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De las mejores residencias en las que he trabajado. Los usuarios están bien cuidados y atendidos. Se les trata con respeto y dignidad, el entorno es muy acogedor, la comida es excelente y la oferta de actividades es amplia. La directora, Mª José, es una gran profesional: humana, abierta y cercana.
Lo mejor su personal, muy profesionales y humanos con nuestros mayores. Dedicación exquisita. Pero se podría mejorar en dos aspectos: * Más personal de atención directa (gerocultores/auxiliares) ya que cada vez hay más personas dependientes que requieren mayor atención. * Instalación aire acondicionado en todas las habitaciones.
Mi madre siempre estuvo muy bien atendida por el maravilloso personal de la residencia. Profesionales capaces, dispuestos, cariñosos y atentos. Muy buenas instalaciones y un jardín para disfrutar.
Quiero mostrar mi gratitud por el trato recibido hacia mi persona en calidad de gerocultora en dicha residencia, más allá de ello es una gran familia con un objetivo común. Ha sido un placer compartir con todo este maravilloso equipo tanto experiencias como motivación, siempre con respeto, profesionalidad y valores. Los residentes son la máxima prioridad y el trato hacia cada uno de ellos es impecable. Recomendable 100% Hasta pronto!
Es muy duro llegar a esta situación y el personal de orpea te ayuda muchísimo con este paso! El personal atento y amable. Un sitio con un jardín muy bonito
He estado de visita varias veces y es un sitio muy agradable. A los ancianos se les ve bien, contentos en la medida de sus capacidades. Me parece un lugar acogedor
Si quieren que su familar pase sus últimos días sufriendo, llorando y siendo tratado como un simple número, esta es sin duda la mejor residencia. La falta de personal y la ineptitud, soberbia y despotismo de la gran mayoría de los empleados y dirección, hacen que de cara a los familiares se ponga una cara que difiere mucho de la realidad. Residentes sin atender correctamente, tratados a voces, recibiendo trato denigrante y aguantando burlas de muchas auxiliares. Lógicamente, dichos residentes son los que, por desgracia, son incapaces de contar tal situación a sus familiares. Empleados realizando jornadas maratonianas, con presión por parte de dirección y mandos intermedios. Gracias al incompetente y nefasto trabajo que se realiza por parte de la dirección, los empleados más válidos y responsables son despedidos, y el resto abandona voluntariamente su empleo por la presión a la que se ven sometidos. Ojalá algún familiar se percatara de la situación y sacara rápidamente al residente de este centro. Personalmente, no quisiera pasar la última etapa de mi vida en manos de personas que sólo nos consideran fuente de ingresos, sin un ápice de humanidad. Por favor, observen al personal del centro, su comportamiento, sus modales, y reflexionen.
El sitio muy bien, pero los baños cercanos al comedor principal nefastos. Reiteradas veces he recalcado el poner cubos de basura en esos baños y limpiarlos, que el olor es tan fuerte que dan nauseas. Nunca se me hace caso. El tema de las basuras es para hacérselo mirar. Es antihigiénico el verlo como está día tras día.
Nunca es agradable dejar a tus padres en una residencia, pero esta residencia tiene un aire especial. Es muy bonita, con un jardin precioso q les da vida a los mayores. Mi máximo respeto a los trabajadores. Todos son atentos. Comen bien. Les duchan todos los días. Rspero q sigan asi.
Espléndido centro, grandes profesionales y atención a mi madre y a todos nosotros perfecta. La información del estado de mi madre es precisa y profesional así como su alimentación que es algo a lo que Le damos una gran importancia. Gracias por todo.
Estoy muy agradecido por todos los cuidados que han dado a mi madre durante estos años. El personal muy atento y cercano. Hemos disfrutado mucho del jardín que tienen y el equipo técnico con el que realizan las actividades. Espero que sigan así para atender al resto de mayores. Gracias
Agradecer de parte de la familia de Juana Corvillo Ortiz, a todo el personal, el trato recibido durante el tiempo que ha permanecido en la residencia. Gran profesionalidad, Muchísimas Gracias.
Lugar agradable y tranquilo. Lo visitamos para valorar un posible ingreso.
La psicóloga es un auténtico encanto, muy interesada por todo tipo de cuestiones y los residentes la saludaban con mucho cariño al pasar. Las habitaciones están bien, de tamaño suficiente, sin más. Los residentes están divididos por patologías para atender a todos de manera adecuada. Hacen mucho incapié en las visitas de familiares teniendo, incluso, un comedor a parte con mantelería y cubertería por si la familia desea comer con el residente. El salón estaba algo más lleno de gente de la que me gustaría.
Buen sitio a considerar para un ingreso de un familiar mayor, ya sea por temporadas o permanente.
Mi abuela está en esta residencia desde hace tres años y solo puedo destacar el trabajo y el valor humano de los profesionales que tiene. Gracias de verdad por hacer la vida más fácil a mi abuela.