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Típica taberna madrileña en pleno barrio de las letras.
Comida: solamente pedimos vermú y croquetas y muy bien. Las croquetas eran caseras de verdad y el vermú muy rico también.
Lugar: una taberna antigua en las que da gusto tomar un aperitivo. Mesas y taburetes pequeños de madera, cómodos no, pero muy castizo. A la parte de comedor no pasamos.
Servicio: nos debe haber tocado el camarero antipático. Al que le pides algo y te dice que ahora no puede pero también se le olvida después.
Precio: vermú a 3,20. Media de croquetas (3) a 6,5€.
Han perfeccionado lo que hacen y no necesitan cambiar. Camareros con chaqueta blanca que ofrecen la mejor comida, buen servicio y buen ritmo. Comí bombones de morcilla y guiso de callos a la madrileña. Botella de rioja. Súper feliz con mi comida.
Un lugar excelente para comer comida casera. Mi experiencia ha sido muy buena. Su servicio encantador y la comida espectacular. Lugar que recomendaré sin lugar a duda! Por cierto, el cocido madrileño son los jueves!
Fabuloso descubrimiento. Un clásico de categoría que redescubre platos de toda la vida con calidad y excelente atención. Me gustó la croqueta de jamón, aunque la de calamar me pareció muy lechosa. Fabulosos el bacalao rebozado y la tortilla. Bueno estaba también el pincho moruno y la tarta de la abuela. Quizá el que menos me convenció fue el montadito de calamares, pero aún así estaba bueno. El trato maravilloso, la verdad.
El lugar tiene CASI 200 años (en 4 años los cumplen) hay un restaurante adelante con barra y mesas pequeñas y un restaurante a la carta en la parte de atrás. Nosotros fuimos al de adelante, nos sentamos rápido apenas llegamos. Los mozos que atienden mesas y los de la barra, TODOS son señores muy amables que hacen pasar un muy buen momento a los clientes. Pedimos tortilla, brownie de morcilla y 1/2 porción de Rabo de Toro estofado. Todo estaba muy rico. Tomamos dos aguas, gastamos 30 Euros en total. Excelente relación precio calidad. El servicio es muy bueno y el ambiente de bodegón antiguo se siente en todo momento.
Tapas perfectas, servicio un poco largo debido a la multitud que se apresura a cenar allí. Ir allí, lugar para descubrir y muy típico: buen ambiente. No olvides probar el guiso de rabo de toro yum-yum
Estamos encantados de haber descubierto este lugar. Tuvimos un rato maravilloso. El servicio fue perfecto, los camareros muy amables. Comimos en el bar lo que hizo que la experiencia fuera aún más agradable. Nos encantó comer los platos típicos, ¡todo estuvo delicioso! ¡Lo recomendamos encarecidamente!
La comida estaba espectacular, todo riquísimo y comida tradicional. Lo único que me pareció una pena es, siendo un sitio con comida rica, céntrico y un local con mucho encanto, el servicio deja mucho que desear porque daba la impresión de que los camareros se enfadaban cada vez que pedías algo y muchas veces contestaban de malas maneras como cuando nos dijeron que nos teníamos que ir porque había otro turno a las 22 (lo entiendo pero se puede decir de buenas maneras y no como nos lo dijeron).
Excelsos callos y croquetas en taberna clásica. Siempre lleno de turistas, pero no es un tourist trap. Mejor la barra que la sala. Un imprescindible de Madrid.
Lugar histórico, lleno de encanto.personal muy amable e informal.los platos que se comen son riquísimos.puedes elegir si comer en la zona de la barra de forma más informal o en el propio restaurante.dale un intento
Excelente comida tradicional madrileña, bien presentada y a precio asequible, si llamas es probable que te digan que están completos pero si llegas pronto, es casi seguro que conseguirás mesa.
A small bar serving authentic tapas frequented by Madrilenians. They serve a good selection of dishes and beer. Not to be missed if you are in the area
Excellent service! Jimmy is the man, as my BF said. On the top of everything, super friendly, and tapas were delicious. I wanted to show to my boyfriend the soul of my hometown and we found it in the same old places. Can’t wait to go back!
Restaurante centenario de Madrid. Menú discreto pero funcional, especializado en cocina típica. Se come de carta y la calidad / precio sobresaliente. El rabo estofado y los caracoles a la madrileña de muerte. Personal muy agradable. Recomiendo reservar.
Estuvimos ayer Domingo y como siempre, impresionante. La atención que tuvieron siempre sonrientes y no hablar de la comida, buenísimo todo. Merece la pena probarlo!
Lugar excepcional para probar la cocina madrileña. Vale la pena los callos y el rabo de toro, está excelente. Pero sobre todo fue increíble probar las croquetas de sepia y calamar, por fuera hechas perfectas, por dentro jugosas. No recuerdo unas croquetas mejores es los últimos meses. La leche frita también está de 10. Buena atención. Para repetir sin dudarlo
Como voy a volver a pedir gambas al ajillo yo ahora en cualquier otro sitio despues de haber probado las ORIGINARIAS de casa Alberto? Espectacular, muy buen trato.
Un'istituzione! Valle la pena mettersi in coda per entrare in questo storico ristorante con ottime tapas e buon vermut. Personale gentile e servizio rapido
Lugar con el encanto clásico de la hostelería de toda la vida. Los productos de muy buena calidad. El menu por 17 euros calidad precio muy bueno. Al ser todo recien hecho en cocina un poquito de paciencia pero la experiencia totalmente positiva
Estas en Madrid y en el Centro, asi que un vino, una croqueta, unos callos, unos torreznos.posiblemente uno de los pocos locales que quedan en el Centro qué saben a Madriz.
Espectacular.uno de los lugares más emblemáticos de Madrid.increíbles sus croquetas huevos a la cervantina.mollejas de cordero al ajillo.todo ello en un ambiente centenario
Muy recomendable el restaurante, croquetas de calamares con ali oli muy buenas, y luego mencion aparte para el rabo estofado y callos madrileños. Postres buenísimo, tanto el arroz con leche como la tarta de queso.
Clásico donde los haya. A tope, y siempre camareros profesionales y con sonrisa un negro (el blanco) y otro negro (el negro). Bromas de ellos! Lástima que sea un sitio tan chico.
Un clásico de Madrid, langostinos al ajillo y croquetas de calamar estan exquisitos, y el rabo de toro se deshace en la boca. La decoración te transporta al pasado, es pequeño así que si quereis comer os recomiendo reservar.
El vino es malo y caro las tapas son poco variadas y no están nada ricas tendrá mucho nombre y mucha tradición pero la verdad es que es una porquería y además está lleno de gente
Preciosa Taberna castiza k aprovecha su renombre para dar gaTo por liebre. Tapas impresentables, incomibles. Si chicote os pillara tendría para 3 programas tan ácidos como lo que nos intentasteis colar.con todo lo bueno que ofrece Madrid por supuesto que no lo recomiendo. A robar a un camino
Restaurante típico, en zona inmejorable, con comida clásica española. Probamos los tacos de bacalao frito y la tortilla de patatas, todo buenísimo. Un detalle importante: el pan también era bueno, lo que no ocurre con tanta frecuencia como sería deseable. El trato, amable aunque con ese estilo directo y sin artificios común en la zona que, personalmente, me gusta. El equipo tiene oficio y eso se nota. Los precios no son especialmente baratos, pero los hay más caros a pocos metros.
Estuvimos el fin de semana pasado, fuimos desde asturias, dos adultos y un niño comimos un plato cada uno, nos pusieron un aperitivo.los platos fueron lasaña de pato, albóndigas a la pepitoria y pixin con langostinos.todos muy ricos, pedimos dos postres; una tarta de queso, que es la más rica que he probado y de calidad, y el postre que lleva chocolate caliente y helado de vainilla.todo genial, el sitio muy bonito y el ambiente y camareros agradables.espero poder volver.
We went just to taste the pork scratchings as they are supposed to be very good. They were just normal. We wanted just a little plate but the waitress refused to serve us that and gave us a full portion (while people next to us got a little plate).