Residencia y Centro de Día ORPEA Madrid Sanchinarro

Quería poner en valor de una excelente fisio de la residencia Orpea Sanchinarro, Gema, que no se la está valorando el gran trabajo que está haciendo con mi madre y más residentes, dedicada a trabajos de fuerza para fortalecerles y que tengan así mejor calidad de vida.

Mi agradecimiento al gran equipo de atención a nuestro padre.
Se siente feliz, estimulado y ha mejorado notablemente su movilidad gracias a sus físios,que se esfuerzan para que a sus 97 años continúe activo.
Valoramos muchísimo tanto esfuerzo personal,tanta implicación y cariño.
Nunca agradeceremos lo suficiente vuestra ayuda.

Agradezco a Gema y Javier la atención y profesionalidad dispensada a mi madre de 96 años que ingreso con fractura de hombro y que se esta recuperando afortunadamente de su lesión a base de trabajo, constancia y disciplina por parte de la paciente, forman un buen equipo y Gema está pendiente de su mejoría día a día en la marcha de los ejercicios y terapia.

Quería poner en valor el gran trabajo y esfuerzo de una excelente fisioterapeuta de la residencia Orpea Sanchinarro, Gema, que está haciendo con mi madre y más residentes, dedicada a trabajos de fuerza para fortalecerles y que tengan mejor calidad de vida.

la poca profesionalidad de la encargada de personal de la mañana Olga y el poco personal con el que cuenta repercute en los empleados y en los residentes Si un residente paga esa gran cantidad de dinero se merece que le traten con amor y cariño y respeto pero claro a la hora de sacar el trabajo solo son un número y los detalles no importan

Lamentable residencia así como su gestión por parte de la dirección y de la trabajadora social que tiene mucha deficiencia. Tienen ya varias denuncias por robo cometidos por propios empleados del centro además de por la mala gestión en la pandemia, además de eso van a ser denunciados por su supuesta mala praxis en la medicación de los residentes puesto que según su directora puede usarse una medicación personal de un residente con otro residente si toman la misma.demencial. Además de tener serías sospechas sobre sí mismo mi mujer fue sedada o no, para que viera que la estaban robando y no se capaz d decir nada por miedo o imposibilidad. Mi consejo busquen la residencia para cuidar de sus familiares

A very dear friend of mine is now living here and she is very well looked after. She's very comfortable and I'm glad she's settled in so well.

Hoy han sido denunciados en la comisaría de robo a mi madre, en el día de ayer 4 de mayo por parte del personal del centro, en concreto una trabajadora que está supuestamente al cuidado de gente con perdida cognitiva. Tenemos constancia y asi lo hemos hecho saber en la denuncia que mi madre fue sedada con algun farmaco puesto que de otro modo mi madre no hubiera dejado el bolso a nadie y que cuando regreso a casa estaba desencajada, se tambalea y estaba somnolienta pero a pesar de todo ello, su discurso es en todo momento coherente, pudiendo identificar a la persona que la robó y manteniendo en todo momento su versión sin cambiar ni un momento el hecho, aprovechando una de las veces que les acompañan para que fueran al baño, cosa que mi madre tiene la movilidad perfecta y no precisa de que la ayuden y que tuvo que dejar el bolso, vio perfectamente como está persona cogio el dinero y se lo metio en el pantalón de trabajo.

No es la primera denuncia que tienen a este respecto, de gente que le ha ocurrido lo mismo, si fuera la dirección del centro empezaría a pensar que clase de empleados son lo que tengo.

Se han portado genial con mi abuelo en sus últimos años! Muy atentos y cariñosos todos! Gracias

Te tratan muy bien y también a los residentes, tienen unas buenas habitaciones y muy buenos sitios para estar con el familiar que está allí. El único pero que le pongo es que a mí padre le falta ropa.

Solo tengo buenas palabras para describir como está mi madre en este centro, tranquila, a gusto, es su casa.
Gracias por la atención que recibe.

Mi familia quiere agradecer a la Residencia Orpea Sanchinarro todo el cariño y atención que recibió mi madre durante los 8 años que vivió en ella, en especial en sus últimos momentos, en los que nos permitieron acompañarla y pudimos comprobar la profesionalidad, humanidad y cariño de todo el personal con el que trataron tanto a mi madre, como a mi hermano y a mi.

Hace unos días tuvimos que trasladar a mi madre del hospital donde estaba ingresada por un ictus a la residencia Orpea Sanchinarro, para que pudieran darle la atención terciaria que necesita en estos momentos y que nosotros no podemos proporcionarle. El trato recibido el día del ingreso fue increíble, tanto del director, Javier de Pablo, como de la doctora, Carmen, y de la trabajadora social, Silvia. Dados los momentos tan difíciles por los que estábamos pasando supieron comprendernos y darnos el calor que necesitábamos.

El cumplimiento de los actuales protocolos ha hecho difícil no poder verla durante un tiempo, pero pasado el periodo reglamentario nos hemos llevado una gran alegría al ver a mi madre sentada de nuevo, algo que parecía que no iba a ser posible. Está guapísima, con su pelo arregladito, su ropa habitual y ya por fin alejada de los tristes camisones de hospital. Diariamente recibe la rehabilitación preceptiva y el tratamiento médico que le ayude a recuperarse, estando pendientes en todo momento ante cualquier incidencia que se pueda producir.

Solo puedo dar las gracias a todo el equipo de la residencia Orpea Sanchinarro por el trato y la atención que está recibiendo mi madre. Se nota el cariño que ponen en su trabajo.

A mediados de febrero ingresamos a mi madre en la residencia desde el hospital en el que estaba siendo tratada por un problema de ansiedad y estres muy acusados. Al darla el alta desde el Hospital nos aconsejaron seguir el tratamiento en un centro residencial ya q necesitaba mucho cuidado y atención para seguir las rutinas diarias y recibir el tratamiento. Desde el primen instante el trato ha sido muy cercano y cordial. Los comentarios de mi madre sobre todo el personal que la atiende a diario (auxiliares recepción, técnicos, terapeutas, fisios, enfermeros, animadores.) son siempre positivos, la hacen sentir segura, atendida y protegida. Y no ha sido nunca una paciente fácil de tratar por lo q tiene mucho más mérito. Sólo puedo tener palabras de agradecimiento porque haya mejorado sustancialmente su calidad de vida y q no se haya sentido nunca como una extraña.

A finales de año llevamos a nuestro padre (90 años, con alzhéimer, recién pasada la COVID), a Orpea Sanchinarro. Veníamos de otra residencia, no es esta nuestra primera experiencia, y a día de hoy solo podemos estar agradecidos por el estupendo trabajo que están realizando con él. Mi padre está despierto, vuelve a andar a ratitos, participa en distintas actividades y, fundamental, podemos verlo y tener con él un contacto humano (con todas las precauciones necesarias, por supuesto), ese contacto que apenas se ha tenido en cuenta durante todo este tiempo y que tan importante es para nuestros mayores. Además, nos mantienen informados con regularidad y siempre que les pedimos o consultamos algo, nos lo resuelven rápidamente. Ojalá podamos seguir contando esto mismo mucho tiempo. ¡Gracias!

Nuestra experiencia ha sido muy buena. Mi padre estuvo 7 años en este centro y jamás tuvimos queja ni nosotros ni él. El personal atento, cariñoso y cercano. Yo iba casi todos los días y pude ver de cerca el trato y la atención que ha recibido. Recepción, enfermería, auxiliares, asistente social, dirección.todos. Antes de la Pandemia la vida era muy familiar, podíamos con toda libertad acudir a ver a nuestros familiares, las veces que quisieramos, los nietos, hijos, amigos, participando en todos los eventos y actividades. Ahora hay que respetar las normas y por el bien de todos y tienen un control exhaustivo de entradas y accesos, así es la vida en estos momentos, difícil. Pero aún así, se comportan de forma muy cariñosa para aportar el cariño a los abuelitos que tan duro está siendo para todos en estos momentos.

Para mi fue muy mala suerte saque a mi padre a los 12 días y porque no pude antes falta de personal para los usuarios que avía y mi padre era dependiente le tenían que hacer todo pero cuando podían o quería me le en con trava todos los días hasta las cejas de pis lo pasé falta hasta que le saque orpea Villanueva de la cañada

Soy familiar de un residente, respondiendo a la tal Gema. No valía la valoración de susodicha siendo que las visitas q realizaba eran en una condiciones vergonzosas tal es así que apestaba a porro y alcohol tanto ella y su marido. Exijia trato preferencial ante cualquier residente, tal es así q un día me enfrente a ella por q estaban atendiendo a mi padre y ha ido ella muy prepotente a decirle a la pobre Auxilir que preferencia tenía su padre. De todas las residencias que podido estar asignadas por la comunidad está es la más decente. Solo invito a una reflexión: SI Tan malos son.por q siguen en ese centro? Hay miles de residencias dnd pueden ir y sobre todo si lo están pagando. Opino q si acusamos a esta gente de maltratadores.creo q somos mas los que seguimos en ella.

Un director sin ningún tipo de ética, mentiroso, que se dedica a tapar los problemas con sus engaños.
Tanto la directora regional como el director general son conocedores de los problemas y no han puesto los medios para solucionarlos.
Para ellos todos los problemas son hechos puntuales.
Residentes con caídas que producen roturas de cadera, traumatismos en cabeza, contusiones múltiples sin que se den explicaciones a los familiares.
La comida que les dan una autentica bazofia. Pongo fotos para que vean la comida que sirven a diario, luego se extrañan de la desnutición de los residentes.
Dicen que cambian pañales y les demostramos que vamos por la mañana y firmamos el que tiene nuestro familiar y por la tarde, después de la comida, sigue con el mismo.
Se equivocan en los tratamientos médicos.
Pérdidas continuas de ropa.
Falta de personal
Muy mala higiene.
Y.muertos, muertos, muertos, muertos, muertos, muertos, pero ellos con la conciencia tranquila de su buen hacer.
NO LLEVEN A SUS FAMILIARES A ORPEA. NO TIENE REMEDIO. NO COMENTAN EL ERROR QUE COMETÍ YO, DENLES UNA OPORTUNIDAD A VIVIR DIGNAMENTE.

La experiencia más traumática que jamás he vivido. No llegué a tiempo para cambiar a mi padre, estábamos en lista de espera en otra. Lo que ha sufrido el pobre y lo que he sufrido yo. Muy mal antes de la pandemia. Horror durante la misma. Han hecho lo que han querido impunemente y a puerta cerrada.

De corazón, aviso a familiares, por vuestra paz mental y por la integridad de vuestro familiar, jamás dejéis a nadie en esta residencia. Ni regalada.

Absolutamente todo es infame. Es vergonzoso el trato inhumano que se les da a los residentes, agravado, si cabe, cuando son dependientes.

Tiene claridad, con sus plantas no parece que estés en invierno, te lleva a estar como en algún sitio tropical solo claro que le falta el mar, pero es rte muy alegre, elegante tiene clase, y sus empleados educados, sabiendo servir y estar a la altura que el comensal se merece y que el rte también, su gastronomía excelente, mi más sincera enhorabuena, Felicidades

Gran atención, están pendientes de las medidas de seguridad. Varios ejercicios para los que residentes. Te explican la situación mediante correos de tal forma que estás al corriente de lo que ocurre.

Todo lo que se vende en esta residencia es un engaño. Mala comida, mala atención, pésima higiene, instalaciones que se enseñan y no se usan, falta de personal. El haber entrado en esta residencia ha sido la peor de todas las decisiones, si alguien lee esta reseña y decide no ir servirá para algo. Todo menos un trato humano hacia las personas que residen.

Buenos días
Soy la hija de josefa recio que ha estado derivada dos meses con vosotros
Quiero manifestar mi agradecimiento a todos pero de un modo especial a Silvia la trabajadora social con la que he tratado diariamente y ha cuidado a ni madre de 10
Un recuerdo a Graciela
Geacias
Laly

Mi madre falleció en esta residencia víctima del COVID19, denunciamos la falta de personal, medios y recursos en esta residencia en el mes de Octubre 2019.en Marzo y Abril 20 sucedió lo inevitable, 70 personas fallecieron, muchas de ellas consecuencia de la falta de atención. Ojalá se haga justicia con esta empresa, interesada tan solo en obtener rentabilidad y benificios para sus accionistas en perjuicio de la personas mayores.

Mi padre estuvo 10 meses, entro andando y falleció desnutrido, con fallo multiorgánico.
La falta de personal hizo que no se le atendiera correctamente. Las médicos son soberbias y déspotas.
A pesar de las diferentes quejas realizadas a las 3 directoras que estuvieron en el periodo que estuvo ingresado (10 mese), no hubo ningún mejora, al revés, cada vez la situación era peor.
No me extraña la situación que están viviendo ahora.
Lamento muchísimo que nadie haya actuado antes.

Por favor, busque otra opción.
No cometa el mismo error que yo.
Efectivamente, todas las residencias sufrieron saturación durante la crisis del COVD19, pero NADA justifica que mi padre falleciera por desnutrición y deshidratación. Eso es INHUMANO y es una conducta CRIMINAL.
Una empresa multinacional, que cotiza en la Bolsa de Paris, con beneficios millonarios no tiene excusa para argumental falta de personal.

Y no, no fue culpa del virus. Meses antes te encuentras con infecciones de orina, pañales que no se cambian (leer el resto de críticas), horas y horas sentados viendo la TV, falta de higiene, falta de medios. En fin, dantesco. Luego viene inspección, y como avisan, ese día están todos en sus puestos y con una sonrisa.

También tienen una sala de hidroterapia en la primera planta, pero solo se utiliza como almacén de residuos. En el folleto y en la visita guiada es muy bonito todo, que si colorterapia, que si terapia cognitiva, fisioterapia.olvídate, no esperes que lleven a tu familiar, lo tendrás que hacer tú mismo.

Lamentable de principio a fin

Cuando el residente es “válido” las cosas no salen tan mal, ya que es capaz de “luchar” por sus propios intereses y se le hace algo más de caso, pero la cosa cambia drásticamente cuando su estado tanto físico como cognitivo empeora y necesita más cuidados…en la unidad UPAD, unidad protegida y más vigilada (según te cuentan cuando quieren internar a tu familiar en esa unidad), los residentes están bastante abandonados, nadie les hace caso, actividades casi nulas.

En la 2º planta (deterioro moderado) el hacinamiento es exagerado, los residentes ni siquiera caben en las salas, cuando te asomas ves un montón de personas mal colocadas, no se puede prácticamente ni entrar ni salir de la sala (sobre todo la de la televisión), vas sorteando sillas de ruedas y sillones “aparcados” de cualquier manera, y para sacar a tu familiar de ahí antes tienes que mover unas 5 personas ya que si no es imposible… en verano en esa planta hace calor extremo, este verano pasado no funcionó correctamente el aire acondicionado ni un solo día, y me constan numerosas quejas alertando de la situación…

En cuanto a las comidas, la calidad es nefasta, sin variedad alguna, el nombre de los platos muy sofisticado, pero luego cuando lo tienes delante la cosa cambia…No se respetan las dietas de los residentes (alergias, diabetes…), por no hablar de la comida para personas con riesgo de atragantamiento, “textura” lo llaman…vomitivo, sobre todo el de pescado, tira para atrás hasta el olor…

De la dirección del centro he conocido a unos 8 directores a cuál peor, pero sin lugar a dudas la peor es Noelia Ortega, la “actual” directora, carece de empatía, da malas contestaciones y su educación es nula, nunca da la cara para solucionarte un problema, de echo la última reclamación interna que puse hace meses ni siquiera ha sido tramitada y nadie ha contestado…una verdadera vergüenza. Los departamentos no se comunican lo más mínimo, solo para ponerse de acuerdo en lo que van a decirte cuando algo ha salido mal y dar la misma versión de lo sucedido.para eso sí.

Dudo mucho de los títulos de algunos trabajadores (cuando mi familiar falleció en el centro, el médico que estaba ni sabía ni hacer el certificado de defunción…tuve que decirle lo que poner en cada casilla, incluso la causa de la muerte ya que no él sabía lo que poner… cuando mi familiar llevaba una hora fallecido en la habitación, apareció para preguntarnos a los familiares si notábamos que respirara…le tuvimos que pedir que hiciera aun así el electrocardiograma de rigor para certificarlo, a lo que mejor ni hablar… tras otra hora, apareció y no sabía cómo hacerlo, no sabía dónde poner los cables, le sobraban algunos…bochornoso).

Pastillas que se dejan encima de las mesas en unidades “vigiladas” con personas que igual se lo toman, igual no, o incluso se lo toma la persona de al lado… si a tu familiar le mandan tratamiento antibiótico ya puedes estar tú las 24h que ni por asomo dan todas las tomas prescritas y mucho menos a las horas que corresponden… hay una enfermera llamada Paty que aparte de ser déspota, ni sabe dar medicación, ni hacer una cura… he visto cómo tomaba la tensión a algún residente por encima de la ropa… Cuando mi familiar internó en el centro era totalmente diferente, nos gustó por la calidad interna y la empatía hacia las personas más vulnerables, pero el declive ha sido exagerado.

ACTUALMENTE NO RECOMIENDO ESTE CENTRO PARA NADA.

La visita que realice no es la mejor que he visto, además me consta que a los empleados no les tratan bien.

No me gusta el servicio de recogida de personas que acuden al Centro de Día.

NO te hacen una llamada perdida, cuando se están acercando a la casa, al recoger o dejar a la persona que está en el Centro de Día.

NO llaman al timbre, si el coche está en la misma puerta, donde vive la persona que acude al Centro de Día.

Y en el minuto exacto de la recogida prevista y estipulada se marcha el coche, aunque haya estado diez minutos antes de su hora esperando, y sin llevarse a la persona que ha ido a recoger.

Cuando en todos los centros de Día del ayuntamiento de Madrid, te hacen una llamada perdida al teléfono, antes de llegar a recoger a la persona, para que la persona este preparada y al llegar a la casa, llaman al timbre para recoger o dejar a la persona, que tienen a su cargo.

Horrible residencia para personas mayores, que pena que me daba ver a los ancianos alli. Mi suegro estuvo sólo dos semanas y menos mal que estaba con él un cuidador que teniamos en casa, sino estoy segura que algo le hubiera pasado. Falta de higiene, descontrol absoluto en todo; ropa, personal de enfermeria, (no sé los ancianos que deben tomar medicinas como lo hacen, porque estoy segura de que no se las administran)
Para que le llevaran una nueva televisión tardaron dos dias.no te quiero ni contar con las cosas importantes.
Debia de haber más control por parte de la administración en este tipo de residencias, son personas mayores que ya están en el final de sus dias y deben de ser cuidados y tratados como se merecen, como personas que son y no como objetos a transportar de un sitio a otro.

Llevé a mi padre por proximidad y poder ir todos los días. Estoy solo yo de familiar. Las instalaciones me parecieron buenas y la habitación que le tocó muy amplia. Pagamos algo más de 2400 euros al mes. 80 euros cada día.
Al poco tiempo de estar ahí empecé a ver las deficiencias. Muy poco personal. Imposible que puedan llegar a todo. Comida pésima. Mala calidad. Raciones mínimas. Mi padre está suelto continuamente. Ya ni le tratan. Si tienen dieta blanda no la dan porque no hay coordinación entre lo que se pauta y lo que realmente se ejecuta. Incluso he visto a gente de la calle ponerse el mandil y repartir platos, sin saber que es lo que tiene que comer cada uno.
Da igual que se sea diabético, dos primeros y dos segundos a elegir, con su correspondiente pan, el que haya. Jarras de agua con mugre pegada, incluso migas de la comida anterior. Pastillas encima de la mesa para que cada uno se sirva por si mismo.
He llegado a ver días con solamente dos auxiliares para todo el comedor. Médicos, salvo alguna excepción, con muy poca idea de su profesión. Malos modos, empatía cero. Alguna vez me he preguntado a mi misma en concreto sobre una de las médicas si tendrá algún tipo de psicopatía, no lo sé. Mucha rotación.
La residencia nunca ha estado bien pero últimamente es un auténtico caos. Es insostenible.
En el caso de mi padre con Alzheimer, hasta en 4 ocasiones he detectado que no le estaban poniendo los parches. Hoy ha sido la última vez. La primera vez me dijo el director que no tenían a nadie en farmacia. Yo aluciné ante la gravedad de esa afirmación. No hay encargado de farmacia así que no se hacen los pedidos ni se medica al paciente.
Después de eso una caja de 50 parches duró 30 días. Ese día detecté que no se lo estaban poniendo porque no había (le tendrían que estar sobrando 20). A pesar de que voy todos los días hoy ha sido el último día que he visto que no se lo han puesto. Donde están sus parches. Tiene receta electrónica.
Preguntas y nadie sabe nada todos te dicen que falta personal y es así porque yo lo veo. A parte no hay coordinación entre médicos, farmacia, comedor, auxiliares y resto de personal. Van como pollos sin cabeza porque son pocos, muy pocos para tanta gente con tantas necesidades específicas. Varios trabajadores del centro me han reconocido que no traerían aquí a sus padres.
Los abuelos tienen hora para ir al baño y para beber. Si le entran ganas a otras horas pues se siente. Las auxiliares tienen también que preparar el comedor o hacer otras cosas. No pierden ni un minuto. Estar en dos sitios a la vez es difícil.
Las infecciones de orina es " algo obligado" Algunos tienen suerte y se toman el antibiótico a otros no se les aplica aunque este pautado. Que se les de la medicación está en función de lo persistente que sea el familiar y con suerte.
En la planta 1 si pasas cualquier día sobre las 6 de la tarde y hasta las 9 o mas, te encuentras con un máximo de tres auxiliares para atender a unas 60 personas calculo. Es decir tienen que dar de cenar, llevar a la habitación, cambiar de ropa, asear, pañales y demás a unas 60 personas entre 3.así te encuentras grupos de abuelos por los pasillos solitos en sus sillas, grupos en la sala donde están todo el día solitos. Desolador. Mientras los auxiliares no paran. Me he equivocado. Espero poder sacarlo pronto y encontrar una solución. No es fácil. La cuenta de resultados del grupo Orpea va viento en popa. Los accionistas felices. La fiesta la pagan los abuelos y los familiares. Ofrecen fideos a precio de gambas y todo se traduce en negligencias continuas. Actualmente no hay ningún familiar que no se esté quejando. Vayas cuando vayas te vas a encontrar con alguien protestando. Familiares que están sufriendo en sus carnes y en la de sus seres queridos. Mayores vulnerables que muchas veces no pueden ni quejarse pero si lo hacen las secuelas de un mal servicio. El problema lo conocen. Falta de personal. Pero el negocio es el negocio. El dinero manda. La residencia ha tocado fondo.

Las personas están bien atendidas y las trabajadores son amables tanto con los residentes como con las visitas además está limpio y cuidado

No es una opinión, es un testimonio
Objetivo, para dignificar y mejorar el cuidado a los ancianos
Mi madre 93 años y dependiente para todas las necesidades básicas
No supe ver que Orpea no cumple dichas necesidades
En 24 meses ha tenido 16 infecciones de orina (no voy a comentar más de algo evidente)
Ha perdido 5 dientes en dicho tiempo (ya no tiene dientes en maxilar inferior)
En este tiempo hemos tenido 5 directores
Los pequeños logros como sacarles del salón, estar, comedor sentados en una mesa cuadrada con miradas al infinito, son de una hora escasa
Los paseos por el jardín solo los ejecutan,
los familiares

La ropa que desaparece no asumen responsabilidad de dicha perdida por parte del centro A pesar de tener notificaciones de dichas prendas /objetos
Personal auxiliar salvo excepciones incompetente para este trabajo.
Hechos e incidencias varios, notificado en su momento a la dirección del centro y Comunidad de Madrid
Espero sea útil para alguna persona, que se vea en la misma situación
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La residencia está limpia y sus empleadas son muy majas. Gran variedad de actividades y en el menú.

Falta personal, directora muy deficiente y mal educada al igual que Rosa a coordinadora, mala organizaciom. Hacen un aperitivo al mes que cada vez es peor.