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Un sitio de toda la vida. Buenos productos y bien cocinados. Precio medio. Comimos pulpo, perfecto, gambas a la plancha riquísimas, tomate con aceite buenísimo, y lo que más me gustaron las almejas marinera. También buenos postres caseros.
Ibamos con la idea de comer una parrillada, pero vimos en el mostrador un calamar gigante de 1,3 kilos y cuando nos dijo que eran 33 euros cambiamos de idea y cogimos eso y unas gambas a la plancha. Estaba todo cojonudo y por ese precio y que te lo preparen sale casi como en casa. Con la bebida nos pusieron unas nécoras riquísimas, a mi no me gustaban de otras veces que las comí y estas si, con mucha carne y mucho sabor. Volveremos pronto.
No volveremos. Calidad precio bastante, muy caro. Uno de los platos tardo cerca de 1,30 horas en llegarnos a la mesa. No pidáis las almejas saben a cocido por 30 euros la ración. Les hace falta una reforma y sillas más cómodas. Las camareras eran majas.
Un restaurante donde se come bien pero caro. Quizá se se pide un menú, puedes estar en torno a los 30-40€ por persona. Cuando estuve fuimos 3 personas, comimos una ración de pulpo a la gallega, una ración de gambas a la plancha y un tomahawk de casi 2 kilos (lo sé, comimos mucho). Con una botella de albariño de la casa, un postre y dos cafés, salimos a 70€ por persona. Ojo, la calidad de la comida fue muy buena, pero hablamos de un restaurante en Móstoles, con mobiliario y menaje de los 70, servilletas de papel, …). En definitiva, por 70€ por cabeza puedes ir a muy buenos restaurantes. Este no los merece.
Restaurante muy viejo, una sola persona para servir a todo el comedor. Pido merluza en un restaurante de pescado y no hay. Carta muy escasa. No lo recomiendo.
Es un sitio agradable, tiene buen género en cuanto a mariscos, pescados y carnes, pero tienen un fallo al servir la carne, te piden el punto que te gusta para dejarla más hecha o menos hecha, pero al servirla la traen en el plato de barro excesivamente caliente y aún comiéndote el entrecot rápido, se pasa de punto por el calor del barro.
Atención y calidad del marisco, exquisito. Pero sobre todo el trato tan cercano de los dueños, correctísimo pero sin agobiar. Fue tomar algo al medio día
Un local algo ajado por el tiempo pero con buen producto y una atención esmerada por parte de la propietaria. Fue una visita breve que preciso repetir para ampliar los detalles. Será en breve.
El sitio es muy viejo y la decoración del año de maricastaña. Si pides algún menú con vino y casera, la casera es enana. Es bastante caro y la calidad normal. No recomiendo pedir el súper menú porque te quedas con hambre Una de las cigalas que me pusieron estaba en mal estado y no pude comerme ni la mitad. No me preguntaron cómo de pasada quería la carne y la mitad de los postres del menú no los ofrecen. La tarta de queso te ponen una ración muy pequeña, de las otras no lo sé. Si quieres helado, sólo tienes un bombón, a pesar de que la nevera de helados está ahí al lado y tienen media docena de tipos distintos, helado? Paga 5€ y no teniendo casi clientela te atienden muy despacio y llamándote cariño todo el tiempo. La verdad, no lo recomiendo en absoluto.
Un servicio impecable. La parrillada y el entrecot del menú insuperable y la atención maravillosa. Repetiremos sin duda, un sitio ideal para comer muy bien a precio razonable. ¡Fantástico!
Muy recomendable, los aperitivos de lujo. Marisco fresquisimo y un trato familiar. Para comer el cordero es lo más. Pasas un día de cañas inmejorable. La bebida algo cara pero compensa con los aperitivos.
Trato genial por parte del personal. Pedimos berberechos al vapor y medio kilo de gambas. Buenísimos! De postre la tarta casera de queso y la de limón estaban deliciosas! Repetiremos sin dudarlo! Enhorabuena a los propietarios!
Buena referencia para comer marisco, todo un clásico en Móstoles. Quizás una pequeña lavada de cara no le vendría mal ya que las instalaciones son prácticamente las originales de su época, aunque eso le da cierto encantó nostálgico de mi infancia en los 80.
Da gusto volver y ver que la simpatía, cercanía y trato personalizado siguen como siempre. Tu consumición acompañada de estos pedazo aperitivos no tiene precio. Zona de barra y disponible salón comedor. Las parrilladas y mariscadas, entre otros, inmejorables y a buen precio. Muy recomendable.
E Restaurante es muy acogedor y a pesar de ser grande consigue ser intimo a la vez. Comimos marisco que está fresco y bien servido con raciones abundantes. Calidad/precio muy bien y trato muy guay. Merece la pena alejarse un poco del ruido de Madrid para come rico, gastar poco y disfrutar de las afueras.
Excelente lugar para disfrutar de una buena comida. El marisco está espectacular, el trato genial. Muy buena relación calidad precio. Volveremos sin duda.