siendo de lejos el mejor club de la zona, el campo es complicado (rompepiernas) pero si juegas bien aquí cualquier otro campo es fácil.
Voy a opinar sobre la cancha de practicas. Un cubo de 48 bolas 4€ y el 25% de las bolas (o más en algunas ocasiones) son bolas que ya no sirven, son como piedras. Además las alfombras están bastante deterioradas, duras y combadas hacia arriba en los bordes y en lugar de cambiarlas le han puesto un añadido que queda un poco más bajo que la alfombra. Necesita una reforma
Campo cuidado, no apto para pegadores, bankers duros, greens cuidados pero crecidos lo que hace que la bola sea lenta, en verano comentan los socios que suele estar muy seco debido a que el campo tiene el suelo arcilloso. El recorrido es muy abrupto para recorrerlo se tiene que estar en buenas condiciones físicas (se recomienda el uso de carro eléctrico con freno de inercia) y si hace calor es imprescindible buggy. Un campo divertido con tee situados en lugares insólitos.
Celebramos la Comunión de los sobrinos y la verdad que salimos muy contentos, la comida estaba muy buena y sin ninguna pega posible. Los camareros muy atentos a cualquier petición.
Fantástico campo de golf cerca de Madrid con unas muy buenas instalaciones. Un campo muy divertido para jugar y con un personal muy profesional. La escuela de golf de diez.
Hemos jugado un grupo de amigos 4 hoyos provisionales por el tema de las heladas aunque habíamos empezado tarde y posteriormente todos los tees estaban juntos, (amarillas, azules y rojas, lo que ha desvirtuado nuestro partido y los hándicap que habíamos puesto
Miré alrededor del campo hoy e inmediatamente me inscribí como miembro. La dificultad del recorrido es bastante alta, por lo que podrás adaptarte a todas las condiciones adversas. Sin embargo, debido a que la diferencia de elevación es grande, debes montar en el bougie. Si no lo golpeas, podrías morir de agotamiento.jajaja
Cuando los neófitos difunden la idea de que el golf no es un deporte es porque no conocen este campo. Como castigo benigno debieran de recorrerlo, solo un par de veces andando, y serían más prudentes a la hora de opinar de aquello que se desconoce. Un campo exigente para los aficionados y de una naturaleza preciosa. ¿Que más se puede pedir?
Una auténtica pena, hacia tiempo que no comía tan mal y eso que el dueño dice que es de San Sebastián.
El sitio es precioso y el personal amable y atento pero la comida, un autentico horror.
Pedimos:
1. Merluza a la Romana: este plato suelen ser taquitos de Merluza rebozados con harina y huevo, pero nos trajeron 3 trozos que parecían pescada, grandes, muy hechos por fuera y totalmente crudos por dentro, la razón es que el pescado no estaba bien descongelado y el rebozado parecía empanado.
2. Pimientos del Padrón; nunca los he visto tan malos, grandes, sin sabor y las pepitas negras con aspecto desagradable.
3. Entrecot de Ternera, ya que el chuletón se les había acabado: El olor y sabor a podrido era MUY desagradable, me da la sensación de que la carne había sido congelada y descongelada dos veces. Devolví el plato y nos sugirieron….
4. Chuletitas de cordero: eran grandes, como de cordera vieja, poco hechas, sin sabor a cordero, sabían a la carne podrida anterior, ya que las harían en la misma plancha sin limpiarla.
En definitiva, gastamos 90€ y aún recuerdo el día con Asco.
Una auténtica pena. Igual el dueño es de San Sebastián…… de los Reyes….
Si cambian el estilo de hacer la comida igual vuelvo algún día, ya que vivimos muy cerca.
El campo duro, pero para ur de vez en cuando me gusta. El restaurante bien, camareros muy majos. Lo peor el señor que atiende el golf. Borde, antipático. El resto del personal muy bien
Me hice socio hace poco tiempo y la verdad que estoy encantado, el campo de golf es divertido de jugar y el entorno es una maravilla, por no hablar de la gente que trabaja allí que es muy amable.
Buen campo de golf al lado de Madrid. Las calles algo secas en verano, pero los greenes, muy cuidados, están impecables. Los desniveles en la mayoría de las calles lo hace divertido. Hoyos muy variados. Imprescindible coger buggie, pero tienen buenas ofertas
Campo exigente pero muy divertido. A lo largo de los 18 hoyos no tienes 2 golpes iguales (lies, distancias, diseño de Hoyos… etc). Puedes jugarlo todos los días, que nunca te harás el mismo resultado. Eso sí, si te lo haces andando acabarás con los gemelos de Roberto Carlos
El hoyo 19 espectacular. Gran variedad en el menú y todo delicioso.
El campo de golf más bonito y difícil de Madrid. Sólo pensar en el dog-leg del 2, la salida del 4 o el marco incomparable del green del 14 hacen que quieras jugar y retarte constantemente. Para los que no lo conozcáis os animo a hacerlo!
Vistas espectaculares en Casa Club, tranquilidad y una cocina de muy buena calidad, con personal amable que te hace sentir como en casa. Volveremos pronto
Quede impresionado del tremendo campo, muy desafiante, lo único, es que las flores que te encuentras en el fairway y rough, dificulta la visibilidad de la bola. Del resto, muy pero muy contento. Espero volver!
Es un campo infernal, dificilísimo lleno de barrancos y unas cuestas imposibles. Hay que hacerlo en boogie aún así como no se permite la regla de 90 grados hay que ir y volver al mismo para medir la distancia ya que no hay balizas con la distancia en ningún hoyo. Los greenes son irregulares con diferencias importantes en la rodadura, unos lentos otros rápidos con caídas anormales. Hay que salir a la carretera con el boogie y circular por carretera hasta la entrada del siguiente hoyo en dos ocasiones. En general es un campo muy difícil de jugar, aun siendo buen jugador y aún yendo recto se pierden muchas bolas por las caídas de las calles. En resumen ha sido una mala experiencia, no creo que regrese
Una buena opción para comer entre semana. Eventos de empresa y lo que surja. Incluso jugar al golf. El restaurante lo llevan Juan y Gino, unos profesionales. Los callos. De primera
El campo no esta mal, se necesitaria mas gente para mantener ese campo. La limpieza fe la casa club y demas instalaciones es nula, deberian de contratar a alguien porque da mucha pena verlo asi, y se te quitan las ganas de ir a jugar, tomar algo o lo que sea.
Campo de golf muy bonito, con muy buenas vistas. Complicado y jugando bola a la salida del tee de las mayorías de lo hoyos, lanzas la bola no viendo donde llega, la mayoría de las veces, perdiendo muchas bolas, sobre todo con poco nivel como es el mío. Imprescindible tomar cochecito, ya que hay muchas cuestas, sobre todo si uno no está en buena forma física. Repito, requiere buena forma física.
De los mejores y más “nobles” campos de golf de España, de uno de los mejores diseñadores del mundo. Vistas fantásticas a la Villa de Madrid y la Casa de Campo.
Campo en un entorno muy bonito, rodeado de monte, encinas y robles. Muy difícil, lleno de desniveles enormes y exigente físicamente. (Recomiendo buggy para el que no esté en forma). Personal del club muy amable.
Merece la pena jugar en este campo. Es un campo difícil con muchas cuestas y calles con pendientes, por lo que es un reto para jugadores que quieran probar todo tipo de golpes. El restaurante tiene un menú bastante bueno, y a un precio razonable
Campo difícil con muchas cuestas, bunkers poco cuidados y calles un poco secas. Vistas muy bonitas aunque nos hizo mucho viento. Recomenable para nivel medio alto. Abstenerse principiantes (como fue en nuestro caso)
Campo de golf divertido de jugar con una primera vuelta que te pone en tu sitio rápidamente si no estás fino. Mi recomendación es coger buggy. La casa club es amplia e ideal para comer en familia los fines de semana con una relación calidad precio aceptable.
En el restaurante hoy un magnifico " cocido madrileño", digno de algunos sitios especializados en este plato. Los ingredientes de buena calidad y muy equilibrados. El pan extraordinario.
Este campo de golf es auténtico! Disfruto muchísimo cada vez que vengo, el personal súper atento, largas y exigentes calles. Entorno muy agradable y buena comida en el chalet social
El restaurante ha sido un descubrimiento. Cocina tradicional de calidad, servicio atento y agradable. Como novedad, ahora esta abierto las noches de verano. Su terraza es muy agradable. 100% recomendable
El riego de los campos se realiza con aguas residuales sin tratar, provocando olores insoportables en todo el campo y las urbanizaciones colindantes. Tras comunicarnos con el club sin recibir respuesta, la proxima semana algunos de los vecinos pondremos la situacion en conocimiento de las autoridades sanitarias.
Un lugar fantástico. La terraza que mira a la piscina es una maravilla y envuelta de naturaleza. Si esta tarde se estaba muy bien, no quiero imaginarme lo que serán las noches de verano. Diseño chic en mobiliario y platos exquisitos y muy elaborados. Precio medio unos 30/35 euros y calidad, calidad.
Un club de golf de los clásicos de Madrid, a pesar del nombre. Las instalaciones están un tanto obsoletas pero cumplen. El campo serpenteante y retorcido, discurre por entre colinas como parte de un curioso paisaje urbano-silvestre. Con esa orografía está claro que resulta duro de andar y difícil de jugar, porque casi nunca hay un stance plano. Asequible para los Local Players pero cruel con los foráneos (Una bola al centro de la calle casi nunca es la mejor opción). Pocos Outs, pero mucho monte como OA hacen difícil el rigor normativo, teniendo que estimar demasiadas veces los puntos de entrada de la bola en dichos OA. Un pintado de blanco de esas estacas sería más oportuno pero complicaría los buenos resultados de muchos socios. Los greenes han ido mermando, cada vez son más pequeños e irregulares, pero francos. Pocos bunkers y con muy poca arena, pero bien ubicados lo complican aún más. Un campo entretenido y muy exigente que no deja indiferente a nadie. O te encantará su desafiante trazado o lo odiarás para siempre. Destacable, el personal de enseñanza y el de mantenimiento, siempre atentos y cordiales.
Muy limpio todo. Las pistas de tenis estan bien. 5 pistas de tierra batida y dos pistas rapidas. Tambien tiene pistas de padel, una pequeña cafeteria. Se puede decir que está todo bien cuidado.
Campo cuidado con bar y restaurante a buenos precios. Los profesores son muy buenos y las tarifas por clases privadas estan fenomenal para niños y grupos de 4.