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Lo primero a destacar es que el café es malo, malo, malo.vamos agua sucia.es una pena que la restauración española en general no cuide un poquito más este detalle.no digo yo de comprar un café de especialidad de 30€/kg.pero algo decente que no sepa a quemado y esté rico.es lo mínimo. Y aquí es para escupirlo.infame.lo probé y lo dejé entero.¿me preguntaste tú si lo dejaba por algún motivo?.ellos no, lo cobraron y tan felices. Luego la comida.pues nada del otro mundo.en concreto yo pedí varios menús para llevar en fin de semana y eran escasos, caro para lo que era (guiso de rabo de toro), y aunque el menú incluía pan, bebida y postre, se ve que si es para llevar, se quedan el pan y la bebida.no me preguntes por qué. Volveré al pueblo.pero cambiaré de bar. El servicio bien, normal.
Un lugar donde seguro que si volvemos a Robledo repetiremos. Un salón amplio y calentito. Camareros muy cercanos y superamables. Estábamos como en casa. Tienen mucha variedad de todo y muy bueno con bastante cantidad de comida en los platos. La verdad es que nos sorprendió a todos lo bien que cenamos y sobre todo el ambiente.
Sitio muy recomendable. Comida buena de cantidad y sabor. La ensaladilla rusa, los torreznos y los rejos, debes de probar. El ambiente es agradable ya sea para comer que para cenar. Tiene mucha terraza ideal para comer o cenar.
El poncho de tortilla espectacular, fuimos recomendados por unos amigos de Madrid. Al ser verano y fin de semana pues tienes vistas a las motos que pasan por la carretera, así que tan agusto.
Absolutamente maravilloso. El personal es encantador, la comida está buenísima pidas lo que pidas y la terraza cubierta es súper agradable. Las mejores patatas revolconas que he probado nunca.
Siempre comemos de maravilla.habíamos reservado una mesa para cuatro y al final solo fuimos dos.hemos comido una ensalada templada, riquísima, dos entrecot y una tarta de queso, cafés y vinos.todo espectacular.muy recomendable.
Magnífica la atención, excelente trabajo el del chef, y un ambiente tranquilo, bonito y acogedor. Enhorabuena por vuestra profesionalidad. Seguiremos viéndonos. Por cierto, uno de los mejores rabo de toro que he comido en Madrid. Hacía falta un lugar así en la sierra.
Una terraza muy agradable, con parque interior para niños. Recomiendo los chipirones, las croquetas de jamón /boletus y la parrillada de verduras. Los camareros, muy agradables y profesionales. Volveremos.
Se come bien y hace nombre al apellido. Un poco caro. Pero lo malo es el trato de los dueños. Bastante bordes y antipáticos. Lo dicho anteriormente es de los anteriores propietarios, pero afortunadamente han cambiado. Solo he ido un día a comer y hubo sus más y sus menos. No puedo dar una opinión objetiva, de momento quiero volver otras veces, pues lo tengo al lado de casa, y aunque hubo problemas finalmente pidieron disculpas y se arregló todo satisfactoriamente. Y lo que si tengo claro es que la comida estaba rica.
Restaurante para comer carne. Se come bien, pero ya lo dice el nombre, calidad precio nos pareció muy caro. Se podía mejorar también la variedad en la carta.
Comimos en la terraza, un trato muy amable, comida buena, quizás un poco elevado el precio, pero merece la pena. Podían habernos invitado a un licor o algo por del estilo.
¡Terraza muy agradable! Hemos probado el menú entre semana, nos pareció muy generoso y bastante económico. También hemos comido de carta el fin de semana, todo muy bueno; destacaría la carne con el lomo alto
Genial la atención y la comida! Teníamos ganas de probar y no nos defraudó. El personal es muy amable y te ayudan con la elección. Las croquetas y el lomo de ciervo muy buenos. Repetiremos!
Todo riquísimo, especialmente los chipirones encebollados y las croquetas. El tiramisú de los mejores que he comido, hasta me llevé uno para que mi hija lo tomase en casa. Las chicas que atienden las mesas encantadoras, da gusto ir a sitios así donde el personal hace que te sientas como en casa. Es triste que un pueblo como Robledo de Chavela tenga tan poca oferta gastronómica, pero sin duda este sitio promete, volveremos seguro.
Hoy he tenido la suerte de ir a comer allí con unos muy buenos amigos. Nos han tratado como si fuéramos de la familia, la comida espectacular y ella trato de 10. Recomiendo sus patatas revolconas, los boletus a la plancha y las croquetas de jamón o setas. Cuando vaya a Robledo ya tengo claro dónde parar a comer o tomar algo.
Son amables y casi el único llegar de la parte de arriba de Robledo que está todos los días abierto. Instalaciones aunque algo antiguas se conserva bien.
Trato agradable y productos tradicionales. Problemas con el punto de la carne fue nuestra experiencia. Comunicación sala /cocina o solo cocina.no sabría decir.
Restaurante Fácil. Hago especial mención a sus patatas revolconas y setas plancha. Rápida y cordial atención Recomendable al 100% Ensaladilla rusa es lo único que no me gustó.
Nos hemos mudado hace poco a la zona y descubrimos este sitio. Me recuerda un poco a los bares del centro de madrid. Sitio de toda la vida que le han dado una vuelta a la carta llevando por gente joven con ganas. Me gusto el ambiente que hay y la comida muy rica